Inicio Blog Página 557

El Poblado: Solo el 5% de Medellín

Por: Juan Carlos Franco
Estamos ya metiéndonos de lleno en campaña electoral. Dentro de poco los candidatos estarán plenamente definidos para Alcaldía y Gobernación.
Y como cada 4 años, presenciamos el espectáculo habitual: Los políticos con aspiraciones buscan afanosamente ubicarse detrás del candidato con mayor posibilidad de ganar en octubre y luego nos tratan de convencer de que esos movimientos –a veces volteretas dignas del mejor acróbata- son honestos y basados en una ideología sólida y coherente.
Cada cual interpreta su papel a la perfección. Nosotros hacemos como que les creemos y ellos hacen como si nosotros les creyéramos de verdad. Y algunos son maestros en indignarse profundamente si alguien sugiere que lo hacen por mera conveniencia electoral. En fin, siempre ha sido así y no parece haber posibilidades de cambios en el horizonte.
Lo triste para El Poblado es que sus necesidades y problemas poco importarán en esta carrera. Sencillamente, las bondades de la democracia no nos ayudan: Los habitantes del Poblado somos solamente el 5% de la población de Medellín, de modo que lo que aquí opinemos seguramente no será la prioridad para ninguno de los candidatos. El Poblado participa y debate con entusiasmo, pero la verdad verdadera es que al final poco cuenta.
Si usted cree que, por ejemplo, el curioso proyecto de valorización que tanto hemos discutido aquí será importante en el debate de los próximos meses, tendrá una desilusión. Algunos candidatos tratarán de no tener posiciones muy claras, pues podrían enredarse sin mucha necesidad. Otros tratarán de pescar en río revuelto. Pero estarán tranquilos, pues la Alcaldía no se define aquí.
Si algún candidato dice que sigue con la valorización, buscarán asociarlo de lleno con la actual administración, lo cual no parece garantía de triunfo. Entonces se limitará a decir obviedades, como que hay que revisar plenamente el proyecto y seguir con lo bueno, eliminando lo malo… Resultado neto, al menos un año adicional de retraso en varias de las obras importantes.
Y el que de entrada sea enemigo político del actual Alcalde, no tendrá que hurgar muy profundo para encontrar elementales falencias en el proyecto y declarar que lo cancelará. Resultado neto, más incertidumbre. Y tal vez otro año más sin obras.
Sea como sea, la cosa pinta negra para nuestra comuna de El Poblado. Y cada día que pasa significa el ingreso de tal vez 15 ó 20 vehículos nuevos, con todo su efecto sobre la movilidad, el aire y la calidad de vida.
O sea, gracias a la incertidumbre causada por un mediocre proyecto de valorización es muy probable que las propiedades terminen desvalorizándose. Y que en adelante sea muy difícil hacer más proyectos por este mecanismo.
Y que cuando estas obras finalmente se ejecuten, su efecto sea muy poco (too little, too late”) sobre la desesperante situación de movilidad de El Poblado.
¿Por qué ha ocurrido esto? ¿Fue acaso mal manejo de la actual administración? ¿Malas comunicaciones? ¿Exceso de optimismo y poca previsión? ¿Falta de liderazgo? ¿Terquedad para no cambiar a tiempo las cosas que desde el principio incomodaban a la comunidad por su falta de lógica o de justicia? ¿O será simplemente que, con tantas cosas por hacer en otras comunas repletas de votos, los problemas de por aquí inevitablemente son secundarios? Y eso que aquí se genera más del 40% de los impuestos a la propiedad.
¡Tiene que haber otra manera de hacer las cosas que resulte mejor para El Poblado!
[email protected]
[email protected]

Policía rindió cuentas en seguridad

0

En un foro realizado por Corpoblado, con la asistencia de administradores de unidades residenciales, centros comerciales y demás líderes de la comunidad, la policía confirmó su compromiso con El Poblado además de adelantar novedades y formas para cumplir con su labor.
“Hicimos un seguimiento a la forma como afrontamos la delincuencia en esta comuna. Hay que revisar la forma como enfrentamos asuntos como el hurto a propiedades que se ha venido presentando en los últimos meses. También destacamos los aportes de la Alcaldía en compra de vehículos, motocicletas e instalación de cámaras para que la comunidad sepa cuándo entran en funcionamiento”, indicó el secretario de Gobierno, Juan Felipe Palau.
El comandante de la Policía Metropolitana, General Yesid Vásquez, fue el encargado de la presentación. Dijo que en El Poblado no hay grupos delinacuenciales identificados, aunque algunos llegan a los barrios de la comuna y arriendan apartamentos por periodos cortos de tiempo, o son “delincuentes de paso”.
Vásquez sostuvo que se sigue presentando el hurto a viviendas, a los ciudadanos que salen de entidades bancarias y la conocida llamada millonaria. Además de mostrar una serie de capturas y logros durante este año en la Estación de Policía de El Poblado, enfatizó en la necesidad de que los ciudadanos establezcan relación con los policías de cada cuadrante, que son fijos y conocen ampliamente su zona. “La ventaja de hablar con el policía del cuadrante es que la reacción ante un hecho es mucho más rápida, las personas hablan directamente con él. No solo están capacitados para atender robos u otros delitos, nosotros estamos trabajando con el hombre, con el ser humano, los estamos capacitando en ese sentido también”, dijo el General Vásquez.
El General adelantó la intención de que la policía adquiera un lote que le pertenece al Municipio para tener más espacio en la estación actual, es decir, el lote contiguo, que se encuentra en un proceso jurídico con un particular que no entregó el inmueble.

¿Funcionan bien las glorietas de la ciudad?

0

¿Funcionan bien las glorietas de la ciudad?
Como respuesta a varias acciones populares interpuestas por la comunidad, la Alcaldía de Medellín instaló hace un tiempo semáforos en varias glorietas con el fin de darle prioridad al peatón.
¿Mal diseñadas? ¿la semaforización es la mejor solución?

Un equipo de la Universidad Nacional fue el encargado de estudiar cuatro glorietas de la ciudad. En la carrera 80 con la 30, con San Juan y con la calle Colombia, además de la de la Autopista Norte cercana a la Terminal de Transportes.
Aunque el propósito del estudio era la semaforización, para Víctor Gabriel Valencia, docente de la universidad y experto en ingeniería de tránsito, la idea era analizar alternativas para esas y otras glorietas, no solo usar semáforos sino lo que fuera más conveniente haciendo modificaciones geométricas o de señalización. De antemano Valencia aclara que “la universidad no tuvo que ver en la programación de los semáforos ni el diseño de soluciones, finalmente solo hicimos el estudio de tránsito”.
Víctor Gabriel Valencia es ingeniero civil con maestría en ingeniería de tránsito y transporte. Es del departamento del Cauca pero vive en Medellín hace más de 20 años. Trabajó en el Instituto Nacional de Transportes hace 22 años y en el Ministerio de Transporte.
El experto respondió algunas preguntas sobre los errores de algunas glorietas, su funcionamiento, la sincronización y la utilización adecuada o no de los semáforos en ellas.

¿Qué errores ve en las glorietas de Medellín?
Tengo conocimiento de la ciudad de más de 21 años. Hay de todo, desde lo geométrico hay algunas bien diseñadas como la de San Juan con la Avenida del Ferrocarril. El problema es que fueron diseñadas hace mucho tiempo para otro tipo de condiciones de esas épocas, ahora que las condiciones del tránsito son más exigentes han quedado obsoletas y las fallas se ven.
Algunas glorietas tienen demasiados carriles en su interior y eso genera desorden en la circulación. Otro factor es que la entrada a la glorieta debería tener alguna curva para transición de la entrada. Las que vienen de una recta con llegada de vehículos a velocidad alta también dificultan el tránsito y pueden provocar accidentes. Hay otras que no tienen un radio adecuado y perjudica la capacidad. Además de esos problemas hay que sumarle que falta cultura para conducir, no usan carriles de acuerdo a los destinos y a veces entran a las glorietas y salen como pueden. También influye la falta de marcación de los carriles y otro inconveniente tiene que ver con los usos del suelo, ya que vemos negocios con entrada y salida de carros en plena glorieta; eso perturba. Un ejemplo de eso era la de Don Quijote en la 80 con la 35: Tenía un acopio de taxis ahí mismo.

¿Es partidario de la semaforización de las glorietas?
Cada una de ellas tiene condiciones particulares para analizar, algunas con semáforos y una buena programación puede que sirva, otras requieren modificaciones geométricas y hay otras que las dos cosas. Tampoco es que sea un adefesio poner semáforos, en Inglaterra y Francia lo hicieron hace muchos años. Aquí lo pensaron para buscar mejores condiciones para el peatón porque las glorietas son enemigas del peatón. Los semáforos generan confianza para ellos.

¿Cómo debe ser la sincronización de los semáforos?
Debe haber soluciones no solo para horas pico sino para todo el día. Cada día es distinto y aquí hacen aforos dos o tres días y ya toman la decisión para un año entero, eso no es razonable. Por ejemplo, la programación de la glorieta de Santa Gema en la 33 con la 80 no le veo ni pies ni cabeza, los ciclos superan los normales y las fases no se ven claras, yo no la entiendo. Lo que necesitamos es programaciones que cubran las necesidades de demanda de todos los días, con sus particularidades y diferentes horarios.

Bajó la accidentalidad
Con ese argumento, además de la seguridad de los peatones y las personas con movilidad reducida, la Alcaldía de Medellín defiende la semaforización de la mayoría de las glorietas, aunque en algunas se den congestiones lógicas por hacer que los vehículos se detengan.
“La decisión de semaforizar las glorietas está avalada por fallos judiciales porque otros actores de la vía, como los peatones y las personas con movilidad reducida también requieren usar la vía de manera segura”, explicó Juan Fernando Franco, Subsecretario Técnico de la Secretaría de Transportes y Tránsito.
También informó el funcionario que la accidentalidad se ha reducido en las glorietas, citando dos ejemplos como la de la Avenida del Ferrocarril con San Juan que ha bajado en un 20%, y la de Bulerías en 10%. “La sincronización de los semáforos en las glorietas es un asunto de alta complejidad, el software que tenemos es para comportamientos de conductores de países como Alemania e Inglaterra, entonces lo que hicimos fue calcular mediante fases de prueba teniendo en cuenta que cada glorieta es diferente”, agregó el subsecretario Franco.
Según el funcionario, con la semaforización ha reducido la muerte de peatones, gran parte de la comunidad ha mostrado satisfacción y todas las glorietas están sincronizadas según las horas y las necesidades los diferentes días.

El temor estaba latente

0

El temor estaba latente
Hasta el 10 de julio permanecerá cerrada parcialmente la Vía Distribuidora, en sentido Sur norte a la altura del puente de la calle 4 Sur, con el fin de reparar la viga averiada tras el accidente del pasado 18 junio

John Jairo Quiroz perdió tres dedos de una mano y se fracturó el cráneo, Armodio Montoya se partió la quijada y la clavícula y Carlos Durango se rompió el radio. Martín Loaiza fue el obrero mejor librado del accidente ocurrido en el puente de la calle 4 Sur sobre la Vía Distribuidora el sábado 18 de junio en momentos en que -por fortuna- las vías de Medellín estaban prácticamente desiertas por cuenta de la final de fútbol entre Nacional y Equidad: fue dado de alta y solo recibió 13 días de incapacidad por lesiones menores en la cabeza y en un brazo, el cual, por ahora, está inmovilizado.
Es el segundo hecho grave ocurrido desde que a mediados de 2010 se inició la construcción de este puente. Al finalizar el año pasado, en accidente en una de las pilonas que lo sostendrán, murió un “pilonero” y otro quedó incapacitado laboralmente. Esta tragedia no trascendió a la luz pública.
Según una Comisión Interdisciplinaria conformada por la Alcaldía de Medellín y las firmas diseñadora, constructora e interventora del proyecto, la causa del último accidente fue la falla en un tensor provisional que provocó el colapso de un tramo de 12 metros de una viga del puente. Aparte de los cuatro obreros heridos, los más asustados fueron los ocupantes de un vehículo particular que a esa hora, 6:30 de la tarde, transitaba por la Vía Distribuidora. Aunque el carro resultó muy averiado por el desplome de la viga, la familia salió ilesa.
Precisamente en la edición 438 de Vivir en El Poblado -primera quincena de junio- hicimos eco de la preocupación de varios lectores, quienes alertaron sobre los supuestos riesgos que implica la construcción del puente para los usuarios de la Regional y la Autopista Sur, al desarrollarse los trabajos por encima de los vehículos y sin protección visible. Sobre este temor publicamos la respuesta del subsecretario técnico de la Secretaría de Obras Públicas, Juan Carlos Restrepo, quien reiteró a Vivir en El Poblado que no había riesgo alguno y que Conconcreto -la firma contratista- “está cumpliendo todas las medidas de seguridad en la edificación del puente.” Tres semanas después ocurrió el accidente.

Siguen las preguntas
De acuerdo con el ingeniero civil Ignacio Arbeláez, presidente de la Junta de Representantes de Propietarios y Poseedores de El Poblado en el proceso de valorización, este miedo ante la estructura en voladizo sobre la Distribuidora y la Autopista Sur también se manifestó en la última reunión del Comité Ciudadano de Obra, instancia veedora de la construcción del puente de la calle 4 Sur y en la cual tienen asiento representantes de Conconcreto, la Alcaldía, unidades residenciales vecinas al proyecto y propietarios de El Poblado.
No obstante, el ingeniero Arbeláez, con amplia experiencia en la construcción de puentes, aseguró que el mismo sistema que se está utilizando en la 4 Sur es el que se usa en las principales ciudades del mundo para edificar puentes atirantados. Es decir, no se suspende el tránsito para construirlos ni se hacen obras falsas para sostenerlos.
Así mismo, el Secretario de Obras Públicas, Sebastián Álvarez, indicó que “este método constructivo está planteado para evitar cerrar las vías y no parar la operación del metro. Todo lo teníamos completamente medido. Si fuéramos conscientes de que estábamos poniendo en riesgo la vida de las personas nunca lo hubiéramos hecho.”
Aunque según esto el sistema en sí no implica riesgos, poco importa ahora porque lo cierto es que algo falló y ocasionó un accidente grave, con consecuencias irreversibles para algunos, como la amputación de tres dedos, y que de haber habido más tránsito por la Vía Distribuidora, muy seguramente el resultado hubiera sido más trágico. De acuerdo con lo que determinó el Comité Interdisciplinario, lo que falló fue un tensor provisional, uno de los que se ponen mientras se instala el tirante definitivo. Manifiestó el Secretario de Obras Públicas que tanto los tensores provisionales como los permanentes tienen certificados de calidad y son fabricados por empresas extranjeras. Si esto es así, ¿por qué falló entonces un tensor auxiliar? ¿Hubo error humano en su instalación? Son preguntas todavía sin respuesta. Mientras tanto, una de las medidas correctivas tomadas por la Secretaría de Obras Públicas, máximo vocero en este tema, fue la suspensión del uso de los tensores provisionales, para instalar de una vez los definitivos.


Sebastián Álvarez, Secretario de Obras Públicas

500 fotomultas al día

0

500 fotomultas al día
Convencido de ello, el secretario de Tránsito de Medellín, Rafael Nanclares, sostiene que el fin de todas las medidas que toman en cuanto a movilidad es culturizar a la ciudadanía y salvar vidas

Aunque algunos se resisten a creer que las fotomultas llegan a su casa y estas tienen el mismo peso que un comparendo realizado por un agente de tránsito en las vías, para la Secretaría de Transportes y Tránsito este es solo uno de los elementos que integran el Sistema Inteligente de Movilidad (SIMM), con el que pretenden reducir la accidentalidad, proteger vidas y aprovechar mejor las vías existentes en Medellín.
Además de mejorar la calidad del transporte público colectivo, el Municipio le apunta a formas de información como las redes sociales en Internet, para que sus seguidores se enteren en tiempo de real sobre las diferentes novedades, choques y cierres en las calles. También hace parte del SIMM la optimización de semáforos, que permitirá tener toda la red de la ciudad mejor calibrada y para eso están en proceso de contratación con un equipo especializado; los paneles de mensajes variables que serán instalados en partes altas de las vías con información para que los usuarios reduzcan velocidad, se enteren de tacos y tomen desvíos sin necesidad de quedarse esperando; y el control de flota que se trata de instalar aparatos dentro de los buses para saber su posición, que no tengan sobrecupo, no excedan la velocidad, que paren en los paraderos y que no abandonen la ruta, con el fin de mejorar el servicio para los usuarios. El otro componente del Sistema Inteligente de Movilidad son las fotomultas con el apoyo de sofisticadas cámaras que vienen siendo instaladas por toda la ciudad. Al día generan unas 500 fotomultas y las cámaras serán periódicamente rotadas a otros puntos claves.
Rafael Nanclares, secretario de Tránsito de Medellín, explicó más detalles sobre las fotomultas y las estrategias de movilidad.

¿Cómo reducir los accidentes en Medellín?
La Organización Mundial de la Salud dice que disminuyendo las velocidades y por eso las fotomultas también. A menor velocidad el choque es mas suave y hay menos probabilidad de morir o quedar herido. Por ejemplo en la Avenida Regional, el carril de la izquierda más cerca del río no puede exceder los 80 kilómetros por hora, el de la mitad 70 y el de la derecha 60. En la Distribuidora los 3 carriles tienen límite de 60. En la ciudad no tenemos vías con especificaciones para andar a 100 kilómetros por hora, ir a esa velocidad aquí es una irresponsabilidad total. También promovemos el uso de elementos de protección y combatimos la conducción en embriaguez, con operativos hemos logrado reducir en un 34% los accidentes por esta causa.

¿Para qué las fotomultas?
Por medio de la instalación de cámaras para monitorear. Con este sistema si usted no va a la velocidad permitida, es muy probable que le llegue una fotomulta a su casa. La idea es reducir la accidentalidad y multar si se pasan un semáforo en rojo, si hay invasión de la cebra, parqueo donde no se puede, contravía o incumplimiento del pico y placa. Las fotomultas nos ayudan a controlar la ciudad, las normas de tránsito no las inventamos nosotros ayer, el Código Nacional de Tránsito es de estricto cumplimiento, son normas básicas de convivencia para que la gente no se mate en las vías.

¿Cómo funciona el proceso de fotomultas?
Las cámaras son automáticas, funcionan de 5 de la mañana a 10 de la noche. Apenas detecta una infracción toma la foto que se va para donde un agente de tránsito que la mira y la valida, aunque la cámara está perfectamente calibrada. Cumplimos con todo el protocolo jurídico y técnico que se exige en Colombia. A la persona le llega en 4 días a la casa pero también los estamos llamando por teléfono. Hacemos todo el proceso de notificación y si la persona no está de acuerdo, se hace el mismo proceso que con las multas, viene a la Secretaría y pide audiencia.

¿Falta cultura en la ciudad?
Las normas son para cumplirlas y es algo que tenemos que aprender de los países desarrollados. Cuando las sociedades respetan las normas de tránsito se va creando respeto a la norma, este es nuestro trabajo y lo hacemos con muchas ganas porque estamos salvando muchísimas vidas, si queremos ser una sociedad organizada con niveles de calidad de vida altos, pues hay que cumplir la norma. Es un tema de respeto por el otro, es que cuando usted va en exceso de velocidad no es que este irrespetando a la Secretaría de Transportes y Tránsito, está irrespetando a toda la ciudad; el día que se choque mata a alguien y eso es inaceptable.

¿Esas cámaras también sirven si hay un hecho de inseguridad?
No porque hay cámaras para seguridad que las tiene la ESU, Empresa de Seguridad Urbana. Las de nosotros son cámaras especializadas, porque tiene que hacer lectura de la placa y medir la velocidad; si las movemos para mirar otras cosas se descalibran. La ESU está haciendo gran inversión en cámaras de la ciudad para seguridad, tienen al rededor de 400. De todas formas ellos tienen acceso a la información de nosotros, si pasa algo se comparte, pero las nuestras no se mueven para eso.

Pérdida de confianza

0

Pérdida de confianza
¿Qué se puede decir de la capacidad de gestión de las personas que han estado al frente del Municipio de Medellín y después de 7 años y medio estudiando soluciones a los problemas de movilidad de El Poblado y la posibilidad de construir unas obras viales para financiarlas por el sistema de valorización, finalmente no han salido con nada? Para que no haya malos entendidos, no salir con nada es dejar lo poco que se ha avanzado en estos años en manos de una decisión política del próximo gobierno que puede llegar a ser alguna de estas alternativas: Descartar lo que se ha hecho y volver a empezar; cancelar todo y dejar las cosas así; estudiar todo lo que se ha hecho para decidir qué hacer, si seguir, si replantear, etcétera.
¿Qué se puede decir entonces? Los problemas de movilidad que había en 2004 no son los mismos que hay en 2011. Y no son los mismos, para peor. Durante el gobierno de Fajardo, la discusión giró la mayor parte del tiempo en torno a la formulación del Plan de Ordenamiento de El Poblado, en la definición de una lista de obras para soluciones de corto, mediano y largo plazo para el problema de la movilidad, y si se harían por valorización. La lista de obras para soluciones de largo plazo quedó aplazada igual que la decisión sobre la valorización.
En este gobierno, que terminará el próximo 31 de diciembre, deberá tratar de hacer la mayor parte de las cosas que le faltan del plan de desarrollo, en medio de la campaña política que terminará en octubre, y desde ahí, con la sombra de los proyectos y promesas del candidato ganador de las elecciones. Eso significa, en la práctica, que proyectos del tamaño e importancia del de valorización, si a esta fecha no estaba en marcha, en lo que queda de tiempo, no podrá hacerse. ¿Qué se puede decir entonces?
Queda preguntarse, asumiendo que no se trata de un simple caso de ineficiencia e incompetencia en la gestión pública, si la discusión de los últimos tres años entorno a la oportunidad del sistema de valorización, a la lista de obras para construir, a la definición de la zona de citación, al monto del aporte del Municipio, a quién paga los accesos del puente de la calle 4 Sur, etcétera, era la verdadera discusión. Cuesta creer que solo estemos hablando de gestión ineficiente.
La imaginación salió a volar desde hace varias semanas por la falta de información sobre la suerte del proyecto de valorización. Si en realidad se quisiera proteger el trabajo de los últimos tres años y medio, para no dejar todo en manos del azar de la campaña electoral, en la Alcaldía ya habrían tomado decisiones al respecto. Pero no, los problemas de movilidad, el motivo de todo este enredo, son hoy, probablemente, menos graves que los del año entrante, como eran menos graves los de 2004 que los de 2011. ¿No hacer nada será solo mala gestión o será otro el motivo para la inmovilidad administrativa? El daño a la confianza de la ciudadanía en el Municipio ya está hecho.

¿Quién soy realmente?


Por: Carolina Zuleta Maya

Hace unos días vi un programa de Oprah Winfrey en el que entrevistó a Jacqui Saburido. Aunque su historia me hizo llorar y doler el corazón, también me dejó un mensaje que me parece que hay que compartir. Aquí está su historia.
Jacqui es una joven venezolana que decidió irse a vivir a USA para aprender inglés. Una noche después de una fiesta sufrió un accidente que cambió su vida para siempre. El 19 de septiembre, 1999, Reggie Stephey, un joven de 18 años salía de otra fiesta, manejando su carro después de haberse tomado algunos tragos. El carro de Reggie chocó contra el carro en el que iban Jacqui y sus amigos. Ella quedó atrapada cuando el carro se incendió y el fuego quemó el 60% de su cuerpo. A pesar de que los médicos no creyeron que fuera sobrevivir, hoy, después de más de cien cirugías, ella está viva. Jacqui antes del accidente, era una mujer linda, como todas estas jóvenes que vemos caminando por nuestra ciudad. Hoy debido a sus quemaduras perdió su pelo, sus orejas, su nariz, los dedos de sus manos y casi toda su visión. No puedo negar que al ver su foto después del accidente, pensé: ¿En un mundo donde las mujeres son valoradas y evaluadas por su belleza, como alguien que se ve como ella puede encontrar la fuerza para seguir adelante? Sin embargo, Jacqui con su increíble espíritu y con el apoyo de su familia, ha hecho que su vida cobre un sentido diferente. Después de ver la entrevista completa, de oírla hablando, riendo y abrazando a la mamá del joven que causó el accidente, pude verla como el gran ser humano que es. Y después la pregunta que me hice fue: ¿Quién soy realmente? ¿Un cuerpo, una cara o mucho más que eso? En la entrevista ella dijo que a pesar de todo lo que ha pasado, se sigue sintiendo la misma persona. Ahora Jacqui invierte gran parte de su tiempo compartiendo su historia para que todos tomemos consciencia de lo grave que es manejar con tragos, de cómo una decisión que tomamos en un instante al salir de una fiesta puede cambiarnos la vida para siempre.
La historia de Jacqui también nos deja una lección aún más profunda, un mensaje que también comparte el libro “Un Hombre en Busca de Sentido”, escrito por Viktor Frankl, – la libertad más grande del ser humano es elegir su actitud frente a cualquier situación. Todos tenemos problemas, cosas que nos entristecen, de las cuales nos quejamos, pero después de ver la historia de Jacqui estoy aún más convencida que está en nuestras manos, y en las de nadie más elegir cómo queremos vivir: positivos y con sentido, o sintiéndonos derrotados.
[email protected]

Outsourced

0

Outsourced
Todd Dempsy ha sido reasignado a la India para trabajar en un call center de una empresa norteamericana. El choque cultural será solo el inicio de sus problemas con un equipo de trabajo muy diferente a él.

El miércoles 6 de julio a las 8:30 p.m. se estrena por el canal Warner la serie Outsourced, una nueva comedia cuya trama transcurre en una compañía de ventas por catálogo, Mid America Novelties, especializada en artículos divertidos como cojines chistosos, pollos de plástico, anteojos bizarros y billeteras de tocino, entre otros. El problema es que el centro de atención al cliente ha sido trasladado a la India. Ese es el destino de Todd Dempsy, un joven ejecutivo de ventas reasignado para gerenciar el nuevo call center en Asia, donde pronto se complicará su vida al conocer a su compatriota Charlie, a cargo de la oficina descentralizada de otra firma. El equipo de Todd está conformado por un grupo de trabajadores que desconoce todo lo relativo a la vida occidental, así cada día es un desafío para Todd, mientras intenta hacer de su equipo una unidad eficiente, pese a las dificultados que plantea el choque de culturas.

Los Niños Robados de Nepal

0

Los Niños Robados de Nepal
La actriz Demi Moore se une al Proyecto Libertad de CNN para promover la lucha contra la trata humana a través del documental Nepal’s Stolen Children (Los Niños Robados de Nepal) que se estrena el domingo 26 de junio a las 7:00 p.m.

Demi Moore se dirige a Nepal para unirse a la ganadora del Premio Héroe CNN de 2010, Anuradha Koirala, y a su organización, Maiti Nepal, que desde su fundación en 1993 ha rescatado a más de 12.000 niños de Nepal, robados para tráfico sexual. Moore es una apasionada defensora de las víctimas de tráfico humano y a través de la organización ADN que ella fundó con su marido, se enfoca en la necesidad de atacar la demanda de tráfico sexual mediante leyes en contra de los infractores, la educación y la rehabilitación de las víctimas atrapadas en estas prácticas. Los Niños Robados de Nepal sigue a Moore, quien habla con docenas de niñas (algunas de apenas 11 años) que han sido víctimas del tráfico sexual. Ellas comparten desgarradoras historias de electrocución y otras formas de tortura, y algunas incluso describen que fueron forzadas a alimentarse con hormonas para que sus cuerpos infantiles tuvieran el parecido del de una mujer adulta. En el centro de Nepal, Moore viaja desde la capital Katmandú hasta un remoto poblado en el distrito de Rasuwa para retornar a una joven mujer a su familia. También va a Bhairahawa, que está cerca del límite con la India, y que es un punto clave en la trata humana, y se reúne con el Primer Ministro de Nepal, Jhalanath Khanal, para discutir los problemas culturales y criminales de su país causados por el tráfico sexual. Khanal promete a Moore que hará todo lo posible para incluir este asunto como parte de una nueva constitución de Nepal, que “ofrezca todo tipo de derechos a las mujeres”. El documental será retransmitido por CNN International el sábado 2 de julio a las 8:00 a.m. 3:00 p.m. y 7:00 p.m. y el domingo 3 de julio a las 4:00 a.m.

Lazos de Sangre

0

Lazos de Sangre
Ree Dolly solo tiene 17 años y ya debe cuidar de su madre y hermanos. Ahora se entera de que su familia puede perder la casa si ella no encuentra a su padre, quien ha puesto la propiedad como seguro de fianza y ahora anda desaparecido.

A los 17 años, Ree Dolly, cuida de su madre catatónica, y de sus dos hermanos, cocinando, vistiéndolos, llevándolos al colegio y enseñándoles principios básicos de supervivencia. Pero un día Ree se entera de que debe encontrar a su padre (un “cocinador” de drogas) quien ha puesto su casa como seguro de fianza, y luego desapareció sin dejar rastro. Enfrentada al riesgo de perder su hogar, se interna en los bosques Ozark para buscarlo. Esto la lleva donde Teardrop, el hermano de su padre, y unos amigos de éste, que de todas las formas posibles le advierten que se mantenga alejada para evitarse problemas. Sin embargo ella lucha contra las mentiras, evasiones y amenazas en su entorno para comenzar a reconstruir la verdad. Este filme, basado en la novela de Daniel Woodrell, estuvo nominado a cuatro Premios Óscar en 2011. Cine Colombia de Oviedo 1:20 p.m. 3:50 p.m. 6:20 p.m. y 8:50 p.m.

Dura de Ligar

0

Dura de Ligar
Sue Claussen, en uno de sus múltiples viajes, se hospeda en el motel donde trabaja Mike. Él quiere seducirla inmediatamente, pero ella es indiferente a sus iniciativas. Sin embargo Sue decide regresar al motel para iniciar un romance inesperado.

Sue Claussen pasa la vida viajando y vendiendo cuadros baratos. Mike es un soñador sin rumbo que trabaja en el motel de sus padres en Arizona. Cuando Sue se hospeda en el motel durante un fin de semana, Mike queda enamorado con solo verla y decide tratar de entrar a su cuarto con botellas de vino y champaña para seducirla. Aunque inicialmente lo desprecia, Sue regresa al motel para tener un romance con él y al día siguiente se marcha, continuando su vida sin novedad, pero Mike se enamora perdidamente de ella y decide seguirla a donde quiera que vaya. Esta comedia romántica, protagonizada por Jennifer Aniston y Steve Zahn, presenta una historia sencilla en la cual se descubre el amor inesperado y la realización de estar en el momento y lugar adecuado cuando se cree pertenecer a algo mejor. Cinemark de El Tesoro 1:20 p.m. 3:45 p.m. y 8:10 p.m.

Granadina presentó su colección de verano

0

Granadina presentó su colección de verano
Enamorarse de vestidos de baño que resaltan la sofisticación de la mujer, su elegancia y en los que el color es el protagonista principal, fue la invitación de la marca Granadina Swimwear en el show room de presentación de su colección en Chupitos Beer Store de La Strada. La pasarela contó con la presencia de las modelos Vanessa Peláez, Sandra Valencia, Luisa Raigoza, Catalina Posada y Paola Cañas, quienes ofrecieron una espectacular muestra llena de originalidad por medio de prendas hechas a mano, con características de telas importadas e insumos de calidad. Deliciosos cocteles amenizaron una jornada que evocó la calidez de una noche de verano.


Juliana Granada, Paola Cañas, Luisa Raigoza, Vaneza Peláez, Catalina Posada, Sandra Valencia, Jenifer Granada.

Elisa Trujillo, Daniela Marquez, Maria del Corral, Daniela Trujillo.

Luisa Osorio, Angélica Mejía, Katerine Ramirez, Laura Roldan.

Mónoca Restrepo, Paola Madrigal, Liliana Montejo.

Felipe Vallejo, Andra Paniagua, Andrea Rojas, Hernan Guzmán.

Otras posibilidades para la irregularidad

0

Otras posibilidades para la irregularidad
Los problemas de tiroides hacen que muchas mujeres también tengan irregularidades que se pueden prolongar por meses.
En ediciones pasadas el síndrome de ovario poliquístico fue el tema tratado en este espacio como una de las posibilidades de la irregularidad en llegada de la menstruación femenina y por tanto una causa eventual de infertilidad.
Ahora bien, hay muchas otras posibilidades que pueden estar causando este descuadre, y normalmente son razones un poco menos graves pero aun así con necesidades de tratamiento lo antes posible. Los desórdenes hormonales son ejemplos claros cuando se habla de irregularidad en las mujeres.
Por ejemplo, se deben mirar con especial atención los problemas de tiroides, ya sea hipertiroidismo o hipotiroidismo, además puede haber incidencia en pacientes con problemas de prolactina como es la hiperprolactinemia.
Esos ciclos menstruales irregulares en muchas ocasiones van desde unos cuantos días y pueden extenderse por meses. Esto puede ser fácilmente confundido con alguna patología inherente a esa ‘maquinita de vida’ femenina y por eso se debe acudir a un profesional para determinar cuales son las reales causas.
El tratamiento incluye, en la mayoría de los casos, sólo pastillas que deben ser tomadas juiciosamente. En poco tiempo se empieza a notar un ciclo más estable hasta llegar a la regularidad en la llegada de la menstruación.
Cabe recordar que el hecho de no haber tenido nunca irregularidad en la llegada de la menstruación no exime a una mujer de tener este tipo de eventos en cualquier momento de su vida fértil.
Romper las barreras de la infertilidad es posible, visitando CONCEVIDAS.

Dos motivos para la Azospermia

0


Dos motivos para la Azospermia
Una obstrucción en los conductos o un daño irreparable en los testículos son dos posibilidades ante la ausencia de espermatozoides en el semen.

Si una persona en una relación tiene eyaculaciones normales pero por algún motivo su pareja no queda en embarazo, es pertinente descartar una posible Azospermia o ausencia de espermatozoides en el semen. Esta situación se puede presentar por dos razones fundamentales: un daño en los testículos que impide la producción normal de espermatozoides o una obstrucción en alguno de los conductos que no permite su salida. Esto tiene que ver con el proceso de producción de espermatozoides en los testículos, los cuales se acumulan en el epidídimo, pasan al conducto deferente, para luego juntarse con un líquido producido en la próstata y otras glándulas y salir finalmente por la uretra. Entonces, cuando el problema es de obstrucción muy probablemente tenga que ver con el conducto deferente de ambos testículos, pues con sólo uno basta para tener una producción normal. La otra posibilidad tiene que ver con alteraciones de los testículos, que eventualmente pueden tener una producción nula de espermatozoides. Esta condición puede ser adquirida por patologías como las paperas con orquitis, que consiste en una inflamación que daña estas “máquinas productoras”. En este segundo caso no tiene solución y se debe acudir a la donación de semen. Cuando el problema es sólo de obstrucción, las alternativas son una intervención quirúrgica para abrirse paso en los deferentes o extraer directamente de los testículos los espermatozoides y hacer una fertilización in vitro en la mujer. Ambos diagnósticos se deben emitir por parte de especialistas y por medio de espermogramas certificados.
Romper las barreras de la infertilidad es posible, visitando CONCEVIDAS.

Síndrome de ovario poliquístico

0

Síndrome de ovario poliquístico
Esta patología del ovario afecta a cerca del 20 por ciento de las mujeres, generando problemas de fertilidad.
Al oír hablar de ovario poliquístico normalmente la idea es de una patología extraña, pero al margen de su nombre, es un síndrome que afecta a cerca del 20 por ciento de las mujeres, causándoles dificultades a la hora de concebir un bebé. Este síndrome obtiene su nombre de la apariencia de los ovarios vistos por ecografía, en la que se observan múltiples quistes pequeñitos, todos menores de un centímetro, que sugieren que la mujer no está ovulando correctamente. Uno de los síntomas más palpables de esta afección es la irregularidad, o descuadre, en la llegada de la menstruación. Las mujeres que tienen esta patología tienen dificultades para ovular cumplidamente, por eso experimentan problemas para embarazarse. De todas maneras es importante advertir que se viene predispuesto al síndrome de ovario poliquístico desde el mismo nacimiento y no se puede hacer nada para curarlo, aunque sí para mejorar las posibilidades de embarazo por medio de un tratamiento mes a mes con medicamentos. Es decir, si en un mes no funcionó se debe realizar de nuevo en el siguiente porque se empieza desde cero. Ahora bien, para las mujeres que tienen esta patología pero quieren postergar la posibilidad de quedar en estado gestante, la recomendación es seguir un tratamiento que incluye tomar pastillas anticonceptivas cuya ingesta deberá ser coordinada con ayuda de un profesional.
De esta manera se reducirá la posibilidad de infertilidad en el futuro.

Paletas de vodka

Paletas de vodka
Para una fiesta de piscina, para la playa, una finca o en una tarde de calor, las paletas son muy refrescantes, y cuando tienen un poco de licor… encienden cualquier fiesta.
paleta
Cada verano la marca de vodka Grey Goose recorre Estados Unidos ofreciendo fiestas en playas y piscinas de hoteles, para promocionar su licor o lanzar un sabor de vodka nuevo. Este año los cocteles frapé y en las rocas, ideales para aliviar el calor, fueron remplazados por paletas de fruta emborrachadas, y las recetas fueron publicadas en su página web. Solo hay que mezclar los siguientes ingredientes y llevar en moldes de paleta al congelador.
1 onza de vodka
4 onzas de jugo de fruta preferido (piña, naranja o limonada)
.25 onzas de algún licor cítrico (Licor 43, Cointreau, Gran Marnier, etc.)
.25 onzas de miel o sirope de caña
5 fresas o frambuesas picadas en trozos pequeños

Infertilidad, ¿y qué hay de la parte emocional?

0


Infertilidad, ¿y qué hay de la parte emocional?
Cuando hablamos de infertilidad nos concentramos en los aspectos técnicos y en los pacientes aptos para cada uno de los tratamientos, pero no muchas veces quienes están a cargo de este proceso toman en cuenta la psicología de sus pacientes y la carga emocional que implica saber que se tiene un problema al concebir y que se debe adelantar un tratamiento para ello.

Según cifras de especialistas argentinos el 90% de las mujeres en tratamiento por infertilidad sufre de trastornos de ansiedad y estrés. Este dato fue revelado con más precisión dado que en este país el 80 por ciento de las mujeres que no pueden concebir en forma natural, recurre a un tratamiento de fertilización asistida.
Estas investigaciones muestran que las parejas experimentan sentimientos de frustración, hasta que logran concretar el deseo de ser padres. Incluso la infertilidad constituye una amenaza al proyecto de vida de los pacientes, afectando en algunos casos la autoestima y la vida sexual de la pareja.
Es una situación clave de nuestra vida que puede producir cambios a nivel emocional, social, físico, laboral e incluso intelectual, y por eso la Sociedad Europea de Reproducción Humana y Embriología aconseja a los centros e institutos que integren psicólogos en los equipos multidisciplinarios, para tratar pacientes con problemas de fertilidad. De esta manera al parecer hay mejores resultados en el tratamiento y en el trascurrir de nuestro rol como padres.

La Vida se abre paso

0


La vide se abre paso
Con INVOcell es más sencillo y menos costoso cumplir el sueño de tener un hijo. Concevidas ya lo tiene a disposición de sus pacientes.

En 2007 y en España, fue la primera vez que se logró un embarazo con óvulos congelados con la ayuda del dispositivo Invocell, creado por el médico francés Claude Ranoux para fertilizar espontáneamente en la vagina, óvulos y espermatozoides.
El procedimiento, que ya ofrece Concevidas, consiste en un recipiente en el que se depositan óvulos y espermatozoides para luego ponerlos en una cápsula en el interior de la vagina durante 72 horas. Posteriormente, el médico extrae el dispositivo y escoge un embrión para colocarlo en el útero.
Lo novedoso de este tratamiento es la utilización de la vagina como incubadora, llevando la alta complejidad en técnicas de fertilización de los laboratorios al interior del cuerpo, lo que convierte el método en una opción natural y económica.
En la fertilización in vitro tradicional, se toman los gametos que integran el óvulo de la mujer y los espermatozoides del hombre para tenerlos en condiciones especiales, a 37 grados centígrados en el laboratorio para que se produzca la fertilización. Ahora este proceso se lleva a cabo en la vagina y con la misma efectividad.
Otro beneficio es que se puede repetir las veces que sea necesario, ya que no se utilizan gran cantidad de medicamentos para estimular la ovulación y por tanto no hay efectos colaterales.
Si bien ya genera una disminución ostensible en los costos de estos tratamientos, en el futuro la reproducción se hará con menos gastos, porque se utilizan cada vez menos cantidad de cultivos y equipos.

Barrio El Poblado, el centro de El Poblado

Un pueblo, en el buen sentido de la expresión, es El Poblado: templo, colegio, periódico, notarías, supermercado, entidades bancarias, parque, quebradas, emisora, zapaterías, droguerías, sastrerías, restaurantes, hoteles y un sin fin de servicios más hacen de este barrio el centro de la comuna 14

De acuerdo con el Departamento Administrativo de Planeación de Medellín, El Poblado o comuna 14 tiene 22 barrios y uno de ellos es El Poblado, el que le da origen al nombre. Para diferenciarlo, algunos le dicen Poblado Centro, por estar situado en torno al templo principal, el de San José.
El Poblado limita al norte con el barrio Lalinde, al sur con La Florida, al occidente con Manila y Astorga y al oriente con Las Lomas No. 1. Según los límites establecidos por el Municipio, se extiende entre la Avenida El Poblado o carrera 43 A hasta la carrera 32 D, y entre las quebradas La Poblada (al norte) y La Presidenta (al Sur). Sin embargo, para las personas del común este sector se divide a su vez en otros subsectores que son asumidos como barrios, como Provenza y el barrio Lleras, de los cuales hemos hablado en ediciones anteriores.

Los orígenes de El Poblado

Según la información publicada por Vivir en el Poblado en la edición 133 de la segunda quincena de abril de 1998, “versiones históricas apoyadas incluso en un monumento construido en el parque principal en 1966 por el Concejo Municipal afirmaron por mucho tiempo que esta parte central de lo que hoy se conoce como la Comuna 14 de El Poblado fue el origen de Medellín. Pero realmente lo que aquí sucedió, según un informe de la Academia Antioqueña de Historia, fue la fundación de un resguardo de indígenas denominado El Poblado de San Lorenzo, el 2 de marzo de 1616 por Francisco Herrera Campuzano. La fundación de Medellín fue el 2 de noviembre de 1675 en el Sitio de Aná, a una legua de distancia de El Poblado. Un nuevo monumento de la escultora Luz María Piedrahíta, contratado por la Secretaría de Educación, lo reafirma”.
Curiosamente, el próspero Poblado de hoy era en aquel entonces asentamiento de indígenas en penurias, con una pequeña capilla llamada San Lorenzo, por lo cual se llamaba el Poblado de San Lorenzo. Al ser demolida la capilla en 1720, la zona tomó el nombre de El Poblado, a secas. La capilla solo se recuperaría 125 años más tarde y se le identificó como San José. Hacia 1876 y por la petición de varios vecinos El Poblado fue erigido como parroquia. Para entonces tenía alrededor de 1.930 habitantes, según el censo de la época.

Con el paso del tiempo
El Poblado céntrico no ha cesado su transformación. De aquel resguardo de indígenas pasó, ya hacia finales del siglo 19, a estar caracterizado por varias casonas dedicadas a habitación, ganadería y recreo. Aún se recuerdan la de los Gómez Martínez o la de don Manuel María Escobar, donde hoy está el colegio Palermo de San José.
En los años 70 fueron célebres lugares como el teatro El Subterráneo (carrera 42 con la calle 8) y el bar y galería de arte Finale. Y en el año 85 nació en la calle 9 con la carrera 42 el primer canal regional de televisión del país: Teleantioquia.
Hoy sus principales referentes son la iglesia de San José, el colegio Palermo de San José, el periódico Vivir en El Poblado, la emisora Santa María de La Paz, las notarías 12 y 17, el bar y restaurante Berlín, El Machetico, La Reina, la Clínica de Fracturas, Pomona, Santa Elena y varias entidades bancarias, por solo citar algunos de los sitios más cercanos al parque principal. Por supuesto, también la muy vital calle 10, el eje principal del barrio. Desde mediados de este año 2011 también se instaló en el área la sede del Ballet Folclórico de Antioquia (carrera 42 con calle 9) y está en construcción un edificio mixto a solo cuadra y media del la iglesia (calle 9 con carrera 41) que dará lugar a 18 locales comerciales, 18 oficinas y 15 apartamentos.

Ruido, tacos e inseguridad, por resolver

Si nos atenemos al mapa y a los límites de Planeación, del céntrico El Poblado también hace parte la Zona Rosa. Esta se conformó hacia los años 90 del siglo pasado cuando las viejas casas empezaron a transformarse en establecimientos comerciales como bares, licoreras, restaurantes y discotecas. La primera piedra de lo que hoy es uno de los sectores de entretenimiento más frecuentados en Medellín la puso el Blue Rock, abierto en julio de 1992 por Jorge Cano, Carlos Uribe y Felipe Gómez en la casa que fuera de Pepa y Pachito Mesa (calle 10 con carrera 40).

En la Zona Rosa está la mayoría de los 117 sitios de rumba que según el Municipio tiene hoy la comuna 14, todos ellos con permiso para funcionar hasta las 4 de la madrugada. Esto ha generado roces permanentes entre comerciantes y residentes. La situación ha llevado a que el Concejo de Medellín intervenga mediante una comisión accidental que busca lograr acuerdos entre las partes, y a que se firmen varios pactos de convivencia que con frecuencia sufren tropiezos por el incumplimiento de algunos de los establecimientos. Otra de las quejas de la comunidad tiene que ver con inseguridad, la ocupación del espacio público, las congestiones de tránsito y el turismo sexual.


Ruido, tacos e inseguridad, por resolver
Si nos atenemos al mapa y a los límites de Planeación, del céntrico El Poblado también hace parte la Zona Rosa. Esta se conformó hacia los años 90 del siglo pasado cuando las viejas casas empezaron a transformarse en establecimientos comerciales como bares, licoreras, restaurantes y discotecas. La primera piedra de lo que hoy es uno de los sectores de entretenimiento más frecuentados en Medellín la puso el Blue Rock, abierto en julio de 1992 por Jorge Cano, Carlos Uribe y Felipe Gómez en la casa que fuera de Pepa y Pachito Mesa (calle 10 con carrera 40).

En la Zona Rosa está la mayoría de los 117 sitios de rumba que según el Municipio tiene hoy la comuna 14, todos ellos con permiso para funcionar hasta las 4 de la madrugada. Esto ha generado roces permanentes entre comerciantes y residentes. La situación ha llevado a que el Concejo de Medellín intervenga mediante una comisión accidental que busca lograr acuerdos entre las partes, y a que se firmen varios pactos de convivencia que con frecuencia sufren tropiezos por el incumplimiento de algunos de los establecimientos. Otra de las quejas de la comunidad tiene que ver con inseguridad, la ocupación del espacio público, las congestiones de tránsito y el turismo sexual.

Barrio Alejandría, entre unidades y oficinas

El barrio Alejandría es asiento de urbanizaciones y edificios de importantes empresas, muestra una pasiva actividad social y poca identidad entre sus habitantes. Alejandría, un barrio para analizar desde la sociología

Resulta extraño o poco frecuente ver caminar personas por sus calles, por sus lomas. Históricamente, por su conformación, ubicación y por el tipo de habitantes, Alejandría es un barrio donde algunos van a trabajar y otros llegan en las noches después de cumplir con sus obligaciones laborales.

Según el Departamento Administrativo de Planeación de Medellín, Alejandría va desde la Avenida El Poblado hasta la Transversal Inferior, y de la Loma de Los Parra a la Loma Los González, por donde baja la quebrada La Sucia. Al norte limita con Los Balsos N°2, al sur con La Florida, al oriente con Los Naranjos y hacia el occidente con el barrio Patio Bonito.
Aunque esa es la delimitación que define el Municipio, sus habitantes y su historia demuestran que en ese perímetro, también está ubicado el barrio El Chispero, e incluso algunos de otras zonas afirman que viven en Los Parra o Los González, pero no en Alejandría.

En Alejandría hay 1.500 apartamentos y 423 oficinas o locales comerciales. Allí están ubicados importantes hoteles, el Mall Zona 2 Sur en la Transversal Inferior, y en la conocida Milla de Oro en la Avenida El Poblado edificios como el del Banco de Occidente, Sudameris y el Centro Comercial La Strada.

¿Es un barrio?
En la zona baja, cercana a la Avenida El Poblado, muchas de las urbanizaciones tienen sus nombres con la palabra Alejandría, y son los habitantes de ese sector los que afirman que viven en el barrio Alejandría. Sin embargo, es común escuchar a otras personas que habitan en la misma zona, dentro del perímetro que la Alcaldía llama Alejandría, referirse al barrio con otro nombre.

El mapa que el Departamento de Planeación presenta como del barrio Alejandría, tiene dentro de sus límites al barrio El Chispero. La característica de tener un barrio dentro del marco que la Alcaldía determina como Alejandría, y que además sea uno tan tradicional como El Chispero, hace de la idea de que exista una zona como el barrio Alejandría, un buen objeto de análisis desde las ciencias sociales.

Según el antropólogo de la Universidad de Antioquia, Luis Alfonso Ramírez, “el tema del barrio, que no es nada fácil de abordar, escribe Michel de Certeau, se determina a través de la práctica de ser caminado. El barrio es una especial manera de compartir las prácticas más comunes y corrientes, así también como las más profundas en todo el sentido de la palabra, pues no se está en la casa, pero tampoco se está en la ciudad; de hecho, el barrio es una síntesis de ambos lugares. Esta idea inmediatamente nos remite a considerar al barrio como nuestro segundo nicho después de la casa, y de igual manera, como nuestro primer contacto con lo extraño, con lo de afuera. Es en el barrio donde nos convertimos en gente para la civilidad. Lo más lesivo para el propio barrio es que deje de ser caminado, pues es desde el caminar que podemos hablar de una apropiación real de él”,.

Sociólogo Javier Ignacio Muñoz

“Las unidades cerradas no tienen dinámica de barrio”

Con la ausencia de comité cívico, acción comunal, parroquia o algún líder comunitario en Alejandría, además de la particularidad de convivir en el mismo cuadro del barrio habitantes de estratos altos y bajos, la sociología explica y analiza el fenómeno. ¿Por qué conviven de manera diferente? ¿Qué identifica a las personas con su barrio? ¿Por qué algunos no se preocupan por el entorno donde viven? ¿Por qué se dan esas mezclas?
Según el sociólogo y docente de la Universidad Pontificia Bolivariana, Javier Ignacio Muñoz, el fenómeno de contar con el barrio El Chispero dentro de lo que el Municipio delimita como Alejandría, responde al desarrollo urbano de la ciudad y a la forma como en esa época se extendió. “A algunos los expulsaron por el costo de los servicios públicos. Yo recuerdo que alguna vez escuché sobre una lucha ciudadana de barrios de ese estilo en El Poblado, para que tuvieran una tarifa diferencial al resto de la comuna. Otros barrios como El Chispero son asentamientos antiguos de algunos que trabajaban en esas casas elegantes”, expresó el sociólogo Muñoz.

Identidad y liderazgo diferentes
Para el experto es más fácil encontrar que las personas se identifiquen con la ciudad en general que con su barrio. “Los criterios de pertenencia son muy distintos. Para los que somos de los años 50 o 60, la referencia de la ciudad era lo industrial, lo pujante y el crecimiento sobre el centro antiguo. Hoy Medellín tiene otros desarrollos, es una ciudad “mostrona” como la mujer de un mafioso, muy abundante, y la gente se deslumbra fácil”, dijo Muñoz.

Para entender la dinámica social del barrio, el sociólogo afirma que hay que diferenciar el estilo de vida de los dos tipos de habitantes que allí existen. “Las unidades cerradas no tienen dinámica de barrio. Esos barrios de urbanizaciones y edificios de apartamentos son casi barrios dormitorios, las personas salen a cumplir sus funciones económicas, los niños al colegio, regresan en la noche y se encierran en su unidad, mientras que en otros espacios como en El Chispero hay lazos de vecindad, cooperación y solidaridad. En un edificio no salen a prestar azúcar, por ejemplo, en los populares tienen historias de vida compartidas, comparten el espacio público, los niños juegan, tienen la misma parroquia, etcétera. Sobre el liderazgo cívico, creo que en las clases altas este es propio de sus profesiones, no es uno que tenga impacto inmediato en la vida del barrio. Un ejecutivo de un banco es líder en su organización pero no es líder en su barrio”, afirmó Javier Ignacio Muñoz.

Ruido en La Strada
Este sitio que en sus inicios se caracterizó más por los restaurantes, es hoy en día el lugar ideal para la rumba de jóvenes. Cuando comenzó dicha transformación, las quejas de algunos habitantes de Alejandría, ubicados detrás del centro comercial, empezaron a tener eco en la Administración Municipal, así como el malestar de algunos hoteles cercanos.
Hace pocos días y después de las visitas pertinentes, la Secretaría de Gobierno decidió reducir el horario de servicio de algunas discotecas por exceso de ruido.
“Se convocó a una mesa de trabajo entre comerciantes y la Administración Municipal y se llegó a un acuerdo sobre el comportamiento de cada uno de los establecimientos, presuntamente generadores de ruido, para que controlen el volumen y se ajusten a los decibeles. Se va a hacer un sondeo semanal sobre las problemáticas que se presentaron en ese período, para ver qué establecimientos irían a sanción conforme a la Ley y no se tendrán en cuenta para posibles ampliaciones de horario”, informó el Inspector de Policía 14B, Miguel Bustamante. También aclaró el Inspector que se pueden dar algunos cierres de establecimientos que cambiaron su tipología, es decir, que no cumplen con la actividad para la que fueron creados inicialmente, y por ello ya existen algunos trámites en la Inspección.

La finca de John Uribe: la historia de Alejandría
Por la crisis financiera del año 1929, la familia de don John se vio obligada a abandonar su residencia en el Centro de la ciudad para trasladarse a su finca, llamada Alejandría. Luego de su muerte, sus familiares dividieron la propiedad y la esposa conservó la casa principal, que años después se convertiría en la unidad residencial Plaza de Alejandría.
En octubre de 1998, en un artículo sobre la historia de Alejandría, contamos que este fue uno de los primeros barrios en construirse al sur de la plaza de El Poblado, en una época en que la mayoría de los terrenos hoy urbanizados eran todavía fincas de recreo.
Los que conocieron aquellos tiempos recuerdan a El Poblado rural en el que hacían paseos a caballo por todas las colinas, o daban vueltas en bicicleta por las pocas calles que existían. Poco a poco el barrio se fue llenando de familias que llegaban del Centro de Medellín, las cuales fueron testigos de la transformación de El Poblado y de Alejandría, donde la naturaleza y el ambiente rural eran sustituidos por lo urbano y las obras de valorización producto del crecimiento general de la ciudad.

Barrio El Castillo,patrimonio de la ciudad

Barrio El Castillo cuenta con algunas unidades cerradas, el protagonismo de este barrio se lo lleva el Museo El Castillo, construcción de tipo francés que con el tiempo se convirtió en museo y lugar para la cultura

Como El Diamante 2, El Castillo es un barrio en el que aún predominan las zonas verdes, en esta ocasión, gracias a los terrenos del Museo El Castillo y del Club Campestre.
Son estos dos lugares además de los colegios Gimnasio Los Pinares y La Compañía de María La Enseñanza, los que le dan vida y estilo propio al barrio. No son los encuentros de sus habitantes en las esquinas, sino la actividad cultural del museo lo que desde el principio determinó el nombre del barrio.

El Castillo está entre la calle 9 Sur, conocida como Loma de Los Balsos y la calle 16A Sur, y entre la Avenida El Poblado y la Transversal Inferior. Está entre los barrios El Diamante 2 y Los Balsos N°2, al occidente tiene límites con Santa María de los Ángeles y La Aguacatala, y al oriente con San Lucas y Los Balsos N°1.

Como lo reseñó Vivir en El Poblado en su edición número 131 de la segunda quincena de marzo de 1998, José Tobón le vendió su finca al reconocido filántropo Diego Echavarría, el cual, educado en Europa y conocedor del arte y la cultura del viejo continente, terminó la construcción del castillo y lo convirtió en su residencia habitual, en ese entonces alejada del ruido de la ciudad. La casa le permitió a don Diego dedicarse a las artes plásticas, la música y la naturaleza, sus grandes pasiones.

Por su afición a la jardinería, Diego mandó a traer desde Italia semillas de los cipreses que forman la alameda de la entrada del castillo. En el testamento de Diego Echavarría, quedó que su residencia fuera un museo y que parte de los terrenos de la finca los cedieran al Hospital San Vicente de Paúl, quienes vendieron su parte a una firma constructora y desarrollaron la unidad Montevideo.

En cuanto al Club Campestre, nunca fue parte de los terrenos oficiales de la finca El Castillo. En 1924, Germán Olano, de la Sociedad de Mejoras Públicas, aficionado al golf, el tenis y el polo, promovió la fundación de un club en Medellín que permitiera la práctica de esos deportes. 60 socios pagaron 100 pesos por acción y en menos de un mes ya habían llegado 100 socios atraídos por las ventajas del Club Campestre frente el Unión y los cafés del Centro. Actualmente es uno de los principales clubes sociales del país.

Le dio nombre al barrio
Fue José Tobón Uribe, quien mientras cursaba medicina en París se enamoró de los castillos de Francia, especialmente los del Valle de Loira. Iniciando los años 30 del siglo pasado, la construcción del castillo en las lomas de El Poblado fue algo impactante entre las demás familias que ya tenían aquí sus casas campestres.

Luego de que don Diego falleciera, su voluntad se cumplió y su hogar se convirtió en museo, el cual ha pasado por reformas y remodelaciones para que la comunidad encuentre variada programación y comodidad. Marta Ligia Jaramillo, quien es la directora del Museo El Castillo hace casi 30 años, afirma que “cuando yo llegué la preocupación era por la seguridad del Museo, pero en dos años construyeron unidades y El Castillo quedó aislado en su espacio verde como parque, cerrado por el vecindario de unidades y edificios como Corales y Montevideo. La familia Echavarría había dejado la casa para que la gente la disfrutara, para que recibieran cultura, arte, y para fomentar la sensibilidad y la creatividad. Ellos querían que fuera un museo de puertas abiertas y recientemente lo cumplimos, lo que pasa es que el mantenimiento no es fácil y además el museo siempre ha estado en obras, mejorando”, dijo la directora.

El Museo El Castillo va desde la Loma de Los Balsos hasta la quebrada La Aguacatala, donde está pendiente una segunda etapa del parque ambiental que aún no se ha desarrollado. Uno de los momentos más difíciles tuvo que ver con la construcción de la doble calzada Los Balsos, lo que complicó el ingreso de los visitantes al museo y la asistencia a los talleres de la escuela de arte, ya que los padres no llevaban a sus hijos por las grandes congestiones en la loma. Sin embargo, según la directora Jaramillo la doble calzada era una necesidad y había que esperar con paciencia.

El parque quedó iniciado

Aunque de la primera etapa del proyecto se mejoraron instalaciones, se consolidó el parque en la parte frontal y posterior del museo, se desarrollaron senderos, se recuperaron las fuentes, además de conservar la flora y la fauna, quedaron pendientes arreglos en el parqueadero, la caja de cristal para eventos y el puente que conectaría con la segunda etapa.
La segunda fase del Parque Ecológico Ambiental le daría uso a la zona verde perdida cercana a la quebrada La Aguacatala. El proyecto contempla continuación y desarrollo paisajístico de jardines periféricos, construcción de plazoleta de acopio y bienvenida, terminar el parqueadero principal, restaurante, continuación de senderos, jardín de orquídeas y marantas, un laberinto floral y juegos infantiles, entre otros.
Por ahora, tras la terminación del convenio con la Alcaldía, la segunda etapa del parque se encuentra a la espera de inversores, para que el Museo El Castillo continúe siendo el pilar que le dio nombre a su barrio, su razón de ser e identidad.

Terminó convenio con la Alcaldía

A mediados de 2009, la Alcaldía de Medellín y el Museo El Castillo firmaron un convenio en el que los primeros se comprometían a dar recursos para la construcción de un Parque Ecológico Ambiental, y el ente cultural abría las puertas para el público de forma gratuita, con el fin de que más de 250 mil personas ingresaran a El Castillo en dos años. La meta se cumplió, dice Marta Ligia Jaramillo.

Según la directora, antes de firmar el convenio construyeron la Sala de Arte, realizaron la remodelación de la sala de conciertos y recuperaron sótanos, con la idea de abrir más aulas para clases y consolidar el edificio. Asegura que no fue fácil gestionar los dineros para ello, y que por lo general los alcaldes consideran que El Castillo, por estar en El Poblado, no requiere impulso y ayuda estatal. “A través de los años los alcaldes han pensado que estamos en un lugar privilegiado y que por eso no necesitamos recursos, y mientras tanto nosotros luchando, el parque deteriorándose, y a la vez manteniendo programación cultural y gestionando con el sector privado que es más difícil. Cuando Alonso era candidato le dijimos que esto era un patrimonio, él nos dijo que si era alcalde nos ayudaba y aproximadamente a los dos años de iniciar su gobierno, nos llamó y se comprometió con el Parque Ecológico Ambiental”, dijo Jaramillo.

Luego de cerca de dos años de convenio, la Alcaldía de Medellín argumentó que no había más recursos para el museo, y aunque faltaron obras, la dirección de la entidad agradece y reconoce la importancia de dicho convenio. “Fue la salvación para El Castillo, recuperamos espacio público y fue la oportunidad para que muchos conocieran el museo. Lo consolidamos como una institución cultural, realizamos eventos de ciudad, y es una lástima que haya terminado porque son inversiones en patrimonio cultural tangible, permanente para el público. Estamos esperando la oportunidad para terminar el parque y en un tiempo tener una financiación que nos permita trabajar y recibir gente gratuitamente”, agrego la directora del museo.

Barrio Provenza: el faro de El Poblado

El barrio Provenza tiene personalidad y sello propio. Lo distinguen su estética armoniosa y el sentido de pertenencia de sus residentes y comerciantes

Oficialmente, Provenza no existe como barrio de El Poblado. No figura en el mapa del Departamento Administrativo de Planeación de Medellín, así como tampoco aparece el barrio Lleras. Sin embargo, ambos están contenidos en lo que el Municipio denomina barrio El Poblado, dentro de la comuna 14 -El Poblado-. Por lo mismo, no hay datos sobre su número de habitantes y no son pocos los que desconocen cuáles son sus límites. Incluso algunos no saben que el templo de La Divina Eucaristía, según la división política de Medellín, no hace parte de Provenza sino del barrio La Florida.

Lo cierto es que en El Poblado, Provenza tiene arraigo como barrio. Está comprendido entre las carreras 32 D y 37, y entre las calles 8 y 10. Lo componen cinco manzanas que, al igual que otras zonas de la comuna 14, se han caracterizado en los últimos años por su transformación de sector netamente residencial a comercial.

De acuerdo con los datos suministrados por la oficina de distribución de Vivir en El Poblado, Provenza tiene 43 viviendas, 108 oficinas y un único edificio de habitación: Provenza, con seis apartamentos. El barrio cuenta con establecimientos como el hotel Plaza Rosa, el Geo Hostal, los restaurantes Basílica y Niteroi, La Taquería y Seagate, las salas de belleza, Luisfer, e Imagen para ti, por solo citar algunos pocos de los numerosos negocios que tiene Provenza.

Cuando pescar era posible

Los antiguos habitantes de Provenza lo recuerdan con nostalgia, como se puede leer en la historia de este barrio publicada por Vivir en El Poblado en la primera quincena de agosto de 1998 (edición 140). Bastante ha cambiado el sector desde aquellos finales de los años 50 del siglo pasado, cuando fue construido por el Banco Central Hipotecario en los terrenos de la antigua finca Provenza. A ambos lados de la quebrada La Presidenta, donde en la época se podía pescar, se edificaron casas de dos estilos, debido a la pendiente del terreno: de dos pisos en un costado y de tres pisos en el otro. Uno de los primeros residentes de Provenza, Jesús Mejía, aseguraba hace 11 años a Vivir en El Poblado que “una casa de esas valía en la época 47 mil 500 pesos, la cuota inicial era de 14 mil pesos y la mensualidad de 400 pesos.”

El destierro del aburrimiento

Durante sus primeros años Provenza era un barrio silencioso y tranquilo, de calles amplias y rodeado de fincas. Las familias que empezaron a poblarlo provenían de distintos sectores de Medellín, como el Centro, Laureles y Buenos Aires. Como a tantos otros que decidieron trasladarse al sector sur de la ciudad, sus allegados los criticaron por “irse tan lejos”, pero como los nuevos habitantes eran en su mayoría profesionales jóvenes, recién casados o con hijos pequeños, vivir en un barrio semicampestre como lo era Provenza hacía parte de sus sueños.

De la rutina de los niños de los inicios del barrio hacían parte el montar libremente en bicicleta por las calles, pescar a pocos metros de la casa, tirar llantas por la pendiente, elevar globos en El Vergel, deslizarse con la corriente de La Presidenta durante los días invernales, coger pitayas y madroños en la finca Los Rosales, pomas en el lote por donde hoy pasa la calle 7, mandarinas en la finca de Norman Navarro y jugar fútbol en la manga llamada Boñiga, de tal manera que el aburrimiento no atormentaba a los muchachos de Provenza.

Junto con Lalinde, Lleras y Manila y más tarde Astorga y Patio Bonito, Provenza conformaba el viejo Poblado, aquel donde todos los vecinos se conocían y podían recorrer sin peligros uno de los lugares más agradables de Medellín.

En aquellos mediados del siglo 20, tanto la calle 10 como el resto de la Zona Rosa -que entonces no existía- constituían una hermosa área residencial. Todas las casas que hoy son locales comerciales estaban habitadas y los pocos negocios existentes eran las tiendas de barrio como el Granero Social de Provenza; Niágara, en el Lleras, las Hamburguesas Pop, contiguas al templo de San José, y el restaurante El Che, en la calle 9. En este entorno se hacían las famosas Olimpíadas de El Poblado. Cada barrio organizaba su delegación para las competencias de fútbol y béisbol en la cancha de Boñiga, de patinaje en el Parque Lleras, de atletismo en la carrera 28 y demás competencias en lugares como la cancha de Provenza o la calle 10.

La nueva era

Las familias crecieron, los tiempos cambiaron, los hijos se fueron y para muchos viejos habitantes de Provenza fue una buena opción alquilar sus residencias para establecimientos comerciales, y trasladarse a otros lugares de El Poblado, propiciando el nacimiento del Provenza que conocemos hoy. Es un barrio que, pese a su transformación y a algunos lunares o negocios que se caracterizan por el ruido que generan, ha luchado por mantenerse agradable y armonioso, al punto de convertirse en ejemplo de unión para otras zonas de El Poblado.

Vía Primavera: unión que florece

Para quienes frecuentan Provenza, su principal referente es la Vía Primavera o carrera 37, entre las calles 8 y 10. Su pequeño parque y sus frondosos árboles, así como sus tiendas, almacenes y restaurantes instalados en las antiguas y cuidadas casas, invitan a recorrerla y disfrutarla. En ella los visitantes pueden encontrar 43 tiendas abiertas, con marcas vanguardistas de ropa, accesorios, calzado decoración, arte y gastronomía.
Gran parte del posicionamiento del que hoy goza esta vía es el resultado del trabajo de sus comerciantes, quienes hace tres años conformaron la Corporación Vía Primavera. Uno de sus objetivos es orientar, coordinar y defender los intereses de los 36 diseñadores y empresarios agremiados, y con la ayuda de autoridades civiles, de policía, el Concejo de Medellín y los residentes, proteger la zona y propiciar una convivencia armónica.
Desde hace dos meses la directora ejecutiva de la Corporación Vía Primavera es Adriana Gómez, una joven administradora de negocios que tiene como reto “lograr que todas las marcas se asocien, incluir a las vías de arriba (carreras 36 y 35), pensar como barrio y no como calle y convertirnos en referente turístico, cultural, artístico y gastronómico, con productos 100 % colombianos.” Actualmente, la corporación gestiona convenios con las facultades de diseño de la ciudad, Inexmoda y grandes empresas, con el fin de mostrar la Vía Primavera, consolidarla y fortalecerla.

Acuerdo por una mejor calidad de vida en Provenza

Como varios de los locales comerciales que existen en Provenza han propiciado quejas de los residentes del sector por la venta de licor y el ruido excesivo, la comisión accidental del Concejo de Medellín que trabaja este tema logró un principio de acuerdo para controlar el problema. Según explicó el coordinador de la comisión, concejal Santiago Martínez, próximamente se firmará un acta de compromiso con comerciantes y la Secretaría de Gobierno para establecer microconcesiones del espacio público en la carrera 36 e impedir la venta de licor. “Los mismos comerciantes del sector lo pidieron. Es un gran adelanto y es maravilloso”, dijo Martínez, quien destacó el sentido de pertenencia que en Provenza tienen por su barrio. “La calidad de gente de Provenza es extraordinaria. No quieren el deterioro del espacio público, ni perturbación por ruido, hay unidad de sentimiento y comportamiento y están prestos a ayudar. Con un grupo con esta visión, Provenza puede convertirse en faro de otros sectores de El Poblado.”

Las lomas solitarias

El barrio Las Lomas, ubicado al nororiente de la comuna, es un barrio más de El Poblado en el que lo comercial y residencial sobresalen sin existir interacción entre ellos

Edificios de empresas, unidades residenciales y muchos vehículos estacionados en las calles son gran parte del paisaje de este barrio. Pueden transcurrir muchos minutos sin ver a alguien caminando por las aceras del barrio, hasta que el paso de algún habitante con su mascota rompe con la rutina de los carros, los semáforos y el silencio general que se percibe por sus cuadras. El paso de esa mascota puede ser el hecho más relevante de un día de semana en el barrio Las Lomas. Mientras en las calles las personas no se ven, no hay tiendas ni graneros, en las oficinas y en los apartamentos de las urbanizaciones cada quien vive lo suyo sin preocuparse por el exterior. Al terminar la jornada, se suben a sus carros y se van sin dejar rastro alguno, y el barrio silencioso sigue ahí.

Así es el barrio, dividido por el Municipio como Las Lomas 1 y Las Lomas 2. Tiene homónimos como las lomas de Los Parra, Los González y Los Mangos, pero el barrio Las Lomas es uno solo y está comprendido entre la carrera 36 y la Transversal Superior, y la calle 10 y la variante Las Palmas, en un área de 826 mil 535 metros cuadrados.
Allí habitan más de 6 mil personas y mientras en 1997 contaba con 2.023 viviendas, actualmente son 2.870 apartamentos, 86 edificios y 230 oficinas.
Algunos referentes son el Hotel Intercontinental, Hotel Park 10, Pinar del Río, Caná de Galilea, Centro Comercial Vizcaya, Hogar Vizcaya y edificios como Las Conchas, Los Caobos, Palmeiras y Fontana Rosa entre otros. El barrio no cuenta con una parroquia grande para los feligreses, pero sí con una pequeña capilla, un centro apostólico llamado Nuestra Señora de la Candelaria.

Las Conchas y Los Caobos

El conjunto de unidades residenciales vecinas a la calle 10 y separadas por la quebrada La Poblada del resto del barrio son conocidas como Las Conchas. Arboleda de La Concha, La Concha, La Concha 2, Bosque de La Concha, Altos de La Concha y el Vivero La Concha son algunos de los sitios que rememoran aquella vieja finca que, como Patio Bonito, Astorga y Manila, hizo de El Poblado un sitio de paseo y descanso a mediados del siglo anterior.
Los Caobos, casa ubicada en la calle 10B con la carrera 35, es una de las edificaciones que muestra que El Poblado era para veranear. Como lo publicó Vivir en El Poblado en su edición 120, de la segunda quincena de septiembre de 1997, “la casa era propiedad de don Jesús Posada y luego de don Jorge Cock Quevedo. Aunque luego pasó a funcionar allí un almacén, siempre será recordada como la casa de la finca Los Caobos y también de la San Lorenzo, cuya portada estaba ubicada en la calle 10”.

Hogar Vizcaya, tres décadas de servicio

El próximo mes de febrero, este lugar que es la casa de 40 ancianos que viven con las comodidades y atención del grupo profesional del hogar, cumplirá 30 años desde su fundación en esa casa antigua que es uno de los sitios tradicionales del barrio Las Lomas.
El Hogar Vizcaya fue una donación de Germán Echavarría y Lucía Olarte, hijo y esposa del reconocido empresario antioqueño Alejandro Echavarría, de la casa que fuera su residencia de veraneo por muchos años. La entrega se hizo siguiendo el deseo de Alejandro Echavarría, quien explícitamente pidió destinar esa vivienda para el cuidado y atención de ancianos de la ciudad.

La Hermana Obeida Bedoya, quien trabaja en enfermería del Hogar, dijo que “acá la política es trabajar para que se sientan en un ambiente de hogar, cubrir las necesidades básicas en un ambiente de familia con todos los servicios de nutrición, fisioterapia, tiempo libre, actividades recreativas y enfermería entre otros. Que estén felices y se sientan queridos y valorados”.

Espacio para el arte

La Galería Arte Autopista tiene 42 años de existencia, empezó en el Centro de Medellín en Sucre con la Avenida La Playa, luego en Oviedo, Villanueva y en otras ciudades como Cali y Bogotá, y hace más de 20 años se encuentra en el barrio Las Lomas en la carrera 28 con la calle 10B.

Hildebrando Mejía, director de la galería desde hace 18 años, fue hace un tiempo un comerciante reconocido que perteneció a las juntas de Fenalco y la Cámara de Comercio. Hoy, a sus 78 años, continúa al frente de este espació para el arte y la exhibición, mientras hace el empalme con su hija Ana Lucía Mejía, negociadora internacional de la Universidad Eafit con Maestría en negocios con orientación al arte en España.

Según el director Mejía, en la galería han hecho unas mil exposiciones y han pasado grandes maestros como Enrique Grau y Ricardo Gómez Campuzano entre otros. Pinturas en óleo, acrílico, dibujo y acuarela; esculturas de piedra, bronce, madera y yeso, son la constante en la Galería Arte Autopista.

“Acabamos de terminar la exposición de Leonel Estrada con 90 cuadros, y justo él cumplió 90 años. Fue extraordinario porque vino la familia en pleno a la exposición. Lo que Leonel buscó es que los niños le pierdan el temor a pintar, que sean mejores personas y artistas, por eso hemos pensado vincular empresas para enviar sus obras a pueblos antioqueños”, dijo Hildebrando Mejía.

También destacó la importancia de la presencia de la galería en el barrio, por la gran ubicación que tiene y la cercanía con importantes hoteles, para que los extranjeros conozcan el arte colombiano.

Problemas de tránsito

Vivir en El Poblado en su especial del barrio Las Lomas en 1997, informó que “la tranquilidad del sector se ha visto vulnerada, sobre todo en las noches y debido al tráfico de vehículos. En el sector de las casas, los camiones en la madrugada que recortan el viaje desde Las Palmas hasta la autopista hacen mucho ruido. Y en Las Conchas, el retorno de la vuelta a oriente por la Cola del Zorro que recalienta frenos y produce choques casi cada semana”. La información de aquella época sigue vigente en la actualidad teniendo en cuenta las quejas de los habitantes de esa zona, que también hablan de las rutas de buses que comienzan a subir y a descender por las lomas desde muy temprano en la mañana, generando ruido y malestar al interior de las viviendas.

El Garabato todavía es un paraíso

Aunque, según Planeación, El Garabato hace parte del barrio Los Naranjos, este sector de El Poblado tiene gran tradición y vida propia

“Cuando los esclavos adquirieron su libertad, muchos de sus antiguos amos les dieron como dote pedazos de tierra para que construyeran sus viviendas. Así nació El Garabato en el siglo 19. Por eso aquí casi todos somos de color oscuro”.

La afirmación es de Hilda Escobar, presidente de la Junta de Acción Comunal de este sector, ubicado entre la Transversal Superior y la carrera 30, y el tanque de EPM (llamado de Los Parra) y la quebrada La Volcana.

El nombre de El Garabato surgió del oficio que desempeñaban abuelas y bisabuelas de esta zona: elaboraban gelatina de pata en las horquetas o garabatos de los árboles y bajaban diariamente a venderlas a la plaza de Cisneros. “Cada casa tenía al frente un garabato donde las mujeres trabajaban, y así se quedó: El Garabato”.

Estas y otras historias recuerda Hilda, sentada en el patio delantero de su casa con apariencia de finca. Oficialmente pasó de sector rural a urbano en 1979, cuando por primera vez sus casas tuvieron nomenclatura. A inicios y mediados del siglo pasado, muchos de sus pobladores trabajaban como mayordomos o jornaleros de las fincas de las personas más adineradas de Medellín, ubicadas en El Poblado. “Aunque no tenemos la vegetación que había antes, todavía hay fauna y flora. Mejor dicho, El Garabato todavía es un paraíso”, asegura Hilda.

Privilegios y lunares


De acuerdo con los datos y mapas oficiales, El Garabato pertenece al barrio Los Naranjos de la comuna 14. Lo conforman 130 casas, en su mayoría de estratos 2 y 3, y un promedio de cuatro habitantes por vivienda.

A diferencia de otros sectores de El Poblado, carentes de espacios públicos, El Garabato es privilegiado al contar con tres parques, una cancha, una ludoteca infantil y una sede para la Junta de Acción Comunal, cedida en comodato por la Alcaldía. En estas áreas, niños, jóvenes y personas mayores juegan fútbol, o aprovechan los juegos infantiles o simplemente disfrutan de la recreación pasiva en medio de los senderos rodeados de naturaleza.

Como carencias, sus habitantes señalan el mal estado de las vías de acceso y el desempleo que, paradójicamente, afecta más a quienes son profesionales o han estudiado alguna técnica.

En los últimos años, además, han sentido como amenaza el proyecto del Municipio de construir un depósito de buses en el sector. Unidos con conjuntos residenciales vecinos, elevaron una acción popular para impedir su construcción por considerarla inconveniente. “Uno de los perjuicios es que cerca de 30 de las casas de El Garabato serían colindantes del depósito de buses y se afectarían porque son construcciones muy viejas.” Después de estas manifestaciones de incomodidad, la Alcaldía no ha vuelto a insistir en la ejecución de este proyecto.

Negocios ilegales

Uno de los lunares de El Garabato es la existencia de dos casas donde se expenden sustancias ilícitas, casos que son bien conocidos por autoridades civiles y de policía. Desde años atrás su permanencia se ha ventilado en reuniones de seguridad en El Poblado y en ocasiones se han realizado operativos. Sin embargo, el par de negocios ilegales continúa floreciente. Ambos tienen como clientes a personas provenientes de otros sectores de Medellín y de la comuna 14, quienes llegan en automóviles de alta gama a comprar la droga que adquieren sin problemas.

Los Parra: el barrio de los caminos

La Loma de Los Parra es uno de los sectores más representativos de El Poblado y uno de los lugares donde se inició su poblamiento

Según Planeación de Medellín, La Loma de Los Parra pertenece al barrio Los Naranjos, al igual que las lomas de Los González y El Garabato. No obstante, los líderes de estos tres sectores no están de acuerdo conque los agrupen con ese nombre pues consideran que les quita identidad.
En el caso de Los Parra, su historia se remonta más de 100 años atrás. Aún en el barrio habitan en casas centenarias descendientes de las familias fundadoras, con un gran arraigo por el lugar. Incluso se encuentran todavía algunos descendientes de la familia Parra, los primeros en habitar este lugar, y de donde surgió el nombre de la Loma de Los Parra. Claro que abundan por estos lados otros apellidos como Vasco, Berrío, Gil y Gaviria.
Con el tiempo y dada su ubicación geográfica, la llamada Loma de Los Parra se ha convertido en sector de referencia de El Poblado y Medellín, y ha propiciado un gran desarrollo a su alrededor .

Entre la tradición y el progreso

De acuerdo con datos suministrados por el Fondo de Valorización de Medellín -Fonval-, el área de influencia de Los Parra se extiende entre la calle 1 sur y la calle 1A Sur, y entre las carreras 29 y 33.

Sus viviendas se ubican tanto hacia el costado sur como al costado norte de esta empinada loma que termina en el Centro Comercial El Tesoro. A muchas de estas casas se llega por innumerables caminos y callejuelas, lo que es justamente una de sus principales características.

Como suele suceder en El Poblado, cada barrio se divide en otros y estos a su vez se subdividen. Es así como de Los Parra hacen parte El Hoyo y San Luis, sectores que manejan hasta cierto punto una dinámica propia.

Datos oficiales indican que para el año 2009 habitaban en Los Parra cerca de 1.300 personas: mil en las unidades residenciales y 300 en las casas del sector tradicional. Y esta es otra de las particularidades de la Loma de Los Parra: en el barrio confluyen los estratos socioeconómicos 2, 3, 4, 5 y 6.

Denis Arrieta, Presidente de la Junta de Acción Comunal, destaca que esta es una de las lomas que más acercamiento tiene con las unidades residenciales y que con varias de ellas se unieron para conformar un frente de seguridad. De Los Parra hacen parte, entre otras, La Coruña, Linares, Reloj de Arena, Canto de la Cascada, Patios de La Fuente, Gibraltar, Bizancio y Jardín de Sauzalito, y hay otras en construcción.

Sitios referenciales

Aunque el barrio conserva la preponderancia de su vocación residencial, tiene tiendas, papelería, barbería y empresas especializadas en restauración de muebles, carpintería, fabricación y distribución de cortinas, artículos en acero inoxidable y publicidad. En las áreas comercial y de servicios se destacan el Mall Plaza, el Hotel Casa Victoria, varios restaurantes, peluquería y sastrería.

Así mismo, la calle 1 Sur o Loma de Los Parra es utilizada como terminal de buses de la ruta 130 de la empresa Autobuses El Poblado Laureles. En parte para evitar la congestión que los vehículos de transporte público propician en la estrecha loma, desde tiempo atrás el Municipio, por intermedio de la EDU, proyecta construir una terminal o depósito de buses en un lote frente al Centro Comercial El Tesoro, al costado occidental de la Vía Linares. Sin embargo, personas de otras áreas vecinas han interpuesto acciones populares para evitar su edificación.

Sin duda, uno de los principales orgullos que tienen hoy los habitantes de Los Parra es la Escuela Santa Catalina de Siena -adscrita al Inem José Félix de Restrepo- construida hace tres años con recursos del Municipio de Medellín y de Presupuesto Participativo y gracias al apoyo de la Junta Administradora Local. Centenares de niños y jóvenes de esta y otras lomas estudian en este colegio de calidad.

Así mismo, Los Parra también cuenta con una cancha de tenis y con un parque conocido como reloj de arena, resultado de compensaciones urbanísticas de constructores del sector.
Uno de los proyectos viales decretados para construir mediante el sistema de valorización y que impactaría al barrio es el conocido como prolongación de Los Parra hasta la carrera 29 o vía Linares.

 

Emma Vasco: historia viva de Los Parra

Entre los personajes más queridos en la Loma de Los Parra está Emma Vasco, quien hace parte del Comité Cívico de Participación Ciudadana del barrio. Sus hijas Beatriz y Marta Vasco le dicen cariñosamente “mi viejita”. No es para menos, pues a ella deben sus triunfos. Beatriz estudió, entre otras cosas, secretariado y auxiliar contable, y hoy, luego de jubilada, adelanta gerontología. Por su parte, Marta es especialista en literatura latinoamericana, profesora destacada del colegio Santa Catalina, tiene ocho títulos y por su labor obtuvo en 2010 el premio Medellín la más Educada, entre decenas de profesores.

Emma vive en unas de las casas más antiguas de la Loma de Los Parra y recuerda el pasado con precisión de detalles, tanto que en 1998 escribió la historia del barrio para un concurso de la Alcaldía y recibió una placa de reconocimiento.

“Mi abuela nació aquí y se murió de 94 años. Nosotros somos nativos y somos las raíces de los fundadores de El Poblado. Mi abuelo era arriero y trabajaba la tierra”. Pese a estar recluida en la cama por causa de una enfermedad que la obliga a utilizar oxígeno, Emma se da licencia para dar rienda suelta a sus recuerdos desde la comodidad de su mecedora en el corredor de la casa.

“Cuando estaba niña salíamos a las 3 de la mañana a buscar leña monte arriba, casi hasta Rionegro, y lavábamos ropa en las quebradas la Escopetería y El Chambul. El agua bajaba por toda la calle por una zanja pequeña, en cada propiedad había una canoita y una acequia y de ahí cogíamos el agua. No había más de 18 casas.”

Emma recuerda que aprendió a leer en una escuelita situada donde hoy es Miravalle, “donde la señorita Pepa Saldarriaga nos enseñó a escribir en la arena porque no había tablero”.

Estudió hasta cuarto de primaria y después empezó a trabajar, al igual que las infatigables mujeres de estas lomas. “Me siento muy orgullosa de haber trabajado en las casas de los ricos como Guillermo Echavarría, María Elena Uribe, María Elena Echavarría, Francisco Robles y Luis Olarte. Planchaba, lavaba pisos, lo que fuera”.

También agrega con orgullo que fue nana del célebre caricaturista Velezefe, quien tenía la finca donde hoy queda el colegio Santa Catalina de Siena, y que cuando llevaba ocho años de trabajar como planchadora en la casa de Javier Bravo Restrepo, situada donde es hoy el Monasterio de La Visitación, este se la llevó a trabajar a Cristalería Peldar en oficios varios. Y allí laboró 25 años hasta jubilarse. Simultáneamente, sus hijas, quienes habían logrado estudiar gracias a su esfuerzo, trabajaban en Peldar.

“Yo nunca me imaginé que iba a tener una vejez tan linda y agradable”, dice y se queda pensativa. Pero a pesar de su satisfacción con el presente, añora aquellos años en que había más unión entre los vecinos y hacían convites, rifas, bazares, empanadas, reinados y bingos para sacar adelante causas como el agua comunal, construir la sede de la JAC o sacar a alguna familia de una urgencia económica. “Yo vivo admirada de la gente, de mi comunidad, de que somos tan echados pa´delante, que no nos dejamos amilanar ni le mostramos al gobierno las necesidades que tenemos, sino que nosotros mismos salimos adelante. La comunidad debe seguir trabajando unida y no mirarse con indiferencia con otro sector.”

Villa Carlota: la nueva cara de El Poblado

La más significativa intervención urbanística que ha tenido El Poblado en los dos últimos años ha ocurrido en el barrio Villa Carlota. Ciudad del Río es una muestra de ello

En un barrio como El Poblado y una ciudad como Medellín, consolidados urbanísticamente hablando y donde en apariencia no son muchos los terrenos planos que quedan por construir, Villa Carlota, asiento de Ciudad del Río, es evidencia significativa de renovación urbana, donde se conjuga con el barrio tradicional una nueva oferta de arte, cultura, recreación, comercio, vivienda y un sinnúmero de servicios médicos y empresariales.

Un nuevo referente urbano

Según el mapa del Departamento Administrativo de Planeación de Medellín, el barrio Villa Carlota se extiende entre las calles 14 y 23, y las avenidas El Poblado (43 A) y Regional (49). Limita al sur con el barrio Manila, al norte con Barrio Colombia, al oriente con Castropol y al occidente con el río Medellín.

De acuerdo con la información suministrada por la oficina de distribución de Vivir en El Poblado, Villa Carlota tiene 907 apartamentos y 708 locales comerciales. Entre sus edificios residenciales se destacan Pinar del Río 1 y 2, El Pinar, Pinar Alto, Parques de Villa Carlota, Villa Carlota y Calabria. Algunos de sus edificios comerciales son Nova Tempo, Colinas del Poblado, Delta, Recife y Centro de Negocios Alcalá. Igualmente hacen parte de Villa Carlota referentes empresariales tan importantes como Holasa, Cartón de Colombia, Servientrega y Ascensores Andino, así como el Centro Comercial Automotriz, Homecenter, el Instituto de los Seguros Sociales, la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales y tres estaciones de gasolina.

El mayor desarrollo de Villa Carlota en los últimos dos años se ha dado en lo que fueran los antiguos terrenos de la siderúrgica Simesa S.A y sus Talleres Robledo, donde se construyó Ciudad del Río. Esta ciudadela nació como resultado de un plan parcial de redesarrollo conocido como La Gran Manzana de Simesa. En Ciudad del Río se encuentran hoy la sede principal del Museo de Arte Moderno de Medellín, el restaurante Bonuar, la Clínica Clofán, dos unidades residenciales (Parque Central y Torres del Río) y el Parque Lineal Ciudad del Río. En construcción están una tercera unidad residencial (Plaza del Río), el Hotel Ibis y muy pronto iniciará la edificación de la Clínica del Prado, por solo citar algunas de las intervenciones con las que contará esta nueva zona.

Este panorama habitacional y empresarial hace, sin duda, de Villa Carlota, uno de los barrios con más importancia y proyección de la comuna 14 y de Medellín.

Bajo la guía del Mamm

Por ser hoy Villa Carlota un espacio de renovación, la joven publicista y filósofa Juliana Restrepo es uno de sus personajes más representativos. Es ella quien desde hace poco menos de tres años dirige los destinos del Museo de Arte Moderno de Medellín, a cuyo alrededor se desarrolla Ciudad del Río. No solo entonces hacen parte de sus retos el progreso y consolidación de esa institución cultural sino la relación amigable y de compromiso con la comunidad circundante de Villa Carlota.

Con solo año y medio de inaugurada la primera etapa del Mamm en este sector, se avecina su crecimiento. La construcción del teatro del Museo empezará este año, con miras a que esté listo en 2013, tras 18 meses de ejecución. Estará situado en donde hoy funciona el parqueadero -área trasera del Mamm- para lo cual se construirán nuevos estacionamientos en sótano con mayor capacidad a la actual (de 32 celdas pasará a 89).

Su diseño es resultado de un concurso realizado a finales de 2009, el cual fue ganado por la firma peruana de arquitectos 51 Uno, con el compromiso de trabajar en conjunto con una firma local, en este caso las arquitectas de Control G.

La estructura tendrá varios niveles. Albergará las oficinas administrativas del Museo, extensión de las bodegas, aulas múltiples para talleres, salas permanentes para colección, un restaurante, locales comerciales, terrazas y, obviamente, el teatro, el cual tendrá 250 sillas y funcionará hacia ambos lados de la pantalla. “Será un auditorio muy bonito y novedoso”, dice la directora Juliana Restrepo. “La pantalla se encoge y se abre para convertirse en teatro abierto, el cual conecta con unas escaleras que bajan a la plazoleta, entonces se amplía su capacidad”, explica.

La otra prioridad de Juliana Restrepo es afianzar las relaciones con la comunidad de Villa Carlota. “Nuestra intención es que los vecinos se vuelvan cada vez más amigos del Museo. Nosotros estamos al servicio de ellos porque son nuestro aliado natural.”

Esta relación cobrará más importancia próximamente, cuando El Mamm asuma la administración del Parque Lineal Ciudad del Río, el cual, por el momento, es de todos y de nadie. Cuando se logre esa alianza con la Alcaldía, el Museo será “doliente” del parque. “Esto será muy beneficioso porque ya tendremos aseo y jardinería permanente, no uno sino dos vigilantes y los vecinos podrán venir directamente a nosotros con sus sugerencias, quejas e inquietudes”, manifiesta la directora del Mamm.

La directora también resalta el acompañamiento que está brindando para la seguridad de Ciudad del Río la policía de la Estación Poblado. Tanto el comandante de la Estación, teniente coronel Fabio Alexander Rojas, como el jefe de cuadrante, mayor Wilson Molina, están a disposición de los vecinos para atender emergencias o eventualidades. El teléfono del mayor Molina es el 321 787 51 76 y el del comandante Rojas es es el 314 470 76 24.

Breakout Kings

0

Breakout Kings
A&E Mundo presenta Breakout Kings, una serie que sigue a dos oficiales cansados del proceso correcto para capturar criminales fugitivos, y deciden conformar un equipo con tres convictos especialistas en fugarse, la persecución de personas, sicoanálisis y el mundo de la criminalidad. Todos del mismo lado de la ley, encontrarán a los criminales más buscados.

Todos los miércoles a las 9:00 p.m. por el canal Space, se emite el programa Rizzoli & Isles, una serie que sigue a dos mujeres en el mundo de los asesinatos. La detective Jane Rizzoli, y la médica forense Maura Isles, resuelven crímenes y atrapan a los peores criminales de Boston. Ellas son buenas amigas, pero de personalidades opuestas, pues crecieron en ambientes económicamente opuestos. Jane es nativa de Boston y la única mujer detective del departamento de homicidios de la ciudad. Es una oficial seria y valiente que nunca baja su guardia. Maura, es metódica y se siente más cómoda entre los muertos que entre los vivos. Siempre vestida impecablemente, con ropa de marca, es conocida como la reina de los muertos. A pesar de sus diferencias, estas mujeres se complementan mientras cada una usa sus habilidades para descubrir quién y cómo cometió el crimen.

Rizzoli & Isles

0

Rizzoli & Isles
Isles y Rizzoli son dos detectives mujeres quienes además de ser buenas amigas, conforman el mejor dúo en la resolución de casos de homicidios. Todos los miércoles por el canal Space, estas dos chicas usan sus habilidades en el mundo de los vivos y los muertos para identificar quién es el responsable de cada asesinato.

Todos los miércoles a las 9:00 p.m. por el canal Space, se emite el programa Rizzoli & Isles, una serie que sigue a dos mujeres en el mundo de los asesinatos. La detective Jane Rizzoli, y la médica forense Maura Isles, resuelven crímenes y atrapan a los peores criminales de Boston. Ellas son buenas amigas, pero de personalidades opuestas, pues crecieron en ambientes económicamente opuestos. Jane es nativa de Boston y la única mujer detective del departamento de homicidios de la ciudad. Es una oficial seria y valiente que nunca baja su guardia. Maura, es metódica y se siente más cómoda entre los muertos que entre los vivos. Siempre vestida impecablemente, con ropa de marca, es conocida como la reina de los muertos. A pesar de sus diferencias, estas mujeres se complementan mientras cada una usa sus habilidades para descubrir quién y cómo cometió el crimen.

Kung Fu Panda

0

Kung Fu Panda
La segunda entrega de Kung Fu Panda llevará a Po, el Guerrero Dragón, a descubrir quién es su verdadera familia y de dónde viene. Ahora debe desafiar al ex heredero del clan de los pavos reales, el señor Shen, quien ha estado a la espera del cumplimiento de una vieja profecía que lo enfrentara con un guerrero de blanco y negro.

El señor Shen, heredero del clan de los pavos reales, quería dominar la china con el poder de los fuegos artificiales, hasta que un día, la adivina de la corte le advierte que será vencido por un guerrero de blanco y negro. Creyendo que se trata del clan de pandas, los hace exterminar a todos para evitar que la profecía se cumpla. Los padres de Shen, avergonzados e indignados por esta atrocidad, lo exilian, mientras éste jura venganza. Años después, Po, disfruta siendo el Guerrero Dragón hasta que debe pelear con unos lobos bandidos que roban metal para Shen. En la armadura de uno de ellos, Po reconoce un símbolo que le genera un recuerdo de su infancia y de una figura materna. Así es que el panda del kung fu decide preguntarle a su padre, el ganso Ping, sobre sus orígenes.

Sin Límites

0

Sin Límites
Eddie, interpretado por Bradley Cooper, es un escritor en la ciudad de Nueva York donde conoce un vendedor de drogas que lo entra al mundo de los nootropics. El cambio hará que Eddie se convierta en una persona supremamente exitosa en muy poco tiempo, ganándose así, no solo la mejor vida posible, sino la admiración de uno de los inversionistas más importantes del país, interpretado por Robert de Niro.

Cuando la fecha límite para entregar su novela llega, Eddie, un escritor neoyorquino, no ha escrito ni una sola palabra. Para empeorar la situación, su novia lo ha dejado y sufre de una grave depresión. En este estado se encuentra con un conocido vendedor de drogas quien le ofrece una nueva droga, un tipo de nootropic llamado NZT-48 con la que podría acceder al 100% de su capacidad cerebral, mientras el resto de las personas usan un 20 ó 25%. Así es como Eddie cambia de vida, se convierte en el corredor de bolsa más exitoso en Wall Street, termina su novela en cuatro días, descubre una pasion insaciable por aprender matemáticas, idiomas, y vivir al máximo cada día. Pero la droga tiene consecuencias que harán que Eddie decida si puede continuar en este estilo de vida o volver a su vida anterior.

Los Naranjos es uno de los 22 barrios de El Poblado

De acuerdo con Planeación de Medellín, Los Naranjos es uno de los 22 barrios de El Poblado. Sin embargo, muchos de sus habitantes no quieren llamarse así.

Para Hilda Escobar, presidente de la Junta de Acción Comunal de El Garabato, fue una sorpresa verificar en el mapa de Planeación de Medellín que el lugar donde nació y ha vivido siempre, se llama barrio Los Naranjos, y que fue agrupado con las lomas de Los Parra y Los González. “Sabía que la Alcaldía decía que éramos del sector de Los Naranjos pero no que ya aparecíamos como barrio. Están agrupando tres barrios en uno solo”. La noticia, lejos de halagarla, la ofende.

Según la división política oficial del Municipio de Medellín, el barrio Los Naranjos se extiende entre las calles 1 Sur -Loma de Los Parra- y 5 Sur -Loma de Los González- y entre la Transversal Inferior (carrera 32) y Las Palmas (carrera 16). Limita al sur con el barrio Los Balsos 1, al norte con el barrio El Tesoro, al sur con el barrio Alejandría y al oriente con el corregimiento de Santa Elena.

“Los Naranjos no nos identifica”

El mismo desconcierto de Hilda lo manifiestan Orlando Arenas y Denis Arrieta, presidentes de las Juntas de Acción Comunal de las lomas de Los González y Los Parra, respectivamente. Como ella, opinan que al denominarlos barrio Los Naranjos, la Administración Municipal intenta invisibilizarlos y quitarles su identidad. “Planeación desconoce la historia de las lomas y como no ha podido desplazarnos físicamente nos agrupa con un nombre que no nos pertenece”, dice Hilda.

“No nos sentimos identificados con este nombre porque tenemos nuestra propia historia. La Loma de Los González tiene la historia de sus apellidos, de sus ancestros, lo mismo que Los Parra; El Garabato también tiene su historia por liberación de esclavos. Tanto nos invisibilizan que nos colocan el nombre de una finca de los ricos del barrio con la que no tenemos ninguna identificación. De alguna manera nos quieren borrar”.
Valga recordar que muchos de los habitantes de las lomas Los Parra, Los González y El Garabato, nacieron y crecieron en esta zona. En su mayoría son descendientes de antiguos trabajadores de las fincas o casas de campo que tenían en El Poblado las familias más pudientes de Medellín. Hoy conservan sus viviendas de uno o dos pisos, casas humildes que pertenecen a los estratos 2 y 3 y que han logrado permanecer en medio de los nuevos desarrollos urbanísticos.

Vivir en El Poblado insistió ante Planeación para conocer su posición frente al tema del nombre del barrio y la inconformidad de sus habitantes, pero al cierre de esta edición no había sido posible hablar con la funcionaria delegada para dar las declaraciones.


Recuerdos de Los Naranjos
El nombre con el que la Alcaldía denomina este barrio de El Poblado tiene origen en la finca Los Naranjos, la cual se extendía desde la Loma de Los González hacia el sur, casi hasta llegar a El Castillo. “Por el sur lindaba con la finca Monterrey, por el occidente con Pasadena, por el norte con la Loma de Los González, por el oriente con Villa del Rosario -la finca de Jorge Rodríguez Arbeláez-, y la casa principal quedaba al frente de donde hoy está El Chispero”, recuerda Hilda Escobar, habitante de la Loma del Garabato.

La finca Los Naranjos pertenecía al empresario Carlos J. Echavarría Misas, hijo del destacado industrial y filántropo antioqueño Alejandro Echavarría y hermano de Gabriel, Guillermo y Diego.

Carlos J. fue gerente de Coltejer, presidente de Bavaria, fundador de la Andi, del BIC y de RCN, entre muchas otras empresas. En Los Naranjos tenía árboles frutales, ganado y lechería. Hilda, quien estudiaba con las hijas de su mayordomo, no olvida que Carlos J. les vendía la leche a los habitantes de la Loma de Los González.

En lo que era Los Naranjos, hay actualmente una serie de urbanizaciones, tanto de edificios como de casas. Su casa principal fue por muchos años la sede de Corantioquia y hace poco fue demolida.

El barrio Lalinde, tradición que se acaba

El barrio Lalinde,  de El Poblado célebre por sus hermosas casonas, es centro de una de las mayores actividades constructoras de la comuna 14. Poco a poco se desdibuja

Basta dar un paseo por el barrio Lalinde, recorrer sus manzanas, para darse cuenta de que el esplendor que en el siglo pasado le confirieron sus hermosas casonas está llegando a su fin. Muchas de ellas hace varios años fueron reemplazadas por bloques de apartamentos y las que quedaban poco a poco ceden su terreno a otras edificaciones.

Hoy es común ver en las diferentes cuadras de Lalinde edificios de apartamentos y áreas comerciales y de servicios en plena construcción, allí donde antes se erigían las casas de habitación de prestantes familias de la ciudad. La mayoría de estas familias se desarticularon por el paso de los años y sus miembros ya no viven en Lalinde, con excepción de unos pocos que hoy residen en apartamentos de la zona.

Según el mapa del Departamento Administrativo de Planeación de Medellín, Lalinde se extiende de occidente a oriente entre las carreras 43 A (Avenida El Poblado) y 36, y de sur a norte entre la calle 11 y las calles 14 y 15. Limita al norte con el barrio Castropol, al sur con El Poblado, al occidente con Manila y al oriente con Las Lomas 1. Su limite sur también lo establece la quebrada La Poblada y varias de las unidades residenciales se han construido muy cerca a ella, algunas sin respetar los retiros. Varias están viendo afectados sus cimientos por el cauce de la quebrada y en temporadas invernales es común que ocasione inundaciones. La Poblada, por fortuna, tiene una veeduría cuyos miembros se reúnen con frecuencia y están pendientes de todo lo que suceda con ella con el fin de prevenir y mitigar emergencias.

Lalinde hoy
Pese a su imparable transformación, Lalinde continúa siendo un barrio con predominio residencial. Se destacan en él edificios como El Corhal, Ardilleros de Lalinde, Los Mandarinos, Callejuelas de Lalinde, Soto Verde, Castropol, Gauus, Pasadena, Rose Park y Poblado de Loma Lalinde, entre otros.

En los últimos años, varios establecimientos y empresas se han convertido en referentes de Lalinde, entre ellos Isagén, el hotel Park 10, Musicreando, el restaurante La Fragata, Bancolombia, El Dorado y las oficinas de Consumo, por solo citar algunos.
Una de las características principales de Lalinde es la facilidad que hay para acceder a él, situación diferente a la de otros barrios de El Poblado. A Lalinde se puede llegar desde la Avenida El Poblado (por la llamada Loma de Lalinde), por la Avenida Las Palmas, por la carrera 34 y la calle 10. No obstante, sus accesos viales también tienen inconvenientes: la Loma de Lalinde es muy estrecha y es de doble vía; además, quienes para salir del barrio toman la Transversal Inferior, se ven más de una vez atrapados en un taco que se prolonga hasta la Loma de Los Parra, y los que quieren bajar por la calle 10 A también suelen encontrarse con un cuello de botella presente casi a cualquier hora del día.

Una de las obras viales proyectadas para construir mediante el sistema de valorización en El Poblado es la polémica ampliación de la Avenida 34. Esta obra, que iría desde La Aguacatala hasta Las Palmas, impactaría también al barrio Lalinde. A la fecha, sin embargo, la realización del proyecto está en entredicho debido a la oposición de algunos sectores de la ciudadanía a que se construya con recursos de valorización y no con dineros del Municipio.

Con nombre de apellido
Al igual que otros barrios de El Poblado, Lalinde debe su nombre al apellido de quien fuera dueño de esas tierras. De acuerdo con la historia sobre este barrio publicada por Vivir en El Poblado en la edición 138 -primera quincena de julio de 1998- don Pablo Lalinde Bravo adquirió en 1914 en este sector una finca de cerca de 20 cuadras para pasar con su familia las vacaciones decembrinas. La compró por 31 mil pesos a Cecilia y Paulina, hijas de Fernando Restrepo.

La finca limitaba por el sur con la quebrada La Poblada y la finca Bretaña; por el norte con la finca Castropol; por el oriente con la finca Villa Lucía, de Paulino Londoño -hoy Hotel Intercontinental-, y por el occidente con la carretera vieja a El Poblado, hoy carrera 43 B o Calle de la Buena Mesa. Eran mangas llenas de árboles frutales, sembrados de café y maíz y con una gran casa que las dominaba, conocida simplemente como La Casa de El Poblado.

Don Pablo Lalinde estaba casado con Evangelina Sánchez y sus hijos eran Olga, Pablo, Hernán, Gustavo, Darío, Ernesto y Marco Antonio. En aquellos años vivían donde hoy es el Pasaje Astoria, en el Centro de Medellín, pero en 1939 decidieron habitar La Casa de El Poblado, que hasta esa fecha solo usaban como veraneadero. No eran pocas las familias que habían hecho lo mismo: dejar sus casas en el Centro para vivir en El Poblado. Y don Pablo no quiso quedarse atrás.

Cuando llegó la parcelación
La propiedad dejó de ser una sola cuando don Pablo decidió parcelar. “Él quiso que todos los hijos ya casados tuviéramos nuestras casas propias y por eso entre 1942 y 1947 comenzó a construir siete casas en las partes altas de la finca”, recordaba hace hace 14 años Marco Antonio, quien ubicó la suya en los terrenos que hoy corresponden al edificio Ardilleros de Lalinde.

Para 1960 ya quedaba poco de la finca adquirida por don Pablo Lalinde. “La única manera que aprendimos de ganarnos la vida fue vendiendo tierras. Eso fue lo que siempre hicimos”, agregaba Marco Antonio.

Pedazo a pedazo se vendió la finca, que ya había perdido parte de su predios como pago de un derrame de valorización y para la construcción de un tanque de Empresas Publicas en la parte alta de Castropol.

Desde momento hasta hoy, Lalinde ha sufrido una transformación similar a la de otros barrios de El Poblado.

Las mismas características del Lalinde actual, no favorecen la existencia de organizaciones comunitarias o una Junta de Acción Comunal en el barrio, aparte de la ya mencionada Veeduría de la quebrada La Poblada. Según Amparo Gaviria, presidente de la Junta de Acción Comunal de El Poblado (sector central) el radio de acción de esta JAC comprende también Lalinde, aunque no hay identificados líderes que tengan participación en la JAL o en la JAC.

El barrio Castropol, de vecindario a comunidad organizada

Castropol es uno de los barrios de El Poblado que más ha crecido. Aunque su número de habitantes y vehículos se ha multiplicado, no sucede lo mismo con sus vías.

 

Al igual que otros barrios de El Poblado, la muy urbanizada Castropol de hoy fue durante buena parte del siglo 20 sitio de recreo de algunas familias. Es así como una de las haciendas de la zona era Corinto, de don Severo Velásquez, una casa vieja con una gran extensión de tierra donde solía pasar las vacaciones. Pero la finca que le dio su nombre al barrio pertenecía a la familia Echavarría, quienes la pusieron Castropol en honor a una región de Asturias, en España.

 

Transformación sin pausa

Como sucedió con otros sectores de El Poblado, posteriormente y de manera paulatina la zona fue urbanizándose, proceso que aún no termina. Las cifras dan cuenta de la dinámica de este crecimiento: mientras el censo del Dane de 1995 determinó que en Castropol habitaban 1.904 personas en 664 viviendas, datos suministradas por el Fonval indican que para 2009 el número de habitantes ascendió a 4.414. Es decir, un aumento superior al 150%.

No obstante, las vías de Castropol, esas que antes llegaban a las antiguas casas, hoy son estrechas e insuficientes y, por tanto, la movilidad y el acceso son uno de los principales problemas del barrio Castropol.

Precisamente para subsanar esta situación, una de las obras decretadas por la Alcaldía de Medellín para construir mediante el sistema de valorización -la prolongación de la carrera 37 A- pretende darle a Castropol un nuevo acceso desde y hacia la vía Las Palmas, con lo que de paso se pretende descongestionar la Avenida El Poblado.

Tal y como lo registró Vivir en El Poblado en su historia sobre este barrio, publicada en la edición 116 de la segunda quincena de junio de 1997, a Castropol se le conocía por esos días como el de las calles muertas pues tenía 10 vías ciegas. En los últimos años, sin embargo, este número ha disminuido pues han construido varias conexiones.

El mapa del Departamento Administrativo de Planeación de Medellín establece que Castropol se extiende entre la carrera 43 A o Avenida El Poblado y las carreras 38 y 36 (Las Palmas), y entre las calles 14 y 28. Limita con Villa Carlota, San Diego, Lalinde y La Asomadera.

De acuerdo con datos de la oficina de distribución de Vivir en El Poblado, este barrio tiene 3.186 apartamentos en 57 edificios, y 355 oficinas. Entre sus unidades residenciales más reconocidas están Providencia (la más grande), Flamingo Real, Belchite, Castropolo, Bronce, Martinica de Castropolo, Pisquines, Poblado Real, Terra Verde, Bosques del Guamal y El Encierro. Otros sitios o establecimientos que se convirtieron en referentes de Castropol son el Hotel Belfort, el edificio La Compañía, Televida, el centro empresarial Palms Avenue, el Patio Parrilla y Mexicana, entre otros.

Jaime Dereix: motor de Castropol

Uno de los personajes más destacados de este barrio es Jaime Dereix, monteriano que hace 38 años vive en El Poblado, los últimos ocho en Castropol, en la unidad residencial Providencia.

Desde entonces ha sido un líder cívico infatigable, con presencia activa en todas las reuniones y juntas que busquen mejorar las condiciones del sector y de la Comuna 14.

Como cuando llegó a Castropol no encontró ninguna organización comunitaria, fundó el primer comité cívico de la zona y la primera Junta de Acción Comunal, lo cual ha sido ejemplo para que otros residentes se motiven a participar, a opinar, a recoger firmas cuando están a favor o en contra de algún proyecto y a quejarse y a denunciar cuando sienten que se les están vulnerando sus derechos.

Además de presidir la junta directiva de la unidad residencial Providencia, es fundador de la Corporación Poblado Verde, integrante de la mesa ambiental de El Poblado y fundador del Club de la Edad Dorada de Colombia.

Para Jaime Dereix, uno de los aspectos positivos que hoy tiene Castropol es que ha mejorado la seguridad y hay más presencia frecuente de la policía, aunque reconoce que todavía falta. Lamenta que el barrio no tenga un templo y que sus residentes deban desplazarse hacia la parroquia San José, en el Parque de El Poblado, para asistir a los oficios religiosos. De ahí el que uno de sus objetivos sea lograr que se construya una capilla en el barrio.

 

 

El barrio Castropol

El Guamal, con el alma en la comuna 14

Aunque por decreto municipal El Guamal pertenece al barrio San Diego, de la Comuna 10, sus habitantes se siguen considerando de El Poblado

Por la carrera 41 con la calle 28, detrás de la Loma de San Julián y rodeado de edificios de más de 20 pisos de altura, está situado un barrio casi diminuto: El Guamal. Un sábado a mediodía parece un pueblo fantasma. Sus dos únicas calles, las que lo rodean, están vacías y solo un carro último modelo se ve en las afueras de una de las 37 viviendas del sector. Un gallo atento es por un momento el único ser vivo visible en el área.

Mirado desde arriba, El Guamal se asemeja a uno de esos pequeños feudos de los viejos cuentos infantiles. Está rodeado de árboles, arbustos, flores y bañado por dos quebradas: El Indio y El Seminario. Al entrar al barrio sobresale entre sus discretas casas un edificio nuevo y enorme, y otro cuento infantil viene a la mente: Gulliver en el país de los enanos. Sorprende que esta construcción esté muy cerca de una de las quebradas, prácticamente sin retiros, lo que sin duda es un factor de riesgo.

La ubicación de El Guamal es privilegiada: a poco más de una cuadra de la Avenida El Poblado, muy cerca de Las Palmas y la calle 30; tiene a su alcance rutas de transporte y un sinfín de servicios de toda índole: médicos, educativos, comerciales, financieros y de diversión, por citar apenas unos cuantos.

De Guatapé para El Guamal
Tal y como lo registró en una edición anterior Vivir en El Poblado, una de las más antiguas habitantes de El Guamal es Pastora Martínez, quien en 1954 llegó a la zona con su esposo procedente de Guatapé, para instalarse en una propiedad cedida por su jefe, un conocido industrial antioqueño, el mismo que años después les cedió el terreno. “Desde ese momento nos sentimos de El Poblado”, le contaba Pastora a este medio. “El único vecino que teníamos en ese entonces era el señor Eliseo Muñoz. Poco a poco las familias se fueron multiplicando y el sector fue creciendo hasta convertirse en lo que es hoy”.

La nuera de Pastora, Ángela María Escobar, quien llegó a El Guamal en el año 1974, relataba, por ejemplo, que sus cuñados y cuñadas estudiaron en establecimientos educativos de la Comuna 14, como la escuela Diego Echavarría, la Francisco Herrera Campuzano y el Instituto El Poblado. Así mismo, actividades sociales, labores notariales y otros asuntos de la vida cotidiana como mercar, ir al médico, o bautizarse, casarse e ir a misa lo han hecho siempre en El Poblado. Hasta en los impuestos prediales constaba que eran de la comuna 14.

Es decir que desde la década del 50 del siglo 20 hasta ahora, la vida de El Guamal se ha desenvuelto en El Poblado, en todos los aspectos. De ahí el que les parezca traído de los cabellos y arbitrario el que por decreto pertenezcan a otro barrio de Medellín.

No a la pérdida de identidad
De acuerdo con el decreto 346 del año 2000, el cual establece los límites de Medellín, El Guamal pertenece al barrio San Diego, de la comuna 10 -La Candelaria-. Sin embargo, el nombre El Guamal tampoco aparece en el mapa oficial de este barrio, disponible en el sitio web del Municipio, y solo es posible deducir su ubicación.

Cuando en 2010 entró en vigencia el decreto 1073 de 2009, por medio del cual se reglamentó el proceso de Presupuesto Participativo –PP- y se acogió la normatividad vigente, los habitantes de El Guamal fueron apenas notificados de que no pertenecían a la comuna 14 sino a la 10. Es decir, diez años después de expedido el decreto.
La noticia cayó como un baldado de agua fría. Los habitantes de El Guamal sintieron que su identidad y su territorio quedaban en el limbo y sus raíces en el aire. Sin embargo, tras varias cartas a la Alcaldía y gracias al apoyo de la Junta Administradora Local de El Poblado y del Consejo Comunal para el PP, se les permitió seguir participando en el proceso de Presupuesto Participativo por la Comuna 14.

“Apoyamos a El Guamal para que siguiera haciendo parte del Poblado y no del Centro, no porque uno sea mejor o peor que el otro sino por cuestión de identidad. Se sentían mal porque se les desconocían sus raíces de un día para otro”, dice Santiago Quintero, Secretario de la JAL. “La lucha no termina –agrega- porque la única manera de que El Guamal sea otra vez oficialmente parte de El Poblado es que el Concejo mediante un acuerdo establezca una nueva delimitación. Por eso seguiremos trabajando”.

Enchula tu bici

0
Enchula tu bici
La bicicleta, esa compañera de la infancia que nos dejó caer un par de veces mientras aprendíamos, y otro tanto haciendo piruetas o chicaneado talento, también nos dio muchos momentos de felicidad en la juventud. Ella está guardada en un garaje, finca o cuarto útil, esperando que le inflen las llantas para ver el mundo otra vez. Dos jóvenes artistas de Envigado pueden ayudar.

 ciclaportada

Muchas personas comparan aquello que no se olvida, con la facultad de montar en bicicleta. No solo porque pedalear y mantener el equilibrio es fácil e inolvidable una vez aprendido, si no tal vez por que los momentos en que se usó una bici fueron de infancia o juventud, llenos de alegría, en compañía de familiares y amigos, o en soledad placentera, disfrutando del aire libre, de la naturaleza o de la ciudad desde otra perspectiva.
 
Enchulame la Máquina, del canal Mtv, glamourizó la idea de convertir autos vetustos en naves escandalosas, llenas de “gallos” y que finalmente llamaran la atención por un diseño novedoso y creativo, en lugar de la pintura oxidada, puertas caídas y choques ancestrales. En Envigado, desde hace dos años existe un taller con ideas similares pero con un lado más ambiental. Se trata de Turbo Colors, un negocio que se dedica restaurar bicicletas olvidadas, la de infancia, la del papá cuando era joven, la que está sin una llanta o de ambas llantas pinchadas, que lleva 15 años en un cuarto útil o garaje, la oxidada de colores setentudos u ochentudos, o a la que le falta el manubrio. Cualquier pedazo de bicicleta que en algún momento tuvo vida útil, Fernando Montoya, artista plástico, y Leonardo Giraldo, diseñador gráfico, se atreven a meterle la mano.
 cicla1
El proyecto de estos dos jóvenes, de 29 y 20 años respectivamente, consiste en darle la vuelta a las bicicletas que ya tuvieron su hora de brillo, y devolverles el glamour con un estilo mucho más artístico que el que lucían. Dice Fernando que la idea empezó con su interés por decorar y personalizar todo; el celular, la chaqueta, una gorra y hacer grafiti, y también con las habilidades innatas de mecánica de Leonardo.
 
El proceso de restauración puede durar aproximadamente un mes, cada bicicleta es un caso único y se toma como un proyecto integral, que requiere diferentes cambios. Cada cliente lleva su cicla o les envía fotos, “idealmente que sea una bici de sus afectos” dice Fernando, pues en cada creación artística la historia detrás de la pieza, o sus orígenes, son una parte esencial de la obra. Después los muchachos tienen una serie de encuentros con el cliente para ver cuáles son sus gustos, cómo es esa persona y su estilo de vida, le presentan opciones de pintura, diseño, dibujo, y una vez el cliente decide, se ponen a trabajar. Tienen un costo fijo para el trabajo de pintura, y ya cada ciclista puede elegir a su antojo y presupuesto, cuáles accesorios extra o diferentes quiere: sillín, canasta, pedales, manubrio, etc. Leonardo y Fernando los consiguen.
 cicla3
En dos años que llevan pedaleando este negocio, han restaurado más o menos 20 bicicletas. Uno de sus proyectos especiales es una bici Gitane que Fernando encontró en una chatarrería, y es el modelo campeón del Tour de Francia 1982-1983, un modelo que solo usan competidores. Tenía los colores del equipo Renault-Elf-Gitane, azul y amarillo, y ahora luce unos vibrantes azules y verdes metálicos, “como un colibrí”, explica Fernando. Además tienen sus propias bicicletas que son híbridos de bicicleta todoterreno y turista para montar en la ciudad. La de Leonardo tiene los colores del equipo de fútbol alemán, y la de Fernando tiene un colorido militar.
 cicla2
Así, sería ideal desempolvar esa vieja amiga de dos ruedas, que se lleva bien con el medio ambiente y darle una nueva vida, para ir a la ciclo-vía, a los ciclo paseos de Días del Aire en el MAMM, para ir a trochar en los municipios aledaños, hacer ejercicio en Las Palmas, o dejar atrás los tacos y la contaminación del carro, para llegar a trabajar o a estudiar, muy a la moda en un transporte chic y limpio.

¿Por qué comprar en la plaza?

¿Por qué comprar en la plaza?
Mercar en los supermercados puede ser un experiencia deliciosa, se encuentran productos importados, y toda la mercancía en una distribución y exhibición meticulosa y muy limpia. Así las cosas ¿por qué habría que ir las plazas de mercado? Allí se encuentra de todo, también hay quien le empaque y le lleve las bolsas al carro, y además entran a jugar precio, ecología, frescura y autenticidad.
 
plaza_ppal
 
Los franceses será posiblemente la población que más aprecia el terroir, ese lista de características que le dan una extensión geográfica a una uva, y realmente a cualquier producto agrícola, que finalmente producirá el vino que tanto aman. En el terroir incluyen clima, tierra, estaciones, agua, etc.
 
plaza2 
 
Así, un chef podría encontrar en su nevera frutilla importada de Chile, con todas las propiedades que esta tierra le da a sus productos. Pero las consideraciones con el medio ambiente ha causado impacto en este aspecto de la gastronomía, en la que ya debemos pensar cuántos kilómetros han tenido que viajar nuestros alimentos, cuánta gasolina han usado para ello, y qué tanto han contaminando en su recorrido. Un buen chef no solo prepara la mejor comida con los mejores ingredientes, un buen chef hace maravillas con lo que encuentre a la mano, o en temporada.
   
 plaza4
 
Lo que hay en temporada suele ser abundante, fresco y apropiado para el clima. La frescura es uno de los aspectos más importantes en la cocina, y los chefs siguen esa regla de oro. Es por eso que muchos de ellos van a las plazas de mercado, o por lo menos mandan a sus asistentes de cocina, dice Humberto Alzate, vendedor de verduras de la plaza de mercado de La América. El chef o dueño de restaurante, y alguno que otro aficionado, pasa por la plaza en un plan mucho más artesanal del proceso gastronómico. Se toman su tiempo y no llevan el afán de las amas de casa, cuyo objetivo culinario está claro y debe ser práctico. Estos en cambio, aprovechan al vendedor para escoger bien los productos, averiguar de cuál municipio vienen, preguntan si pueden partir una fruta o verdura en el momento para ver si está buena. En los supermercados “no lo dejan probar a uno nada. Si lo mordió y está maluco, de malas, ya lo paga” explica Humberto.
 
plaza1
 
Pero también dice que la mayoría de la gente que le compra sus productos son amas de casa que compran los domingos temprano, cocinan en la tarde “al por mayor”, planeando diferentes platos para toda la semana. “Llegan aquí con una lista de lo que van a comer toda la semana, o cambian aquí según lo que haya”. Lía Medina, es una de esas amas de casa que hace exactamente eso, vive con su hija y nieta, y como trabaja toda la semana en una sastrería y vendiendo ropa, prefiere no tener que llegar a la casa a cocinar. Así, el elemento de la frescura no es indispensable por que realmente toda su comida en la semana son porciones descongeladas de lo que preparó el domingo. Pero el precio es lo que importa. “Cuando paso por los supermercados, en Laureles y El Poblado, a comprar algún ajuste o cositas de aseo, quedo escandalizada con los precios. Los mismos 20 mil pesos de un ajuste en uno de esos sitios me rinden tres veces más en la plaza, y en la plaza, los vendedores que me conocen, casi siempre me dan una encima”.
 
plaza3
  
No hay que estar evitando el supermercado por lo extra costos, ni imitar al chef en la conversación con el proveedor o en su búsqueda romántica por ingrediente perfecto, pero uno podría elegir la plaza por la relación directa que hay allí con los agricultores y vendedores. En la plaza hay muchos menos intermediarios, la venta del producto es genuina, sin artimañas de mercadeo, sin iluminación pensada para la exhibición, ni regadores de agua automáticos, no hay empaques hermosos que distraigan de la verdadera calidad del contenido, y todo es, tal cual, como se ve allí mismo.
 

Cata de Zacapa en el Campestre

0

Cata de Zacapa en el Campestre
Reconocidos empresarios y socios del Campestre se reunieron en el salón Luciano del club para deleitar el paladar en la Cata de Ron Zapaca, considerado por los conocedores como uno de los mejores rones del mundo. En la cata, que estuvo acompañada de una presentación por parte de Privanza de sus nuevas tendencias en moda masculina, los asistentes disfrutaron desde mojitos cubanos preparados con Zacapa 15 años hasta copas coñaqueras de Zacapa XO, además de una exquisita cena de momentos preparada por el chef Job Castañeda. Vea más imágenes del evento en www.vivirenelpoblado.com (sección Crónica Rosa).


Silvia Castaño, Luis Palacio.

José Vélez, Paula Uribe, María Camila Gómez, Luis Alberto López.

Alfonso Almanza, Juan Carlos Estrada, Juan Gonzálo Sánchez.

María Paula Zuleta, Sebastián Peláez, Melissa Osorio, Wiliam Salazar

Andrés Jaramillo, Paula Giraldo, Andrés Tahta, María Tahta.

Luzmila Acosta

0

Luzmila Acosta un ejemplo de la vocación y el humanismo que todo profesional, especialmente si pertenece al sector de la salud, debería demostrar al ejercer su labor, es Luzmila Acosta, la primera psiquiatra de Antioquia y quien durante más de cincuenta años ha atendido con amor y entrega a personas de todos los estratos sociales, a muchísimas de ellas sin remuneración económica alguna.

Médica de la Universidad de Antioquia y especialista en psiquiatría de la Universidad de Maryland, su aporte social y el hecho de abrirle las puertas a muchas mujeres que hoy desempeñan esa profesión, llevaron a que el Concejo de Medellín y la Biblioteca Pública Piloto decidieran homenajearla en 2007, asignándole a una de las calles de nuestra ciudad (Calle 73, entre las carreras 75 y 80) el nombre de esta antioqueña, quien durante décadas trabajó paralelamente en el Hospital Mental, el antiguo Seguro Social y en su consultorio particular, en el cual todavía atiende. Una de las fundadoras de las sociedades de psiquiatría de Antioquia y Colombia, Luzmila Acosta fue retratada por Carlos Tobón en 2010.

Ensayos para un mundo perfecto

0

Ensayos para un mundo perfecto
En la Casa del Encuentro del Museo de Antioquia se inauguró recientemente la exposición itinerante Ensayos para un mundo perfecto, muestra colectiva integrada por las obras de 43 artistas de diferentes regiones del país, los cuales fueron seleccionados por el curador Carlos Betancur entre un total de 500 que se presentaron a la convocatoria del Salón de Arte BBVA Nuevos Nombres Banco de la República. El coctel de apertura contó con la presencia de directivas del Museo y de BBVA, además de personalidades de la vida artística y cultural de la ciudad. La exposición estará abierta al público en las salas temporales de la Casa del Encuentro del Museo de Antioquia hasta el 17 de julio, mes en el que emprende rumbo hacia Cali, Pereira, Bucaramanga y Cartagena.


Julián Posada, Paula Andrea Betancur.

Fernando Díaz, Libe de Zulategui.

Juliana Restrepo, Felipe Martínez.

Germán Jaramillo, Felipe Gil.

Efraín Riaño, Ana Piedad Jaramillo, Óscar Cabrero.

César del Valle, Paola Tafur, Alejandro Mancera.

Andrés Martínez, Ximena Díaz, Esteban Peña.

Carolina Restrepo

0

Carolina Restrepo
Un sueño de Puro Corazón.

“Tienes que conocer a tu versión masculina”, le dijo una amiga poco antes de que le presentase por chat, pues el hombre en cuestión vivía en Lima, a quien en el transcurso de unos meses se convertiría en su actual esposo y la razón para dejar a su Medellín natal -donde ejercía con éxito el rol de diseñadora para la marca Onda del Mar-, para trasladarse a la capital peruana.
Tras un tiempo en el que se dedicó a crear y vender prendas y accesorios para sus amigas, esta diseñadora de la UPB, quien había ocupado durante años importantes cargos en las áreas de diseño de Diesel y Estudio de Moda, decidió junto a su esposo Jean Edouard Tromme darle vida a Puro Corazón, una marca especializada en bolsos y accesorios femeninos en los que se mezclan técnicas tradicionales artesanales con materiales y diseños contemporáneos. Actualmente, la empresa distribuye sus colecciones en varios países de Latinoamérica, Europa y Asia.
Puro Corazón es según Carolina, quien es la directora y líder creativa de la marca, “un sueño materializado”, y un proyecto tan empresarial como emocional ya que involucra a un número de familiares, amigos y un gran equipo de personas, entre ellas cerca de un centenar de artesanos de diferentes lugares del Perú, quienes enriquecen con su trabajo los encantadores diseños concebidos por esta emprendedora paisa.

Juegos de media noche

Por: Juan Carlos Orrego
Ahora que se vinieron encima las vacaciones de mitad de año, quizá convenga ocupar el espacio de esta columna con una historia de sombras y enigmas nocturnos; una que, en el mejor de los casos, servirá para que algún padre desesperado con tanto niño suelto logre concitar su atención así sea durante un par de minutos (en el supuesto, claro está, de que no haya a la mano una edición de Las mil y una noches ilustrada con grabados eróticos).
Hace un par de meses, cuando dormitaba con esa beatitud con que se reposa al amanecer —cuando el ronroneo de los primeros buses insinúa, tímidamente, la nueva jornada—, un ruido metálico y salido de rutina me obligó a abrir los ojos hasta el brote doloroso y me hizo saltar de la cama como lo hace quien descubre que ha sido traicionado por su despertador. Vagué algunos segundos por el oscuro corredor de la casa, indeciso sobre hacia qué lugar debía enderezar mis pesquisas, y sólo cuando ya era demasiado tarde descubrí lo que había ocurrido: la tapa metálica de mi contador de agua había desaparecido. Me apresté, desconsolado, a pagar una tapa nueva a cambio de una suma cincuenta o cien veces mayor que la propina obtenida por el escurridizo ladrón. ¿Qué más podía hacer? Si ese era el robo que me había deparado la siniestra ruleta criminal de la ciudad, bien podía creerme un consentido de la suerte.
Muchos ratos de las noches que siguieron los pasé asomado a la ventana, a pesar de las horas non sanctas marcadas por el reloj del comedor. En una de esas, casi me convencí de que la perseverancia me deparaba un premio: cuando, después de abandonar por enésima vez la redacción de una columna —son las típicas cosas que se escriben en las horas del gallo—, me planté entre los faldones de la cortina, distinguí un hombre en cuclillas tras el antejardín de la casa de enfrente. No tuve duda de que se trataba del ladrón de tapas, y, sin ningún miramiento por la hora y la santa paz con que dormían mi mujer y mis hijos, armé un zafarrancho de silbidos y gritos roncos desde el postigo de la puerta. A pesar de la barahúnda, lo único que ocurrió fue que un muchacho escuálido, melenudo y con gorra de almacén de lubricantes, se irguió cansadamente de la acera y se perdió calle arriba. Sentí un remordimiento atroz cuando distinguí, en su diestra, una coca plástica: creí descubrir que el pobre diablo se dedicaba, apenas, a tomar la miserable cena de cada semana. El remordimiento no me dejó pegar lo ojos.
Hace tres noches (o, mejor, alboradas), cuando sólo llevaba un minuto en la cama, sentí algo así como un latigazo furibundo descargado sobre un mulo gigantesco. Llevándome todo por delante, abandoné la habitación y me acomodé en la supradicha ventana para cerciorarme —por milésima vez en la vida— de mi candidez impenitente: el cuitado merendero de la otra noche, acompañado por otro truhán de parecida greña, descolgaba del modo más campante la línea telefónica de la cuadra de enfrente. Aterrorizado ante lo que parecía el cuadro maldito de dos duendes asidos al cordón de una campana, no atiné a emitir ni el más mínimo gemido, y sin mover un dedo presencié cómo la operación fue llevada a cabo con total satisfacción de sus aviesos ejecutores.
Anoche ocurrió lo peor: apostado ante el atisbadero que ya nunca abandono, vi pasar a los desgarbados ladrones por la mitad de la calle. La sangre se me heló cuando el de la gorra de los lubricantes señaló mi fachada, con un gesto perverso en el que supe leer la cuenta pendiente que tengo con él desde la noche que lo espantaron mis silbidos. Recordé esas palabras de Bertold Brecht que suelen recitarse en los velorios de los sindicalistas: “Después siguieron con los curas, pero como yo no era cura, tampoco me importó. Ahora vienen por mí, pero ya es demasiado tarde”.
[email protected]
[email protected]

El secreto de El Divino

0

Por: Gustavo Arango
Pocas veces se encuentra una opinión tan unánime como la que ha perdurado entre los críticos sobre José María Vargas Vila: todos coinciden en que era un pésimo escritor. Ilegible, pomposo, vacío, rimbombante, fatigoso, vacío, cantinflesco, “adolescente con todo lo malo de la adolescencia”… El único mérito que se le reconoce fue su talento para el insulto. Borges destaca unas frases suyas contra Santos Chocano –“ Los dioses no permitieron que deshonrara el patíbulo… Sigue vivo, después de haber fatigado la infamia”–, y agrega que es “la injuria más esplendida que conozco: injuria tanto más singular si consideramos que es el único roce de su autor con la literatura”.
La infamia de su estilo no impidió que Vargas Vila fuera el escritor hispanoamericano más famoso y vendido de comienzos del siglo 20. Sus libros eran publicados en ediciones de lujo por prestigiosas casas editoriales de Europa –Bouret y Sopena- y contaban con la publicidad de estar incluidos en el índice de libros prohibidos por la iglesia. Al autor lo rodeaba la leyenda: a los veinte años había denunciado a un cura por frecuentar las camas de sus estudiantes y tuvo que exiliarse de Colombia; al parecer fue expulsado de los Estados Unidos por sus ideas “anti yanquis”; vivía en Europa –en París, Roma, Madrid o Barcelona– en medio de refinamientos decadentes. Sus lectores lo llamaban ‘El Divino’. Vargas Vila influyó en personajes como Jorge Eliécer Gaitán, Juan Domingo Perón y hasta Pablo Neruda. Malos y todo, a ochenta años de su muerte, sus libros aún se siguen vendiendo en las esquinas.
Hago eco de las críticas, porque hace poco descubrí que están equivocadas. Tanta unanimidad en el rechazo resultaba sospechosa. Ahora puedo afirmar que Vargas Vila fue un escritor incomprendido, que es posible que nunca se valore en sus justas proporciones, por la simple y sencilla razón de que su obra maestra no ha sido publicada. Al momento de morir, en mayo de 1933, Vargas Vila dejó escrito un diario íntimo de cuatro mil quinientas páginas. La historia de ese diario parece una novela de aventuras. Lo heredó Ramón Palacio Viso, su secretario, quien tras la muerte de Vargas Vila se fue a vivir a Cuba con su esposa. Luego estuvo en otras manos. Años después, el gobierno cubano impidió que los diarios salieran de la isla. Ahora reposan en bodegas del Estado y hasta se habla de un complot, que implica a García Márquez, para que no se conozcan y no le hagan sombra al Nobel colombiano.
Hasta ahora sólo han aparecido dos libros con fragmentos del diario. Consuelo Triviño recibió permiso de Fidel Castro para asomarse a esas páginas y decidió concentrarse en lo anecdótico, a pesar de que Vargas Vila insiste en que los hechos no le importan. La segunda selección, transcrita antes de que el diario fuera confiscado, muestra un Vargas Vila en constante agonía, preparándose para la muerte y la inmortalidad. Queda la sensación de que ninguna de las dos selecciones nos ofrece el Vargas Vila completo. Podemos, sin embargo, ver allí la soledad de la fama, la mirada descarnada sobre los contemporáneos, el desprecio de sus propias obras, la pequeñez y los delirios de grandeza de un hombre que era consciente de estar haciendo en la sombra su obra más importante.
Tal vez nunca conoceremos por completo el monumento que Vargas Vila talló en secreto, a espaldas de la fama. Pero a través de los fragmentos es posible vislumbrar que aquel hombre escribió el testimonio vital más ambicioso que jamás haya emprendido un hijo de estas tierras; un esfuerzo a la altura de las obras de Pepys, Rousseau, Proust o el mismo San Agustín. Quizá, después de todo, Vargas Vila era mucho más ‘Divino’ de lo que todos, incluso él mismo, podríamos haber pensado.
Oneonta, New York, junio de 2011.

En gastronomía ¡la moda es lo simple!

0

En gastronomía ¡la moda es lo simple!
Para cocinar deben utilizarse siempre los mejores ingredientes que se produzcan localmente en forma sustentable
En las artes y en otras disciplinas relacionadas con el disfrute de los sentidos, como es el caso de la gastronomía, las nuevas tendencias llegan, permanecen un tiempo y después desaparecen o se regresa a otras que se daba por descontado que estaban muertas y enterradas.
Hasta hace pocos años y por varios siglos, el “non plus ultra” gastronómico estuvo en la cocina tradicional francesa, ésta fue reemplazada por la “nouvelle cuisine” del mismo origen, también de sabores complejos pero con preparaciones más sencillas; después, con el advenimiento de las inmigraciones masivas y la globalización, vino la internacionalización de los productos y de los sabores, siendo así como se popularizaron las cocinas rápidas de origen chino, italiano, español, japonés, mexicano, peruano, brasileño, etcétera.
Mientras esto sucedía, a principios de la década de 70’s del siglo pasado, una Chef del área de San Francisco, Alice Waters, abrió un restaurante en la ciudad de Berkley (California) con la intención de dar de comer a sus amigos, pero que muy pronto se convirtió en uno de los restaurantes emblemáticos de los Estados Unidos: Chez Panisse, estatus que ha mantenido durante casi 40 años.
La filosofía de la cocina de esta chef está basada en este principio: para cocinar deben utilizarse siempre los mejores ingredientes que se produzcan localmente en forma sustentable. Para lograr que esto sucediera empezó identificando agricultores y productores locales que le garantizaren la entrega oportuna de productos de primera calidad; elaborando diariamente y a partir de ellos, un menú que ofrece a precio fijo a sus comensales y que consiste en tres o cuatro pasos. Para acompañarlos dispone de una surtida bodega con vinos provenientes de varios países. Detalles sobre este restaurante, los menús, reservas y precios se encuentran en http://www.chezpanisse.com.
La señora Waters ha publicado varios libros, uno de los últimos es “El arte de la comida simple” –The art of simple food-, que contiene notas, lecciones y algunas recetas de la revolución que ha contribuido a crear. Entre otras cosas comenta que uno podrá obtener una comida de calidad extraordinaria si cuenta con los mejores ingredientes, los cocina de una manera simple, obteniendo una comida que sabe a lo que es, y que son los sabores originales que da la tierra cuando los productos son cosechados en el momento preciso de su madurez. Generalmente estos productos se podrán conseguir lo más cerca posible de su fuente, que en nuestro medio bien podrían ser las ventas de pie de carretera o la Central Mayorista.
Una visita a la Central Mayorista, que es el sitio donde según me han dicho compran los chefs más renombrados de la ciudad, le traerá agradables sorpresas al visitante. Además, si se toma la decisión de visitarla periódicamente se podrá ir conociendo a los puesteros (y ellos a usted), entrabar amistad, recibir consejos sobre lo que está mejor y a mejor precio y al final fortalecer las relaciones humanas y de confianza entre ellos y usted. Yo siempre he dicho que no es lo mismo hablar con el puestero amigo y preguntarle por los mejores aguacates o fríjoles, que pararse frente a la góndola del súper mercado y seleccionar la mercadería “a ojo”.
Así compraban nuestras abuelas y así se sigue comprando en las poblaciones, cuando sus habitantes llegan muy temprano desde las veredas al mercado con los productos de sus parcelas, los comercializan y por las tardes regresan con productos frescos de aquello que les hace falta para completar su dieta; los habitantes de la comunidad urbana de esas poblaciones y los visitantes durante el día de mercado también se benefician comprando alimentos frescos directamente a los productores.
El próximo paso bien podría ser regresar a las costumbres tradicionales y explorar otras nuevas: sembrar una maceta con hierbas aromáticas para ayudar a condimentar los alimentos, hacer comidas simples y balanceadas utilizando los productos que están frescos, cocinar con amigos y compartir con ellos las recetas, desarrollar los sentidos para identificar los olores y los sabores, comer en familia o con amigos disfrutando del placer de estar juntos. Les aseguro que estas costumbres, acompañadas de ejercicio regular, mejorarán vuestra calidad de vida y ayudarán a alejarse a dos enemigos comunes en estos días: el infarto y el cáncer.
[email protected]

Angélika

Angélika
Angélika, una joven cantante de El Poblado, regresó de España dispuesta a conquistar la escena musical del país con una dulce voz y dulces instrumentos

Nos encontramos con Angélica en los jardines del Museo El Castillo, un ambiente natural y de recuerdos de infancia, muy propicio para el estilo y musicalidad de ella. Con un vestido corto de color verde, tacones con medias a la mitad de la pierna y cargando un ukelele, parece una muñeca que canta.
De niña, Angélika Molina cantaba con su madre, quien tocaba en la guitarra canciones de Piero y María Elena Walsh. Oír la música de Angélika hoy, una joven adulta, es oír esa influencia infantil, con un aire inocente que ella describe como naif.
Su infancia estuvo cargada de clases de piano, guitarra y grupos de coros que fomentaron ese gusto por la música. Paralelo al colegio, y la carrera de negocios internacionales, estuvo estudiando técnica vocal durante ocho años con Gizela Zivic, en los que también grabó demos en Medellín y Bogotá, siempre buscando su propio estilo y personalidad musical. Pero insatisfecha hasta ese momento con lo que había logrado, se fue en 2008 para España a hacer una maestría en canto profesional en la Academia de Arte de Madrid. Dice Angélika que fue una experiencia especial porque aprendió otro enfoque al de la técnica lírica, con el método de Robert Jeantal, con el que trabajaba mucho aire y vibrato en el canto. “Robert Jeantal le enseñó a cantar a Paloma San Basilio, Miguel Bosé, Alejandro Sanz y Ana Torroja”. Y así llegó una oportunidad para entusiasmarla aún más; la grabación de un concierto con Manuel Villalta, director de la banda de Miguel Bosé, para la cadena Antena 3.
Fue en este medio, rodeada de profesores y compañeros, inmersa en la música de cantautoras españolas como Cristina y Los Subterráneos, o La Oreja de Van Gogh, que Angélika descubrió su lado dulce que quería hacer “canciones orgánicas”. Se metió de lleno a componerlas con la guitarra hasta desarrollar un amplio repertorio, de donde más tarde tomaría algunas para producirlas en un pequeño abre bocas de lo que será su disco, cuyo lanzamiento se planea para finales de este año.
Son cuatro canciones que pertenecen a lo que Angélika llama caramelo folk, un híbrido musical del pop orgánico, del pop folk americano, europeo y lo que viene del corazón de la cantante. Las letras, como cualquier compositor lo sabe, hablan de cosas que le han pasado, de amor, tristeza o de aquello que la angustia, como el medio ambiente, tema de donde salió “El llanto de la Tierra”. “Yo parto de un sentimiento fuerte que me pase, de amor o desamor, o de lejanía, y eso lo relaciono con una figura que me parezca chévere como un taza de café o té, una gata, un globo o una cometa, y generalmente voy haciendo ambas cosas a al vez, melodía y letra, y me pongo con la guitarra a sacar unos acordes”.
Su primer sencillo es “Moveré la Tierra”, que habla de las dificultades de quienes se van a vivir a tierras extranjeras y encuentran un punto de apoyo en una persona a su lado por quien mover el mundo. Estas dos canciones, y unas cuantas más, tendrán su debut nacional cuando Angélika inicie una gira en el país en octubre y noviembre como telonera del cantante bogotano, Cabas. Además, Angélika hará parte de la banda de Cabas, pues según ella, él está entusiasmado con las melodías del ukelele.
El ukelele llegó a las manos de Angélika hace un año y medio aproximadamente. Con sus conocimientos de guitarra se dedicó a “sacarle sonidos” y ahora siempre está con ella. “Suena muy dulce, es portable y a la gente parece llamarle mucho la atención”. En sus presentaciones también toca el xilófono y la melódica, acompañados de la banda, compuesta por batería, teclado, bajo, y contrabajo.
Y cuando Angélika no está en modo cantante, está en modo empresaria para su música, componiendo más letras, activa en sus redes sociales para compartir lo que hace con sus fans, contactando a Ágatha Ruíz de la Prada para el vestuario de sus conciertos, como ella dice, haciendo de su música una forma de vida. Si no, está ayudando con el negocio de la familia: la repostería Mikaela, donde Angélika creó un espacio llamado Tardes de Tarta y Café pata invitar a otros artistas como ella.
Rodeada de hermosos jardines, Angélika cantó para nosotros con su ukelele la canción “Cuando las Lámparas”, inspirada en un poema escrito por su abuelo Leonel Estrada, artista y reconocido promotor del arte en Medellín. No sería extraño entonces, pensar que la necesidad por la expresión creativa sea herencia familiar.

Se acabó la amenaza en Las Palmas

0

Se acabó la amenaza en Las Palmas
Así lo aseguran tanto el Municipio de Medellín y la Gobernación de Antioquia, quienes dicen tener todo bajo control

El más reciente hundimiento en la vía Las Palmas ocurrió el último fin de semana de mayo, en el kilómetro 10 más 300 metros, en el cruce de la quebrada La Aguacatala. Según Rodrigo Caicedo, gerente de Concesiones de la Gobernación de Antioquia, este tramo de la carretera estará recuperado el 7 de julio, trabajos que costarán cerca de 1.500 millones de pesos. De acuerdo con el funcionario, lo que en esta oportunidad ocasionó la destrucción de un tramo del carril de ascenso al oriente, fue la erosión de la quebrada La Aguacatala, 30 metros más abajo de la calzada, y no deficiencias en la construcción de la vía. “Erosionó el cauce izquierdo y arrastró el muro de contención y el lleno del viaducto 5. Primero estamos trabajando en proteger la ladera de la erosión que produjo la quebrada y en arreglar el cauce para acabar con el problema, para luego recuperar el muro de contención, hacer el lleno y pavimentar la vía”, explicó Caicedo.

“El problema no es de las vías”
En cuanto al origen de la erosión del cauce de La Aguacatala, situación que no se había presentado antes y diferente a las emergencias que sufrió Las Palmas en noviembre de 2010, el gerente de Concesiones no dudó en atribuirle, además del cambio climático, una alta cuota de culpabilidad al hombre y a la transformación que ha hecho de la naturaleza al modificar cauces, deforestar las laderas del entorno para urbanizar y sembrar especies no convenientes. “El problema no es de las vías, es ambiental, estamos modificando la naturaleza desde hace 50 años y si no entendemos esto y no lo atacamos, cada vez va a ser peor y seguiremos botando plata en estos arreglos”, advirtió.
Con respecto a la habilitación del tramo de Las Palmas que se hundió en noviembre pasado, Rodrigo Caicedo informó que se va a recuperar el cauce de la quebrada la Sanín y que se trabaja en “salvar” el viaducto 7, sitio donde se hundió la vía, para iniciar en agosto, o a más tardar septiembre, la construcción de un puente. La ejecución de éste tomará un año, es decir, estaría al servicio de los usuarios de Las Palmas a finales de 2012. Su costo será de 22 mil millones de pesos. “A pesar de todo -insistió el gerente de Concesiones- hemos mantenido la movilidad en las Palmas, hemos hecho un esfuerzo grande para que permanezca abierta, con algunas restricciones.”

Todo va bien, pero…
Entre tanto, José Fernando Flórez, coordinador de obras de la urgencia manifiesta declarada por la Alcaldía el año pasado para atender el desastre invernal en las laderas surorientales y en el tramo de Las Palmas que le corresponde a Medellín, aseguró que la emergencia está controlada. De acuerdo con el funcionario, se han hecho o están en ejecución las obras de estabilización requeridas en la Cola del Zorro y en Las Palmas y sus laderas, y ninguna amenaza se cierne ahora sobre esta área. “Terminamos el muro de contención en la Cola del Zorro, y el canal disipador -el que va al lado del deslizamiento, después del colegio de San José- se ha adelantado en un 50%; la construcción del muro frente al Colegio Latino va por el 80%; también se hizo la recolección del material en la quebrada La Poblada y actualmente se trabaja en el drenaje para mitigar los efectos del mayor de los deslizamientos, entre Del Monte y Castelazo; así mismo -agregó- se recolectó todo el material del deslizamiento en la quebrada La Presidenta 2, arriba de Las Palmas, se revegetalizó en un 80% y se están haciendo obras de estabilización en la corona del deslizamiento.”
No obstante, José Fernando Flórez enfatizó con preocupación en que no ha podido construirse el canal en concreto que se requiere en el sector conocido como El Reposo, pues la propietaria del predio no lo ha permitido. “Es necesario hacer este canal para controlar la emergencia, sino, cada vez que llueva va a caer lodo a Las Palmas.” El asunto se convirtió en un lío jurídico y ahora será un juez quien lo resuelva.

Que otra vez será…

0

Que otra vez será…
Aunque en 2008 la Alcaldía aseguró que las 22 obras por valorización estarían listas en 2011 y la distribución se haría a finales de 2009, cuando faltan 4 meses para elegir un nuevo alcalde solo una obra está en ejecución y la distribución sigue lejana

El próximo 23 de junio el Consejo Municipal de Valorización conocerá las nuevas alternativas de cronograma preparadas por el Fonval con el fin de no tener que aplazar hasta el año entrante el momento de decretar de nuevo las obras a construir por valorización y la nueva zona de citación.
En la práctica, esto significa que el proceso se devuelve al menos dos años, al momento de 2009 en que el paquete vial para construir mediante valorización en El Poblado durante la actual administración fue decretado por primera vez. También implica que el puente Gilberto Echeverri o de la calle 4 Sur y sus accesos, será lo único tangible que quedará de las 22 obras viales propuestas e incluidas en el Plan de Desarrollo de Alonso Salazar, al finalizar su periodo.
De esta manera, los temores manifestados de tiempo atrás por varios concejales de Medellín y por la Junta de Representantes de Propietarios y Poseedores de El Poblado serán realidad: que se iba a acabar el período del actual alcalde y El Poblado no vería solucionado su caos de movilidad pues el proceso de valorización caminaba a paso de tortuga mientras el número de vehículos crecía en forma exponencial.

“Las modificaciones son de fondo”
De acuerdo con el director del Fondo de Valorización de Medellín -Fonval- y subsecretario de Valorización Luis Alberto García, los más recientes cambios en el cronograma son consecuencia del concepto emitido el pasado 25 de abril por la Junta de Representantes de Propietarios y Poseedores, ente que solicitó a la Alcaldía ampliar la zona de citación (es decir, extender a otras zonas de Medellín el derrame de valorización) y excluir del cobro a tres de las 22 obras: la ampliación de la Avenida 34, la prolongación de Los Balsos y los accesos del puente Gilberto Echeverri.
Según el director del Fonval, tanto la ampliación de la zona de citación como la exclusión de estas obras del paquete de valorización obliga a volverla a decretar, para lo que se necesita hacer otra vez estudios de prefactibilidad que podrían terminarse el año entrante, y luego los de factibilidad. “Las modificaciones solicitadas por la Junta de Representantes son de fondo, ampliar el área de citación es cambiar el soporte financiero y sacar tres obras del proyecto es otra variable fuerte”, argumentó García.
Sin embargo, el Consejo de Valorización pidió recientemente al Fonval acortar más ese cronograma de manera que la valorización se pueda decretar antes de terminar este año. Y en esas están, pero aunque la reunión del Consejo de Valorización para establecer la nueva fecha de decretación estaba programada para el jueves 9 de junio, se aplazó dos semanas más, hasta el jueves 23. Mientras tanto, el tiempo sigue corriendo y el 31 de diciembre continúa acercándose, la venta de carros sigue disparada, la construcción de proyectos habitacionales no cesa y las vías de El Poblado permanecen iguales.

Reina la incertidumbre
Al quedar sin piso la decretación anterior, tampoco se puede emitir la Resolución Distribuidora y, por tanto, es muy improbable que este año los propietarios de El Poblado sepan cuánto les va a tocar pagar por valorización, como se había anunciado. Y, como se recordará, sin Resolución Distribuidora el Municipio no puede acceder a los créditos que se necesitan para poder iniciar la construcción de los proyectos, lo cual hace que estos se vean aún más lejanos.
Ante esta situación, el presidente de la Junta de Representantes de Propietarios y Poseedores de El Poblado, ingeniero civil Ignacio Arbeláez, dijo a Vivir en el Poblado que el aplazamiento de la reunión del Consejo de Valorización en un momento tan crucial crea mucha incertidumbre. “Me parece muy grave que ni vaya a haber obras ni se vaya a hacer distribución ni derrame durante esta administración. El Municipio había prometido empezar a hacer obras antes de cobrar la valorización.”

A jugar tenis en Los Parra

0

A jugar tenis en Los Parra
La cancha que poco era usada para el deporte, ahora recibe varios días a la semana a niños de la zona que practican tenis de campo. La fundación que recibió en comodato el espacio, promete abrir más programas para adultos y otros vecinos del sector

Desde inicios de este año, la Fundación Amigos del Tenis de Campo y del Deporte obtuvo una sede en El Poblado, a beneficio de un comodato firmado con Empresas Públicas de Medellín, propietarios de la cancha ubicada cerca a la loma de Los Parra, en la calle 1A Sur N° 29C-10.
El espacio deportivo lo tenía en comodato la Junta de Acción Comunal de Los Parra, el cual venció en octubre de 2010 y tomaron la decisión de cederlo bajo la misma figura a la fundación, con EPM como comodante.
La entrada de la fundación le ha traído a la cancha más dinámica deportiva; algunos vecinos se quejaban de que el sitio no era utilizado para el deporte sino para consumo de algunas sustancias ilícitas, y eso les daba sensación de inseguridad.
Ante la preocupación de algunos, sobre si tendrán el ingreso restringido a la cancha o si la acción comunal vendió el espacio, la presidenta de esa organización comunitaria aclaró que “nosotros teníamos la cancha en un comodato con EPM que se acabó. Ellos eran libres de renovar o no. Se lo dieron a la fundación y ellos se comprometieron a compartir el espacio con la acción comunal. La cancha tiene candado a algunas horas pero si van a usarla bien, se abre perfectamente. Entonces hay que aclarar que no vendimos nada, fue un comodato, nosotros trabajamos mucho para que nos vengan a decir eso”, dijo Denis Arrieta.
Al respecto, EPM le envió a Vivir en El Poblado un comunicado que dice: “después de analizar el alcance de las actividades propuestas por la fundación y los potenciales beneficios para las comunidades aledañas, la JAC del barrio loma de Los Parra, que venía utilizando este lote desde tiempo atrás, tomó la determinación de cederlo a la fundación. Esto se ha traducido en una mayor organización y aprovechamiento de este espacio, que además será objeto de adecuaciones y mejoras por parte de la fundación. Según lo ha manifestado la propia comunidad localizada en su zona de influencia, los beneficios se han multiplicado, pues ya cuentan con programas formativos que han incentivado la convivencia y la tranquilidad ciudadana, con énfasis importante en el cuidado integral de la niñez”.

Tenis para los niños
La Fundación Amigos del Tenis de Campo y del Deporte, es una organización sin ánimo de lucro que también tiene sedes en Rionegro y en el barrio Santo Domingo. Ahora en Los Parra, entrena con un instructor profesional a 54 niños de la zona, de La Visitación y El Chispero entre otros, los lunes, miércoles, viernes y sábados.
Según Alba Liliana Taborda, secretaria de la fundación, “a esta cancha venían a hacer cosas diferentes a practicar deporte. Hemos tenido buena aceptación de la comunidad y pensamos en un futuro abrir espacios para las personas adultas. Recibimos niños de 5 a 18 años, es una labor social que estamos proyectando a la comunidad, si algunas veces encuentran la cancha cerrada, deben pedirle a un vecino que tiene las llaves que les abra, siempre y cuando venga a hacer buen uso del espacio. El que venga a hacer deporte es bienvenido”.

¿Qué es esa vaina


Por: Jorge Alberto Vega Bravo

Colombia es un país multicultural, con un español rico en matices. El lenguaje coloquial de nuestra Costa Atlántica es pintoresco y rico en expresiones propias. Muchos amigos y pacientes me preguntan por la antroposofía y un amigo costeño me lanzó la pregunta que encabeza este artículo y me puso a trabajar en una respuesta que llegue a costeños, paisas, cachacos y llaneros.
Empecemos diciendo que la Antroposofía es una corriente espiritual conocida en el mundo como Ciencia Espiritual e iniciada por Rudolf Steiner (1861-1925) a comienzos del siglo 20. El desarrollo espiritual es buscado aquí en términos científicos, no religiosos. La antroposofía se sale del dominio de la creencia y entra en el campo de la ciencia, esto es, trabaja con hipótesis que son validadas.
Si volvemos la mirada a la etimología y exploramos el origen de la palabra, nos encontramos con dos vocablos griegos: ‘sophia’, sabiduría y ‘anthropos’, hombre. Así que una definición etimológica nos lleva a ‘sabiduría o conocimiento del hombre’. Anthropos se puede partir en sus dos componentes: ‘anth y ropos’ que significan ‘carbón ardiente’; el ideograma chino de hombre (Ren) tiene gran similitud ideográfica con el de fuego (Huo). Y en hebreo hombre se dice ISH y en el significado de sus letras está incluido el fuego (shin). Tres culturas clásicas que relacionan lo humano con el fuego.
Pero vamos a agregar ‘otras vainas’: La Antroposofía es un camino de conocimiento que parte de una antropología ampliada e integra el domino de lo corporal, de lo anímico, de lo existencial (espiritual) y de lo social.
Para la antroposofía el ser humano posee cuatro niveles de organización o cuerpos nombrados como cuerpo físico (material), cuerpo vital (biológico), cuerpo emocional (sensible) y Organización del Yo (nivel espiritual), que a su vez están relacionados con los cuatro elementos antiguos (tierra-agua-aire-fuego) y con cuatro reinos (y aquí nos salimos de la biología científica): mineral, vegetal, animal y humano. Salta a la vista que para la antroposofía el ser humano constituye un reino independiente y no un animal inteligente.
R. Steiner trabajó en profundidad este tema y describió tres cualidades netamente humanas: Andar, Hablar y Pensar que constituyen una conquista evolutiva ligada al desarrollo evolutivo del ser humano.
La antroposofía surge en un momento particular -principios del siglo 20- donde la humanidad asiste a una gran expansión de la mente y el espíritu. La revolución industrial se ha consolidado. Asistimos al desarrollo de la nueva física y de avances tecnológicos como la aviación, la electricidad, el fonógrafo y el automóvil. Nace el psicoanálisis y es la antesala de la revolución bolchevique y de la primera guerra mundial.
La Antroposofía no ofrece una sabiduría nueva. Si no que presenta las viejas verdades de tal manera que se puedan utilizar mejor.
La antroposofía es la unión del conocimiento espiritual con la ciencia. Para que esta unión sea posible, Steiner sistematiza la investigación de los mundos suprasensibles para poder utilizar este conocimiento en la práctica. “Hay quienes creen que con las fronteras de la percepción sensorial se agotan también las fronteras de todo conocimiento… pero si se hacen conscientes de esas fronteras, descubrirán que en esa conciencia existen las facultades para atravesarlas”. “En todo ser humano duermen facultades que le permiten adquirir conocimiento de los mundos superiores… el problema consiste en qué se debe hacer para desarrollar estas facultades”. Steiner trabaja en varios libros y en numerosas conferencias este proceso y luego lo lleva a la vida práctica.
La Antroposofía aplicada genera un proceso reordenador de la cultura a través de la pedagogía Waldorf, un proceso que recupera la tierra a través de la agricultura biológico-dinámica y un proceso sanador del ser humano a través de la medicina y la psicoterapia de orientación antroposófica. Vamos a profundizar en estos aspectos en próximas entregas.
La antroposofía está en capacidad de responder a los candentes interrogantes que acosan al ser humano actual: su verdadero origen como individuo, la existencia de la conciencia más allá de la muerte física, el papel del hombre como ser social y cultural y la estructuración de la sociedad como organismo ternario.
[email protected]

El cambio no convence

0

El cambio no convence
Desde cuando se suprimió la bidireccionalidad en la Transversal Inferior desde la Calle 12 hacia el sur, no han cesado las quejas y quienes aseguren que fue peor el remedio que la enfermedad

El jueves 21 de abril los usuarios de la Transversal Inferior se sorprendieron cuando al bajar por La Concha no pudieron girar a la izquierda para tomar Las Palmas, como lo habían hecho en los últimos años. Sucedió que la Secretaría de Transportes y Tránsito decidió suprimir el sentido bidireccional de la Transversal Inferior entre las calles 12 y 10 B y dejarlo unidireccional, solo en el sentido norte – sur.
El objetivo de este cambio, según informó en su momento la Secretaría, era “mejorar la movilidad y la capacidad de la vía (Transversal Inferior) al permitir una mayor fluidez de los vehículos que circulan por este lugar.” También el Tránsito indicó entonces que “para hacer más eficiente el desplazamiento de vehículos” fueron instalados dos cruces semaforizados en las calles 12 y 12 A, con el fin de permitir el retorno a Las Palmas. El proyecto requirió una inversión de 110 millones de pesos.
Pero a pesar de las buenas intenciones, casi dos meses después la modificación vial no termina de convencer a muchos usuarios de la Transversal Inferior, quienes consideran que los tacos en las horas pico son ahora peores que antes, ya no en uno sino en los dos carriles, y que los más perjudicados son quienes habitan en el sector de La Concha, pues al suprimirles el acceso a Las Palmas deben bajar por la calle 10, congestionando más el área.
Una de los muchas personas que se comunicó con Vivir en El Poblado para pedir a la Secretaría de Transportes y Tránsito que reconsidere su decisión y que explique con base en qué estudios la tomó, es Carlos Peláez. En su opinión, “no hubo solución de nada, sino un empeoramiento de la situación. Derramaron todo el tráfico por la 10, subutilizando Las Palmas, y la 10 con la 34 se volvió imposible.” Añadió que en las horas pico “la congestión se prolonga hasta Templo Antonia” y sugirió echar atrás la medida, “por lo menos hasta que hagan otras obras.”

Argumentación oficial
Consultada sobre estas inquietudes, la Secretaría de Transportes y Tránsito, por intermedio del Subsecretario Técnico, Juan Fernando Franco, argumentó que la determinación de cambiar la direccionalidad en ese tramo de la Transversal Inferior se tomó tras aprobar un estudio que se presentó en septiembre de 2007. Según este, tanto en la mañana como en la tarde, con la unidireccionalidad se podía mejorar su circulación y agilizar la de Las Palmas. “Esta decisión fue tomada pensado en la eliminación de conflictos”, expresó, y resaltó que para el peatón el cambio es más beneficioso “puesto que en el momento de atravesar alguna de las dos transversales sólo debe mirar para un solo lado, lo cual aumenta su seguridad.”
El funcionario agregó que la accidentalidad en la vía disminuyó. “Las cifras se incrementaban cada año. Desde la concepción de las transversales se tenían 133 conflictos, ahora, con la intervención de unidireccionalidad, se ha reducido a 53.”
Acerca de la capacidad de movilización de vehículos que tiene hoy la Transversal Inferior en el tramo de la modificación, Franco dijo que “antes presentaba condiciones muy bajas si se comparan con los niveles que se puede tener cuando se declaran las unidireccionalidades.”
La dependencia oficial descartó la posibilidad de revocar la decisión, al menos por el momento. “De realizarse un estudio que demuestre que este cambio de direccionalidad tiene efectos negativos, la Secretaría procederá a analizarlo, pero, de no haberlo, se continuará como se viene ejecutando.”
Sobre si el Tránsito tiene alguna otra medida prevista para mejorar el tráfico en el área, el Subsecretario de Control manifestó que “en el punto donde se encuentran los cruces semaforizados no hay otra medida, pero para las transversales en general se planean en las obras por valorización pasos a desnivel en la Transversal Inferior con la calle 10.