Inicio Blog Página 516

Los dispositivos no deben ser ruedas sueltas

0
Los dispositivos no deben ser ruedas sueltas
Al aumentar la oferta y consumo de tecnología en la educación y el entretenimiento, padres y educadores deben ser un filtro permanente

Los dedos de Paulina son ágiles al deslizarse por la pantalla del iPhone de su padre. Con solo tres años de edad es capaz de acceder a las fotografías del celular, buscar y entretenerse con un juego de Plaza Sésamo y abrir una aplicación en la que un pequeño gato repite frases. Su madre limita el uso de pantallas, pero piensa que llevar una vida sin ellas es imposible.


Foto cortesía Eafit

El doctor Álvaro Posada Díaz, pediatra puericultor (disciplina médica que se ocupa del desarrollo durante los primeros años de vida) y autor del libro Niño sano, está de acuerdo: “Las pantallas están aquí para quedarse, lo importante es el acompañamiento que le den los padres a sus hijos”. Según el especialista, la Academia Americana de Pediatría recomienda que los niños menores de dos años no tengan ningún acceso a pantallas porque es la edad en la que más se desarrollan las conexiones cerebrales. La misma academia argumenta que los niños, hasta los tres años, tienen una necesidad crítica de interacciones directas con sus padres y otras personas, para un crecimiento saludable del cerebro, y un desarrollo apropiado de habilidades sociales, emocionales y cognitivas. Dice el doctor Posada que a partir de los tres años se puede permitir el uso de algunas pantallas con acompañamiento responsable. A partir de los nueve, todas las pantallas se pueden permitir con vigilancia y con un límite de dos horas al día. Para este especialista el problema es más de contenidos, pero en sí misma, la tecnología le ayuda a los niños y jóvenes a aprender otras formas de comunicarse, desarrollar la motricidad, la coordinación entre ojos y manos, destreza digital y a solucionar problemas. Por otro lado, reconoce la desventaja que se le atribuye de fomentar menor esfuerzo.

El médico antroposófico, Jorge Vega Bravo, coincide con que el uso indiscriminado de pantallas a temprana edad disminuye la voluntad. Para evitarlo resalta que la pedagogía Waldorf insiste en la importancia de respetar el momento de introducir las tecnologías en la vida infantil. “Idealmente, aunque difícil, los niños no deben ver televisión ni tener acceso a otras pantallas antes de la maduración del sistema nervioso central, es decir, hasta los nueve años”. En esta edad, explica el doctor, los niños pasan por el proceso “Rubicón”, en el cual descubren el mundo más allá de los hogares y el colegio, haciéndolo el momento propicio para acceder a herramientas tecnológicas. Recomienda a los padres transformar sus hábitos de consumo de tecnología, pues los niños aprenden todo por imitación hasta los ocho años (ver columna de Jorge Vega, “El desarrollo intelectual precoz: una trampa evolutiva”, en nuestro sitio web).

Entre otras consecuencias, la Academia Americana de Pediatría enumera las desventajas físicas: dificultad para conciliar el sueño por exceso de estimulación, dolores por mala postura, obesidad por inactividad y visión deficiente por enfocar los ojos en la pantalla durante mucho tiempo. En cuanto a las desventajas mentales y sociales están: ansiedad, adicción, pérdida de habilidades para relacionarse y periodos más cortos de concentración.

En Colombia, según cifras del DANE de 2011 (publicados en 2012), el 89,8% de los hogares tienen televisor, el 89,4% poseen celular, el 23,4% conexión a Internet, y el 54% de los colombianos (de los cinco años en adelante) usan un computador (en su casa u otros lugares). Por edades, el grupo que más reportó haber usado un computador fue el de personas entre los 12 y 24 años (74,9%), seguido por el de personas entre 5 y 11 años (52,6%).

Sin embargo, la discusión sobre el desarrollo adecuado de niños y jóvenes inmersos en tecnología se enfrenta a la necesidad del conocimiento tecnológico como herramienta de aprendizaje y entrenamiento laboral. William Mesa Agudelo, experto en programas educativos especiales y magíster en Educación Innovativa, realizó una investigación en instituciones educativas de la ciudad, cuyos resultados sugieren un alto grado de motivación hacia el aprendizaje cuando se usan herramientas TIC (Tecnologías de la Información y la Comunicación). Pero la gran ventaja de la tecnología, según Mesa, es el acceso equitativo a fuentes del conocimiento y la posibilidad de aprendizaje. “Los estudiantes pueden desarrollar habilidades investigativas, capacidad de aprendizaje autónomo y procesos mentales como razonar, interpretar, argumentar, asignar significados, tomar decisiones y resolver problemas”.

Mesa añade que la educación actual requiere herramientas tecnológicas que reduzcan inequidad y exclusión educativa. Asegura que los escasos recursos económicos de algunos actores educativos podrían aumentar la brecha digital, y, por tal motivo, requieren intervención estatal. Según la Secretaría de Educación, en las instituciones educativas públicas de Medellín hay un computador por cada 14 niños. La meta es llegar a 9 o 10 niños por computador antes de finalizar la administración actual.

Cuando el tiempo libre educa

0

Cuando el tiempo libre educa
Colegios de Medellín y entidades públicas desarrollan programas para el aprovechamiento y buen manejo del tiempo libre a partir de la motivación
Deportes, actividad aeróbica, interpretación de instrumentos musicales, movimientos corales, ballet, hip hop, teatro, pintura, robótica, gastronomía, manualidades e idiomas, son solo algunas de las actividades extracurriculares que ofrecen los colegios privados en El Poblado y en otros sectores de la ciudad.

Pero, antes de ahondar en las opciones, cabe preguntarse ¿cuáles son los aportes de estas actividades para los estudiantes? Según la psicóloga y magíster en Educación, Yólida Ramírez, “una de las cosas más difíciles de aprender es manejar el tiempo libre. Actualmente la mayoría de los padres de familia trabajan, y el tiempo que los niños permanecen solos lo ocupan viendo televisión, navegando en Internet o en la calle”.

Hacer parte de una actividad extra implica un compromiso, por lo que se desarrollan habilidades que son indispensables desde la niñez, entre ellas, la disciplina, la concentración, la atención, la permanencia, la toma de decisiones, la autonomía y el buen manejo del tiempo, según lo expresado por la psicóloga.

Muchas instituciones educativas coinciden en incluir en el plan de estudios estas actividades que complementan el aprendizaje en el colegio y la sana utilización del tiempo libre.

En el Colegio Alemán, las Actividades de Tiempo Libre (ATL) son obligatorias para los niños desde el Kindergarten (prekínder y kínder) hasta Mittelstufe (del quinto al octavo grado). Los estudiantes eligen la actividad que desean y emplean una hora y media que está incluida en el horario de clase. En los grados más altos son opcionales y se realizan en horario extracurricular. “La idea es reforzar las habilidades de los niños. En estudios que se han realizado en el colegio, se comprobó que un niño que aprende a descifrar un código musical, tiene mayor capacidad de entender matemáticas y aprender otro idioma”, según expresaron voceros de esta institución educativa.

El colegio Marymount también propone clases opcionales de una hora y media, todos los días. Su propósito “es que las niñas no tengan que desplazarse a otro lugar de la ciudad para hacer lo que les gusta y, más que reforzar lo académico, la idea es que canalicen y disfruten el tiempo libre”, destacó Mónica Martínez, coordinadora del Comité Cultural del colegio.

“Además de ser una unidad formativa, hacemos parte de una comunidad”, dice por su parte Jesús Castro, director de Estudio del colegio Montessori, quien explica que el propósito es “dar una formación equilibrada en la que los conocimientos no estén desligados de la práctica”.

Apuesta por una Jornada Complementaria
“El sector oficial no cuenta con los recursos económicos ni la infraestructura física necesaria para desarrollar este tipo de actividades”, explica Yólida Ramírez, quien además es docente en el Colegio San Lorenzo de Niquitao. La dinámica social que allí se vive dificulta la permanencia de los estudiantes.

“Hace poco -por ejemplo- el Índer intentó realizar un programa complementario, pero el problema es que cuando los niños salen del colegio tienen la necesidad de ir a una fundación en donde los cuidan y alimentan”.

Desde junio de 2012 la Secretaría de Educación de Medellín, viene desarrollando el programa Jornada Complementaria, el cual “busca brindar alternativas de uso productivo y creativo del tiempo libre de los estudiantes”, según la explicación del coordinador del programa, Juan Pablo Ramírez. Este comenzó a implementarse en los corregimientos de Palmitas, San Cristóbal y en tres colegios de las comunas 5, 6 y 7, llegando así a más de nueve mil niños. Actualmente existen 30 mil cupos para atender el tiempo libre de los jóvenes de toda la ciudad, según cifras de la Secretaría de Educación.

Teniendo en cuenta el limitante del espacio reducido para desarrollar las actividades complementarias, “priorizamos el hecho de que los niños no salgan de su territorio y reconozcan lo que tienen alrededor, como las juntas de acción comunal y local, la parroquia y los parques biblioteca”, afirma Ramírez. El programa cuenta con cuatro rutas pedagógicas: cultura, deporte, ciencia y tecnología y bilingüismo, las cuales son atendidas con diferentes aliados, entre ellos el Índer, la Secretaría de Cultura, el Parque Explora, Medellín Digital y Medellín Bilingüe. Las actividades se realizan dos días a la semana en un tiempo de dos horas. “La idea es que los rectores se animen a complementar los otros días”, dice Juan Pablo.

Deseo, clave del éxito
“Donde está el deseo está el éxito que se adquiere en lo cotidiano”, afirma la psicóloga Yólida Ramírez. Ella piensa que “un niño motivado hace más de lo que se le pide”. El coordinador de la Jornada Complementaria, Juan Pablo Ramírez, coincide con esta afirmación: “Nos hemos encontrado que la jornada complementaria se puede convertir en un elemento motivacional. No estamos buscando deportistas de alto rendimiento, científicos o artistas, nuestro propósito es que el chico se apasione por lo que hace y encuentre razones para vivir”.


Un referente que da sentido

“Siempre he sido de las que se mete en todo en el colegio. En este momento hago parte de las Olimpiadas de la Ciencia. Me encantan las ciencias exactas, la literatura e investigar”. Así responde Daniela Varela, una joven de 17 años del colegio Jesús María, a la pregunta de por qué se motivó a participar en el Campamento de Jóvenes Inventores con el científico Raúl Cuero, realizado en el ITM en diciembre.

Lo que más le gustó a esta estudiante y habitante de El Poblado es que no tenían que saber de ciencia ni biología, sino la motivación por la creatividad y la investigación desde otras áreas como la música y el periodismo. “No pensé que iba a ser tan exigente. Estaba súper nerviosa, había invitados importantes de otros países, pero ver mentores jóvenes como nosotros, me motivó mucho”, cuenta Daniela, quien se muestra muy segura de lo que aprendió.

Además de las conferencias que le dejaron nuevas ideas y curiosidades, trabajó en un invento. Se trataba de un antibiótico que no atacara los síntomas sino al microbio.

En esta experiencia de Parque Creativo, el cual ha sido implementado por Cuero en otras cuatro ciudades del mundo, “a los chicos se les olvidó el celular al segundo día, el entorno de distracción, y se concentraron en la ciencia. Hablaban de invenciones, microbiología y modificaciones genéticas”, cuenta Juan Pablo Ramírez.

Precisamente él, quien conoció de cerca los resultados de los estudiantes, afirma estar seguro de que “esos jóvenes, al terminar el laboratorio, se la pasaron leyendo y trabajando en sus proyectos”.
De cada uno de estos campamentos se eligen por lo general cinco proyectos, Medellín generó 19 invenciones potenciales, de 22 participantes, por lo que Raúl Cuero afirmó “que fue el mejor campamento que ha tenido y se impresionó por la calidad de la ciudad”.


Foto cortesía Secretaría de Educación


Las 10 habilidades para la vida
El programa Jornada Complementaria de la Secretaria de Educación se fundamenta en las diez destrezas psicosociales que propone la División de Salud Mental de la Organización Mundial de la Salud (OMS):

1. Autoconocimiento
2. Empatía
3. Comunicación asertiva
4. Relaciones interpersonales
5. Toma de decisiones
6. Solución de problemas
7. Pensamiento creativo
8. Pensamiento crítico
9. Manejo de emociones
10. Manejo de tensiones y estrés

 

Medellín quedó habilitando

0

Medellín quedó habilitando
A pesar de que el nivel de las instituciones educativas de la ciudad ha venido creciendo desde el 2005, la ciudad se rajó en las pruebas del ICFES en 2012


Foto cortesía Eafit

La publicación en la revista Dinero de los mejores puntajes en las pruebas Saber 11 (ICFES) de los colegios del país, desconcierta a muchas personas en Medellín y Antioquia. Aunque históricamente la ciudad no ha mostrado un posicionamiento importante en estos resultados, las inversiones y la decidida política de darle prioridad a la educación en los últimos 10 años, han elevado las expectativas.

Esta priorización, incluidos millonarios recursos, se hizo más evidente con Sergio Fajardo como Alcalde de Medellín (2004 – 2007). En su administración se amplió la capacidad instalada oficial, mediante una inversión de 287.112 millones de pesos en infraestructura física educativa y 9.022 millones de pesos en dotación de mobiliario escolar. Se construyeron diez colegios de calidad (inicialmente), se adelantaron 235 ampliaciones y adecuaciones y 667 obras de mantenimiento.


Foto cortesía Eafit

Se convirtió en una política pública apostarle a la educación, según los eslóganes que se difundieron y se siguen difundiendo para hablar de Medellín y Antioquia como “las más educadas”.

La posta de la educación fue tomada por las dos administraciones posteriores (Alonso Salazar y Aníbal Gaviria). De ahí la sensación de desesperanza con los números obtenidos. Resulta que Medellín, en los puntajes de 2012, ubica su primer colegio en el puesto 27 del escalafón (La Enseñanza) y solo incluye a siete instituciones educativas en el top 100 nacional. En cambio Bogotá ubicó 43 colegios en los 100 mejores y Cali llegó a 13.


Foto cortesía Eafit

Ante este panorama la conclusión primaria sería que no ha funcionado lo que se ha hecho en materia educativa. Claro, si se toma esta medición como la última palabra en el diagnóstico del avance en la calidad. Esto ha llevado a muchas personas, vinculadas con la educación, a cuestionar la metodología utilizada por el ICFES. No obstante, es la misma Secretaria de Educación de Medellín, Luz Elena Gaviria, quien resalta la importancia de las pruebas para adelantar diagnósticos.

Ella advierte que, por el contrario, los números vistos en detalle le entregan a Medellín ese premio que tanto ha buscado en materia educativa. Desde 2004 hasta la fecha, la ciudad realmente ha crecido en los indicadores de una manera sostenida.

“En 2004 el 16% de los colegios públicos de la ciudad estaban en nivel inferior, el 64% en el medio y el 19% en el nivel superior. Al mirar el 2012, con todo el proceso de mejoramiento de la infraestructura y la conectividad, se ve una disminución en la franja de inferior, que pasa al 8%. En el nivel medio bajamos a 56% y en nivel superior hemos escalado hasta el 35%”, dice la funcionaria.

Estas cifras muestran que desde 2004 y hasta el 2012, Medellín ha duplicado sus alumnos en nivel superior y ha reducido a la mitad los que están en nivel inferior.

Según ella, las noticias son mucho más alentadoras si se tienen en cuenta dos factores: que estos procesos en educación no se dan de un día para otro y que el mayor esfuerzo en estos años ha sido en acceso y permanencia en la educación. “En Medellín tenemos cubierto el 100% en acceso a las instituciones educativas y los restaurantes escolares. En transporte escolar hay una alianza con el Metro y los transportadores, generando beneficios con subsidios del 50 y el 100%. Hoy los chicos no pagan un solo peso para ingresar a los colegios oficiales. Todas las instituciones tienen sala de cómputo y conexión por fibra óptica. Esos son avances que no están en el resto del país. Es más, tenemos la tasa de deserción más baja. Solo un 3,7 por ciento (12 mil de los 395 mil estudiantes), mientras la media del país está en 5,2 y la meta nacional es llegar al 3,8”.

Una medición cualitativa
Juan Luis Mejía, ex secretario de Educación de Medellín (1999), hoy rector de Eafit, plantea que al margen de los números hay otros indicadores en los que se ha avanzado mucho. “Uno es en la dignidad del sistema educativo. Y tengo un ejemplo muy claro. Cuando yo fui Secretario de Educación la Secretaría no estaba en la Alcaldía. Me dijeron que estaba afuera porque cuando se la tomaban los maestros se podía evitar un problema mayor. En esa época quedaba cerca a unos talleres en Palacé con Los Huesos. Eso muestra el sitio en el que la sociedad tenía la educación. Era como un estorbo. Hoy el cambio es muy alto y hay una preocupación social”, expresa.

Mejía advierte además que Medellín recibe anualmente entre 25 y 30 mil habitantes nuevos, que vienen desplazados de las regiones más pobres, y por tanto en las condiciones de desarrollo humano más bajas. “Ese desplazamiento le genera un problema grande en indicadores sociales, entre ellos la educación. Así no sea solo por la violencia”.

En cuanto al paso a la educación superior, el rector de Eafit advierte que es claro el desequilibrio entre colegios de alto nivel (comúnmente los privados) y los de bajo nivel. Es evidente en materias como inglés o matemáticas y más específicamente en cálculo.
Él también llama la atención de iniciativas como el Fondo EPM, que “le ha sacado 20 mil jóvenes a las calles y los ha incluido en las aulas de la educación superior, además del esfuerzo del programa Buen Comienzo para la primera infancia, un tema que hace 10 años no se tocaba. Son cerca de 100 mil niños incorporados al sistema educativo. Si no fuera por ese programa estarían en el partidor de la vida en desigualdad frente a los que si tienen esta posibilidad. Es un programa integral con nutrición, salud, acompañamiento psicoafectivo y en los primeros pasos de la educación”.

Aunque resta mucho por mejorar, los análisis parecen dar un parte positivo inicial. Al menos parece que en la ciudad ya no hay excusa para no estudiar y que muchas de las instituciones están entendiendo que no se trata solo de formar a niños y jóvenes por medio de libros y cartillas, es también la meta de forjarlos en unos valores específicos e implementar metodologías que eduquen a seres integrales, felices y curiosos.

Medellín parece ir lento pero seguro, en momentos en los que los paradigmas educativos se están revaluando. Tal y como ha quedado en evidencia en trabajos como el difundido documental La Educación Prohibida, queda la pregunta sobre la capacidad del sistema educativo para pasar de un modelo que recibe niños para contenerlos en los muros de un colegio, para pasar a una metodología que los guíe en su desarrollo. El camino todavía es muy largo.


Educación en El Poblado
Las 24 instituciones educativas de la comuna 14 están en nivel muy superior, incluyendo la única oficial, el INEM, que tiene más de 4.600 estudiantes. Fue precisamente esta institución la que ganó en 2012 el premio a la Calidad de la Educación. Aunque no es una población homogénea, pues recoge estudiantes de toda el área metropolitana, sus estándares de calidad son muy buenos.
Cabe destacar que es en El Poblado y en sus áreas de influencia, en donde están los colegios con los mejores resultados, con casos destacados como La Compañía de María (La Enseñanza), El Montessori, El Theodoro Hertzl (El Retiro), The Columbus School (Envigado), Gimnasio Vermont, Gimnasio Los Pinares y El Fontan.


Conceptos básicos de las pruebas del ICFES
Según los conceptos emitidos por el ICFES, en las pruebas Saber 11 se evalúan competencias y componentes en cada una de las pruebas que integran el núcleo común y el componente flexible. “Las competencias se refieren a los procesos que el estudiante debe realizar para resolver lo que plantea una pregunta. Estos pueden considerarse como herramientas que disponen al sujeto a proponer soluciones a algún problema”. En los componentes estos tienen que ver con “problematizaciones, categorías conceptuales o tópicos sobre los cuales se pregunta. Además, son inherentes a una disciplina o área del conocimiento. Por ejemplo, la célula o la mecánica clásica constituyen componentes de la biología y la física, respectivamente”.


NÚMERO DE ESTABLECIMIENTOS EDUCATIVOS POR CATEGORIA EL POBLADO

(Oficiales y No oficiales) 

Categorías de rendimiento en Pruebas Saber 11

Total Medellín

Fuente: Bases de Pruebas Saber 11 – ICFES

La unidad estadística corresponde a la jornada. Se excluyen las jornadas nocturnas y sabatinas
 


Categorías de rendimiento en Pruebas Saber 11

Oficiales Medellín

Fuente: Bases de Pruebas Saber 11 – ICFES

La unidad estadística corresponde a la jornada. Se excluyen las jornadas nocturnas y sabatinas

 

“La exigencia es la clave”

0

“La exigencia es la clave”
Desde hace 16 años el colegio La Enseñanza es destacado como el mejor de Medellín en las pruebas Icfes. Su directivas hablan de sus logros

El colegio La Enseñanza, de la Compañía de María, es una de las instituciones educativas más tradicionales de Medellín. Con 114 años de existencia, fue el primer colegio femenino del Valle de Aburrá. Este centro educativo, que es reconocido por su alto nivel de exigencia académica, ha sido destacado desde 1997 como el mejor colegio del municipio, según los resultados de las pruebas Icfes. Su rectora, Gloria Cecilia Londoño, en entrevista con Vivir en El Poblado, habla acerca de la educación y de los logros alcanzados.


Gloria Cecilia Londoño, rectora La Enseñanza

¿Cuál considera que es el éxito de la Enseñanza?
“Creo que es una estructura que se ha consolidado a lo largo de la historia, y en esa estructura la base es el desarrollo de las potencialidades de la persona. ¿Cómo la hace?, con una educación muy personalizada, conociendo para qué es buena cada niña. Una segunda clave tiene que ver con la conjugación en formación en valores y disciplina académica”.

¿Cómo se define el modelo pedagógico y qué tipo de estudiantes forma La Enseñanza?
“Nuestro modelo es humanista. Es un desarrollo de valores y formación asumidos personal y colectivamente, pero también es construir el conocimiento que está retado por el contexto histórico, por cada realidad. Desde cada área se va fortaleciendo un proceso de investigación, entonces no es un saber de memoria sino que es un saber analítico, un saber que se precisa de acuerdo a la ciencia en el que se interrelacionan las distintas áreas”.

La Enseñanza ha sido destacado como el mejor colegio de Medellín, pero aún no alcanza los primeros lugares nacionales ¿Qué vacío encuentra en la educación de la ciudad?
“Tenemos que seguir reflexionando el tema del modelo social, donde muchos esfuerzos y dinero se gastan en como mitigar la violencia y las situaciones de desequilibro social. Tenemos programas muy bonitos, pero me parece que todavía hay que abordar el tema educativo desde la equidad, la calidad y la cualificación de la educación, porque no basta con la cobertura”.

¿Qué destaca de la formación en La Enseñanza?
“El desarrollo del pensamiento. El ajedrez, por ejemplo, se enseña para desarrollar capacidades donde el silencio es importante, el análisis, la observación, la interacción con los otros. Entonces desarrollar esas cualidades te va preparando para todas las bases de las ciencias exactas. También la sensibilización en el campo de la historia, la geografía, el contacto con los diferentes entornos y las visitas a otros lugares de la ciudad, donde están aconteciendo situaciones límite. Hay que preguntarse cómo la educación responde en una ciudad donde hay tantas diferencias”.

¿Cuál es el aspecto a mejorar dentro de la educación en Medellín?
“Es un reto mantener la calidad educativa y formar para que las niñas realicen su desempeño académico con altos indicadores. El punto débil es la formación de los docentes. Esto va unido a la vocación porque en la educación privada, en general, los docentes están por vocación y hay una mayor libertad para hacer la selección de los docentes. En la educación oficial con la permanencia de los docentes, buenos o no buenos, hay que garantizarles el trabajo”.

La obediencia

La obediencia

/ Elena María Molina

Obediencia es una palabra que causa sentimientos encontrados, porque si bien permite el desarrollo del control sobre sí, sobre el ego, también nos conduce a la negación de la consciencia, de la libertad. ¡Tantos crímenes y abusos se cometen por obediencia! Obediencia que supone renunciar al discernimiento y al espíritu critico, a lo necesario. Qué alienación.

Cuando escuché que la palabra quiere decir estar a la escucha de lo que viene a nuestro encuentro, algo cambió. Obedecer quiere decir abrirse a la realidad, a lo inesperado, a la adversidad, a lo que trasciende el ego… A lo que trasciende cualquier fanatismo. A lo que trasciende una idea. Pretender no obedecer también puede volverse esclavo de sus condicionamientos. ¿Obedecer poco, nada? tiene que ver con la autoridad irreemplazable en occidente, de la autoridad exterior. Obedecer es ante todo la escucha de la verdad interior.

Es la escucha de la realidad que encontramos, como es, y la respuesta a lo que se nos solicita desde el exterior. ¡Y que sea justo! Desde ahí, obediencia y resistencia no tienen porque oponerse. Es ese gran sí a lo que nuestro interior nos dicta, y un sí al mundo de lo real. Un ajuste, entre la situación y mi deseo.

El problema es que obedecer tiene la connotación de la negación y del mando. Y no tiene el significado desde el sentido mismo de la palabra, porque la confundimos.

Empieza el 2013: propiciar estar a la escucha de lo que la vida nos trae y propone. Estar a la escucha de lo que nuestro ser espera, y es lo justo entre ambas solicitudes, lo que podremos realizar. Que logremos el dominio sobre lo que realmente es importante, como una alianza entre la razón y la pasión, la voluntad y el deseo. Para que tanto el control como la inspiración encuentren espacio.

Cada año nos propone una nueva aventura. Nuestras propias ideas y entrar en justa relación con lo que la vida nos envía y presenta, para sacarnos de nuestro pequeño mundo, de nuestro ego. Bueno, o no aceptable, siempre capaces de renunciar a querer controlarlo todo, al control sobre nosotros mismos, para ser al fin discípulos de nosotros mismos, capaces de amar, de crear, de ser originales, discípulos de la vida.
[email protected]

¡Sí hay Becas!

0

¡Sí hay Becas!
En la ciudad existen fondos privados y públicos, en alianzas con universidades, que benefician a los estudiantes para su formación académica


Estudiastes de Eafit becados por la Andi

Uno de estos fondos es el programa Jóvenes con Futuro, proyecto con el que la Gobernación de Antioquia amplía la formación para el trabajo y el desarrollo humano en áreas Técnico Laborales a jóvenes entre los 16 y 29 años. Este programa actualmente tiene abiertas las inscripciones para participar por becas en el Politécnico Colombiano Jaime Isaza Cadavid, hasta el 30 de enero de 2013.

El Politécnico, que es líder en la formación técnica y tecnológica en Antioquia, participa con una oferta académica que incluye carreras técnico laborales en Producción Agrícola, Turismo y Medio Ambiente, Producción Forestal, Producción Pecuaria, Adecuación de Tierras y Logística en Transporte.
Mayor información en www.alianzamedellinantioquiaeducacion.com/

Fondo Andi-Eafit
En la Universidad Eafit los estudiantes tienen varias alternativas de becas. Allí, según Paola Gaviria, Jefe del Departamento de Beneficios y Compensación, se ofrecen beneficios para los estudiantes destacados en actividades co-curriculares, (como los deportistas y los pertenecientes a grupos artísticos), y estímulos por el buen rendimiento académico. Sin embargo, uno de las fondos de becas más importantes con el que cuenta, es la alianza Andi-Eafit que beneficia a estudiantes con dificultades económicas de estratos 1, 2 y 3.
Este convenio, que funciona en la universidad desde 1996, entregó becas a 83 estudiantes en 2012. En total este centro educativo, durante el segundo semestre del año pasado, otorgó 1.480 becas (1.227 pregrado y 253 posgrado).

Fondo EPM
Una de las becas más reconocidas en Medellín es la del Fondo EPM. Este es un programa donde la Alcaldía brinda oportunidades para el acceso y la permanencia en la educación superior a los estudiantes de estratos 1, 2 y 3. Esta iniciativa financia hasta tres salarios mínimos por cada semestre para matrícula y hasta 2.5 salarios mínimos para sostenimiento.

La más reciente convocatoria, abierta para el primer semestre de 2013, recibió los recursos de los excedentes de EPM, para unos dos mil estudiantes. Además de este fondo privado, la Alcaldía, la Gobernación y la Fundación EPM firmaron el año pasado la Alianza AMA, un acuerdo donde se beneficiarán por lo menos 2.300 jóvenes de Medellín y Antioquia, con recursos aproximados de 29.500 millones de pesos para educación superior.
Esta alianza para el primer semestre de 2013 entregará 1.300 becas. Dentro de la Alianza AMA, durante este cuatrienio, se espera beneficiar cerca de 10 mil jóvenes de bajos recursos de las nueve regiones de Antioquia.

Por una educación de calidad

0

Por una educación de calidad
¿Cuál es el reto del sistema educativo en Medellín?

Después de casi diez años de haber sido elegido como alcalde y de haber puesto en marcha su política bandera con el reconocido eslogan “Medellín la más educada”, el actual gobernador de Antioquia, Sergio Fajardo, ha extendido la transformación social por medio de la educación al Departamento.

Fajardo, que en su momento recibió una ciudad convulsionada por el reciente proceso de desmovilización que adelantaba el Gobierno con los grupos paramilitares (2003), buscó un cambio en el imaginario colectivo de violencia que identificaba a Medellín. Para ello dispuso de la mejor arma: la educación. Esta se convirtió en el pilar fundamental de su administración, legado que continuó Alonso Salazar y que hoy consolida Aníbal Gaviria.

A pesar de esta decisión, materializada en una inversión inicial de 287 mil millones de pesos en infraestructura física y otra cercana a los 9.022 millones de pesos en dotación de mobiliario escolar, la ciudad apenas viene dando muestras de cambio. Para muchos analistas no basta con una alta inversión en infraestructura, pues este empuje por sí solo no garantiza la calidad en la educación. A los colegios de calidad construidos en las zonas más vulnerables de Medellín, los programas de Internet gratuito y la edificación de parques bibliotecas, entre otras obras públicas, se les debe sumar la formación integral de docentes y creación de grupos de investigación como parte del desarrollo educativo.

Estos esfuerzos, que se evidencian en el paisaje urbano de los distintos barrios, aún no son suficientes. Esto se ve reflejado en las pasadas pruebas Icfes, donde los colegios de Medellín, con respecto a otros del país, no ocuparon los primeros lugares. Cabe resaltar que varias de las mejores instituciones de la ciudad están ubicadas o tienen incidencia en la comunidad de El Poblado. La más destacada es La Enseñanza – de la Compañía de María- que desde hace 16 años se mantiene a la vanguardia en el Departamento. Sin embargo, a pesar de ser la mejor institución en la región, a nivel nacional ocupó el lugar 27.

Aunque estos resultados pueden ser tomados como simples estadísticas y no son el único factor para medir la calidad de la educación, sí generan interrogantes. ¿A pesar de la alta inversión, en qué debe enfocarse la educación? ¿Cuál es el reto del sistema educativo en Medellín?

Para los antiguos griegos la Paideia era la base de la educación. Este modelo buscaba seres humanos íntegros, mediante el adiestramiento del cuerpo como camino a la sabiduría y al entendimiento de la belleza, mas descartaba la capacitación para trabajos mecánicos reservados para los siervos y esclavos. En el mundo actual se requieren ambos saberes. Por ello, la búsqueda debería centrarse en generar modelos que permitan desarrollar individuos con formación humanista, pero también con habilidades prácticas que les faciliten su inclusión a las actividades productivas. El reto sigue ahí, a la espera de ser alcanzado.

Lincoln

0

Lincoln
La historia de los últimos cuatro meses en la vida de uno de los presidentes más emblemáticos de Norteamérica, mientras se esforzaba por terminar la Guerra Civil, acabar con la esclavitud y restaurar la unidad de su país. Estreno el viernes 25 de enero en las salas de cine de la ciudad.

Lo imposible

0

Lo imposible
Una conmovedora historia real sobre cómo una familia sobrevivió al tsunami que azotó el sudeste asiático en 2004.

Obras que van a París

Obras que van a París
La grandiosidad de exponer Barranqueros y Árboles de esperanza en el Grand Palais de París

En un taller en el mall Indiana del Alto de Las Palmas se pintan cuadros que van a París y a otras ciudades del mundo. El taller ocupa el segundo piso de una oficina envuelta en aroma de inciensos. El paisaje tras el gran ventanal del fondo le permite a la artista recordar sus principios inspiradores, el mismo que ignora cuando se concentra en su trabajo creativo.

Una mujer sonrió arriba, en el fin de unas escalas, cuando se abrió la puerta del taller. Se alcanzó a ver su rostro, la sonrisa y un pincel manchado de amarillo. Una vez allí, fue evidente el inicio de un paisaje en un lienzo junto a su autora Sylvia Restrepo Botero. Esta era la muestra de una labor que inició hace más de 20 años y que la ha llevado a hacer parte de exhibiciones en grandes ciudades del mundo como Hong Kong, Berlín, Barcelona, Florencia, Ciudad de México, Sidney y París. Hace poco regresó de esta ciudad, en la que participó, del 27 de noviembre al 2 de diciembre de 2012, en el Salón de Artistas Independientes de París, esta vez con dos obras: Barranqueros (óleo sobre lienzo 80 x 180 cm) y Árboles de esperanza (hierro con pintura electrostática 30 x 40 x 15 cm).

Sylvia Restrepo es una artista de la ciudad, criada en El Poblado en una casa grande de la calle 7. Desde niña tuvo la posibilidad de estudiar con quien denomina una gran maestra, la artista Libe de Zulategui. Siempre tuvo claro que formarse en el exterior era la mejor opción, por lo que siendo muy joven, viajó a New York (1982) y realizó sus estudios en artes plásticas en el Fashion Institute of Technology, y más tarde, en la Universidad Autónoma de México (1990).

Reconocida por la dirección de arte en importantes producciones de la televisión colombiana, el cine y el teatro, Sylvia se refiere a lo que estos lenguajes han significado para su vida recordando lo que decía su amigo el director Jorge Alí Triana: “la televisión tiene la continuidad de la prensa; el cine los detalles de la literatura; y el teatro la mirada interior de la poesía”.

Entre los recuerdos con actores, protagonistas de telenovelas y artistas que conoció, existe uno muy grato que la enorgullece: “Buscábamos quien representara a una Débora Arango joven para un documental por sus 90 años, y después de 30 audiciones, ella dijo: ‘La única que se parece a mí es Sylvia’”, cuenta mientras reafirma la admiración que tiene por la artista.

La exposición
La inmensidad de la estructura de hierro que cubre el Grand Palais de París, en los Campos Elíseos, es en sí misma un motivo solemne. Allí, en donde está el Gran Salón de Artistas Independientes, creado en 1884 por impresionistas como Van Gogh, Monet y Gauguin para abrir la puerta a un estilo diferente, llegó Sylvia con la posibilidad de mostrar su obra. “Es maravilloso lo que se siente estar en uno de los lugares más espléndidos de París”, dice.

En este salón, que representa uno de los espacios más importantes del arte contemporáneo, se presentaron 300 artistas con alrededor de mil obras. “Personas del gremio del arte lo visitan para cazar lo que les agrade, convirtiéndose en el motivo que lleva a un artista a presentarse en esta exposición”, cuenta Sylvia. La suya fue elegida por un galerista y será exhibida en el Centro Cultural Árabe Sirio, en el Campo de Marte en París, a finales de este año.

La obra interior
Durante los últimos dos años Sylvia se ha dedicado a los paisajes, que están presentes en la escultura de hierro y la pintura que expuso en París. “El tiempo es el que le dice al artista cuándo su obra es realmente buena, por eso, para que la obra madure se debe tener constancia”, dice. Esta es el resultado de un trabajo interior, de estar en soledad y exponerse a la propia mirada. De allí surgió su descubrimiento: “he encontrado en la naturaleza la metáfora poética de que el hombre es un árbol, alimenta sus raíces y da frutos para que alguien más los recoja”, asegura.

Sylvia reconoce la importancia del trabajo técnico, para darle valor y calidad a quien invierte en arte, dado que “la obra es lo que el artista ve afuera, lo transforma en su pensamiento y lo pone con sus manos en el medio”.

Cuando Sylvia inicia un cuadro no está predispuesta a planeaciones. “Me paro frente al lienzo y es como si me saliera de mí misma”. No le gusta encasillar su obra y prefiere no hacer cuadros por encargo. La satisfacción la encuentra cuando ve que a la gente le suscita sensaciones, sobre todo a los niños, a quienes considera los mejores críticos. Es inevitable para ella no recordar la emoción que sintió cuando una niña dijo sobre uno de sus cuadros: “mami esto es lo más lindo que tenemos en la casa”.

{joomplucat:79 limit=10|columns=3}

En el Carmen: Museo de la Cerámica

0

En el Carmen: Museo de la Cerámica
114 años de historia de una tradición se reflejan en cada una de las piezas, objetos decorativos y fotografías que se encuentran en el Museo de la Cerámica del Carmen de Viboral, pueblo reconocido como referente en la producción de loza. Este lugar, que vale la pena visitar, abrió sus puertas en diciembre de 2012 y está localizado en la Casa de la Cultura Sixto Arango Gallo.









Recuerdos de viaje

0

Recuerdos de viaje
Del Oriente al Suroeste del territorio antioqueño, estuvimos capturando instantes en las primeras semanas del año, una época festiva en la que muchos habitantes de El Poblado se trasladaron a otros municipios a disfrutar de sus últimos días de descanso, antes de comenzar con todo este 2013. Estas fueron las imágenes obtenidas en este atractivo recorrido por algunos de los pueblos y caminos de nuestro departamento.


Verónica Herrera, Juan Orozco

Aracely Rojas, Luis Javier Trejo

Benjamín Denis, Laura Pérez

Carolina Hernández, Ricardo López

Daniela Quiroga, María Isabel Giraldo, Alejandra Rodríguez,Valentina Zuluaga, Catalina Quiroga, Estefanía Sanabria

Elisa Botero, Carlos Fernández

Esteban SAldarriaga, Juan Montoya, Pablo Escobar

Fabiola Castaño, Lucy Orozco

Familia Flaum Isaza

Federico Palacio, Daniel Palacio, Susana Palacio, Vanessa Díaz

John Jairo Otálvaro, Janeth Castaño

Juan Carlos Arango, Ángela Arango, Olga Mejía, Laura Arango

Juan David Londoño, Santiago Vargas, Daniel Duque, Alejandra Flores, Yesenia Rivera

Juan Esteban Burgos, Manuela Álvarez

Juan Manuel Osorio, Marcela Gómez, Nicolás Osorio

Juan Montoya, Andrés Velásquez

Juliana Isaza, Manuela Zuluaga, Lucas Zuluaga, María Isabel Villa

Juliana Posada, Liliana Andrade

Juliana Zuluaga, Carolina Botero

Karen Cañola, Anny Castañeda

Julián López
Laura Restrepo


Luisa Fernanda Mesa, Santiago Cadavid

Luisa REngifo, Andrés Escobar

María Clara Vélez, Felipe Velásquez

Mariana Aristizábal, Marcela Flórez

María Victoria López, Carlos Duque

Mateo Arango, Laura Arango

Natalia Cano, Marcela Gaviria, Cristina Ortíz, Juan DAvid Henao, John Eduardo Camacho

Natalia Celis, Alina Vélez, Ana MAría Saldarriaga, Mariana Isaza

Rafael Orozco, Carolina Bedoya

Reinado en Sopetrán

Sara Quintero, Sara Cristobal

Simón Aristizábal, Isabella Restrepo,Julián Uribe

Sofía Mallarín, Elisa Botero

Stefany Rivera, Laura Martínez

Tatiana Londoño, Mariana Osorio

¿Podemos y queremos hacerlo?

0

Hace pocos días llegó a mis manos un ejemplar del magnífico libro Colombia cocina de regiones; a través de sus páginas sus lectores podrán hacer un recorrido por platos emblemáticos de estas regiones del país: la costa del Pacífico, los Santanderes, Antioquia y el Eje Cafetero, el altiplano Cundiboyacense, el Caribe, la Amazonía y los Llanos Orientales, y finalmente Huila y Tolima.

El libro incluye unas noventa recetas de comidas tradicionales de cada una de las regiones, desarrolladas para la ocasión por cinco reconocidos chef, con comentarios y palabras introductorias de cinco personajes cercanos al mundo de las ollas y de los sartenes, y acompañadas con magníficas fotografías que permiten apreciar la riqueza visual y complejidad de las viandas y que casi permiten percibir los incitantes olores que invitan a consumirlos cuando arriben a la mesa.

Los ingredientes usados son aquellos que se producen en nuestros campos y que son fáciles de encontrar en visitas a las plazas de mercado o a los súper mercados de nuestras ciudades y poblaciones; en general se trata de preparaciones sencillas y emblemáticas de cada región, que no requieren de estudios avanzados de cocina para ser realizadas. Las recetas, que están bien explicadas, abarcan platos para todos los gustos y ocasiones: pasabocas, entradas, platos fuertes, postres, dulces y colaciones.

Además, y para mí, este libro y otros tradicionales de la cocina del país podrían servir como aliciente para aquellos cocineros que quieran usar su inventiva y creatividad en el desarrollo de lo que podría ser la nueva cocina colombiana, aquella que por ejemplo utilizaría como fundación las cocciones tradicionales para modificarlas o aderezarlas con nuevos elementos de producción local y que son aquellos que durante muchos años estuvieron encerrados en comunidades y regiones apartadas, dadas las características geográficas del país, y que en su momento sirvieron para fortalecer los sentimientos de regionalismo, a los que ahora se les ofrece la oportunidad de fusionarse entre sí, utilizando adicionalmente otros productos que hasta ahora han sido usados muy poco, me refiero a nuestra gran variedad de frutas, flores, hierbas y especies.

Estimo que contamos con todo lo necesario para llevar adelante un proyecto de estas características: cocineros de reconocida trayectoria, reconocidas escuelas de cocina, amplia variedad de productos de todos los climas, universidades y centros de investigación y pensamiento, consumidores deseosos de conocer y ensayar nuevas ofertas; tenemos pues ante nosotros una oportunidad única para ampliar y fortalecer nuestra oferta gastronómica, creando lo que sería la cocina colombiana de la modernidad, la del siglo 21.

Me da la sensación de que estamos a tiempo, investigadores independientes estiman que tanto el turismo externo como el interno tendrán un gran potencial de crecimiento en los próximos años; turismo que está todavía en ciernes respecto a lo que podría llegar a ser en unos pocos años. Si a esto le sumamos un país con una belleza natural difícil de encontrar en otros países, podríamos estar a las puertas de lo que han logrado hasta ahora algunos países hermanos, como Argentina y Perú.

Una versión simplificada de la ecuación ganadora es: gastronomía propia novedosa y de calidad + belleza natural respetada y bien conservada + buenos servicios + gente amable = Crecimiento económico y bienestar para los habitantes de Colombia, que en pocos años podría constituirse en un nuevo paraíso turístico.

¡El desafío es llevarlo adelante, yo quiero pensar que se logrará!

Comentarios y sugerencias serán bien recibidos en [email protected]
Buenos Aires, enero 2013-01-03
[email protected]

Adiós a los excesos

0

Claves para retomar un estilo de vida saludable en 2013

Los “pecados” cometidos en la alimentación durante diciembre y las primeras semanas de este mes todavía persisten en la consciencia de muchos, y se notan en sus figuras. Por ello, no es extraño que en estos días busquen maneras de consentir su organismo, librarse de unos cuantos kilos de más y trazarse como meta una existencia un poco más saludable.

El médico nutriólogo Sandro Gómez afirma que no existen fórmulas mágicas o misteriosas para conseguir dicho objetivo, simplemente adoptando ciertos hábitos se obtendrán resultados satisfactorios. Uno de ellos es el consumo de entre litro y medio y dos litros de agua (esto incluye las bebidas ingeridas con las comidas). Ir al baño a causa de esta ingesta considerable de líquido no es una mala señal, todo lo contrario, es una evidencia del buen funcionamiento de los riñones. La cantidad recomendada varía según el sexo, peso y tamaño de la persona, aclara Sandro.

Otras recomendaciones de este especialista en nutrición, son limitar los postres, a uno por semana y seguir obviamente una alimentación balanceada (con un consumo regular e importante, de verduras y frutas, que aportan fibra, vitaminas y minerales). Para mantener una buena condición física, el médico nutriólogo también aconseja mínimo 180 minutos de ejercicio a la semana, repartidos en sesiones de 30 o 40 minutos por día. Si la meta es quemar grasa, señala que se debe realizar un tiempo superior al mencionado, aunque este debe establecerse de manera progresiva y no realizar de un tirón esfuerzos físicos para los que no está preparado el cuerpo.

Un merecido descanso
El médico y columnista de Vivir en El Poblado, Jorge Vega, afirma que un modo de otorgarles un “descanso” a órganos vitales en el metabolismo como el hígado y los riñones, es una mono-dieta, compuesta por jugos, frutas, verduras hervidas, abundante agua y una sopa de avena y vegetales. La mono-dieta debe realizarse únicamente durante un día, una vez al mes o cada quincena. Entre las combinaciones de jugos que recomienda el doctor Vega están aquellos que mezclan piña con vegetales verdes como el apio, el perejil y el brócoli, y los de zanahoria con frutas como la papaya y la manzana.

Disciplina, fuerza de voluntad y evitar tentaciones difíciles de rechazar, son otros ingredientes necesarios para llevar este año un estilo de vida saludable.

Los buenos hábitos comienzan en casa

Los buenos hábitos comienzan en casa
Una nutrición saludable es un compromiso mayor de los padres con sus hijos

Enseñar a comer a los niños no es una tarea que sus padres deben tomar a la ligera, pues los hábitos alimentarios que estos adquieren en sus primeros años, pueden convertirse más adelante en fuertes obstáculos para nutrirse de una manera equilibrada.

El médico nutriólogo Sandro Gómez ha desarrollado desde hace dos años el blog Alimentado a Isabel, espacio en el que describe cómo ha generado en su hija hábitos saludables de nutrición. “A los cinco meses, edad en la cual Isabel inició la alimentación complementaria, comencé a darle, progresivamente, papillas de verduras, luego frutas y por último cereales. Hoy ella tiene dos años, come de todo y no tiene miedo a ensayar nuevos alimentos”.

De acuerdo con Sandro, al cumplir un año, es momento de sentar al niño a disfrutar los alimentos en la mesa, en familia, dándole la libertad para explorarlos y experimentar sus texturas, sabores, colores y olores. Para ello es bueno establecer unos horarios de comidas que permitan fijar en los pequeños ciertas rutinas. Así mismo, no es recomendable reemplazar líquidos por sólidos (teteros y suplementos), pues esto puede generar en los niños una futura aversión a este tipo de alimentos.

Al alimentar los niños es relevante tener presente que la persistencia y la paciencia son indispensables. Sandro indica que a un pequeño se le debe exponer unas veinte veces a cierto alimento, antes de concluir que definitivamente le disgusta. Los niños no nacen con el gusto aprendido; por lo cual aconseja no alterar los sabores naturales de los alimentos con sales o azúcares, ya que así aprenderán realmente a diferenciarlos. De igual modo, introducir nuevos alimentos junto a otros que ya ha manifestado agrado es un camino para facilitar su aceptación.

Es importante limitar el consumo de dulces y bebidas azucaradas a temprana edad, ya que dificulta al niño desarrollar una preferencia por alternativas más nutritivas y saludables, además de hacerlo más proclive a la obesidad.

Yólida Ramírez, psicóloga y magister en educación, resalta la importancia que tanto los padres como familiares y adultos cercanos a los pequeños sirvan como ejemplo y se preocupen por brindarles una alimentación equilibrada desde un comienzo. “En mi consultorio he tratado a un niño de cuatro años que no consume sino frunas, confites y otros alimentos y bebidas dulces. El origen del problema se encuentra en la alimentación que los padres le dieron en sus primeros años de vida. Enseñar hábitos no es fácil, pero es mucho más difícil modificarlos”.

Obligar a un niño a dejar “el plato limpio” no es un método aconsejable, pues, incluso en su adultez, puede llevarlo al sobrepeso, al estar condicionado a no dejar nada sin importar la cantidad servida. Es mejor brindarles a los niños porciones pequeñas y que pidan más sí así lo desean, que obligarlos a ingerir en muchas ocasiones cantidades desmedidas para la capacidad de sus estómagos.

De acuerdo con Sandro Gómez, “nuestros hijos no son transparentes como para permitirnos conocer hasta qué nivel se encuentra su estómago lleno, pero por su edad se puede determinar más o menos cuál es su capacidad gástrica. Al año es de unos 350 mililitros, a los dos años de 500 mililitros y de ahí en adelante va aumentando lentamente hasta llegar a 900 mililitros a los diez años de edad. Este valor de capacidad gástrica es en promedio y los valores expresados son los máximos. De ahí radica la importancia de no dar líquidos abundantes antes de las comidas, pues esto va a ocasionar saciedad y disminución de la ingesta de sólidos”.

La alimentación de los niños debe ser balanceada e incluir todos los grupos de alimentos para un crecimiento y desarrollo ideales. Una vez comienzan su época escolar, es complejo controlar la exposición del niño a ciertos alimentos (las loncheras de sus compañeros o alimentos comercializados en la cafetería, por ejemplo) pero esto puede mitigarse empacando en sus loncheras, productos naturales, saludables, fáciles de consumir y que no requieran calentarse. Sandro Gómez recomienda incluir en la lonchera “jugos naturales hechos en casa, agua y yogures; una a dos frutas picadas; galletas, wraps o sanduches, preparados con jamón, queso y atún; y snacks saludables como arroz soplado y galletas de queso. Los buenos hábitos comienzan en casa.

El rock según Jordi

El rock según Jordi
Fotografías, tarjetas de prensa, boletas de conciertos, publicaciones periodísticas y literarias hacen parte de Imágenes del Rock

En uno de los salones de la Sala de Arte de la Cámara de Comercio de Medellín suena un collage de clásicos del rock. Los visitantes, atraídos por el estridente sonido de las guitarras eléctricas y las voces de Steven Tyler, Prince, David Bowie, Bruce Springsteen, entre otros, se dirigen curiosos a ver de qué se trata.

Al entrar al lugar de la exposición observan que en los muros se exhiben retratos, entradas a los conciertos más legendarios de décadas pasadas, libros, novelas, pases de prensa, periódicos y revistas que hablan de la historia del rock. Una de las fotografías que más llama la atención es una del público en el estadio de Wembley, tomada en 1975 durante uno de los grandes festivales de rock en Inglaterra. “Los grandes conciertos de rock han sido el paradigma de la libertad, desde Woodstock hasta el presente. Miles de personas compartiendo un espacio, la música y su libertad”, dice la descripción del retrato.

El autor de esta exposición es Jordi Sierra i Fabra, escritor de origen catalán, residente en Medellín y fundador de la Fundación Taller de Letras, quien a lo largo de sus años de juventud persiguió la vida y conoció tras bambalinas la historia de diversas estrellas del rock. Uno de ellos fue Freddy Mercury, de Queen, a quien entrevistó en varias ocasiones en los setenta y ochenta.

“En mayo de 1970 dejé de trabajar en una empresa de construcción y abandoné los estudios para convertirme en director del semanario Disco Express, en Barcelona. Llevaba un año escribiendo como corresponsal en otra revista que había ayudado a fundar, El Gran Musical, pero seguía compaginándolo todo en una agitada vida de trabajo y estudios. A partir de ese momento, a los 22 años, comencé a vivir y a viajar con los grupos de rock, a entrevistarles, a participar de su mundo en cenas, fiestas y un largo etcétera”, narra Jordi su experiencia con la música rock y sus ídolos.

La exposición Imágenes del Rock, según describe el autor, es la invitación a un recorrido visual a través del ojo crítico de Jordi, quien ha sido uno de los cronistas de la contracultura musical con mayor relevancia en hispanoamérica en los últimos 40 años, gracias a la amplia bibliografía que ha escrito sobre el rock. La exhibición permanecerá abierta al público, de manera gratuita, hasta el próximo 23 de enero (Cámara de Comercio, sede centro, calle 53 número 45 – 77).

La percepción dice una cosa, los números otra

0

La percepción dice una cosa, los números otra
Habitantes de El Poblado sienten que hay motivos de preocupación en cuanto a la seguridad

Andrés Jaramillo* retiró dos millones de pesos de una entidad bancaria cercana al Carulla de las Palmas. Luego ingresó a este hipermercado en la zona de los puntos de pago. Su intención al hacer este movimiento era evitar ser presa de algún atracador que estuviera en las inmediaciones.

Se quedó allí leyendo una revista, luego salió, se montó a su carro y se fue. Según él, revisó si alguien lo estaba siguiendo, pero todo parecía estar bien.

Bajó por la carrera 35 (por el Centro Empresarial Prisma) para conectarse con la carrera 36, lugar en el que tiene su negocio. Al bajarse fue abordado por un hombre “bien vestido y con ropa de marca”, quien le dijo: ‘me permite le pregunto algo’, para luego sacar un arma y decir sin más ni más, ‘entrégueme el reloj (Rólex valorado en 15 millones de pesos) y las gafas’.

El delincuente abordó una moto (al parecer una Suzuki VStrom) de alguien que lo estaba esperando y se fue del lugar con lo hurtado. No se llevaron ni los dos millones ni su esfero ni su anillo, objetos de buena marca y costosos.

Él llamó a la policía y pidió acompañamiento para subir al hipermercado y pedir el video de la cámara de seguridad.

“Allá me mostraron un video en el que se ve a un hombre que habla por celular mientras pasa cerca de las cajas de pago. Se puede notar que cuando salgo él manda un mensaje y, como muchas veces ocurre, probablemente le tomó una foto a la placa, para advertirle a los compañeros que yo iba saliendo. El problema es que el video no se ve bien y en este sitio no hay cámaras externas. Yo me pregunto ¿cómo puede ser posible esto? Me preocupan estos atracos y parece que no se hace nada por evitar que ocurran. Además, según tengo entendido, ya van como siete hurtos de este tipo en los alrededores”, denuncia Andrés.

En su pedido a las autoridades Jaramillo expresa que “la vigilancia es demasiado esporádica y cuando las motos de policía pasan, lo hacen a una velocidad que no les permite hacer una verdadera labor de patrullaje”.

Aparte de denunciar extorsiones a su negocio, también pide que ubiquen aunque sea un par de carpas de policía para disuadir a los maleantes, tal y como se ha venido implementando en otras zonas de la comuna 14.

“Reducir la delincuencia a cero es imposible”
Ante la denuncia de este ciudadano, el comandante de la estación de policía El Poblado, Coronel Fabio Rojas, manifestó que seguirá el caso atentamente, pero explicó que los resultados operativos son buenos en seguridad.

“Lo primero es que reconocemos el modus operandi de estos delincuentes, pero en esta zona no hemos tenido otros reportes de hurtos como este. En cuanto a dos carpas a los dos extremos de la carrera 36 (cerca del ‘Codo de San Lorenzo’, donde ocurrieron los hechos), pues debo decir que no puedo instalarlas porque de esta manera tendría que hacerlo en cada esquina”.

Recomendaciones
No dar papaya es clave. Siempre se deben mantener los vidrios de los vehículos arriba y esconder de la vista cualquier objeto valioso en su interior. La policía también recomienda que la comunidad pida acompañamiento al retirar grandes cantidades de dinero, aunque, según expresa el Coronel Fabio Rojas, se presta el servicio incluso cuando el retiro es de 500 mil pesos. Si deciden no pedir el acompañamiento, la idea es que al menos no vayan solos. Por último, es importante saber cuándo usar ciertos elementos como joyas o relojes costosos, sobre todo cuando se estará en sitios en los que se puede ser presa fácil de la delincuencia.

No sobra reseñar estas medidas de seguridad que, aunque parezcan disco rayado, pueden hacer la diferencia y evitar un mal momento o una tragedia.
* Nombre cambiado a petición de la fuente.


Las cifras parecen dar un parte alentador
Aunque es evidente que la delincuencia acecha en muchos lugares, como ocurrió en la situación vivida por este comerciante, El Poblado está mostrando datos que dan cuenta de una mejoría en seguridad -al menos eso dicen los informes-, aunque la percepción ciudadana sigue siendo de inseguridad.
Los números de la estación Poblado muestran 960 capturas en el total del año pasado, 915 de ellas en flagrancia (puede incluir persecución). Este dato total ha permanecido muy constante: el promedio ha estado entre 850 y 900 en los últimos cinco años.
La cifra más ‘alentadora’ es la reducción en el número de homicidios. Mientras en la comuna 10 (Candelaria, centro de la ciudad) se registraron 140 en 2012, en El Poblado la cifra llegó a 7 (aproximadamente un homicidio cada dos meses).
En el comparativo de hurtos a personas en El Poblado se presentaron 15% menos. Fueron 286 en 2011 y 244 en 2012. En la comuna 10 (centro de la ciudad) los atracos en 2012 llegaron a 504.  
En cuanto a los lugares que representan mayor peligro para los atracos, están las inmediaciones de las  vías de salida y entrada a El Poblado. Estos individuos las eligen para que les sea más fácil la huida. Entre otras, están la glorieta de la 10 (en la avenida Las Vegas), las Transversales, la Avenida El Poblado y Las Palmas.


Los cuadrantes de seguridad en El Poblado

Cuadrante 1: Barrio Colombia y Villa Carlota. Teléfono: 312 722 2130
Cuadrante 2: Castropol. Teléfono: 312 721 5038
Cuadrante 3: Manila y Astorga. Teléfono: 312 721 2474
Cuadrante 4: B. El Poblado, Las Lomas 1, Lalinde y La Florida. Teléfono: 312 712 7782
Cuadrante 5: Las Lomas 2, Altos de El Poblado y El Tesoro. Teléfono: 312 722 5254
Cuadrante 6: La Aguacatala y Santa María de Los Ángeles. Teléfono: 312 716 8822
Cuadrante 7: Alejandría, Los Balsos 2, El Castillo, El Diamante 2. Teléfono: 312 716 7484
Cuadrante 8: Los Naranjos, Los Balsos 1, San Lucas. Teléfono: 312 716 5018
Cuadrante 9: Barrio Patio Bonito. Teléfono: 312 715 2631
Estación Poblado (atiende todos los cuadrantes): Teléfono: 312 55 67.

 

Palmas a la deriva

Palmas a la deriva

/ Juan Carlos Franco
Como sabemos, pasarán muchos años antes de que podamos ir al aeropuerto por el ya célebre Túnel de Oriente. Al menos cinco, y eso suponiendo que en 2013 se puedan desenredar los estudios y licencias…

Pero que nadie se haga muchas ilusiones, pues el túnel, al menos en sus primeros años, será una mediocre obra tercermundista: 8 kilómetros de calzada simple, sin posibilidad de sobrepaso. Como el túnel de Occidente, pero el doble de largo.
Después de un par de pasos por el túnel haciendo fila paciente detrás de un lento camión, la gente que vaya y venga del aeropuerto -normalmente de afán- pronto concluirá que por ahí no va a llegar más rápido que por la vía actual de Las Palmas. Sin mencionar el peaje, que sin duda sería mucho más costoso, tal vez el doble.

Además, con los paisajes que tiene la vía actual entre Indiana y Sajonia –sin duda entre los más bellos de Antioquia–, más la posibilidad de sobrepaso, no serán muchos los que prefieran meterse al hueco oscuro a hacer fila. ¡O sea, por fuera más bonito, más barato y, tal vez más rápido!

La obra solo tendrá impacto importante cuando pongan en operación el segundo túnel. En otras palabras, desde el primer momento deberían abrir los dos. Es cuestión de sentido común.

Pero volvamos al presente y a la realidad de la vía actual. Como cualquiera que haya pasado por ahí recientemente puede atestiguar, el aumento de tráfico es impresionante. Tanto en la subida por la doble calzada, como en la bajada hasta el aeropuerto.

Basta ver las frecuentes y muy largas filas que se forman en el peaje, tanto para ir y volver. Peaje que, a propósito, será trasladado este año.

No hemos visto diseños ni conocemos con precisión la ubicación definitiva, pero cabe esperar que, en alarde de sensatez y para evitar trancones futuros, la Gobernación defina que tendrá 3 carriles en cada sentido. Y no 2, como hoy. Caramba, y que uno de los carriles sea para cruce electrónico. ¡Planeación y ambición allí, por favor!

Hasta la fecha el control de esta vía es mínimo. Si bien es cierto que en las curvas más peligrosas instalaron separadores flexibles para moderar velocidad, por ningún lado se ve autoridad. Cualquiera puede ir a la velocidad que le da la gana. Y ni se diga en la doble calzada, arriba de Los Balsos, tramo que también corresponde a la Gobernación.

Las frecuentes, inútiles y bastante torpes señales de límite 30 Km/h son una burla a la inteligencia de los conductores. La gente sube y baja a 100 y todo tan normal.
Y muchos, muchísimos, van por toda la izquierda a 40, bloqueando tráfico. Y jamás pasa nada.

Bueno, y qué tal los vehículos acompañantes de ciclistas, a 10 Km/h y ocupando todo el carril derecho. ¿No es un despropósito y un riesgo enorme para todos (ciclistas, acompañantes y otros vehículos) seguir permitiendo esta actividad en una vía de tan alta circulación y velocidad?

Si vamos a usar intensivamente esta vía por los próximos cinco años, si esta seguirá siendo la entrada y salida principal de Medellín hacia el aeropuerto, hacia el Oriente Cercano y hacia el Magdalena y Bogotá, es urgente que haya un manejo más profesional y coherente.

¿Querrá nuestra Gobernación ejercer este liderazgo? ¿Será capaz? ¿Sabrá del tema?
[email protected]

Tacos y más tacos

0

Tacos y más tacos
Lo que se pensó como parte de la solución a la movilidad de El Poblado, terminó generando un caos vehicular

La recién construida rotonda en la calle 9 Sur, entre carreras 42 A y 43 A, entregada a finales de 2012, que pretendía mejorar la movilidad y la seguridad vial de la doble calzada Los Balsos, ha dejado un impacto contrario al esperado, según lo afirman algunos conductores de esta importante vía de la comuna 14.

Lo que inicialmente fue pensado como una alternativa para descongestionar el tráfico vehicular generado al frente del Centro Comercial Santafé, ha traído más inconvenientes de lo esperado. Todo esto quedó en evidencia, precisamente, durante la pasada temporada navideña, pues se presentaron largos embotellamientos en este sector.

Juan Jaramillo, residente de la comuna 14 y usuario de esta vía, expresa su inconformidad ante los tacos que actualmente se forman entre Los González y Los Balsos, ya que a la salida del Centro Comercial se represan decenas de carros en la rotonda nueva. “Se juntan seis carriles en uno: los que van a subir para luego bajar por Los Balsos o a coger la 43 A, los que bajan por Los Balsos y los que salen por la 42 de Santafé o de Los González”, señala.

Según la Vicealcaldía de Infraestructura, Hábitat y Movilidad, la construcción de la rotonda obedeció a la solicitud de los mismos ciudadanos, quienes pidieron tener mejores vías de acceso a Los Balsos y al centro comercial Santafé, que desde su construcción ha generado un aumento en el tráfico vehicular en la zona.

Según las cifras del Plan de Desarrollo de la comuna 14, se estima que el 94,83 por ciento de los hogares tiene vehículo propio, es decir, que existen cerca de 54.400 carros particulares que circulan diariamente por las vías de El Poblado, sin contar con el transporte público y los vehículos de otras comunas y municipios que usan las vías para ir a sus destinos.

Ante la inconformidad ciudadana por los continuos embotellamientos y la falta de planeación, la Secretaría de Movilidad expresa que están recibiendo las observaciones de los habitantes para estudiarlas y garantizar el mejoramiento de la movilidad en estas zonas de la ciudad. “La rotonda se construyó para solucionar un problema técnico de paso, ya que había un riesgo alto para las personas y vehículos que querían tomar Los Balsos. Hemos tenido dificultades por la demanda de los centros comerciales y eso ha generado conflicto de tráfico. Estamos estudiando la posibilidad de sortear ese paso dejándolo abierto en ciertas horas del día. Estamos mirando el comportamiento de la ciudad en este principio de año para tomar decisiones”, señala Ómar Hoyos, secretario de Movilidad.

Proponen cambios en movilidad

0

Proponen cambios en movilidad
El alto flujo vehicular continúa generando congestiones en algunos tramos del puente de la 4 Sur. Residentes y usuarios piden solución

Nueve meses después de la inauguración del puente de la 4 Sur, una de las obras de mayor impacto en la infraestructura física de Medellín, la movilidad no parece mejorar para la comunidad de El Poblado. Según los habituales usuarios de esta vía, el alto flujo vehicular continúa generando congestiones en varios puntos del trayecto, principalmente en dirección occidente-oriente, es decir, desde el sector de Guayabal hacía El Poblado, donde se represan decenas de vehículos, sobre todo en horas pico y durante la antesala del pico y placa.

Jesús Arango Restrepo, habitante de El Poblado, quien diariamente transita por el puente de la 4 Sur para llegar a su casa en el conjunto residencial Casteloblanco, ubicado en la calle 7 Sur, expresa su inconformidad por lo que se suponía iba a ser una solución para el caos vehicular de la comuna 14.

“El principal problema que he observado es en la llegada del puente de la 4 Sur a la carrera 43C y desde este punto hasta la Avenida El Poblado, en sentido occidente-oriente, pues a esta vía, de tan solo dos carriles, confluyen tres vías: los que vienen del puente de la 4 Sur y van hacia los González; los que bajan por los Balsos y se dirigen a Patio Bonito, y quienes vienen de Patio Bonito y van hacia los González”, señala el residente.

“Adicionalmente, a la altura del restaurante J&C Delicias, en la carrera 43AA, obligaron a quienes venían por la Avenida El Poblado en sentido norte-sur, y van a subir por Alejandría, a ingresar a esta vía, que ya está bien congestionada; o quienes vienen del occidente por el puente de la 4 Sur y requieren ingresar a los parqueaderos de oficinas de los edificios 43 Avenida, Cima o Formacol. A estos les toca dar toda la vuelta por la carrera 42 y bajar por Alejandría”, concluye.

Ante tal problemática, residentes y usuarios piden a las autoridades municipales alternativas para mejorar la movilidad de la zona, en sectores críticos donde se presentan los embotellamientos. Una de las propuestas de los usuarios es que “la carrera 43C debe ser unidireccional, en sentido sur- norte, desde la ‘ye’ que hay bajando por Los Balsos, para tomar el puente de la 4 Sur, hasta la ‘ye’ que hay antes de la calle 2 Sur, que sirve a quienes vienen de Patio Bonito, en sentido norte-sur, para tomar el puente de la 4 Sur. A partir de este punto, hacia el norte, sería nuevamente bidireccional la carrera 43C”.

Por su parte, el Secretario de Movilidad, Ómar Hoyos, manifiesta que se están estudiando alternativas para mejorar la movilidad, ya que la conexión del puente de la 4 Sur con la Avenida El Poblado se dejó sin solución. “Hay un grupo de trabajo exclusivo para tratar los temas de movilidad de El Poblado. Parte de los conflictos generados en la movilidad del puente de la 4 Sur se deben a que faltan las obras complementarias contempladas dentro del proyecto de Valorización, muchas de las cuales se iniciarán este año. Con esto esperamos superar los problemas de tráfico en este sector”.

¿Cómo te quieres sentir en 2013?

¿Cómo te quieres sentir en 2013?
/ Carolina Zuleta

El inicio de un nuevo año nos da la oportunidad de hacer una pausa en el camino, analizar cómo estamos y si vamos en el camino que deseamos. Creo que este es un gran momento para revisar metas que nos hemos puesto y crear unas nuevas. Alcanzar sueños construye nuestra autoestima, nos demuestra que somos capaces de crear valor y crecer para ser mejores personas. Uno de los cinco elementos que la psicología positiva definió como fundamental para tener una vida plena es precisamente el logro de metas.

Como se ha vuelto costumbre para mí, en un reciente fin de semana, puse mi música favorita, me serví una taza de café y me senté con marcadores y papeles de colores a escribir todos mis sueños para el 2013. Como he aprendido en coaching, lo primero que hice fue escribir las distintas áreas que debo considerar – espiritualidad, amistades, familia, romance, salud física, apariencia, dinero, carrera, educación, comunidad, hábitos, diversión y espacio personal (casa, oficina, etc). Luego empecé a escribir qué quería en cada área. Para mí, soñar es algo que me encanta y que me queda fácil, así que una hora más tarde tenía una lista de sueños y metas larguísima. Todo lo que escribí me emociona, me hace feliz y me llena de energía, sin embargo, al leer la lista sentí que se me hacía un hueco en el estómago ¡Eran demasiadas cosas! Me sentí abrumada de solo pensar todo lo que tenía que hacer para poder lograr lo que deseaba.

Por la noche, como es mi rutina, me senté a meditar. Por lo general cuando estoy meditando paso por una etapa donde no puedo parar de pensar. Continúo intentando dejar pasar los pensamientos y enfocarme en mi respiración, y de un momento a otro me invade una paz profunda. Me siento calmada, tranquila, completamente feliz y en ese momento en mi corazón sé que todo va a estar bien. Esa noche mientras sentía esa plenitud pensé en mi lista de metas y concluí que realmente lo que yo quiero es sentirme de esta manera permanentemente, todo lo demás es secundario.

Además, la experiencia me ha demostrado que cuando tengo paz interior y estoy viviendo en el amor, todos los sueños se alinean, conozco a las personas que me van a ayudar, aparecen los recursos que necesito y además disfruto y me gozo más la vida.

La mayoría de teorías que leo sobre cómo crear metas, fallan en hablar de la importancia de los sentimientos. Sin embargo, al final del día lo que queremos es sentirnos de una manera específica: algunos queremos sentir libertad, otros felicidad y otros paz. Así que te invito a que sueñes en grande. Escribe tus metas y además escribe cómo te quieres sentir. Y recuerda, lo más importante, la felicidad está dentro de ti, mientras la busques en cosas externas a ti, la estarás buscando durante toda la vida.
[email protected]

Manos a la obra

0

“Manos a la obra”
Diez obras del proyecto de Valorización iniciarán en 2013 y se sumarán a los cuatro tramos entregados


Prolongación Los Parra, Patio Bonito. Foto cortesía Fonval

En 2013 la Alcaldía de Medellín, a través del Fondo de Valorización de El Poblado – Fonval – tiene programada la intervención física de diez obras que están contempladas dentro del Proyecto de Valorización, lo que permitirá, según las autoridades municipales, continuar con el mejoramiento de la movilidad y el espacio público de la comuna 14.

Según estima la administración municipal, con las obras del Proyecto Valorización El Poblado, se generarán cerca de 35.827 metros lineales nuevos de vía carril construidos, que se le sumarán a los 15.784 metros lineales de vía carril mejorados. Además, se entregarán a la comunidad 244.021 metros cuadrados de espacio público mejorado.

En cuanto al pago de valorización, el Fonval asegura que 57 mil sería el número de propietarios y poseedores entre los que se distribuiría el Proyecto Valorización. La Alcaldía aclara que actualmente está en estudio un eventual ajuste a la zona de citación. Según las proyecciones, el 80 por ciento de los propietarios pagará menos de cinco millones de pesos.

“El ajuste de la zona de citación ya se contrató y se está trabajando en el estudio. Esperamos, como ha sido acordado, entregar en junio los resultados al Concejo de Medellín. El propósito de nosotros es comenzar el proceso de licitación este mismo mes y la ejecución de tres de las diez obras, como el tramo de Astorga, la lateral norte de la quebrada Zúñiga y la prolongación de la loma de Los Parra”, dice Luis Alberto García, director del Fonval.


Transversal Inferior con Los Balsos. Foto cortesía Fonval

En el tema de compensación ambiental, que ha sido una de las mayores preocupaciones de la comunidad de El Poblado, las autoridades señalan que por cada tala de árbol que se requiera para la ejecución del proyecto, se realizarán entre tres y cinco nuevas siembras.

Durante 2012 fueron entregadas las cuatro primeras obras del paquete de Valorización, solucionando en parte la movilidad de la comuna 14. La última de ellas fue el puente sobre la quebrada La Presidenta, en la carrera 43C entre la calle 7 y transversal 6, entregada a la comunidad el pasado mes de noviembre con un costo de 1.574 millones de pesos. Esta sirve de conexión de los barrios Astorga y Patio Bonito. Las otras obras entregadas fueron la conexión de la carrera 43C-D, entre calles 11 y 11A (Barrio Manila); el empalme vía Linares a la calle 10; y la vía Linares entre las lomas de Los Balsos y Los González.

Además de la ejecución de estas obras, otros proyectos han sido contemplados dentro del paquete de Valorización, propuestos dentro del Plan de Desarrollo 2012 -2015. A las 20 obras iniciales se le suman la red de andenes para El Poblado, el paso a desnivel de la carretera El Tesoro con la vía Linares (carrera 29 D), la ampliación de la doble calzada de la loma de Los Parra, entre la Avenida El Poblado y la Avenida 34; el paso a desnivel de la Transversal Inferior con la loma de Los González; el paso a desnivel de la Transversal Inferior con la loma de Los Parra; y la peatonalización de las vías aledañas al Parque Lleras. Este último aún en estudio.


Obras para 2013
1. Conexión de la carrera 43 C entre las calles 8 y 9 (barrio Astorga)
2. Paso a desnivel Transversal Inferior con Loma Los Balsos
3. Prolongación loma de Los Parra (Av. El Poblado – Las Vegas) primer tramo
4. Lateral Norte Quebrada Zúñiga (tramo Sistema Vial del Río)
5. Paso a desnivel Transversal Superior con loma Los Balsos
6. Paso a desnivel Transversal Superior con carretera El Tesoro
7. Paso a desnivel Transversal Inferior con calle 10
8. Prolongación de la loma de Los Balsos hasta el sector de ISA
9. Mejoramiento loma Los Mangos
10. Ampliación Avenida 34 en doble calzada – El Poblado (tramo 1)

Hay que romper el círculo vicioso

0

Hay que romper el círculo vicioso
La seguridad, además de cierto grado de prevención personal, requiere compromiso ciudadano para enfrentar la acción de los delincuentes

La sensación de seguridad se ve afectada por el diario recibir noticias o ser testigos directos de hechos delincuenciales. El estado de alerta es inherente al ser humano; sin embargo, en un entorno que percibimos como inseguro, nos sentimos temerosos ante el más mínimo movimiento extraño y las actividades normales de la vida – desplazarse, ir a un cine, salir a un restaurante, conducir de noche, por ejemplo, implican un cierto atreverse a correr un riesgo. Si hemos sido víctimas de una fechoría, con mayor razón el miedo va a ser nuestro compañero de todos los días por más o menos tiempo.

Cuando ocurre un delito, un atraco por ejemplo, una reacción común es limitarse a despotricar de las autoridades. Pero todos tenemos un rol en el cuidado de la seguridad. Es necesario, en primer lugar, que cada persona sea consciente de su papel, en lo referente a minimizar el riesgo. Esto es, todos tenemos algún grado de responsabilidad en la prevención del delito, no exponiéndonos innecesariamente. Pero la participación del ciudadano debe ir más allá. No sólo se trata de prevenirnos, también es necesario desincentivar la acción de los delincuentes. Uno de los mecanismos para lograrlo es la denuncia. Es triste saber que en el 2012 en El Poblado sólo se recibieron 21 denuncias por delitos (14 por hurto). Esto contrasta con el dato policial: 915 capturas en flagrancia el año pasado; esta última cifra deja muy claro el interés que tiene El Poblado para el hampa. Es fácil imaginar cuántos cacos logran su cometido cada año, es decir, que cometieron el delito y quedaron en la impunidad.

Estos números tienen diferentes lecturas. Por un lado, es evidente que el poco interés por denunciar tiene que ver, en gran parte, con la falta de confianza en las autoridades. La realidad es que, mediante argucias legales, muchos de estos individuos no son ni siquiera juzgados, mucho menos condenados.

El ciudadano siente, además, que es engorroso, y hasta peligroso seguir adelante con estas acciones hasta que el malhechor pague por su fechoría. No cualquiera está dispuesto a verse cara a cara con estos personajes en una diligencia judicial. Si a una persona le roban un celular, simplemente deja las cosas así.

Es un gran error pensar que la desidia es un buen camino para lograr la seguridad. El problema es que los delincuentes saben todo esto y se sienten con las garantías suficientes para obtener dividendos de cualquier posición asumida por las víctimas. Entonces, seguirán buscando su botín.

Empieza el año y Vivir en El Poblado invita a utilizar el sentido común para minimizar los riesgos y decidirnos por la denuncia. Es un camino para salir de esa costumbre que hace que el ciudadano delegue toda su responsabilidad en las autoridades y que ellas tengan el argumento de la falta de denuncia ciudadana por los delitos de que es víctima. Sería una buena estrategia para romper un círculo vicioso que parece nunca acabar.

Hay que romper el círculo vicioso

0

Hay que romper el círculo vicioso
La seguridad, además de cierto grado de prevención personal, requiere compromiso ciudadano para enfrentar la acción de los delincuentes

La sensación de seguridad se ve afectada por el diario recibir noticias o ser testigos directos de hechos delincuenciales. El estado de alerta es inherente al ser humano; sin embargo, en un entorno que percibimos como inseguro, nos sentimos temerosos ante el más mínimo movimiento extraño y las actividades normales de la vida – desplazarse, ir a un cine, salir a un restaurante, conducir de noche, por ejemplo, implican un cierto atreverse a correr un riesgo. Si hemos sido víctimas de una fechoría, con mayor razón el miedo va a ser nuestro compañero de todos los días por más o menos tiempo.

Cuando ocurre un delito, un atraco por ejemplo, una reacción común es limitarse a despotricar de las autoridades. Pero todos tenemos un rol en el cuidado de la seguridad. Es necesario, en primer lugar, que cada persona sea consciente de su papel, en lo referente a minimizar el riesgo. Esto es, todos tenemos algún grado de responsabilidad en la prevención del delito, no exponiéndonos innecesariamente. Pero la participación del ciudadano debe ir más allá. No sólo se trata de prevenirnos, también es necesario desincentivar la acción de los delincuentes. Uno de los mecanismos para lograrlo es la denuncia. Es triste saber que en el 2012 en El Poblado sólo se recibieron 21 denuncias por delitos (14 por hurto). Esto contrasta con el dato policial: 915 capturas en flagrancia el año pasado; esta última cifra deja muy claro el interés que tiene El Poblado para el hampa. Es fácil imaginar cuántos cacos logran su cometido cada año, es decir, que cometieron el delito y quedaron en la impunidad.

Estos números tienen diferentes lecturas. Por un lado, es evidente que el poco interés por denunciar tiene que ver, en gran parte, con la falta de confianza en las autoridades. La realidad es que, mediante argucias legales, muchos de estos individuos no son ni siquiera juzgados, mucho menos condenados.

El ciudadano siente, además, que es engorroso, y hasta peligroso seguir adelante con estas acciones hasta que el malhechor pague por su fechoría. No cualquiera está dispuesto a verse cara a cara con estos personajes en una diligencia judicial. Si a una persona le roban un celular, simplemente deja las cosas así.

Es un gran error pensar que la desidia es un buen camino para lograr la seguridad. El problema es que los delincuentes saben todo esto y se sienten con las garantías suficientes para obtener dividendos de cualquier posición asumida por las víctimas. Entonces, seguirán buscando su botín.

Empieza el año y Vivir en El Poblado invita a utilizar el sentido común para minimizar los riesgos y decidirnos por la denuncia. Es un camino para salir de esa costumbre que hace que el ciudadano delegue toda su responsabilidad en las autoridades y que ellas tengan el argumento de la falta de denuncia ciudadana por los delitos de que es víctima. Sería una buena estrategia para romper un círculo vicioso que parece nunca acabar.

Hay que romper el círculo vicioso

0

Hay que romper el círculo vicioso
La seguridad, además de cierto grado de prevención personal, requiere compromiso ciudadano para enfrentar la acción de los delincuentes

La sensación de seguridad se ve afectada por el diario recibir noticias o ser testigos directos de hechos delincuenciales. El estado de alerta es inherente al ser humano; sin embargo, en un entorno que percibimos como inseguro, nos sentimos temerosos ante el más mínimo movimiento extraño y las actividades normales de la vida – desplazarse, ir a un cine, salir a un restaurante, conducir de noche, por ejemplo, implican un cierto atreverse a correr un riesgo. Si hemos sido víctimas de una fechoría, con mayor razón el miedo va a ser nuestro compañero de todos los días por más o menos tiempo.

Cuando ocurre un delito, un atraco por ejemplo, una reacción común es limitarse a despotricar de las autoridades. Pero todos tenemos un rol en el cuidado de la seguridad. Es necesario, en primer lugar, que cada persona sea consciente de su papel, en lo referente a minimizar el riesgo. Esto es, todos tenemos algún grado de responsabilidad en la prevención del delito, no exponiéndonos innecesariamente. Pero la participación del ciudadano debe ir más allá. No sólo se trata de prevenirnos, también es necesario desincentivar la acción de los delincuentes. Uno de los mecanismos para lograrlo es la denuncia. Es triste saber que en el 2012 en El Poblado sólo se recibieron 21 denuncias por delitos (14 por hurto). Esto contrasta con el dato policial: 915 capturas en flagrancia el año pasado; esta última cifra deja muy claro el interés que tiene El Poblado para el hampa. Es fácil imaginar cuántos cacos logran su cometido cada año, es decir, que cometieron el delito y quedaron en la impunidad.

Estos números tienen diferentes lecturas. Por un lado, es evidente que el poco interés por denunciar tiene que ver, en gran parte, con la falta de confianza en las autoridades. La realidad es que, mediante argucias legales, muchos de estos individuos no son ni siquiera juzgados, mucho menos condenados.

El ciudadano siente, además, que es engorroso, y hasta peligroso seguir adelante con estas acciones hasta que el malhechor pague por su fechoría. No cualquiera está dispuesto a verse cara a cara con estos personajes en una diligencia judicial. Si a una persona le roban un celular, simplemente deja las cosas así.

Es un gran error pensar que la desidia es un buen camino para lograr la seguridad. El problema es que los delincuentes saben todo esto y se sienten con las garantías suficientes para obtener dividendos de cualquier posición asumida por las víctimas. Entonces, seguirán buscando su botín.

Empieza el año y Vivir en El Poblado invita a utilizar el sentido común para minimizar los riesgos y decidirnos por la denuncia. Es un camino para salir de esa costumbre que hace que el ciudadano delegue toda su responsabilidad en las autoridades y que ellas tengan el argumento de la falta de denuncia ciudadana por los delitos de que es víctima. Sería una buena estrategia para romper un círculo vicioso que parece nunca acabar.

La Sinfónica de Eafit inicia temporada

0

La Sinfónica de Eafit inicia temporada
Concierto en homenaje a Rafael Vega Bustamante

El jueves 7 de febrero a las 7:30 p.m., en el Auditorio Fundadores, la Orquesta Sinfónica de Eafit realizará su primer concierto del año. El programa está integrado por tres obras destacadas por su carácter innovador.

La primera de ellas es Fuga y Misterio, una progresista y atrevida creación musical del legendario compositor argentino Astor Piazzola. El programa continúa con el Concierto No. 2 para violín y orquesta en mi menor, Op. 64. de Félix Mendelsshon, obra que resulta novedosa e icónica como un resultado de la depuración equilibrada del estilo y la tradición. Para su interpretación se contará con la participación del solista catalán Joseph Colomé.

La Sinfonía No.º 3 “La Heroica”en mi bemol mayor, Op. 55, de Ludwig Van Beethoven cierra el concierto, sinfonía que muestra una faceta diferente de la innovación llevada a la música: aunque fue una creación de vanguardia que marcó una ruptura y podría describirse como revolucionaria en muchos niveles, pronto fue asimilada como un modelo.

Este concierto es concebido como un homenaje al recordado gestor cultural y crítico musical Rafael Vega Bustamente, quien falleció el año pasado. Para conocer el valor de las boletas y obtener mayor información del concierto se puede comunicar al 261 9500 ext. 9656 y 9732.

Las claves de la nutrición y una vida saludable

0

Las claves de la nutrición y una vida saludable

Comienza un nuevo año de los conversatorios de Vivir en El Poblado y Santafé Medellín. En estos espacios quincenales distinguidos expertos de diferentes campos conversan en forma amena con el escritor Esteban Carlos Mejía sobre temas útiles en nuestra vida cotidiana.

 

El primer conversatorio de esta temporada 2013 será Las cuatro claves de la nutrición. El invitado será el médico nutriólogo Sandro Gómez Mauquet. Este especialista en Nutrición Clínica Enteral y Parenteral de la Universidad Nacional Autónoma de México, abordará los mitos, las verdades y acciones para alcanzar una alimentación equilibrada y llevar una vida saludable.
Este evento, recomendado para todos aquellos que desean deshacerse de esos kilos de más y limpiar el cuerpo de los excesos cometidos en vacaciones, se llevará a cabo el jueves 7 de febrero de 6:30 p.m. a 8:00 p.m. en el primer piso del Centro Comercial Santafé Medellín. La entrada es libre y no requiere inscripción. Informes en el 268 2758.

Centro Infantil Rotario de La Visitación:

0

Centro Infantil Rotario de La Visitación:
Abiertas matrículas gratuitas

Hasta completar los cupos, estarán abiertas las matrículas gratuitas en el Centro Infantil Rotario de La Visitación, dirigidas a niños de 2 a 4 años que pertenezcan al Sisbén III, categorías I y II. Allí, a partir del 4 de febrero, de lunes a viernes, en una jornada de ocho horas (de 8 a.m. a 4 p.m.), los pequeños recibirán una atención integral, que incluye acompañamiento y alimentación (desayuno, almuerzo y refrigerio). Esta labor es realizada por la Fundación Solidaria La Visitación, bajo los lineamentos de Buen Comienzo, programa de la Alcaldía de Medellín que brinda educación inicial, salud, nutrición, recreación y protección a niños menores de cinco años, en 16 comunas y cinco corregimientos, por medio de sedes de atención.

La Fundación Solidaria La Visitación es una organización sin ánimo de lucro que durante 23 años ha desarrollado programas de intervención en distintas comunas de la ciudad, ofreciendo atención integral y alternativas educativas, recreativas y culturales a niños, jóvenes y familias de estratos bajos.

Para obtener mayor información sobre los requisitos para acceder a las matrículas o para apoyar a la Fundación Solidaria La Visitación, comuníquese en los siguientes teléfonos: 268 9191- 266 8938. El Centro Infantil está en la calle 5 Sur No. 30-72, contiguo a la parroquia de La Visitación.

Juegos de alcoba

0

Juegos de alcoba

Por Gustavo Arango
“De caoba, mi señora”. Había comprendido que debía hablarle a ella. El hombre se escondía detrás de las gafas, el bigote y un balbuceo que sería igualmente indiscernible si uno se acercara para oírlo.
Pero ella lo oía, entendía los murmullos de ese hombre que podía ser su padre, que seguramente era su amante, a juzgar por las constantes miradas a la calle, el inocultable temor a ser visto allí con ella. Era un buen observador. Años de vender artículos para el hogar le habían dado la suspicacia para detectar la más leve huella de infidelidad.
“Pregunta si es resistente”, tradujo ella con una sonrisa, quizá imaginando el decorado general de su apartamento, contenta de estar protagonizando una escena como ésa.
“Usted podría organizar en esa cama una fiesta de elefantes. El ajuste de las piezas está cuidadosamente revisado”.

“Una fiesta de elefantes”, repitió ella divertida. Al hombre se le enderezó el bigote. Conocía esos gestos: la venta era un hecho.

Por política del almacén, los trámites eran breves. No debían permitir titubeos en los clientes. La pareja se despidió con palabras agradecidas de ella y el mismo monótono y lejano balbuceo del hombre.

Pronto sería mediodía. En un día normal, iría a almorzar al restaurante de la esquina y volvería de inmediato a trabajar. Pero era su día de suerte. Había hecho en la mañana las ventas que con dificultad hacía en una semana. Se dejó tentar por la idea de pedir la tarde libre. Quería sorprender a su mujer, dedicarle más tiempo.

Su jefe titubeó con la propuesta. Temía que fuera un desperdicio interrumpir la buena racha, pero al final accedió. Se sentía generoso y pensó que quizá era el momento de congraciarse un poco con su mejor vendedor.

A la hora del almuerzo salió con sus compañeros. Le palmeaban la espalda, lo felicitaban por su ingenio y le auguraban muchos éxitos. Alguien prometió usar la hipérbole de los elefantes. En la esquina decidió no comer. Se despidió de todos y caminó sin prisa, tratando de imaginar los éxitos que le auguraban.
No era mucho dinero, nunca lo había tenido, no le interesaba demasiado y no sabría qué hacer con él. En algún momento lo habían convencido de que tener dinero en exceso era un riesgo moral. Tampoco eran lujos. A lo sumo, la realización de un sueño de toda la vida: que tardes como ésa lo encontraran en lugares extraños. El único éxito que podía interesarle era poder ver lo que había detrás de palabras como Roma, Estambul o Sri Lanka.

Cuando llegó a su casa, abrió la puerta con sigilo. Quería sorprenderla, darle una sorpresa, invitarla al cine o a comer helado. La buscó en la cocina, pero no estaba. Desde la sala escuchó los crujidos en el cuarto. Pensó que ya era hora de cambiar el viejo juego de alcoba, que ella debía dormir; quiso creer que tenía un sueño intranquilo.

Se preguntó con qué fin habían ajustado la puerta, qué endeble conciencia querían cegar. Quiso grabarse cada detalle de la escena, cada ruido, cada gota de sudor. Los veía atropellarse, uno contra otro, con algo como miedo o desesperación, mientras descartaba una a una las actitudes aprendidas.

No cerró la puerta de la calle. Unos pasos después, otros ruidos vinieron a ocuparlo. Tomó un bus en la esquina y, después, se bajó y tomó otro y, mucho después, tomó otro y siguió hasta que el mundo tenía otro rostro.

Un baño público

0

Un baño público

Por Memo Ánjel
El hombre chico entró al sanitario público. Estaba limpio y olía a fresco. Nada mal: dos orinales, dos sanitarios, un lavamanos amplio, una fuente de jabón, una secadora eléctrica de manos, un dispensador de papel. Si hubiera estado en un campo de concentración, se habría comido el papel. Pero no, el hombre chico estaba satisfecho. Se acercó al orinal que le pareció menos bajo, se empinó y disparó un chorro potente y amarillo. Orinó sin problemas. Y mientras lo hacía, imaginó otros sanitarios. Sintió el olor a desinfectante y recordó los baños públicos de las películas. En muchos de ellos habían matado gente: con puñales, con bolsas de plástico, con tiras de seda, con disparos de ametralladoras. Miró a su alrededor y todo seguía tranquilo. Leyó un aviso: “Acércate más. Salpica menos”. No aceptó la invitación del aviso. Miró con cuidado a su alrededor. Podría suceder algo, como en el viejo Chicago, cuando la prohibición de vender licores tenía la ciudad vuelta un sumario. Terminó de orinar y fue a mirarse al espejo. Estaba tranquilo y pensó que en lugar de ese aviso podrían colocar, en el centro del sanitario, una calcomanía con una mosca para que todos los hombres le apuntaran. Cuando el hombre chico era niño y orinaba en el campo, buscaba un grillo, una hormiga, algo que se moviera para darle con el chorro. Sonrió y se dijo, hoy es lunes.

El sábado había hecho el amor con intensidad y en la mañana del domingo había desayunado bien. Fruta, huevo con pimienta, un buen café. Incluso le gustó el contenido del periódico y la mujer que tenía al lado. Así que el hecho de orinar ese lunes solo fue eso, orinar, sin pensar porquerías. Y había quedado bien, con todos los canales vacíos. Incluso sintió que había crecido un poco. La cama del sábado, en la que se había mostrado como un vikingo cerrero, era amplia. Y la mujer que estuvo en ella, una reina de cabaret. La pasó bien y durmió como si le hubieran pegado un tiro en la frente. Todo se le puso oscuro y amplio.

En la mañana del domingo, recién bañado, mordió unos trozos de pan del sábado. Antes de almorzar hizo el crucigrama y luego miró la tele. Por la tarde durmió y soñó que era un peón de ajedrez. Al despertar, miró por la ventana e hizo un inventario de árboles, balcones y vecinos. Descubrió dos puertas azules, una fachada amarilla reciente y dos mujeres viejas que conversaban mientras se escarbaban las uñas de los pies. Le pareció asqueroso.

Frente al espejo en que se miró el hombre chico, volvió a repetir: “Hoy es lunes”. Sonrió y los dientes se le vieron blancos y parejos. Quiso hacer muecas y cantar “tengo más dientes que un hombre grande”, pero en esas entraron dos tipos, más cuadrados que altos.
—Acérquense más para que salpiquen menos, dijo el hombre chico. Los pisos meados huelen mal, acotó.

Y no se supo más, pues como en los baños públicos matan gente y, como ya pasó en Chicago y en New York, entrar en detalles no viene al caso. Como digo, era un hombre chico y estaba satisfecho. Y tenía todos los canales vacíos.

Corazón de mantequilla

0

Corazón de mantequilla

Por José Gabriel Baena
Había una vez dos personajes de novela que vivían en mis 66 obras inéditas dentro del anaquel de la cocina, y se llamaban Vampiretto y Funeralda, eran vampiros vegetarianos y se mantenían leyendo en voz alta interminables cuentos de pérfidos ateos o sobre ellos mismos, como por ejemplo:

“ -Nada mejor para empezar una buena y triste historia que sentarse un largo día de verano en el trópico, digamos el 20 de diciembre de 2012, al borde de la piscina de sangre tibia, oyendo a los Rolling Stones y su coro de once mil vírgenes desnudas cantando You can´t always get what you want y, después de llorar a lágrima suelta entre 12 y 15 minutos hora estándar del Este, tomarse una ginebra doble y sentarse a filmar este cuento neofantastic, así: “Tras montes y valles, en tierras remotas, había una princesa más linda que la luna, o digamos que el sol, más dulce que el moscatel, o digamos que la miel, y no tenía esta princesa ni padre ni madre ni hermana ni hermano ni otros parientes, y se hallaba tan sola en el mundo como árbol solitario a orillas del camino, ya dijimos que este va a ser un cuento bien triste, más triste que Los Rollos del Mar Muerto del Amor que escribiste cuando perdiste para siempre el amor, y como si fuera poco tres brujas malvadas, envidiosas de la belleza de la infanta, la tenían hechizada. Y entonces llegó el apuesto caballero y gallardo aventurero Vampiretto desde los confines del mundo y le dijo citando a Cervantes: -¿De qué temes, cobarde criatura? ¿De qué lloras, corazón de mantequilla? ¿Qué te persigue o acosa, ánimo de ratón casero? Y con su espada deshizo el conjuro, y las tres brujas se desintegraron en pavesas, y en recompensa la princesa, que casualmente se llamaba Funeralda, le obsequió al húsar Vampiretto, pues era un húsar húngaro, un gran libro llamado El Gran Libro de Cuentos de Tapas Negras y una enorme vela, y le dijo: “Aquí te dejo, no tardarán en resucitar las brujas, y si quieres hacerme tuya enciende el cirio y lee el Libro y no te dejes interrumpir, y sobre todo no levantes la vista del libro, pase lo que pase y digan lo que digan”. Y Vampiretto cumplió con su deber y al momentito la princesa fue suya a la luz de los candiles. Y el libro que le obsequió la princesa era ESTE MISMO, para que lo leáis en temor y prudencia. Así… mientras el tiempo pasaba lentamente, nuestros protagonistas se amaban como dos tiernas palomas y vivían felices y contentos y por la tarde hacían su siestita soñando con héroes y heroínas y morfinas y hachís, benditas drogas enviadas por Alá, y leyendo luego más cuentos sobre ellos mismos, así:

“-Sucede que había en la profunda selva algunas hermandades constituidas por monjes que, rebeldes a las enseñanzas de Saulo de Tarso y de Temístocles, buscaban en el egoísmo y el bandidaje la imagen engañosa de la sabiduría y se les conocía como los 80 Malvados Ascetas Desnudos, quienes no vivían de limosnas sino del asalto sangriento y a mansalva. Después de avistar en un claro a Vampiretto y Funeralda se dirigieron durante la noche a la Famosa Roca Negra, pues sabían que tarde o temprano, extraviados en el bosque, nuestros héroes estarían allí después de ponerse el sol. Así sucedió, y una vez Vampiretto y Funeralda se hubieron alojado en una casita que servía de abrigo a los desgraciados viajantes, 900 (o 700) de los 80 Ascetas Desnudos se acercaron al albergue intimándoles rendición, amenazando con prender la casa si no se entregaban por las buenas. Pero Vampiretto y Funeralda, que tenían la facultad de conocer todos los pensamientos –como sucede en las antiguas y buenas novelas-, supieron que los iban a matar, y se hicieron muy pequeñitos y se deslizaron por el ojo de la llave y, volviéndose invisibles, escaparon en las mismas barbas de los Herejes Bandidos Teólogos. Y unos 200 años después, en el siglo 21, y para establecer la topografía de este cuento, Vampiretto tomó a Funeralda de la cintura y la hizo montar detrás de él en su mismo corcel, porque llevaba corcel bien aprestado y apercibido de armas y ricas viandas, y regresaron a su palacio sobre los precipicios en el corregimiento de Santa Elena de la Maldita Medellín de Indias, con vista a la presuntuosa ciudad.

Deberemos decir aquí también que en el vasto jardín de Funeralda y Vampiretto, en alguno de sus mágicos y ocultos rincones, perdido entre macizos de flores de altísimos tallos, vivía acurrucadito desde hacía muchos años, quizá desde el principio de los tiempos, un anciano mago cuya hermosa cabeza semejaba un ovillo de lana de las ovejas de la luna, esto es, ovejas de lanas de plata, cabellera maravillosa que se prolongaba con las barbas, plateadas también. ¿Y para qué mencionamos la existencia de este anciano mago? Pues parece ser que se escapó de otro cuento donde no le daban desayuno ni sopitas ni su copita doble de jerez para dormirse. Ser personaje de cuento es oficio bien difícil, sobre todo cuando se entra en la edad de los achaques y lo descuidan a uno los autores. Y entonces nuestros jóvenes protagonistas lo cogieron de su cuenta y lo invitaban a sus abundantes cenas bañadas en vino. “-Por todo ello y lo que hemos atravesado de vida en vida –citaba siempre Vampiretto a Gao Xingjian– no conviene sondear las almas, no conviene buscar las causas y los efectos, no conviene buscar el sentido, todo no es más que caos. No tienes ganas sino de exponer los hechos valiéndote de un lenguaje que trasciende las relaciones de causa y efecto y de la lógica. Se han contado ya tantas tonterías que nada te impide seguir contando más”. Y cantando Flores muertas, el mejor bolero de los Stones, se despide de vosotros Josecito Nosesabe. FIN

Un cruce inventado

0

Un cruce inventado

Por Saúl Álvarez Lara
…Fue entonces cuando cometí el error. Me enamoré. Sucedió así. La vi por primera vez en el cruce de dos calles. La vi antes de que el semáforo cambiara pero algo la interrumpió y no alcanzó a hacerlo. Me pareció tímida en su vestido de algodón blanco. No tenía un cuerpo de esos que entusiasma, era más bien menuda pero algo en ella la destacaba del resto, ángel dirían algunos. Entre el momento en que la luz roja le prohibió el paso y el regreso de la luz verde tuve tiempo suficiente para llegar a su lado.

Cruzar calles no era su fuerte y la noté nerviosa, con deseos de estar en la seguridad de la otra acera o en otra parte. Un peatón en sentido contrario la rozó con fuerza, salió de su trayectoria e invadió la mía. Me miró con una disculpa pero no esperó respuesta. En menos de treinta segundos, intensos, llegamos a la otra acera. Cuando recuperó la calma caminó entre la gente que se abría a su paso. Me mantuve dos metros detrás. Por momentos alcanzaba a situarme a su altura. Entonces pude apreciar su perfil; sus hombros bronceados; su cintura perfecta y la falda al vuelo, que dejaba, a veces, percibir la piel de sus muslos. Caminaba como si fuera a llegar tarde. Al trabajo, pensé. De repente se me ocurrió que la causa del nerviosismo podía ser la posibilidad de incumplir una cita. Iba retrasada y su afán no debía tener otra explicación. La posibilidad de la cita fallida abría otros espacios. Una cita de amigas, con su madre o de trabajo, eran situaciones aceptables, pero si se trataba de un encuentro de amor era distinto. Hasta ese momento nunca consideré la posibilidad de los celos. Ahora, con la mujer vestida de blanco, la sospecha de ver traducido su afán en angustia por culpa de una cita de amor, me descompuso. La presencia de otro me convirtió en presa fácil de los celos.

Cualquiera puede pensar que es imposible que situaciones así sucedan en un espacio tan corto de tiempo, para muchos se necesita una vida entera, pero no, la sola idea de una presencia masculina cerca, acariciando su piel, besándola, me erizó los pelos. Entonces, estuve a punto de cometer otro error. Quise alargar la mano para tocarla, tomarla por el brazo y preguntarle adónde iba, cuando un golpe sólido en el hombro interrumpió mi intención y perdí el equilibrio. La perdí de vista.

Aquel día hice el recorrido entre el semáforo y el lugar donde recibí el golpe en el hombro cientos de veces con la esperanza de verla pero ella no deshizo sus pasos. Volví el día siguiente y el siguiente y muchos otros después. Horas miré desfilar gente. La luz pasó de verde a rojo y cambió de nuevo a verde cientos de veces pero ella no regresó. Después de casi tres semanas de vigilia, una mañana creí entender por qué no la había vuelto a ver. Esperaba una mujer vestida de blanco sin considerar que hubiese podido cambiar de vestido, sin duda su guardarropa debía incluir la gama de tonos y texturas que la moda exige para estar al día. Hice grandes esfuerzos pero no logré imaginarla de rojo encendido o azul colegio, para mí era una mujer vestida de blanco. Mi incapacidad para verla en otros colores era superior a mi deseo, incluso a mis celos, y nunca más apareció. Es probable que nunca haya regresado.

Entonces inventé una táctica de defensa que no solo la alejaba de mi vista y mi deseo, sino de cualquier probable enamorado que hubiese buscado aquel día, inventé que era una extranjera de paso y así se quedó en mi memoria.

La boda negra

0

La boda negra

Por Juan Sebastián Mora Eusse
Esta es la historia de un hombre con nada que perder, excepto a sí mismo. La alegría y la desdicha se confundían en su rostro. Era un manojo de inseguridades. El suyo era el juego eterno de menospreciar lo propio y languidecer por lo ajeno, para luego valorar lo que una vez fue suyo y desinteresarse por lo que hace poco anhelaba.

La fecha de matrimonio estaba fijada para el 24 de noviembre. Ese día se cumplían tres años de la tarde nublada en que la conoció en el bar La Esmeralda. En ese bar, muy cerca de la iglesia donde iba a casarse, decía haber vivido “los mejores años de su juventud”.

Su futura esposa era bella, sofisticada a su manera, y dotada de un sentido del humor tan negro como el suyo, cualidad que le fascinaba y aterraba al mismo tiempo. El deseo de ella era vestir de negro en la boda. Familia y amigos la habían criticado hasta al cansancio. Así eran las ocurrencias de la novia: divertidas, perturbadoras.

Al fin llega la hora. Continúan las burlas y las críticas por el vestido de la novia. Pero son cada vez menos notorias. El arroz llueve. Marido, mujer e invitados se dirigen a Los Abedules, la hacienda donde él pasó su infancia.

La parranda era ruidosa. El padre había contratado una de las papayeras más costosas del país. La hija tuvo que aceptarla a regañadientes. Ella detestaba con pasión la música tropical. Los rostros de los novios parecían felices.

Después del brindis y demás rituales típicos de las fiestas matrimoniales, el novio cayó en una de sus encrucijadas mentales. Su nuevo compromiso batallaba con la idea de la libertad que perdía. Justo en ese momento, cuando la libertad parecía derrotada, sentía que aún era posible retenerla.
“Voy al baño”, dijo.
Se escabulló por una de las puertas traseras. Allí se abría un frondoso bosque que conocía de memoria. Más allá estaba el barranco, en cuyo borde muchas veces se había sentado a reflexionar.

La novia también desapareció. Las copas de más la condujeron a una de las habitaciones donde se sumió en un profundo sueño o, al menos, eso sostuvo ella al día siguiente.
Después de dos horas, nadie sabía el paradero de los recién casados. Entonces, del bosque emergió el novio. Su traje blanco estaba cubierto de lodo. Habló con agitación a los pocos invitados que seguían despiertos en el corredor.

“Tienen que acompañarme al bosque, ya mismo”.
Al principio, los borrachos se rieron.

“No lleva ni medio día de casado y ya se quiere volar”.

Pero algunos empezaron a alarmarse con la palidez fantasmal y el gesto preocupado de su amigo. Buscaron linternas y se adentraron en el bosque. Trataban de seguirle el paso al novio, quien corría entre los pinos y solo se detenía para no perderlos de vista.

Los sonidos del bosque y la oscuridad reducían el efecto del alcohol en los improvisados expedicionarios. El silencio se apoderó del viento. Los pinos se evaporaron. Al final de la carrera, el novio se detuvo en el borde del barranco y les gritó:

“¡Aquí, aquí está!”
Un escalofrío recorrió sus cuerpos. El novio yacía en el fondo del abismo, con su vestido blanco cubierto de lodo. Invadidos por una intolerable sobriedad, los invitados buscaron la figura que los había guiado hasta allí. Había desaparecido.

Mientras tanto, en la casa, la viuda limpiaba de lodo y de hojas su vestido negro. Sabía que al día siguiente iba a necesitarlo.

Bazar en la Vía Primavera

0

Los Mercados Campesinos, la Tienda del Mamm y un grupo especial de creativos de la UPB, cuya misión era reformar prendas, fueron algunas de las atracciones del más reciente bazar en la Vía Primavera. Durante este evento, que combinó la oferta comercial y gastronómica de la zona con actividades culturales, se recolectaron y entregaron, en un mismo día, regalos para los niños del Hogar Bambi.

Alejandra De Bedout, Laura Jiménez

Andrés Tobón, Lolita Tobón

Camilo Agudelo, Juanito Acosta

Carlos García

Carolina Gómez, Juan David Gutiérrez

Catalina Restrepo

Estefanía Osorio, Ana Cristina Patiño, Laura Muñetón, Carolina Betancur

Juana Toro, Juan Manuel Barrera

Laura Díaz

Mariana Gómez, Camila Sánchez

Melina David, Susana David

Nataly Duque, Natalia Taborda, Cindy Colorado

Paula Jaramillo, AMy Piñeres, Gloria Saldarriaga, Alejandra Jaramillo

Ricardo Ruiz

Sebastián Mejía, Mario GIraldo




Palabramar: El Colegio del Cuerpo

0
Palabramar: El Colegio del Cuerpo

Uno de los centros de danza contemporánea más importantes del país, El Colegio del Cuerpo, presentó en el Mamm Palabramar. La obra, concebida como un homenaje al poeta Aimé Cesáire, fue el cierre del año del programa cultural del museo Noches Extendidas.


Adrián Zelaya, Carlos H. Jaramillo, Dora Mejía

Alina López, Santiago Alzate

BeatrIz Franco, Dora Vélez, Lizbeth García, María Mercedes González, Óscar Roldán

Catalina Echeverri, Harry Montoya, Carlos Alberto Rendón

Diego Castaño, Mónica Giraldo

Gladys Márquez, Natalia Estrada, Laura Estrada

Johanna Agudelo, Yadira Sánchez

Juan José Montoya, Álvaro Ramírez

María Paula Duque, Ana María Duque









68,70,72. Bienales de Arte Coltejer

0
68,70,72. Bienales de Arte Coltejer

49 obras de artistas de 12 países componen 68,70,72. Bienales de Arte Coltejer, exposición inaugurada en el Museo de Antioquia, con la curaduría de Nydia Gutiérrez y Carolina Chacón. La muestra, además de hacer un reconocimiento a aquellas históricas bienales patrocinadas por Coltejer, tiene el propósito de promover investigaciones interdisciplinares sobre el surgimiento, desarrollo e impacto que tuvieron en la esfera artística y social de la época.


Alberto Sierra

Ana Piedad Jaramillo, Rafael M. Kalach

Andrés Piedrahita, Alonso Orrego

Carolina Chacón, Juan Bustamante

Catalina Jiménez, María Cristina Vargas, Byron Vélez, Paula González, Carlos Rendón

Diana Carolina Zapata, Karen Gómez

Diego Bedoya, José Javier Mejía

Gabriel Baraya, Lina Posada, Jaime Morales

Hernán Varela, Julieta Marín, Doris Ortega, Luz Ángela Soto

Hildebrando Mejía, Ana Lucía Mejía, Alberto Piedrahita

Isabel Cristina Seguro, Marco Aurelio Sáenz

Jessica Escobar
Maleya Hoyos


Juan Francisco Vélez, María Luisa Estrada, Sofía Estrada

Lucía González, Ignacio González, Ángela Duque

Martha Elena Gómez, José Miguel Lotero

Pascual Ruíz, Alfonso Sánchez

Ricardo Giraldo, Jovanna David

Walter Correa, José Claver








En la búsqueda del cuerpo

0
En la búsqueda del cuerpo

Pudo haber continuado su carrera como bailarín profesional en cualquier lugar del mundo pero prefirió regresar a trabajar con la infancia desfavorecida

No es una historia simple la de Álvaro Restrepo, es quizás el profesional de danza contemporánea más conocido de Colombia y el bailarín colombiano más reconocido internacionalmente. A pesar de haber empezado a bailar a los 24 años, -tarde para un bailarín que depende de la juventud de su cuerpo para el virtuosismo-, pudo estudiar en Nueva York, recorrer el mundo, presentarse en los mejores escenarios y ser entrenado por grandes maestros del baile como Martha Graham y Merce Cunningham.

Su infancia estuvo lejos de ser maravillosa. Sobrevivió a una educación escolar y familiar basada en la violencia física y psicológica. En un ambiente machista del Caribe colombiano su único refugio fue el aprendizaje del piano con su tía abuela Maruja de León, “la primera gestora cultural de Cartagena, una mujer visionaria y muy cristiana (en el mejor sentido de la palabra), que vivía su fe y la ejercía a través del amor por los demás”. Ese, dice Álvaro, fue su primer contacto con las artes y con las obras por los otros.

Terminado el bachillerato siguieron un par de años de estudio de Filosofía y Letras, y otros dos de trabajo con niños de la calle en Bogotá. Luego vino el estudio de Teatro como herramienta terapéutica para los niños desamparados. Allí descubrió su cuerpo, las posibilidades del baile y su pasión y talento.

Algunos lo llaman el clamor del alma, otros insatisfacción; Álvaro lo describe como un llamado. Después de encontrar el éxito internacional, regresó a Colombia con el ánimo de ayudarle a los niños menos favorecidos a encontrar un camino, a descubrir el talento a temprana edad y a cuidar el cuerpo. Así, de la mano de Marie France Delieuvin, bailarina y coreógrafa francesa, fundó en 1997 el Colegio del Cuerpo en Cartagena.

Si se mira por encima, el Colegio del Cuerpo es un proyecto social, pero Álvaro Restrepo lo que busca es talento. “La mejor manera de impactar lo social es a través de la búsqueda de la excelencia”, explica el bailarín. “Nos hemos propuesto que no haya diferencia entre hacer el bien y la excelencia”.

El colegio recibe niños y jóvenes de escasos recursos según su talento y dedicación. Esto le permite a los pupilos tener oportunidades que de lo contrario el contexto cartagenero les negaría. A su vez el trabajo con la danza “forma seres sensibles, alertas y compasivos, que es lo que necesita esta sociedad”, asegura. Agrega que, como todas las artes, el baile debería ser una asignatura formal y no de uso del tiempo libre. Pero la danza profesional no es un concepto fácil de introducir en la sociedad colombiana. “Yo creo que es porque somos un país donde todo el mundo sabe bailar y el baile está presente siempre. Somos muy corporales y tal vez por eso se asocia a la rumba, al carnaval, a la diversión y no a la disciplina y al sacrificio”.

Sacrificio ha sido para Álvaro dedicarse mucho a la gestión del colegio, dejando un poco la creación artística. “Dedicarme 15 años a este proyecto y a mantenerlo vivo me cambió la vida, pero he tratado de entender que el colegio es una obra de arte, una escultura social, así que me siento gratificado por los ‘sacrificios’ en la lucha”, dice con alegría.

Ahora quiere regresar a su propio cuerpo, a crear obras para sí mismo. Para él, el paso del tiempo no es una derrota, es una conquista. “La vida del bailarín termina cuando uno lo decide, cada edad tiene su propia danza y su propio tiempo”, explica el coreógrafo. Sin embargo, no espere verlo bailando en una rumba, pues dice que no va a fiestas a trabajar, prefiere ver cómo se desinhibe la gente, analizar el lenguaje corporal de los otros y mirar cómo se revelan a través del cuerpo. “Como decía Martha Graham, el cuerpo nunca miente”.

Ari, la DJ de los vinilos

0
Ari, la DJ de los vinilos

Adriana Gutiérrez se destaca en la escena electrónica de Medellín

Antes de salir a escena en el Beat Xperimental, evento musical realizado en La Miscelánea, en el barrio Provenza, Adriana tenía las manos heladas. Hacía tiempo no tenía esa sensación y se puso nerviosa cuando DJ Dmoe la presentó como “buena conocedora de la música”. Sobre la mesa en donde estaban las tornamesas y el mixer, acomodó un maletín y de este eligió unos cuantos discos de vinilo. Buscando que el cambio pasara desapercibido, los acomodó sobre la pista que venía y estos giraron al tacto de agujas nuevas. Llevó los audífonos a la cabeza y bailó al ritmo de lo que mezclaba. Al tiempo, descubrió un oído para escuchar los sonidos, cantó las pistas vocales y dijo: “Me gusta contar una historia, ese es el trabajo del DJ”.

Ari DJ, como se hace llamar Adriana Gutiérrez, empezó a tocar piano a los seis años cuando su papá la llevó a la casa de una alemana que tenía un piano. Allí tomó clases y se acercó a los sonidos de obras clásicas infantiles. Luego aprendió a tocar el órgano electrónico y continuó tomándole amor a la música.

Vivir por la música
En Armenia, su ciudad natal, creció oyendo música disco, folclórica colombiana y todo tipo de ritmos de descendencia africana que a su padre se le antojaban.

“¡Entretenimiento musical a cargo de Adriana Gutiérrez!”, decían los presentadores en fiestas y eventos en los que interpretaba música tropical junto a su profesor de órgano. A los 10 años le dijo que quería tocar música clásica, pero este la ignoró por completo. Desmotivada, no volvió a ensayar y así dio fin a sus presentaciones.

Pereira ofrecía más opciones para un futuro profesional y allí se fue a vivir. Entre Música y Derecho, terminó eligiendo el segundo de huida del desafortunado destino que, según su madre, le esperaba a los artistas. En el 2000 la música electrónica estaba en su boom y los DJs todavía tocaban con vinilos. No olvida esa primera fiesta cuando vio salir a Dj Alexa de Bogotá, con un saxofonista: “Vi a esta pelada tocando electrónica con música convencional, los discos, los acetatos y dije: “¡Wow, yo quiero ser como ella!”.

Estando en la universidad empezó ir a las fiestas, pero su curiosidad iba más allá de la rumba. Se hacía al lado de los DJs para hablar de música y ver lo que hacían. “Yo quiero aprender”, le dijo a uno de ellos en el bar que frecuentaba. “Para ese momento había mucha competencia, sobre todo entre los hombres, líderes del género. No era fácil que alguien te enseñara”, cuenta Adriana. “¿Pero seguro que quiere aprender?”, le dijo su amigo, reconfirmando que aquel deseo no fuera el mismo de las chicas que solo lo hacían por moda. Desde ese momento cada tarde practicaba. Logró tener su primer tornamesa, compartió equipos con otros DJs y fue hasta Cali a comprar discos.

Aunque llegó hasta el cuarto año de Derecho, este quedó relegado tras tropiezos y desencantos. Había conocido a Andrés Puerta, DJ Mister Drums, quien estudió en España con el DJ Cristian Varela (líder en el género techno) y juntos emprendieron la creación de JAH Estudio, la primera academia de electrónica que existió en el Eje Cafetero. Para sustentar lo que enseñaba, entró a estudiar Licenciatura en Música en la Universidad Tecnológica de Pereira. Reconoció que el violín, con el que se hacen obras hermosas, le fue imposible y que al fin de cuentas lo suyo era “la música del futuro” y su instrumento, la tornamesa.

Del Eje Cafetero a Medellín
Ari fue la primera DJ en Pereira. Participó en el Afternoon Party en 2004, ocupó el tercer puesto en el concurso de Heineken Thirst y su primera residencia fue el Tropical Cocktails de esa ciudad. En este mundo electrónico las mujeres suelen ser estigmatizadas. “Otra vieja que viene a mostrarse y que no sabe tocar”, dicen los productores cuando estas se presentan, cuenta Adriana. Sin embargo, su experiencia y el empeño por lograr una excelente producción le han permitido destacarse. Es una de las pocas mujeres que sabe tocar con vinilos.

A principios de 2012 llegó a Medellín, la ciudad electrónica colombiana, para continuar haciendo lo que más le gusta: aprender, enseñar y producir música. En abril de este año tuvo la oportunidad de presentarse en Fruto Beach (Cartagena), la playa más importante para la música electrónica en el país. Hoy reside en el Tropical Cocktails del Parque Lleras, bar en el que toca house, su género predilecto. En otros escenarios recurre a un saxofonista y a percusionistas, para un show en el que ofrece otras alternativas. También da clases de teoría musical en la academia Dj Zentral, ubicada en la calle 10 de El Poblado y estudia informática musical en el Instituto Tecnológico Metropolitano.

“Entiendo el afán de los DJs por figurar, pero nunca lo he sufrido. No sufro si no toco un fin de semana, lo que me desvela es la buena música”.
Para conocer más sobre el trabajo de Ari DJ visita su set Privilage en http://www44.zippyshare.com/v/29836530/file.html y youtube.com/arideejay.

Francisco y su pesebre

0

josegabrielBaena

Francisco y su pesebre

/ José Gabriel Baena
Con la leve brizna de catolicismo que aún conservo en mi malvado corazón, declaro que no acepto en absoluto la afirmación de Benedicto 16 sobre que no hubo en el pesebre ni buey ni asno, y sí en cambio leo con fervor cada año Las Florecillas de San Francisco de Asís el 25 de diciembre, día de mi ascenso a este mundo, donde se cuenta cómo este santo inventó el pesebre que ha sobrevivido 783 años en el imaginarium de los pueblos. (Francisco nació en 1182 y murió en 1226). Transcribo fragmentos de la Biblioteca de Autores Cristianos y de la Editorial Aguilar en su colección de miniaturas que publicaba entre 1950-60. Diáfana piratería de las cosas del Altísimo.

“La suprema aspiración de Francisco, su más vivo deseo y su más elevado propósito, era observar en todo y siempre el santo Evangelio y seguir la doctrina de nuestro Señor Jesucristo y sus pasos con todo cuidado, con todo el anhelo de su mente, con todo el fervor de su corazón. Digno de recuerdo y de celebrarlo con piadosa memoria es lo que hizo tres años antes de su gloriosa muerte, cerca de Greccio, el día de la natividad de Nuestro Señor Jesucristo. Vivía en aquella comarca un hombre, de nombre Juan, a quien el bienaventurado Francisco amaba con amor singular, pues, siendo de noble familia y muy honorable, despreciaba la nobleza de la sangre y aspiraba a la nobleza del espíritu. Unos quince días antes de la Navidad, el bienaventurado Francisco le llamó, como solía hacerlo con frecuencia, y le dijo: Si quieres que celebremos en Greccio esta fiesta del Señor, date prisa en ir allá y prepara prontamente lo que te voy a indicar. Deseo celebrar la memoria del niño que nació en Belén y quiero contemplar de alguna manera con mis ojos lo que sufrió en su invalidez de niño, cómo fue reclinado en el pesebre y cómo fue colocado sobre heno entre el buey y el asno”.

“El hombre bueno y fiel corrió presto y preparó en el lugar señalado cuanto el santo le había indicado. Llegó el día, día de alegría, de exultación. Se citó a hermanos de muchos lugares; hombres y mujeres de la comarca, rebosando de gozo, prepararon cirios y teas para iluminar aquella noche que, con su estrella centelleante, iluminó todos los días y años. Llegó Francisco y, viendo que todas las cosas estaban dispuestas, las contempló y se alegró. Se prepara el pesebre, se trae el heno y se colocan el buey y el asno. Allí la pobreza es ensalzada y Greccio se convierte en una nueva Belén. La noche resplandece como el día, noche placentera para los hombres y para los animales. Llegan las gentes y ante el nuevo misterio saborean nuevos gozos. La selva resuena de voces y las rocas responden a los himnos de júbilo. Cantan los hermanos las alabanzas del Señor y toda la noche transcurre entre cantos de alegría. Francisco está de pie ante el pesebre, desbordándose en suspiros, derretido en inefable gozo. Se celebra el rito solemne de la misa sobre el pesebre y el sacerdote goza de singular consolación. Así… el niño Jesús, sepultado en el olvido en muchos espíritus, resucitó por su gracia, por medio de su siervo Francisco, y su imagen quedó grabada en los corazones enamorados. Terminada la solemne vigilia, todos retornaron a su casa colmados de alegría.” Amén pa´ las ánimas.
[email protected]

Ron Botero… ¡qué aguinaldo!

0

En los primeros días de diciembre recibí esta sugestiva invitación: “Prometemos la luna. Programa Noches de Planetario. Ron, noche, alcoholes y literatura. Invitados: Héctor Abad, escritor, y Mario Jursich, director de la revista El Malpensante. Viernes 14 de diciembre, hora 6:30 p.m. Planetario. Entrada libre”.

No asistí… no pude asistir. ¡Qué lástima! No soy caro amigo de ninguno de los dos, pero por avatares del destino hace algunos años a los dos les serví unos rones en la chimenea de mi casa y disfruté de su breve compañía… sobra decir que tímidos no son y les fascina el ron. Hasta el momento de iniciar esta crónica, no he recibido ningún mensaje o comentario de aquella noche de luna, la cual – no es osado imaginar – debió de haber sido una auténtica tertulia etílica, rebosante de picantes anécdotas y conspicuas opiniones. Aclaro: ajeno a lo tratado aquella noche, seguramente comentaron algo acerca del Ron Botero, recién salido al mercado y asunto sobre el cual me voy a referir, esperando no parecer plagiario de sus eventuales comentarios. No es la primera vez que escribo sobre el tema. En octubre de 2009 escribí en mi columna Apuntes de Servilleta una crónica titulada “No más enólogos… necesitamos sabihondos del ron” y en ella decía: “Durante más de medio siglo la vida me ha permitido disfrutar y degustar del bouquet de rones panameños, boricuas, ticos, jamaiquinos, guatemaltecos, hondureños, venezolanos y obviamente cubanos convirtiéndome actualmente en pregonero de la necesidad de valorar y divulgar la cultura de aquello que el escritor cubano Fernando G Campoamor denominó perfectamente como ‘el hijo alegre de la caña de azúcar’. Es un hecho: como en tantas cosas de nuestra cultura, los colombianos estamos rezagados en el conocimiento histórico, social y geopolítico de una bebida que lleva más de cuatro siglos entre nosotros y continuamos sin prestarle la atención que se merece; sin embargo, en menos de dos lustros nos hemos convertido en grandes conocedores de vino y da gusto oír los comentarios y observaciones especializadas de quienes ya han pasado por una, dos, tres o media docena de catas, gracias a las invitaciones que semanalmente se ofrecen en las principales ciudades de Colombia, organizadas por las distribuidoras de vinos chilenos y argentinos, las cuales tienen al consumidor atribulado de información y a los propietarios de restaurantes repletos de producto en consignación”.

Lo que tenía que pasar pasó: a finales de noviembre me invitaron a una cata de Ron Botero organizada por la FLA e implementada y servida impecablemente en el restaurante San Carbón (sobre la variante Las Palmas). Hicimos presencia 60 personas a quienes en magistral charla el maestro mayor de la FLA (ingeniero Jorge Gómez) no solo nos enseñó con lujo de detalles cada uno de los rones que destila la FLA, sino que de manera impecable, sin alborotos y exceso de adjetivos, nos instruyó sobre las “virtudes gustativas” del Ron Botero.

Confieso: mi primer encuentro con el Ron Botero fue fascinante; me pareció muy diferente a todos los que conozco, me supo su añejo, me gustó su color, me calentó sensualmente la garganta, su aroma me sacó lagrimas de los ojos, me apretó la dentadura, me irrigó las venas del cerebro, lo sentí llegar al estómago, me entró por el alma… sencillamente, me encantó; además, su nombre, su razón de ser, sus intenciones sociales, su estupenda etiqueta y su hermosa botella lo convierten en un estupendo aguinaldo para amigos y parientes cercanos y sobre todo para llevar a las amistades lejanas. Hoy quiero agradecer a San Carbón por tan amable invitación y a la FLA por tan estupenda bebida, la cual, gracias a su gran calidad, entrará a reforzar el bar de los verdaderos amantes y coleccionistas del ron y a quienes como Héctor y Mario y Yo, un buchecito diario se nos convertirá en elixir cotidiano.
[email protected]

Andrea Trujillo: Ganso y Castor

0
Andrea Trujillo: Ganso y Castor

Un encantador café bistró que transporta con su exquisita comida y decoración a las calles parisinas, viene ganando adeptos desde hace dos meses cuando abrió sus puertas en la carrera 36 con la 7 – 46, en el barrio Provenza. La artífice de Ganso y Castor es Andrea Trujillo, quien estudió cocina en la Escuela Hofmann, en Barcelona, y administración hotelera en la prestigiosa Escuela de Hotelería de Lausana, en Suiza.

El paté, las empanadas de queso de cabra, la sopa de cebolla, los sándwiches y los ricos menús diarios (que incluyen entrada y postre) son algunos de nuestros recomeAndados de la carta de este acogedor lugar. Para las cenas de Navidad y Año Nuevo, Ganso y Castor ofrece pavos ahumados, lomos acaramelados y perniles a las finas hierbas, con dos tipos de salsas y una variedad de acompañantes (los pedidos deben realizarse con dos días de anticipación).

El pernil, lomo o pavo queda perfecto con una salsa de manzanas especiadas y acompañado de una ensalada de orzo al pesto con tomates secos, pasas y nueces. Recetas que Andrea Trujillo nos regala en la presente edición de la Buena Mesa.

Salsa de manzanas especiadas (para 6 porciones)
• 3 manzanas verdes.
• 80 gramos de azúcar.
• 30 gramos de mantequilla.
• 2 estrellas de anís.
• 1 rama de canela.
• Media vaina (ramita) de vainilla.
• Una cucharadita de polvo cinco especias.
• Media taza de caldo vegetal.

Procedimiento
Pelar las manzanas y cortarlas en láminas delgadas, vigilando que las semillas se retiren. En una cacerola derretir la mantequilla y poner las manzanas con el azúcar, el anís, la canela, la vainilla y el polvo cinco especias. Cocinar a fuego medio durante 20 minutos o hasta que las manzanas estén blandas. Retirar el anís, la canela y la vaina de vainilla. Licuar hasta que no queden trozos de manzana. Regresar a la olla y aligerar con un caldo vegetal de tal forma que quede una salsa consistente pero ligera.

Ensalada de orzo al pesto, con tomates secos, pasas y nueces
(para 10 personas)
• 500 gramos de orzo.
• 1 taza de pesto de albahaca.
• Media taza de tomates deshidratados.
• 1/3 taza de nueces picadas.
• 1/3 taza de pasas rubias.
• Sal y pimienta al gusto.

Procedimiento
Cocer el orzo en abundante agua con sal hasta que esté al dente. Colar y enfriar con agua corriente del grifo. Agregar al orzo el pesto, los tomates, las nueces y las pasas. Mezclarlos bien hasta obtener un color homogéneo en toda la pasta. Rectificar la sal y pimienta. Servir frío de acompañamiento a carnes como pavo, roast beef y pernil.

El cochinillo de Toscano

0
El cochinillo de Toscano

Un plato que vale la pena probar este diciembre es el cochinillo all’ aspromonte, de la trattoria y pizzería Toscano.

Esta creación del propietario del restaurante, el italiano Felice Toscano -inspirada en sus tardes de caza cerca al macizo montañoso Aspromonte, en la región de Calabria- consiste en un cochinillo horneado, que se marina durante dos días en brandy, vino blanco y especias. El plato va acompañado de unas papas de la casa y un antipasto calebrese (una tabla con quesos, carnes maduradas y otras delicias). Incluye además dos jarras de sangría o dos litros de vino blanco o tinto. El cochinillo debe ordenarse con tres días de anticipación y está pensado mínimo para seis personas, máximo para diez. El costo por persona es de 55 mil pesos. Toscano está ubicado en calle 8 A Nro. 34 – 20, en Provenza. Informes en el 311 3094.

Los buñuelos de Don Pedro

0
Los buñuelos de Don Pedro

“Es una receta de mi bisabuela, que mi papá trajo de su pueblo cuando montó el restaurante hace más de 25 años”, afirma Pedro Suárez acerca de los célebres buñuelos que vende en su restaurante Don Pedro, localizado al lado de la iglesia de Santa Ana, en el parque de Sabaneta. La clave es, según él, que están hechos con quesito. Grandes y esponjosos, son un antojo difícil de ignorar. También son famosos porque cada año, Don Pedro prepara un buñuelo de gigantescas proporciones (el de 2011, pesó 40 libras). Los chorizos, chicharrones, pandequesos y morcillas (además del inmenso típico montañero) también son otros de los productos estrellas de este restaurante.
Informes: 288 0962.

Un banquete de alternativas

0
Un banquete de alternativas

Varios reconocidos sitios gastronómicos de la ciudad ofrecen suculentas opciones para las cenas de Navidad y Año Nuevo. En la Cafetiere de Anita pueden ordenarse pavos rellenos con manzana, champiñones y tocineta, pechugas de pavo rellenas de frutos rojos secos, perniles horneados con un glaseado de naranja y Cointreau, jamones ahumados dorados en salsa maple y jerez.

El Chef Francois vende por encargo perniles asados en salsas de uchuvas y finas hierbas, pavos rellenos, con carne de cerdo o res, y deshuesados en salsa de cerezas o al vino. La Salsamentaria Excelsior ofrece perniles asados, cañones de cerdo asados y jamonados, pavos rellenos, chuletas de cerdo jamonadas, pechugas rellenas y pierna de cordero, en una variedad de ricas salsas. Todos estos restaurantes también cuentan con una diversidad de acompañamientos para estas carnes tradicionales en las cenas decembrinas, ocasiones ideales para consentir el paladar.

Hay que confiar en el camino

0
Hay que confiar en el camino
/ Esteban Carlos Mejía
Es muy difícil no tutear al padre Jorge Villalobos. Te envuelve con eso que la gente llama don de gentes, te escucha con atención y te habla con respeto. Tiene pinta de galán de telenovela mexicana. No es casual: nació en Durango, a medio camino entre San Luis Potosí y Culiacán, como en un corrido de José Alfredo Jiménez. Ya casi no tiene acento. En vez de “no manches, güey” tiende a decir “eh, ave María, pues”. Sin exagerar, claro.

No predica: convence. Su elocuencia es antirretórica, sin alambiques oratorios. Charla (o platica) con sencillez y claridad, a punta de ejemplos cotidianos o de remembranzas de grandes obras de literatura universal. Es capaz de reírse de sí mismo y no se deja confundir con preguntas capciosas ni con novedades teológicas. Y eso que fue ordenado en el Vaticano por el mismísimo Juan Pablo II. Vivió unos meses en Curitiba, Brasil. En 1992, sus superiores lo trasladaron a Medellín. Con humor, pensó que alguien quería deshacerse de él, pues por entonces nuestra ciudad sufría los peores estragos de la mafia. A los pocos días, se sintió feliz. “Qué tierra tan hermosa, qué gente tan amable, qué valentía”. Hoy en día es párroco en San Juan Bautista de La Salle, en Copacabana, casi en los límites con Girardota. Lidera la Fundación Gente Unida, que en diecisiete años ha construido seis colegios populares y un hogar para niños. Las dos horas con el padre Villalobos, en el último conversatorio del Centro Comercial Santafé y Vivir en El Poblado (la Navidad, el amor y la familia), se fueron volando. Por eso, nos comprometimos a volverlo a invitar el año entrante.

Con frases precisas y comprensibles, habló de los seres humanos. “Somos cuerpo, mente y espíritu. Cuidamos nuestros cuerpos en los gimnasios. Hacemos múltiples actividades intelectuales. Pero ¿qué le dedicamos al espíritu?”. Fue contundente: “la espiritualidad es la experiencia divina en cada persona. Y la Navidad es la época más propicia para cultivar el espíritu”. Lo interrumpí, con la venia del patrocinador, y le hice ver las dificultades de ser espiritual en una temporada tan mundana, compras, natilla, buñuelos, pavo, perniles, Papá Noel, renos, traídos del Niño, alumbrados. No se alteró. “Para cultivar el espíritu, lo primero que tenemos que hacer es sacar tiempo. Tiempo para estar solos y en silencio. Tiempo para agradecer a Dios por las bendiciones recibidas, tanto materiales como espirituales. Debemos hacer un ‘stop’ para dar gracias”. Gran consejo iniciático. “Después hay que buscar y encontrar un camino. Con sus alegrías y dificultades, vaivenes, avances y retrocesos. Y seguirlo como es”. Se trata de una elección individual, una decisión propia. “Hay que confiar en ese camino”.

De la espiritualidad pasamos a la solidaridad. “Por naturaleza somos altruistas. Por educación y cultura, somos egoístas”. Recordó a Jean Valjean y los candelabros del obispo, uno de los pasajes más conmovedores de Los miserables, de Victor Hugo. “No te prives de ayudar a nadie”, concluyó. “A ti no te empobrece, a ti te enriquece”. Y bajo el signo de la caridad, el padre Villalobos nos deseó felicidades en Navidad, espíritu de espíritus.

En 2013 seguiremos con los conversatorios con Santafé. Estén pendientes de la información. Mientras tanto, por favor, pásenla bien. ¡Requetebién!
[email protected]

Bonos que protegen el ecosistema

0
Bonos que protegen el ecosistema

Ahora tanto industrias como personas naturales pueden contribuir a la conservación de los bosques y comunidades del Darién con bonos de carbono


Fotos cortesía Anthrotec

“Si no se hace algo para conservar y proteger, en 30 años desaparecerían las extensiones de bosque del Darién y, aproximadamente, cerca de tres millones de toneladas de carbono serían emitidas al medio ambiente”, señala Mauricio Salazar, gerente del proyecto Corredor de Conservación Chocó Darién, que la compañía Anthrotect adelanta desde 2010 en Acandí para la conservación de las comunidades nativas y el ecosistema natural de este territorio.

Este proyecto, que nace de la necesidad de proteger los bosques tropicales en el extremo norte del Chocó, lugar considerado patrimonio natural de la humanidad por la Unesco (Parque Nacional del Darién en Panamá y Parque Nacional Los Katíos en Colombia), es un sitio reconocido no solo por sus especies endémicas y biodiversidad, sino por su importancia geográfica, ya que conecta el sur de América con el norte. Este, según explican los expertos, es un sitio de conservación internacional.

Ante esta necesidad de protección nacen los bonos de carbono, que son un mecanismo de descontaminación del medio ambiente propuesto en el Protocolo de Kyoto, con el objetivo de reducir las emisiones de dióxido de carbono que van a la atmósfera y así prevenir los efectos del cambio climático.


Fotos cortesía Anthrotec

“En este territorio encontramos que los bosques son amenazados por ganadería, por extracción de maderas, cultivos ilícitos, entre otras circunstancias. Vemos que el patrón de deforestación en Acandí es muy alto, y si no se hace algo va a desaparecer. Nosotros hacemos actividades para evitar la deforestación y para eso se crea el sistema de preservación de carbono. Desde 2010 hasta ahora, el Corredor de Conservación Chocó – Darién ha protegido 300 hectáreas de bosque tropical, lo que se traduce en 100 mil toneladas de carbono que se contienen en este territorio”, expresa Salazar, ingeniero forestal de la Universidad Nacional y máster en Antropología de la Universidad de Londres.

Este proyecto ambiental recibió en noviembre pasado el sello VCS (Verified Carbon Standard) que certifica las actividades emprendidas para la reducción de las emisiones de carbono. En el Darién no solo se busca la conservación de los bosques, sino también el desarrollo de las comunidades afrodescendientes e indígenas del Cocomasur (Consejo Comunitario de la Cuenca del río Tolo y Zona Costera Sur) que comprende cerca de 13.400 hectáreas en títulos colectivos y más de mil familias nativas.

Para desarrollar este proyecto, explican sus gestores, se basan en cuatro ejes de acción: la gobernabilidad de las comunidades afrocolombianas e indígenas, para que sean soberanas en su territorio; la conservación de los bosques y el uso sostenible de los recursos; el bienestar comunitario y los planes de etnodesarrollo; y la protección a la biodiversidad del Darién.

“Si evitamos la deforestación, generamos créditos de carbono. Esos créditos los negociamos en el mercado voluntario, donde llegan las empresas interesadas en reducir emisiones, generando ingresos económicos que financian las actividades de desarrollo sostenible”, explica Salazar. “El reto de la conservación es volverlo económicamente viable. Parte de la conservación está basada en altruismo o gente que entrega fondos para conservar, pero esto no es autosostenible. En el Darién se encuentran las comunidades indígenas nativas como los Embera y los afrodescendientes. Necesitamos es ofrecerles el desarrollo que ellos tanto necesitan. Y compensarlos de alguna forma por la preservación que ellos han hecho”, concluye.

4.600 años encuadernados

0
4.600 años encuadernados

En mayo el antropólogo Pablo Aristizábal y su grupo rescataron un cementerio indígena en Los Guayabos. Ahora el turno es para el libro

El traje que lució el antropólogo Pablo Aristizábal en la presentación del libro Nuevos Descubrimientos Arqueológicos en la Ciudad de Medellín, pudo haber dado la impresión de que el trabajo que realizó desde mayo de este año, había sido todo, menos extenuante.

Alejado del glamour de los eventos de ciudad, en esos días las botas Macha mandaron, al igual que los jeans y las camisetas manga corta. Este trabajo consistía en desentrañar en tiempo récord los misterios que emanaron con una vasijas funerarias pertenecientes a comunidades indígenas del año 670 después de Cristo (según la datación con carbono).

Fueron quince días agitados. Las retroexcavadoras, ávidas de tierra, transformaban una zona verde cercana a Eafit, incluido el lote Los Guayabos, para dar paso al gigante de la 4 sur (Gilberto Echeverri).
Las excavaciones mostraron un total de seis vasijas o urnas funerarias con tapa, correspondientes a un cementerio familiar precolombino.

Ante el descubrimiento, Aristizábal expresó: “Lo bello es que encontramos miles de años de historia en una hectárea. Tenemos este cementerio indígena; el periodo colonial, que consiste en botijas o ánforas usadas por los españoles. Además, tenemos una cantidad de locitas y platos traídos de Inglaterra en los siglos 18 y 19”. El hallazgo también confirmó que El Poblado fue un resguardo indígena en 1615.

Divulgar el pasado
Después de extraer todo el material, el turno fue para las restauraciones y para la divulgación. Precisamente Pablo explicó el 13 de diciembre todo el proceso, ahora sí con ropas dignas de un coctel y de un documento como este. Un eslabón de la memoria de la ciudad y un esfuerzo que gracias a unos pocos se salvó de ser enterrado para siempre.

La presentación se realizó en una zona adecuada que se llama plazoleta Gilberto Echeverri, un espacio que deja ver una placa conmemorativa y un montículo de piedra que fue trasladado allí pieza por pieza.

Este documento será llevado a colegios y a todas las bibliotecas de la red pública de la ciudad, para que las nuevas generaciones lo conozcan. Esta historia, que en total encontró evidencia de 4.600 años, espera tener una sala arqueológica en Eafit y un dvd (documental), si todo sale bien.

El boom constructivo de la actualidad hace que Pablo, al otro día de la presentación, se vuelva a vestir adecuadamente para rescatar un pasado que tendrá un lugar especial en nuestro futuro.

Ubiquémonos

Ubiquémonos

/ Juan Carlos Franco
A lo largo del año esta columna se ha enfocado en destacar las aspiraciones que tenemos los habitantes de El Poblado y de Medellín de habitar en un entorno con mayor calidad de vida. Y también las frustraciones, que no son pocas, en parte por incoherencia de nuestras autoridades, o por insistir en modelos equivocados de urbanismo, o por falta de visión o de liderazgo, o por indolencia. Y a veces, también por ignorancia, tanto de habitantes como de dirigentes.

Esos problemas nos parecerán muy graves en nuestra perspectiva humana, tan limitada, tan local, tan corta, con tantos matices que la hacen difícil de entender.

Pero caramba, se antojan un tanto serios, severos para tratarlos en la última columna del año, con la Navidad ya encima y con un deseo de ser más leves, de acercarnos al Universo.

Empecemos por echar una mirada a nuestros alrededores. Hablemos de lo que hay más allá de nuestra ciudad, por ejemplo.

¿Somos muchos en Medellín? Se siente como que sí, pero aquí solo vive y trata de ser feliz uno de cada 3.000 habitantes de la Tierra.

¿Le parece grande la ciudad? Sus 38.000 hectáreas cabrían 3.000 veces en Colombia. Y Colombia, que se ve tan grande, cabría 130 veces en la superficie “terrestre” de la Tierra, valga la redundancia, y 450 veces en el planeta entero.

¿Le parece grande la Tierra? Respire, la superficie de Júpiter es 120 veces mayor. Y el volumen, 1.400 veces. Como quien pone una cereza al lado de un balón de fútbol. Pero eso no es nada, el Sol, una estrella del montón (excepto para nosotros, claro) es casi 1.000 veces más grande que Júpiter y 1.300.000 veces más que la Tierra.

Pero aún el Sol, con semejante tamaño, trata de no darse muchas ínfulas. La estrella Betelgeuse, que por esta época navideña se ve todas las noches como uno de los hombros de Orión, es 350 millones de veces más grande y, atención… 14.000 veces más brillante. Lleve abundante protector solar y gafas si planea acercarse.

Y la estrella más grande conocida, VY Canis Majoris, es 17 veces más voluminosa que Betelgeuse, o sea 6.000 millones de veces mayor que el Sol.

Además, el vecindario del Sol es pequeño, muy pequeño. Hace 35 años los humanos lanzamos las naves Voyager, que van por el espacio a 56.000 Km/h –la máxima velocidad que podemos darles-, y apenas ahora están empezando a salir del sistema solar. Para llegar a Alfa Centauri, la estrella más cercana de todas, aquí al ladito, harían falta otros… 70.000 años.

Y si algún día pudiéramos multiplicarles la velocidad por casi 20.000 para que fueran tan rápido como la luz, esas naves tomarían 100.000 años solo en ir de un lado a otro de nuestra galaxia, la Vía Láctea. Que tiene más de 200.000 millones de estrellas, una de ellas nuestro Sol. ¡Cada habitante de la Tierra agarre de a 30!

O sea, un rayo de luz que hoy esté llegando a un extremo de la galaxia fue emitido en el otro extremo cuando apenas unos grupitos de Homo Sapiens trataban de sobrevivir en ciertas comarcas africanas. Y la Vía Láctea, a propósito, es solo una galaxia del montón.

Bueno, y si queremos salir de la galaxia y visitar a nuestra vecina Andrómeda, que se puede ubicar a simple vista en noches claras, tocará pedir vacaciones en la oficina mínimo por cinco millones de años para ir y volver. Y eso a la velocidad de la luz.

Y nosotros aquí tan perturbados por los tacos de diciembre.
¡Feliz Navidad!
[email protected]

“Ahora son un simple adorno”

0
“Ahora son un simple adorno”

En San Lucas dicen que el barrio se volvió un atracadero. La Junta de Acción Comunal pide herramientas para apoyar a las autoridades

La gota que rebosó el vaso para John Jairo Arango fue el atraco del que fue víctima su hija. A ella la abordaron dos hombres en moto que la amenazaron con un revólver y le hurtaron el dinero que había retirado segundos antes en un cajero electrónico.
Aunque esta situación ocurrió cerca a La Visitación y no en San Lucas propiamente, se parece mucho a varios hechos ocurridos en los últimos meses en el barrio, extendiéndose sobre las transversales y en las zonas aledañas a Casa Victoria.
En la calle 19 sur con la carrera 17, por ejemplo, se han presentado robos, dado que es un tramo que no tiene muy buena iluminación.

Arango también afirma que “por el trajín de tantas personas que trabajan en el sector de la construcción en Envigado, el corredor de la 20 sur, en San Lucas, se ha convertido en zona obligada para muchas personas que pasan por allí”. En su concepto, esto habría deteriorado la seguridad.

En todos estos casos John Jairo ha sentido gran impotencia, y no solo porque sea el presidente de la Junta de Acción Comunal de San Lucas Los Mangos, sino porque no puede evitar pensar en unos radioteléfonos que sirvieron para alertar a la policía de estas fechorías, pero que hace un año no funcionan.

Él tiene uno de estos aparatos colgado en su casa como adorno. Cuando la señal no apareció más, Arango llamó a la estación de Policía El Poblado. Allí le informaron que estas herramientas dependían de una antena repetidora en el CAI de las Palmas, pero que esta se había desmontado porque no cumplía con los requisitos de ley.

Sin esos 11 radioteléfonos, que habían sido entregados por Presupuesto Participativo a varias juntas de acción comunal (Los Mangos, El Tesoro La Y, El Tesoro La Virgen, La Chacona, Los Parra, El Garabato, Poblado Centro, Manila y el Comité Cívico de El Poblado), la percepción de indefensión se hizo mucho mayor.

“A mi la policía me dice que tienen seguridad en todos los cajeros, pero en el transcurso de una semana, por el sector de la Visitación, esto ha sido un agosto para la delincuencia”, dice.

Otros teléfonos pero sin con qué sostenerlos
La reacción policiaca cuando funcionaban los radioteléfonos parecía de muy buen recibo para la comunidad. Los comentarios expresados es que era inmediata. “Se evitaron muchas situaciones delincuenciales”.

Los deseos comunitarios por contar con herramientas para ayudar a las autoridades no pararon allí. Se hicieron dos frentes de seguridad: uno en La Visitación y otro en Patio Bonito. Se instalaron dos cámaras, una en cada sitio. Además se asignaron 33 avanteles.

Pero, de nuevo se presentó un problema. Ahora resulta que la comunidad tiene que pagar 400 mil pesos para pagar una póliza y así poder retirar y activar estos teléfonos. Aparte de esto hay que asumir un plan de telefonía celular mensual. De inmediato la comunidad, incluido John Jairo, manifestó la inviabilidad de encontrar a alguien que se responsabilice en estas condiciones.

Estos aparatos hacen parte del contrato de los frentes de seguridad (hay 95 en El Poblado) y cobija a las juntas de acción comunal, a las asociaciones de comerciantes y a otros grupos organizados.

Respuestas a la ciudadanía
Vivir en El Poblado intentó comunicarse con la Secretaría de Seguridad, liderada por Eduardo Rojas y con la ESU (Empresa para la Seguridad Urbana). En la primera dependencia explicaron que en próximos días atenderán los requerimientos, por motivos de agenda, y en la segunda manifestaron no tener nada que ver con este tipo de tecnologías de apoyo comunitarias.

El que sí se pronunció fue el comandante de la estación de Policía El Poblado, Coronel Fabio Rojas, quien corroboró que la antena (repetidora) de Las Palmas fue retirada porque no cumplía con los requisitos de ley. Rojas expresó, además, que “se vienen atendiendo los requerimientos de cada una de las zonas” y mostró que incluso capturaron este mes a individuos que se dedicaban a hurtar bicicletas en Las Palmas, una situación que venía aquejando a esta zona, al igual que a San Lucas.

El uniformado aprovechó para recomendar de nuevo la comunicación con el cuadrante 8 (que cobija a San Lucas), cuyo número es 3127165018.
Por último, afirmó que “se viene trabajando en comunión con la policía de Envigado para realizar muchos más patrullajes”.

La situación planteada es que no hay herramientas para trabajar, en un momento en el que se le pide a la comunidad que colabore con la seguridad.

El fallo de la CIJ

0

El fallo de la CIJ

/ Juan Carlos Vélez Uribe
En días recientes tuve la oportunidad de visitar en compañía del expresidente Álvaro Uribe Vélez la isla de San Andrés. Allí pudimos conocer de primera mano los efectos que ha producido el fallo de la Corte Internacional de Justicia de La Haya en la vida del archipiélago y de sus pobladores. La verdad es que se queda uno asombrado del tremendo error que cometió la Corte de La Haya al despojarnos de no sé cuantos kilómetros cuadrados de mar, pero creo que la cifra es cercana a los cien mil.

Qué tristeza, la verdad hay que decirlo, que este tribunal no hubiese conocido en detalle lo que significa su decisión para la vida de un grupo amplio de habitantes de las islas, que dependen exclusivamente de los recursos naturales que reposan en esas áreas de mar de las que fuimos despojados. Me refiero principalmente a 600 pescadores artesanales de Providencia y a más de 3.000 trabajadores de las empresas pesqueras que tienen su asiento en San Andrés, que explotan la langosta y el caracol pala de los cayos y bajos circundantes a estos.

Es en estos sitios, los que quedaron en manos de Nicaragua, donde hoy se encuentran los principales bancos de pesca y los bajos donde se concentra el 70 por ciento de la langosta que se produce en la zona, la cual le representa al país varios millones de dólares en divisas, producto de su exportación. Es increíble que la Corte de La Haya no haya tenido en cuenta que las redes que se utilizan para la pesca en esas áreas tienen una extensión de 24 kilómetros y que el mar territorial de los cayos solo tenga 18 kilómetros contados a partir de sus costas. Tampoco que el caracol y la langosta que se reproducen en los cayos, se capturen en los bajos que se encuentran en las aguas asignadas a los nicaragüenses.

Igualmente, es lamentable que la CIJ de La Haya no tuviera en cuenta la existencia de la reserva de la biosfera declarada por la Unesco y que es conocida como Sunflower. Esta importante zona de protección en el mar Caribe incluye la barrera de coral que comienza en la isla de Providencia y se extiende por 32 kilómetros, la cual es considerada la tercera más extensa del mundo luego de la de Australia y la de Belice. Qué torpeza cometió la CIJ al dejar por fuera del control de las autoridades colombianas más de la mitad de esa barrera de coral. ¿Cómo irá a ser la depredación que va a ocurrir en esa parte que quedó en Nicaragua?

No tuvieron en cuenta tampoco que al asignarle zonas al país centroamericano donde se presume la existencia de yacimientos de hidrocarburos, como la denominada “Media Luna”, paralelo 15 con meridiano 82, cualquier accidente que se presente en la explotación de estos recursos generará seguramente un desastre ecológico en los ecosistemas de nuestros cayos e islas, y la coordinación entre los dos países para enfrentarlo será muy compleja dada la figura propuesta por la Corte sobre cayos “incrustados” en el mar de otro país.

Estas razones que traigo hoy a colación se suman a las tantas que hemos venido arguyendo un número importante de colombianos que sostenemos que este fallo injusto de la CIJ de La Haya no debemos acatarlo. Fue una decisión que no se ajustó a derecho y por lo tanto es un deber patriótico no aceptar ese despojo orquestado por el tribunal de La Haya.
[email protected]