En este oficio de emitir opiniones es forzoso hacer de abogado de todos los diablos o dioses, pues, si se abandona uno a sus convicciones férreas, poco habrá para decir: no sé si Dios existe, los hombres son estúpidos y la única ciencia verdadera es pasar el rato. Cuando se trata de pensar sobre el papel, lo que uno escribe sobre las cosas depende de poco más que la humedad del ambiente, y después de varias decenas de columnas es imposible recordar qué se ha dicho de tanto asunto suelto, de modo que ser inexpugnablemente coherente resulta ser empresa solo para elegidos. Vaya un ejemplo de la opinión “variable y ondeante”.
Sixto Paz en enero y Jorge Suárez la quincena que terminó, visitaron Medellín para “difundir su verdad”, en la que tienen cabida seres extraterrestres, naves voladoras y escondrijos bajo tierra. “No teman: son amigos”, coinciden
Jorge Suárez cuenta que su región, la del Cerro Uritorco, noche a noche es sede de una fe-nomenal dinámica de avistamientos de esferas de todos los tamaños y colores, y cree que en sus profundidades opera una base de los extraterrestres.
El auditorio de una conferencia sobre Ovnis bien podría confundirse con el de las charlas culinarias de Nacho Cajiao, el de las ceremonias religiosas, o de la reunión cívica para planear una tutela contra la Alcaldía. Van señoras de edad, muchachos de pelo largo, señoras de más edad, tipos sin pelo, niños, jóvenes bonitas y otras no tanto, con la diferencia de que allí lo que buscan son contactos con “entidades biológicas extraterrestres”, como las llaman.
Es gente, la del auditorio, convocada por la pasión Ovni, para otros Veds -vehículos extraterrestres dirigidos-, que da la idea de tener más información que curiosidad. De hecho sus preguntas superan las imaginables ¿qué fue lo que más les gustó de Medellín a los extraterrestres?, o si fue verdad que trajeron la Piedra del Peñol: nada qué ver.
Las obras del Museo de Antioquia... una visita guiada
Caminar (Ed. 296)
Textos de Carlos Arturo Fernández, profesor de Artes de la Universidad de Antioquia y miembro del Consejo de Curaduría del Museo de Antioquia, para Vivir en El Poblado.
Los escribe una mujer guajira: elogios para su cocina
De la edición impresa (Edición 296)
Mi correría por el Caribe me sigue dando tema para esta columna, y boba sería si después de pasar a vuelo de pájaro por la hermosa Guajira no fuese capaz de referirme de alguna manera a esta exuberante región de Colombia. Y digo a vuelo de pájaro porque definitivamente para conocer en profundidad una región como esta se necesita vivir en ella al menos un invierno y un verano.
Adaptado para Internet de la edición impresa (Edición 295)Carlos H. Jaramillo, Subsecretario de Planeación Este sector de la ciudad especialmente vive una cultura individualista....
Entre los conflictos usuales entre vecinos, ruido, daños, basuras, abuso de confianza, siempre se ha hecho notoria una modalidad bien particular: montar un pleito, hasta con abogado, contra el próximo, y desconocido, ocupante del barrio. Conocedores ofrecen sus interpretaciones
Nota adaptada para Internet de la edición impresa (Edición 295)
“El vecindario está convertido en un chiquero y probablemente es por culpa de gente que viene de otros sectores de la ciudad”, decía una carta de protesta que llegó el 28 de abril a Vivir en El Poblado desde La Aguacatala, y que si se estudia con detenimiento comparte unos intereses y una manera de comprender el mundo con los del enfurecido habitante de La 10 que en una reunión cívica del 4 de abril en el Cerca dijo que “la explicación a los problemas que sufre el parque principal en la noche es que sus usuarios no son de aquí”, y que también se identifica con el ataque jurídico en diciembre desde el Edificio Mindanao contra el proyecto residencial Santos por razón de que les van a “dañar el vividero".
Iniciativa para remediar los problemas de movilización, espacio público y medio ambienteAdaptado para Internet de la edición impresa (Edición 294)Los objetivos que públicamente pretende...
Los expertos aseguran que entre el 20 % y el 30% de las mujeres han sido abusadas sexualmente en su infancia o adolescencia, igual que el 15 % de niños. El abuso tiene muchas formas.
De la edición impresa (Edición 293)
Hay un tipo llamado Lindsay Ashford que tiene un sitio en internet en el que hace apología de la pedofilia; se presenta a sí mismo como un amante de las niñas y que personas como él, que las quieren tanto, jamás les harían daño. En otro sitio, El Castillo Azul, se reúnen hombres a los que les gustan los menores de edad, para hablar de sus gustos y para comunicarse con muchachos a los que según ellos les atraen los hombres mayores.
Pero eso que parece tan lejano puede estar a la vuelta de su casa. En las madrugadas de El Poblado es posible conseguir una niña o un niño en la calle para tener sexo con ella o él; de hecho hay gente que lo hace. Y así como pasa en esta comuna, pasa en muchas otras zonas de la ciudad y en diferentes modalidades (en prostíbulos, salas de masajes, parques y calles oscuras pero no lejanas).
La factura del predial del segundo trimestre, en repartición esta quincena, dará cuenta además de la suerte que corrieron las reclamaciones que presentaron desde febrero los ciudadanos inconformes con los nuevos avalúos de sus propiedades .
En El Poblado y otras cuatro zonas el valor catastral –base para calcular el impuesto a casas, apartamentos, oficinas, lotes y demás- fue actualizado después de cinco años.
Los sistemas de intercambios de archivos Peer to Peer (P2P), algo así como 'de igual a igual', en los que se basan programas como Kazaa, Limewire, Morpheus, Emule y el nuevo Bittorrente, no están exentos de problemas. Constituyen una violación de los derechos de autor y le abren la puerta de su computador a todo tipo de visitantes, con intenciones no siempre buenas. A pesar de lo extendido de su uso, hay mucho desconocimiento sobre ellos.
El Municipio de Medellín, por medio de su Secretaría de Gobierno ganó las tutelas de los negocios del Mall Vial La Aguacatala a finales del año pasado.
Se trata de los negocios que cerró la Inspección de Policía 14B por no cumplir con los requisitos de ley (por tener venta y consumo de licor a pesar de la vigencia de un decreto de congelación expedido por la Alcaldía desde antes de que abrieran esos negocios) y que habían incoado unas acciones de tutela (no se dice poner una tutela, sino incoar una tutela) en defensa del derecho al trabajo, a la igualdad y al debido proceso.
Llegó la primera cuenta del predial y como estaba pronosticado hubo contribuyentes a los que el nuevo avalúo de sus propiedades y en consecuencia el impuesto recalculado les causó alarma.
Nada mejor para producir una mezcla de emociones contradictorias. Ansiedad y excitación por todo lo que viene, y a la vez disgusto y malestar de que las vacaciones se acabaron.
Todos los niños (los chiquitos, los medianos y los más grandes), sienten un hormigueo en el estómago en esta época del año, no importa si las vacaciones estuvieron llenas de actividades o de reclamos porque se aburrían sin nada para hacer.
Textos de Carlos Arturo Fernández, profesor deArtes de la Universidad de Antioquia y miembro del Consejo de Curaduría del Museo de Antioquia, para Vivir en El Poblado.
Las obras del Museo de Antioquia... una visita guiada
Las obras del Museo de Antioquia... una visita guiada
San Lorenzo (Ed. 228)
Textos de Carlos Arturo Fernández, profesor deArtes de la Universidad de Antioquia y miembro del Consejo de Curaduría del Museo de Antioquia, para Vivir en El Poblado.
Las obras del Museo de Antioquia... una visita guiada
Fachada del edificio (Ed. 227)
Textos de Carlos Arturo Fernández, profesor deArtes de la Universidad de Antioquia y miembro del Consejo de Curaduría del Museo de Antioquia, para Vivir en El Poblado.
Las obras del Museo de Antioquia... una visita guiada
Horizontes (Ed. 226)
Textos de Carlos Arturo Fernández, profesor deArtes de la Universidad de Antioquia y miembro del Consejo de Curaduría del Museo de Antioquia, para Vivir en El Poblado
Para la mayoría de los mortales, sobre todo los más mayores, el asunto de los computadores sigue siendo algo entre mítico y misterioso, quizás algo mágico. Pero los jóvenes de Medellín ya van bien adentro en el camino de las nuevas tecnologías y en su relación con el mundo exterior.
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