MOSTRANDO LOS RESULTADOS PARA:

La Medellín de Emiro Kastos

La Medellín de Emiro Kastos
/ Etcétera. Adriana Mejía
“Las costumbres son frías y ceremoniosas: los hombres no se reúnen sino para tratar cuestiones de dinero”

La Medellín de ponqué

La Medellín de ponqué
/ Etcétera. Adriana Mejía
O este valle de lágrimas fue alguna vez un paraíso terrenal o míster Scully era un tontarrón de los pies a la cabeza

Pastrana, el Memorioso

Pastrana, el Memorioso
/ Etcétera. Adriana Mejía
Memorias olvidadas ya no exhala el aroma del pan recién salido del horno

Una sola sombra ancha

Una sola sombra ancha
/ Etcétera. Adriana Mejía
¿Memoria u olvido? No es fácil la disyuntiva

Como hígado de pato

Como hígado de pato
/ Etcétera. Adriana Mejía
Y, que conste, no quiero faltarle al respeto

Entre el cuero y la cuerina

Entre el cuero y la cuerina
/ Etcétera. Adriana Mejía
Deplorable espectáculo para este circo de tres pistas

Pague una y lleve dos

Pague una y lleve dos
/ Etcétera. Adriana Mejía
Es como si a Medellín la hubiéramos conseguido en un pagueunayllevedos y hubiéramos salido estafados con la ñapa

Los libros, forever

Los libros, forever
/ Etcétera. Adriana Mejía
Con la cola de “Guillermito” colgándole todavía de la boca, sacaron a Fulanita a empujones de la habitación

Los que saben de paz

Los que saben de paz
/ Etcétera. Adriana Mejía
Tarde o temprano, como sociedad, seremos coprotagonistas. Que el momento nos coja preparados

Medellín en ascuas

Medellín en ascuas
/ Etcétera. Adriana Mejía
Entre los muchos acontecimientos que suelen mantener en ascuas a Medellín hay tres que han sobresalido en los últimos días

Camilla, batola y catéter

Camilla, batola y catéter
/ Etcétera. Adriana Mejía
Con contadas y honrosas excepciones, médicos y enfermeras hablan entre sí en un lenguaje incomprensible

Angelinas como arroz

Angelinas como arroz
/ Etcétera. Adriana Mejía
Los verdaderos ejemplos provienen de mujeres que ponen la cara a la vida (y a la muerte) sin apellidarse Jolie

Ay Bangladesh

Ay Bangladesh
/ Etcétera. Adriana Mejía
Da ganas de no cambiarse la piyama

Tambalean las coronas

Tambalean las coronas
/ Etcétera. Adriana Mejía
Las cortes cuestan más al pueblo de lo que lo benefician

Con los nobel de punta

Con los nobel de punta
/ Etcétera. Adriana Mejía
No puede llamarse literatura a un texto que no consigue cambiarte en algo la vida

¿Quién da más?

¿Quién da más?
/ Etcétera. Adriana Mejía
La porno violencia vende, el negocio está servido

En modo innovador

En modo innovador
/ Etcétera. Adriana Mejía
La sociedad, ocupada en hacer plata, es muy culpable del deterioro que echó raíces en valles y laderas

Como pompas de jabón

Como pompas de jabón
/ Etcétera. Adriana Mejía
Demasiados lobos arrebatándose la gloria terrenal

LLavanderas de festival

Lavanderas de festival
/ Etcétera. Adriana Mejía
Me volvió la misma sensación de que de los pies a la cabeza soy puro y adolorido estómago

Las letras que respiro

Las letras que respiro
/ Etcétera. Adriana Mejía
El aporte de Schami a la literatura y a la comprensión del mundo está asegurado

Mis respetos

Mis respetos
/ Etcétera. Adriana Mejía
Y, entonces, las carencias de unos, por la magia de birlibirloque se convierten en el exhibicionismo de otros

Tacones cercanos

Tacones cercanos
/ Etcétera. Adriana Mejía
Colombia debería estar de fiesta con este acto de reparación, pero no

 

Ídolos y dolos

Ídolos y dolos
/ Etcétera. Adriana Mejía
En erigir y derribar diosecillos pasajeros nos tenemos confianza


Perro es perro

Perro es perro
/ Etcétera. Adriana Mejía
Hay que convivir con ellos para saber que, más allá de su aspecto físico y de sus reacciones instintivas, son individuos inteligentes

“¡Oh, ahí va”!

“¡Oh, ahí va”!
/ Etcétera. Adriana Mejía
Siempre va a ser más rápido, fácil y efectivo coger por el atajo

A la caja, libros

A la caja, libros
/ Etcétera. Adriana Mejía
Con la lectura, el sabor es lo primero; el saber llega por añadidura>

Flipando en colores

Flipando en colores
/ Etcétera. Adriana Mejía
La peor parte del paseo, la única jarta, es el trayecto Medellín-Pintada

Detrás de una medalla

Detrás de una medalla
/ Etcétera. Adriana Mejía
Ahí sí salen presidente, gobernadores, alcaldes, líderes políticos a ofrecerles carro, casa y beca

Mi amiga, Fulanita

Mi amiga, Fulanita
/ Etcétera. Adriana Mejía
“Despegamos a tiempo, con gente hasta de un solo ojo, como diría mi mamá”

Me fascinás, Falcao

Me fascinás, Falcao
/ Etcétera. Adriana Mejía
“Me fascinás, Tigre. No importa que te llamés como te llamás”

Turistas de pelo tieso

Turistas de pelo tieso
/ Etcétera. Adriana Mejía
Me refiero a ciertos mochileros que asaltan, como langostas, ciertos hostales de garaje de esos que se dan silvestres en la Comuna 14

En cuanto a nalgas se refiere

En cuanto a nalgas se refiere...
/ Adriana Mejía
Si me alimentara de revertrex y fuera jurado de un concurso de imitadores, haciendo mohines hubiera dicho: me ericé, mi amorrr

Dónde andarán nuestros mozos

¿Dónde andarán nuestros mozos?
/ Etcétera. Adriana Mejía
Sfeir-Younis encarna uno de esos escasos eslabones que unen los dos mundos: el del espíritu y el de la materia

Hugo, Óskar y los demás

Hugo, Óskar y los demás
/ Etcétera. Adriana Mejía
Más que actuar como un hijo herido y desconcertado, lo hace como un tiranito que le vuelve la vida imposible a su mamá y al público, por ahí derecho

En blanco y negro

Opinión / Etcétera. Adriana Mejía
En blanco y negro
Qué pena con tantas mujeres negras que se desempeñan con idoneidad en cualquiera sea la tarea que se propongan

Qué noche la de esa noche

Nunca fue tan evidente la oscuridad que a pasos largos se apodera del mundo, como en el Debate del 27 de junio. Publicitado al...

Expoartesano “La Memoria”: una celebración de las culturas ancestrales en Plaza Mayor

Con una inauguración llena de música a cargo de la Filarmónica Emberá Chamí y el tenor Eduardo Escolar, Plaza Mayor Medellín recibe a Expoartesano...

Bajo el ala del sombrero

¿De manera, pues, que cuando Petro deje la jefatura de Estado, la gorra que le sirvió de techo de invernadero mientras le pelechaba la...

Fulanita no marchó

Mi amiga, Fulanita, no marchó. Por dos razones, me dijo. Una: el pánico que tiene a las multitudes -no va a conciertos de tarima...

Y dele con el grito herido

El sonado caso de pederastia sucedido hace poco en un hotel de El Poblado, no ha sido la excepción a la regla, como tampoco...

El boceto póstumo

¿Esto era todo?, me pregunté en voz alta. La expectativa que había precedido la publicación de En agosto nos vemos, cuando cerré el libro,...

Jamón crudo sin sal

Adolfo, uno de los primos Strauch que sobrevivieron al accidente aéreo de los Andes (Daniel y Eduardo, los otros dos), en vista de que...

Un minuto de silencio

La lujuria del micrófono y de las redes sociales nos trae a los colombianos de a pie, por la calle de la amargura; al...

¡Ah cosa bella, carajo!

Alguien escuchó a un davoseño, davosense, davosano –ignoro el gentilicio de los nacidos en Davos- que al toparse con un yipao –su alquiler fue...

Petro en la taza del café

Tengo un ritual por las mañanas: saborearme, con parsimonia, un americano que me potencia la alegría de vivir. Lástima que ahora me está sentando...

Luz María Montoya, la cronista

El corazón de la montaña, así se titula el libro en el que Luz María Montoya Hoyos recopila parte de sus crónicas, perfiles y...

El virus que nos cambió la vida

Las ediciones de Vivir en El Poblado de 2020 son ejemplares de colección, porque algún día vamos a querer recordar, perplejos, todo lo que...

Vientos de paz

Cinco años han pasado ya desde la firma del Acuerdo para la Terminación Definitiva del Conflicto, en noviembre de 2016. ¿Cómo cubrió Vivir en...

A bajarle al tonito, cantineros

Vecinos del Mall Verona, desesperados con el ruido y el desorden que se genera en algunos de sus locales, piden a las autoridades que...

Ahí va Melania con su neceser

Un contrincante gris, a quien subestimaba, desacreditaba y matoneaba en la campaña, le arrebató el triunfo a Donald Trump.¿Y Melania? Ahí va, con su...