Mis maestros se sorprendieron por la fascinación que ejerció el Kybalión sobre mí. Lo leía y lo releo con mucha frecuencia y sigo convencida del tesoro único y exclusivo que representa.
Hay un pequeño libro que es como la biblia del esoterismo y de las mánticas o artes adivinatorias: el Kybalión. Recuerdo que cuando me lo recomendaron me recorrí varias librerías en Medellín y no lo pude conseguir hasta llegar a la Anticuaria y, para mi gran sorpresa, me entregaron un librito muy subrayado y en un estado lamentable.
Mis maestros se sorprendieron por la velocidad con que lo logré conseguir y por la fascinación que ejerció sobre mí. Lo leía, releía y lo releo con mucha frecuencia y sigo convencida del tesoro único y exclusivo que representa.
Sus autores, tan discutidos, se hacen llamar los tres iniciados, que sin duda fueron muchos más los que intervinieron en su escritura. Lo publicaron como un tratado con siete principios herméticos, ocultistas, basados en los principios que Hermes ha enseñado a la humanidad para su comprensión y desarrollo:
- Mentalismo. El Todo es mente; el universo es mental. El Todo es el conjunto totalizador. Nada hay fuera del Todo.
- Correspondencia. Como es arriba, es abajo; y la inversa. Como ha de ser, será.
- Vibración. Nada está inmóvil; todo se mueve; todo vibra.
- Polaridad. Todo es doble, todo tiene dos polos; todo su par de opuestos: los semejantes y los antagónicos son lo mismo; los opuestos son idénticos en naturaleza, pero diferentes en grado; los extremos se tocan; todas las verdades son medias verdades, todas las paradojas pueden reconciliarse.
- Ritmo. Todo fluye y refluye; todo tiene sus períodos de avance y retroceso, todo asciende y desciende; todo se mueve como un péndulo; la medida de su movimiento hacia la derecha es la misma que la de su movimiento hacia la izquierda; el ritmo es la compensación.
- Causa y efecto. Toda causa tiene su efecto; todo efecto tiene su causa; todo sucede de acuerdo con la ley; la suerte o azar no es más que el nombre que se le da a la ley no reconocida; nada escapa a la Ley.
- Género. El género existe por doquier; todo tiene su principio masculino y femenino; el género se manifiesta en todos los planos.
Retomarlo hace que me dedique con pasión a descubrir la correspondencia de los tiempos y a hablar de ellos, sobre cómo nos repetimos.
Así llegó Jonás, expulsado del gaznate de la ballena, a predicar que el mundo se va a acabar si el ser humano no reacciona. Por resonancia, nosotros salimos de la era de Piscis y vemos cómo el mundo se está destruyendo si no hacemos el gran cambio
Y el segundo tema es el del final de la esclavitud y la salida de los Israelitas de Egipto, porque nos estamos convirtiendo todos en esclavos de nuestras ambiciones frente al baratillo de ilusiones de placer, poder y posesión con que la vida nos esta sometiendo.
Y ahí sigo, pensando que la vida merece reacciones definitivas que rompan esquemas tan arcaicos y obsoletos.