Esta variedad de vino blanco es la más popular en España. Se trata de una bebida fácil de tomar, con aromas y sabores frutales.
Cuando se habla de vino español, lo más seguro es que a la cabeza de aquel que es experto venga, en primer lugar, el tempranillo, una variedad de uva tinta que caracteriza las botellas de la península ibérica. Sin embargo, otra cepa que también es insignia es la verdejo.
“Cuando las personas hablan de vino blanco, generalmente solo hablan de chardonnay o sauvignon blanc”, expresa Sergio Fiorentini, director de exportación de la bodega española Cuatro Rayas. “Sin embargo, el mundo de las uvas blancas es mucho más grande”. Y, precisamente, el verdejo es una variedad que cada vez conquista más a los paladares. De hecho, es el vino blanco más tomado y exportado en España.
El verdejo se cultiva en la denominación de origen (D.O.) Rueda (ver mapa), cuya zona de producción se encuentra en las provincias de Valladolid, Segovia y Ávila en el centro de España. Está integrada por 72 municipios, de los cuales 53 se sitúan al sur de la provincia de Valladolid, 17 al oeste de Segovia y 2 al norte de Ávila. Y el 22 % de los vinos producidos en esta D.O. se elaboran, precisamente, en la bodega Cuatro Rayas.
El verdejo es un vino muy frutal; “tiene una nariz de monte bajo, como decimos los españoles”, explica Sergio. Es decir, tiene aromas a pasto recién cortado. “También a semillas de anís, hinojo, manzana verde y, dependiendo de la edad de las viñas y a la fermentación, pueden encontrarse también aromas a liches, maracuyá y otras frutas tropicales”, explica el experto.
Acidez
Una de las grandes ventajas de este caldo es que es muy fácil de entender: “No hay que darle muchas vueltas en la copa para que deje salir sus notas”, dice Sergio. Y una de las virtudes que presenta, además, es la acidez en boca que lo convierte en un excelente vino para maridar con las comidas diarias. De hecho, el vino Cuarenta Vendimias acaba de resultar ganador como el mejor vino blanco para todos los días en la pasada versión de Expovinos, feria organizada por el Grupo Éxito.
El terruño
Los aromas y sabores del verdejo de Rueda son el resultado de una combinación de factores que solo se encuentran en este lugar de España. “Nuestros microclimas se complementan con un terreno plano, compuesto de suelos aluvionales, cascajosos y muy fáciles de labrar, lo que hace que el agua pase más fácilmente”, dice Fiorentini. Además, la altura (600 a 780 msnm) brinda inviernos largos y primaveras cortas que favorecen la floración de la uva. Por otro lado, los inviernos calurosos se complementan con una amplitud térmica, fundamental para el desarrollo de los aromas típicos de la variedad.