Taller de Pasta, fábrica artesanal que incita a los comensales a despertar su creatividad
A Avigliana, el catalán Jordi Herrandiz fue esquiar y encontró su actual oficio. En este pueblo italiano, la abuela de uno de sus amigos le enseñó lo suficiente para cultivar un apasionante hobby: fabricar pastas artesanales.
Años más tarde, viviendo en Medellín con su esposa paisa Claudia Cuartas, las pastas caseras de Jordi eran cada vez más populares entre sus conocidos. El pasatiempo se transformó en negocio y nació Taller de Pasta, fábrica donde Jordi, de manera artesanal, produce pastas cortas (caserecce, penne, fusilli, torchietti), largas (spaghetti, fettuccine, y papardelle) y rellenas (raviolis de carne, pollo, queso y albahaca, y queso y espinaca), que vende a particulares y restaurantes.
Además de atender eventos y domicilios, Jordi abrió en la parte frontal de su taller un espacio que funciona como un pequeño restaurante, en el que los comensales pueden combinar las pastas con cinco salsas básicas (napolitana, Alfredo, tres quesos, pesto y champiñones y limón) y personalizarlas con una docena de adiciones, haciendo del gusto y la invención propia las claves para lograr un buen plato.
La fábrica funciona de lunes a sábado de 9 am a 6 pm (los sábados cierra a la 1 pm). El restaurante abre a la hora de almuerzo de 12 a 2 pm, de lunes a viernes. Jordi también atiende en las noches, pero solo reservas en grupos. Es muy importante llamar con suficiente antelación para confirmar su disponibilidad. Taller de Pasta está situado en la calle 10 sur # 45-150. Informes en el 321 2032.