El Colegio San José de Las Vegas acaba de inaugurar en su sede de El Retiro un aula “gamer”, con el fin de implementar estrategias de aprendizaje basadas en videojuegos.
Eso de la letra con sangre entra ya no aplica. Afortunadamente. Hace muchos años que las personas y entidades encargadas de la educación de los niños y jóvenes entendieron que la letra con diversión entra. O con juego, como es el caso del colegio San José de Las Vegas, que acaba de inaugurar, en su sede de El Retiro, el aula gamer Play to Learn.
¿De qué se trata?
De un aula para aprender jugando. Más de dos mil estudiantes de la institución cuentan ya con un espacio dotado con consolas de Play Station 5 y Xbox, televisores, y PC gamer, para que puedan desarrollar diferentes competencias, desde metodologías basadas en los videojuegos. Una innovadora metodología de aprendizaje, que recoge la tendencia de la gamification (ludificación, en español), es decir, una técnica de aprendizaje que traslada el lenguaje y la mecánica del juego al ámbito educativo y profesional.
La apuesta del colegio San José de las Vegas con esta innovadora experiencia de aprendizaje es fortalecer las competencias que requieren los estudiantes del siglo XXI, es decir, el trabajo colaborativo, la resolución de problemas, la creatividad y la toma de decisiones. Según el profesor Óscar Mauricio Ortiz, docente de segunda lengua y tecnología en la Institución, esta metodología “involucra todas las áreas del conocimiento, como la ciencia, la tecnología, la ingeniería, el arte y las humanidades”. Basados en la estructura de los videojuegos, que los estudiantes tanto conocen -y aman-, los docentes diseñan distintos proyectos de aula, en todas las áreas.
¿Qué opinan los estudiantes?
Según Juan Manuel Uribe, del grado 8°, se trata de “una forma divertida y descomplicada para aprender, que nos ayuda a desarrollar un pensamiento estratégico, que es lo que generan los videojuegos. Y, claro, nos salimos de lo tradicional, de un salón de clase en el que podemos estar aburridos”.
Tomás Monsalve Bernal, del grado 11°, considera que es una excelente herramienta para aprender una segunda lengua: “Todos los videojuegos son en inglés, entonces uno debe esforzarse para aprender a hablarlo, a entenderlo y escucharlo”. María José Alfonso, del grado 11°, por su parte, está convencida de que “los videojuegos nos ayudan a desarrollar diferentes habilidades como la atención, la concentración, a fomentar los idiomas, la memoria y el trabajo en equipo”.
Los niños se concentran mucho más, y les prestan mucha más atención a las clases, ya que es algo que les gusta”
Valeria Moreno, grado 5°
Y Valeria Moreno, del grado 5°, tiene la clave; según ella, contrariamente a lo que se piensa en la educación tradicional, el juego no distrae, sino que ayuda al aprendizaje: “Nos ayuda a aprender de una manera más divertida. Los niños se concentran mucho más, y les prestan mucha más atención a las clases, ya que es algo que les gusta”