Donald Trump asumió la presidencia de Estados Unidos anunciando que declarará dos emergencias nacionales: energética y migratoria, en un esfuerzo por revertir muchas de las políticas de su predecesor, Joe Biden. En su discurso de investidura, prometió tomar medidas inmediatas en temas como migración, energía, diversidad y aranceles, con la intención de posicionar nuevamente su sello en la Casa Blanca.
Emergencias nacionales y cambios en migración
Trump aseguró que firmará una orden ejecutiva para declarar una emergencia nacional en la frontera sur, e instaurar la política Quédate en México y acelerando la deportación de extranjeros con antecedentes criminales. Además, el mandatario buscará finalizar la construcción del muro fronterizo y establecer centros de detención temporal para migrantes. “Todas las entradas ilegales serán frenadas”, afirmó.
Reformas energéticas y fin a las políticas de diversidad
Otra de las medidas que dijo el mandatario estadounidense clave fue la firma de una orden para revertir el programa de energías limpias impulsado por Biden. Trump apuesta por un modelo basado en combustibles fósiles, con especial énfasis en la explotación de recursos en Alaska. “Liberaremos nuestra energía y seremos autosuficientes”, expresó.
En cuanto a diversidad, el nuevo presidente mostró su voluntad de acabar con los programas de equidad, diversidad e inclusión (DEI) en agencias gubernamentales, proclamando que el gobierno federal reconocerá únicamente los sexos masculino y femenino. Además, revisará las subvenciones relacionadas con justicia ambiental y capacitación en diversidad.
Un mandato con sello propio
Trump ha prometido un inicio de mandato con “velocidad y fuerza históricas”, con más de 100 decretos ejecutivos en su primer día. Entre ellos, también planea recuperar el control del Canal de Panamá y fomentar la adopción del bitcoin en las finanzas estatales.
“Esta será la era dorada de Estados Unidos, y nadie nos tomará ventaja”, concluyó Trump en su discurso de toma de posesión.