Hace unos días, el presidente Gustavo Petro Urrego había anunciado que declararía la emergencia por Desastre en Colombia. La promulgación se cumplió este martes, 1 de noviembre, pero ¿qué representa?
Lo primero es que esta declaratoria se originó por la extensa temporada de lluvias de este año y busca, con el enfoque de cumplimiento de cinco objetivos, enfrentar el hambre y la crisis por las lluvias.
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Y es que las lluvias de los últimos meses en Colombia son las más altas de los últimos 40 años. Tristemente se reporta la muerte de 266 personas a causa de los desastres por las lluvias en el país y 300 municipios se han tenido que declarar la calamidad pública para atender las afectaciones.
Como antecedente, el pasado lunes 31 de octubre, en reunión del Consejo Nacional de Riesgo, entidad compuesta por el gabinete nacional y las entidades especializadas en Atención de Desastres, se decidió declarar el Desastre en el país. Y no se apellida natural porque no es un desastre natural; es la combinación entre el Fenómeno de La Niña, que se ha profundizado por la crisis climática.
La situación del país
Los niveles en este momento de lluvias durante todo el año, que se mantienen desde el mes de marzo de 2022, son los más altos en los últimos 40 años. Ni siquiera el desastre del 2010 – 2011, logra los niveles actuales de caída de lluvias. Y hay una probabilidad del 54 % de que se prolonguen para el año entrante, lo cual pone al país en una situación difícil.
Precisamente, por eso se decretó el Desastre, después que casi 300 municipios lo han hecho a través de calamidad, la figura que se utiliza municipalmente.
El país se acerca a la cifra de 800 municipios afectados y el número de muertos asciende a 266. Además, hay una pérdida ostensible de cosechas que agrava la situación del precio de alimentos, que ya vienen altos por los enfrentamientos en Ucrania, por la inflación en dólares de los alimentos y por la caída del peso.
¿Qué se hará con la declaratoria?
En esta declaratoria de Emergencia se sumarán una serie de partidas, no ejecutadas aún en el presupuesto nacional en diferentes entidades, dinero que se va a invertir en lo que queda del año en atender los problemas del hambre y los problemas de la emergencia propiamente dichas.
Es una concentración de parte del presupuesto que aprobó el gobierno pasado, cambiándole su destinación hacia la atención exclusiva del hambre y de la emergencia que se provoca con las lluvias.
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Javier Pava, director de la Unidad de Riesgos, explicó que entre los objetivos propuestos de destinación de ese dinero están los siguientes cinco puntos:
Un subsidio de transferencia a personas madres cabeza de familia y madres de hijos en la primera infancia, de $500.000.
Se cambiarán las formas de contratación. El gobierno nacional podrá contratar, de ahora en adelante, directamente a organizaciones populares, entre ellas las Juntas de Acción Comunal, para que estas organicen allí un Comité de Hambre para lograr dar a través de ollas comunitarias: desayuno, almuerzo y comida en los barrios populares y en las veredas afectadas.
Se va a ampliar el PAE, Programa de Atención Escolar, de tal manera que cubra el 100 % de los jóvenes y niños, y que, además, se extienda por el periodo de vacaciones hasta el 31 de diciembre de este año.
Se transformará Indumil en una reconversión industrial, para que pueda construir puentes, al estilo de los que se importan, para dar rápidamente la apertura de comunicación vial en las partes donde se han caído los puentes o donde se han roto las carreteras.
Se instalará un subsidio del 100 % a los fertilizantes que se destinen a la producción de alimentos en Colombia, como la producción cafetera, para dar rentabilidad al producir alimentos. Con esto, se busca que para el primer semestre del año entrante se tenga una canasta familiar mucho más barata para comprar en el supermercado.
“Estos son objetivos billonarios, al valorar cada uno de estos objetivos estamos hablando de billones de pesos, que trataremos de ejecutar a través de la figura del desastre hasta el 31 de diciembre, el año entrante nos fortaleceremos con el presupuesto y la adición presupuestal que se presentará, si la reforma tributaria es aprobada en la próxima semana”, dijo Javier Pava.