El consumo mensual de electricidad de un hogar promedio colombiano es de 157 kWh. En febrero de 2024, la demanda de energía en Colombia experimentó un incremento del 5,48% en comparación con el mismo periodo del año anterior. De las diez regiones del país, la región Caribe lideró el consumo de energía con 1.759,72 gigavatios hora, seguida de la región Centro con 1.561,69 GWh y Oriente con 935,79 GWh.
Mario Alberto Luna, profesor del programa de Ingeniería en Energía de la Universidad de Medellín, explica que el aumento del costo de la energía que los antioqueños y los colombianos ven en sus cuentas de servicios públicos también se debe a malas prácticas en los hogares. Hay electrodomésticos que, por su uso, requieren sacar más dinero de los bolsillos cada mes. Conocer esto es esencial.
Electrodomésticos de Alto Consumo
- Nevera: “en el top 1 siempre va a estar la nevera y eso depende mucho de las prácticas de abrirla. Dejarla abierta va a encender el compresor y va a empezar a consumir más energía. Entonces, debemos cerrar la nevera. Otra recomendación es cambiar la nevera por tecnologías más recientes con compresores inverter que consumen menos energía”, explicó el docente.
- Freidora de aire: este electrodoméstico puede oscilar entre 1.200 a 1.800 vatios de consumo. “Si la vamos a utilizar por 30 minutos o una hora, vamos a consumir mucha energía, similar a una plancha de resistencias eléctricas”, agregó.
- Microondas: ocupa el tercer lugar, especialmente cuando se usa para descongelar alimentos, ya que puede tomar entre 10 y 15 minutos. “Es un electrodoméstico que puede estar entre 1.500 y 2.000 vatios durante 15 minutos, y su uso recurrente durante la semana puede aumentar significativamente la factura”, explicó Luna.
Malas prácticas en los hogares
Los consumos ‘vampiros’ también contribuyen a que la cuenta de servicios suba. Ejemplos incluyen mantener el celular cargando constantemente y tener el router del wifi prendido todo el día. “Hay consumos mínimos, pero extrapolados a periodos largos de tiempo, estos consumos pueden ser significativos”, explicó el profesor.
Otras malas prácticas son dejar el televisor prendido mientras se realizan otras actividades, dejar las luces encendidas o no cambiar la iluminación tradicional por luces eficientes como las LED.