Hoy niños y adolescentes se ven inmersos en el mundo de la tecnología y por eso muchos de los padres, los maestros y los niños dicen que sus hijos, alumnos y ellos mismos no quieren leer, porque las pantallas y los botones están ofreciendo una serie de actividades en los que ese acto va perdiendo su importancia y la lectura se está haciendo cada vez más lejana.
La tecnología nos plantea nuevos retos; retos que nos ponen a pensar en la realización de estrategias o caminos que promuevan la lectura desde el hogar, para que así los niños empiecen a quererla y a convertirla en un evento significativo que como consecuencia va a lograr que le tomen amor y la incluyan en su quehacer.
También le puede interesar:
- Eafit y CES, las mejores de Colombia en índice mundial de Objetivos de Desarrollo Sostenible
- Campaña Libros son amores apoya librerías locales e independientes
- Agenda para vivir sin salir de casa
- Galería Arte Alto crea proyecto de apoyo a los artistas
- La Semana del Libro y el Idioma de Medellín será en casa este año
A continuación unos tips que podemos llevar a cabo para estimular la lectura:
- Leer en voz alta a los niños un cuento o historia que ojalá pocos conozcan, para interrumpirla y entre todos armar un final. Luego confrontar con el texto cuál de los finales se ajustó a la realidad
- Hacer un móvil de los personajes de la historia leída. El móvil se debe ubicar en un lugar de la casa, así tiene más valor para los niños
- Con material de desecho, hacer el vestido (disfraz) del personaje que más le gusta a cada lector
- Aprovechando la actividad anterior, hacer un pequeño drama, una canción, una poesía de lo leído
- En el cuarto de los niños o en un lugar de la casa, hacer un diseño de algo llamativo de la historia o hacer una maqueta del lugar donde esta se desenvuelve
- Buscar palabras que rimen con los nombres de los personajes y hacer una canción con ellas
- No pelear con la tableta, el celular o el computador: ya son parte de nuestra vida. Hay varias versiones sobre a qué edad debe iniciar el contacto de los niños con la tecnología: unos dicen que no debe ser antes de los tres años y otros antes de los cinco. Es criterio de cada papá.
Por: Ángela María González Duque: [email protected]