El Dagred hace recomendaciones
Tras visitar las excavaciones que generan temor en la Cola del Zorro, el Dagred recomienda monitoreo constante, tanto a constructores como a vecinos
El Departamento Administrativo de Gestión del Riesgo de Emergencias y Desastres (Dagred) realizó una inspección visual por riesgo a un proyecto constructivo en la Cola del Zorro e hizo varias recomendaciones. La inspección se dio como respuesta a la solicitud que hizo al 123 el ingeniero civil experto en estabilidad de estructuras, José Darío Aristizábal, para que los organismos de prevención de desastres visitaran el talud de más de 20 metros de profundidad que excava la firma Conintel en la carrera 15 con calle 9 C con el fin de construir un edificio de apartamentos (Aniz).
Como lo informó Vivir en El Poblado en su edición anterior (490) el temor de José Darío Aristizábal, habitante de la zona y profesor de la Universidad Nacional, es que dicho talud ocasione un movimiento de tierra en masa que genere una tragedia similar o peor a la ocurrida en noviembre de 2008 en Alto Verde.
De acuerdo con el informe enseñado a este periódico por Jaime Enrique Gómez, subdirector de Conocimiento y Reducción del Riesgo -del Dagred-, en la visita al proyecto (carrera 15 con calle 9 C) realizada el pasado 28 de agosto se detectó que si bien para la excavación se implementó un sistema de protección del talud, “no se evidencia la construcción de sistemas de contención con ninguno de sus colindantes”. Se refiere a la urbanización de casas Villa Verde, donde vive el profesor Aristizábal, y a las torres de la unidad residencial Zándalo, edificadas también por Conintel.
Con base en lo anterior, el Dagred recomienda a esta firma constructora “mantener la seguridad de las edificaciones vecinas” según lo estipulado en la norma sobre excavaciones y estabilidad de taludes (NSR10, Título H, Capitulo H.5).
La inspección visual del Dagred también arrojó que los cortes y excavaciones están siendo realizados muy cerca a las casas de Villa Verde, a menos de dos metros, y a menos de diez metros de Zándalo, aunque aclara que “no se observan patologías en las viviendas o manifestaciones que indiquen que las intervenciones realizadas en los predios de la excavación están generando algún tipo de afectaciones a sus colindantes”.
Sin embargo, entre las recomendaciones a los constructores están la realización de un “monitoreo de la verticalidad” de los edificios adyacentes y de las casas unifamiliares, así como la actualización permanente de las actas de vecindad.
A los vecinos de la obra les pide “el continuo monitoreo a sus viviendas”, para identificar daños asociados, como grietas en el suelo y zonas verdes, fisuras diagonales en muros de las viviendas y vidrios averiados sin causa alguna.
En caso de detectar alguna anomalía, les recomienda solicitar una nueva visita técnica al 123.
Finalmente, el Dagred notificó sobre el asunto a la Inspección 14 A de El Poblado, con el fin de que haga seguimiento a las recomendaciones.