En el coliseo Carlos Mauro Hoyos, sector Guayabal, permanece el grupo de indígenas que ayer (miércoles 22 de febrero) ingresó a la sede administrativa de Medellín, en La Alpujarra, de manera violenta y alegando un posible “abandono de parte de la administración pública y falta de apoyo institucional”.
Ayer mismo se instaló una mesa diálogo con las autoridades, y mientras se adelantan las negociaciones con la alcaldía de Medellín, las madres e hijos de los grupos de familia que protestaron aguardan en el Carlos Mauro Hoyos, esperando noticias de sus peticiones.
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La mesa de diálogo está conformada por la alcaldía de Medellín, líderes indígenas, la Personería, Procuraduría, ICBF y Defensoría del Pueblo.
La primera decisión de esos acercamientos la comunicó el alcalde de Medellín, Daniel Quintero Calle: “Vamos a pagar el transporte de quienes deseen retornar a sus territorios”.
Y añadió: “Quiero ser tan claro como sea posible. En Medellín no permitiremos la mendicidad e instrumentalización de menores por parte de gobernadores Indígenas”.
Hasta el momento, no se conoce más información de esta opción que la alcaldía de Medellín está ofreciendo a los indígenas.
Por su parte, el secretario de Gobierno de Medellín, Juan Pablo Ramírez, indicó que se están evaluando los daños y afectaciones causadas por la comunidad indígena al edificio de La Alpujarra y se adelanta la limpieza de las instalaciones.
“La institucionalidad brindará las garantías necesarias para su permanencia en el lugar (el coliseo Carlos Mauro Hoyos)”, añadió el secretario de Gobierno.
Las peticiones de los indígenas
Estas serían las peticiones de los indígenas a la alcaldía de Medellín:
- Autorización para desarrollar cualquier tipo actividad en las calles de la ciudad con los hijos menores, incluida la mendicidad.
- Que mediante la Unidad de Víctimas se acelere la inclusión de ellos en el registro nacional de víctimas.
- Que las autoridades acompañen el retorno a sus comunidades en el Alto Andágueda, en el departamento del Chocó. Y que quienes no regresen se les brinde alimentación y albergue.
- Cumplir los compromisos, que según los indígenas no se les ha cumplido.