Zapatos para todas
Ximena Rivera se olvidó de la bacteriología y del laboratorio para dedicase al diseño de carteras y zapatos.
Hace más de 5 años Ximena Rivera se dedica al diseño de moda; marroquinería a su gusto. Sintiéndose pionera en un boom actual de diseño de accesorios, admite que sus trabajos son fruto de un talento innato y del deseo de conocer el mundo fashionista pues la carrera que terminó es bastante distante de lo que hoy hace. Bacteriología y laboratorio clínico no dejan mucho más espacio que las batas blancas en cuanto a moda así que aprovechando su traslado a Nueva York se inscribió en varios cursos en las escuelas de diseño Parsons y FIT.
En 2003 completó su primera colección y decidió regresar a Colombia porque “sentía que había una necesidad en los consumidores por algo distinto, todo era café, blanco beige, negro.” Luego vino la tienda en Vía Primavera para romper, según ella, con los esquemas del calzado: fucsia, naranja, verde y amarillo en un momento en el que pocos se atrevían.
Pero el gran logro de Ximena no es tener un almacén hoy reubicado en El Tesoro, sino recibir la aceptación de otros diseñadores que la acrediten como una de las mejores. “Trabajé con Pepa Pombo, Ricardo Piñeres, Paula Hoyos; ellos me dicen cuál es la idea de su colección y yo les paso una propuesta”. Eso le ha permitido estar en desfiles como el de Isabel Henao con Carolina Herrera.
Como todos los diseñadores, ella busca evitar las tendencias de las pasarelas y encontrar su propia inspiración creando zapatos que perduren dentro del agitado ritmo de la moda, además agrega que aquí no tenemos estaciones y por ende seguir las temporadas de la moda internacional es bastante difícil: “Uno se tiene que adaptar a la realidad de su clima, de su gente, sin embargo trato de hacer cosas que sean comerciales sin que pierdan mi esencia porque no tendría razón de ser repetir lo mismo que hace todo el mundo”. Esa esencia de cada diseñador es compleja, cada uno dice tener su toque especial y único. Para Ximena son los accesorios que llevan los zapatos: llamativos, grandes, especiales, que sean el centro de atención con bordados, cristales o piedras. Con ellos empieza a fluir su creatividad para producir colecciones en cuero, tanto suelas como forros y capelladas, lo que, según Ximena, es el éxito de la comodidad.
El concepto de zapatos básicos le cuesta definirlo, ella dice no tener en su clóset zapatos negros o cafés, lo esencial está en la versatilidad de este accesorio, poder usarlos con faldas o jeans y en múltiples ocasiones. Ni los que viven de la moda, ni los que la disfrutan desconocen que Medellín ha cambiado en su rigidez a la hora de vestir. Hay mucha más libertad y atrevimiento, cada uno lleva lo que quiere y las puertas de la moda se abren cada vez más. Sin embargo Ximena piensa que hay mucho por cambiar, sus colecciones nuevas solo se venden bien cuando la gente empieza a ver los diseños usados por otras personas; son pocos los que imponen y muchos los que siguen. Por otro lado, para esta diseñadora, la idea de combinar cartera con zapatos está mandada recoger: “A mí me parece demasiado monótono, uno queda como sectorizado. Puede haber combinaciones que nada que ver sin llegar a verse como un payaso, lo más importante es que los colores estén en la misma gama de tonalidades, pero hay que desinhibirse, dejar que la cartera sea distinta a los zapatos y a la correa”. No obstante todo tipo de mujer encuentra qué ponerse en Ximena Rivera: “Depende del punto de vista en que encierres a una mujer clásica; si una mujer no se atreve con el color pero le gusta el diseño yo le cambio el color y eso le da la vuelta completamente al zapato, tengo clientas desde las más lanzadas hasta las más conservadoras; el color va muy de la mano con ser clásico o vanguardista”.
Con 3 colecciones al año, otoño-invierno, primavera-verano y una mini colección entre ambas, Ximena prepara la próxima, inspirada en África, con tonos tierra salpicados de colores vivos en zapatos cerrados, muchos botines con estampados de animal. “Es como una África exuberante”.