“Soy un convencido de la educación técnica”
Educación media y diversificada, propuesta pedagógica del Inem, un caso destacado en educación pública
Cuando Fernando cruza la puerta de un salón hace una lectura del grupo y detecta cómo abordar la clase. Se apropia del tema, lanza un chiste, baja la voz, la levanta: “¡cuidado te me dormís!”, le dice a alguno. Relaciona los temas a hechos actuales, le gusta hablar del diario vivir y de lo que el ciudadano necesita. “No existe una metodología verdadera o válida. Las metodologías son las posibilidades que tiene un profesor”, dice, mientras aclara que hay situaciones que no se planean.
Cuando fue asesor de profesores les dijo: “Es muy importante que sepan cómo enseñar lo que saben, pero es más importante saber lo que van a enseñar. El maestro cuando es bueno, lo es, acabado de salir de la facultad o con muchos años de experiencia. Eso de ser profesor se lleva aquí adentro, uno no sabe qué es pero lo tiene”, dice el rector Fernando, acentuando la pasión que siente por su profesión.
En la dirección
Un rector es un gerente de la educación. Propone acuerdos, busca convenios, se proyecta a la comunidad, entiende a sus maestros… Es un maestro. El rector del Inem es un hombre alegre que se formó como uno de ellos. Estudió licenciatura en Ciencias Sociales en la Universidad de Antioquia y en 1989 ya daba clases de geografía e historia en el bloque 9. A la vez que daba clases de Constitución Política y Democracia en la Facultad de Educación, se preparaba como abogado de la misma universidad. Fue docente de la Universidad San Buenaventura, del ITM y rector por tres años del Instituto Técnico Pascual Bravo, en donde se enamoró de la formación vocacional. Cree en las inteligencias múltiples y en quien entiende que sus potencialidades están en la técnica. Cuando estuvo en Japón comprendió que sus técnicos son valorados igual que el maestro y que si en Colombia la empresa privada se aliara con la educación, esta sería imparable.
Un modelo pedagógico triunfador
Por estos días Fernando Carvajal se siente más orgulloso. El galardón a Mejor Colegio Oficial de Medellín que obtuvo el Inem en los pasados premios “Antioquia la más educada” en noviembre de 2012, es uno de los motivos fundamentales.
La institución recibió este reconocimiento cuando las cuatro gestiones fundamentales que deben cumplir las instituciones educativas en Colombia (administrativa, directiva, académica y proyección a la comunidad) fueron verificadas con las propuestas que adelanta el Inem José Félix de Restrepo, para orientar la formación de sus cinco mil quinientos estudiantes.
Él, un convencido de la educación técnica, asume su papel de maestro y rector para hablar de los logros alcanzados y la gratificación del empeño de sus profesores. Entre los proyectos de las diferentes áreas destaca su trabajo en artes (crearon la Sinfónica José Félix de Restrepo); una Liga Antioqueña de Deporte, el proyecto Por un vivir más humano, del área de religión, en el que estudiantes de escasos recursos se benefician y el Programa Intercambio Intercultural, con la AFS (American Field Service), con el que estudiantes viajan y permiten que otros lleguen a enseñar su idioma.
El Inem José Félix de Restrepo, la institución más grande de Antioquia, gradúa a un promedio de 850 bachilleres al año. Debido al convenio con el Sena, los estudiantes reciben doble título: bachiller y técnico en algunas especialidades. “En los seguimientos que hemos hecho, el 80 por ciento de los egresados están ingresando en el primer año a la educación superior. En 2012, de 600 estudiantes que se presentaron en la Universidad de Antioquia, pasaron 149, lo que significa que el 25 por ciento pasó en el primer intento”, dice.
Como prueba de la calidad docente, al título adquirido por la institución se sumaron dos premios: la “Mención Samuel Barrientos”, para la profesora Beatriz Mejía, con el proyecto Sueño de hadas y el “Premio para Directivos Docentes” en la categoría Oro, otorgado a la coordinadora Miriam Briceño.
Ante estos logros el rector quiso anotar: “Aunque los estudiantes vengan de otros sectores de la ciudad, el Inem es una institución de la que El Poblado debe sentirse orgulloso, reconocerla dentro de su territorio y propiciar su mejoramiento”.