El viernes 11 de julio, la Fundación Santiago Corazón presentó los resultados de su gestión (la ampliación de la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI), uno de los más importantes) a varios de sus donantes en el Pabellón de Cardiología Pediátrica de la Clínica Cardio VID (antes Cardiovascular), institución con la que la Santiago Corazón tiene una alianza desde 1988, año de nacimiento de la fundación.
Esta alianza lleva veintiséis años tratando niños con cardiopatías congénitas. Mauricio Tamayo Palacio, director general de Cardio VID, contó que “la relación con Santiago Corazón es de tiempo atrás. Todos los días queremos afianzar más esa relación, con la máxima humanización del servicio que tengamos, con la mayor tecnología, dedicación, cariño y amor a todas estas personas. Eso es lo que estamos buscando nosotros aquí”.
Tamayo aseguró que la clínica creció “un 50% en atención de pacientes pediátricos”, y que “lo que se hace aquí, es lo más complejo que se hace en el país en el tratamiento de niños con cardiopatías, básicamente”.
Por otro lado, Inés Elena Madrid, directora de la Fundación Santiago Corazón, agradeció a todas aquellas personas “que nos vienen acompañando desde hace tanto tiempo, porque esto es como cuando uno deposita el dinero en el banco. Uno sabe adonde lo está llevando. Y aquí es donde está su inversión”. También dijo que, aunque “faltan muchas cosas por hacer, lo que se hace aquí no lo hace ninguna parte en Colombia”.
Mauricio Tamayo, Soledad Tamayo, Inés Elena Madrid y Arturo Vayda
Además, que “la Clínica y los médicos siempre se habían soñado tener toda la parte de hospitalización con servicios completamente independientes, lo que tiene que ver con UCI y con UCE (unidad cuidados especiales)”, y esas instalaciones ya están en funcionamiento.
“Queremos seguir contando con el apoyo de cada uno de ustedes, y que la Clínica nos permita seguir canalizando esos recursos que ustedes nos transmiten para traerlos acá, y que se den cuenta de que aquí hay muchas cosas por hacer, pero entre todos vamos a lograrlo”, concluyó Madrid.
¿Qué dicen los médicos?
En la visita a conocer los nuevos equipos e instalaciones del Pabellón de Cardiología Pediátrica estuvieron presentes Luis Horacio Díaz, pediatra cardiólogo hemodinamista, ecocardiografista y Jefe del servicio de Cardiología Pediátrica, y Miguel Antonio Ruiz, pediatra cardiólogo intensivista. Ellos comentaron los avances de la gestión conjunta entre la unidad y la Fundación Santiago Corazón.
Miguel Ruiz se unió al agradecimiento y afirmó que “muchas cosas en este servicio han sido posibles gracias al apoyo de ustedes”. Contó que “nuestra unidad es netamente cardiovascular pediátrica. Van a ver niños desde un día de vida, hasta 18 años. Operamos entre 200 y 250 niños anualmente”. Dijo también que, a partir de la reforma realizada, “el sueño nuestro es tener entre 300 y 350 niños operados al año. Todos cardiovasculares. Con todas las patologías complejas que existen”.
Sobre la mortalidad, Ruiz comentó que “ojalá pudiéramos decir que el 100% sobrevive, pero en ninguna parte del mundo tienen esos números. Hoy nos podemos dar el lujo de decir que estamos por debajo del 6% en pacientes con cardiopatías congénitas. Todo, global, por debajo del 6%. Y la meta es tener menos del 4%”.
Luis Horacio Díaz, por su parte, manifestó que “somos la institución en la ciudad, en la región y probablemente en el país, que opera la mayor complejidad en cardiopatías congénitas”. Además, “vamos, desde la edad de prematuros hasta adolescentes. En ese sentido, somos también, probablemente, el servicio más grande en número de cardiólogos pediatras en el país, y con integralidad”.
Más de dos décadas de labor solidaria
Arturo Vayda, presidente de la Fundación Santiago Corazón, expresó que las mayores satisfacciones durante los años de trabajo de la fundación han sido “la cantidad de niños que se han operado y salvado” y “ver los progresos que se han tenido en la cantidad de procedimientos con equipos nuevos que se han ido actualizando y adquiriendo”.
Según Vayda, “nosotros no hemos pretendido ser una fundación muy grande, ni tenemos capacidad para serlo”. Sin embargo, aseguró que “con el apoyo de tantos donantes, a medida que hacemos otras actividades y se va haciendo publicidad, se nota que la gente se vuelca a ayudarnos y se sensibiliza mucho con el tema de las cardiopatías congénitas, a pesar de ser un tema tan especializado”.
Hasta el día de hoy, la Fundación Santiago Corazón ha atendido a más de 60.000 niños con cardiopatías, construyó el Pabellón Infantil de Cardiología en 1993, la UCI (Unidad de cuidados intensivos) en 1999 y la UCI de neonatos en 2001.
Se estima que de cada cien niños que nacen en Colombia, uno tiene alguna cardiopatía y debe ser intervenido, con certeza, una o dos veces en su vida. A lo largo de su gestión, el éxito de los tratamientos de la Unidad de Cardiología Infantil de la Clínica Cardio VID ha sido de un 93%. Si quiere conocer más sobre la fundación, puede ingresar a su página oficial.