La suspensión del servicio, que se llevará a cabo entre el 26 y el 30 de enero, permitirá realizar un procedimiento rutinario y necesario para garantizar la seguridad y el óptimo funcionamiento del sistema. La renovación del empalme del cable portador tractor será ejecutada por un equipo técnico especializado, que incluye expertos internacionales del fabricante POMA y personal de Cables Aéreos del Metro.
Durante este período, se habilitarán las rutas alimentadoras C6-012A, C6-013 y C6-017, que conectarán los sectores afectados con estaciones clave como Acevedo, Popular y Santo Domingo. Además, el cierre vial de la calle 107 entre las carreras 51B y 49C también será necesario como parte de los trabajos.
El Metro de Medellín agradece la comprensión de los usuarios frente a esta suspensión, subrayando que este mantenimiento no está relacionado con incidentes anteriores y forma parte de su compromiso con la seguridad y el mantenimiento periódico de su infraestructura. La línea K retomará su operación normal el 31 de enero.