La esperanza de los comerciantes está puesta en que la remodelación física del parque Lleras sea la cuota inicial de la recuperación de un referente de ciudad.
Por: Daniel Palacio Tamayo / [email protected]
La intervención que se anuncia para el parque Lleras es de relevancia. Aunque todavía se avanza en la elaboración de los diseños definitivos, se presupuesta que la intervención tendrá un costo cercano a los 5 mil millones de pesos, con los que se espera dar un nuevo aire a esta zona que afronta problemas de orden público y convivencia.
Luis Guillermo Orjuela, de la corporación Zona Rosa, asegura que están contentos con los cambios anunciados, pues cree que puede ser un hito en la recuperación del parque, siguiendo la teoría de las “ventanas rotas”, que plantea que un lugar entre más deterioro físico presente, más ilegalidad atrae.
El líder gremial afirma que los comerciantes están listos para asumir los sacrificios propios de una intervención como la que se planea, con tal de que la remodelación le traiga una nueva vida.
La gerente de El Poblado, Sandra Giraldo, afirma que se busca “darle vida diurna al parque y atraer diferentes tipos de inversión privada que alimente de contenidos de interés para la familia”, por lo que pidió la vinculación de los comerciantes al proyecto.
Giraldo adelantó que los diseños serán entregados en unas tres semanas a la Alcaldía, que será la encargada de darle el visto bueno e iniciar el proceso licitatorio. La intervención se articulará con las intervenciones que avanzan en Provenza y el parque de El Poblado.
Anteriormente se intentó realizar la remodelación del parque Lleras como parte de una alianza pública privada; sin embargo, explica Orjuela, no fue posible porque en “ese momento la norma no estaba madura”. Ahora el reto que se trazan con la administración municipal es un relanzamiento del parque.
Más socialización pide Corpoblado
Luis Hernando Mejía, director de Corpoblado, considera que la propuesta y la intervención del parque Lleras es positiva para toda la ciudad, pero cree que también el Municipio tiene que ampliar sus capacidades respecto al control en movilidad, seguridad y habitantes de calle. Adicionalmente, pidió más socialización: “Por ejemplo, instalaron la escultura en el parque de El Poblado, que mucha gente la ha recibido mal; nosotros no estamos en contra de la obra, pero sí nos oponemos a que no le cuenten a la gente”, concluyó.