La séptima reunión de comisión accidental, que se realizó este lunes 30 de septiembre, había generado mucha expectativa en Manila, pues se suponía que los comerciantes, que se habían declarado afectados por las señalizaciones de prohibido parquear en los lados derechos de las vías del barrio, llevarían propuestas concertadas con la comunidad.
La sorpresa para los representantes del municipio de Medellín (de las diferentes dependencias) y para los residentes, fue saber que no habían hecho la tarea de presentar una propuesta unificada.
De nuevo, entonces, se inició el debate para tratar de encontrar soluciones y se revivieron opciones como los parquímetros; la carnetización, para evitar que personas ajenas al barrio parqueen sus vehículos en la zona; y la implementación de zonas blancas en las vías, con horarios específicos para estacionar.
El concejal Carlos Mario Mejía, como encargado de la comisión, exhortó a todos los asistentes a la reunión para que se sentaran de una vez por todas a hacer un plan conjunto: “Ya viene ley de garantías y llevamos ocho meses de discusiones. Tenemos que tomar medidas urgentes para dar por terminada esta comisión”, dijo.
Otra de las propuestas contempladas en las últimas reuniones es la construcción de una gran torre de parqueaderos, una alternativa que es vista por muchos como la más razonable.
El nuevo compromiso de los comerciantes es que buscarán soluciones concertadas en las primeras dos semanas de octubre.
El caso de los restaurantes
Aunque no se tiene en firme la decisión, en comunicación con el inspector 14 A, Wbeimar Velásquez, y con la oficina del concejal Carlos Mario Mejía, quedó claro que la sanción a los restaurantes Olivia y Barbacoa Burger and Beer es inminente y será “drástica”, lo que podría conllevar al cierre de los establecimientos por venta y consumo de licor.
Inseguridad y consumo de droga
A las discusiones en Manila se suma ahora una denuncia ciudadana según la cual “se está presentando venta y consumo de drogas, inseguridad y falencias en las luminarias” a lo largo de la calle 11 (diagonal) y 11 A, entre carreras 43 B y D. Los residentes afectados piden soluciones.