La investigadora y docente venezolana Meyby Ugueto-Ponce recibe al equipo de Fuerza Latina en Curiepe, a una hora y media de Caracas. “No se puede hablar del trabajo que hago sin reconocer la fuerza colectiva que tiene Curiepe”. Con su trabajo busca reivindicar la memoria de la población afrodescendiente, su espiritualidad, sus relaciones sociales comunitarias y acabar con los estereotipos.
La fuerza colectiva de Curiepe nace con su historia de pueblo de “negros libres” que se remonta al sistema esclavista del siglo XVIII. Esa historia y el acervo cultural que le transmite a Meyby Ugueto-Ponce su abuela, plantean las preguntas que más tarde centrarían su investigación académica. “La historia de Ana Santiaga Ponce es la historia de muchas mujeres descendientes de africanos”.
Dejaban a sus hijos al cuidado de tías o hermanas para trabajar en la capital. ¿Quiénes eran estas mujeres, por qué se las deshumanizaba? La realidad de la población descendiente de personas esclavizadas refleja la continuidad de la colonialidad. Meyby Ugueto-Ponce ve necesario profundizar sobre “las preguntas que como mujeres negras, empobrecidas, tenemos en Venezuela”. Los avances en el diseño de políticas públicas que visibilizan a la población afro no bastan. Ella lo hace además a través de la danza. Su proyecto “Memorias danzadas” es un homenaje a las mujeres que vivieron bajo la esclavitud.