| Dada la gran contaminación en el Valle del Aburrá y que aún se percibe a simple ojo, el 22 de mayo de 2008 la Alcaldía de Medellín, el Área Metropolitana, Ecopetrol y el Concejo Municipal, firmaron un acuerdo para mejorar la calidad del aire y por consiguiente la calidad de vida de todos habitantes. Ese año, la ciudad recibía un diesel de 4.500 partes por millón (ppm) de azufre; ahora ha reducido a 500 ppm y se espera que para julio de este año el contenido de azufre sea de 50 ppm, consiguiendo que Medellín cumpla con los estándares internacionales. El Alcalde de Medellín, Alonso Salazar, había manifestado que mejorar la calidad del aire de la ciudad era un sueño durante su administración, y para ello ha sido fundamental la labor de Ecopetrol que para cumplir con sus metas, ha trabajado en la importación de combustible para elaborar mezclas más limpias, y la distribución de mezcla de gasolina con etanol y de diesel con biodiesel. Lo que falta por hacer Aunque la reducción del contenido de azufre en el diesel es un avance importante, las autoridades ambientales han entendido que dicho logro debe ir acompañado de políticas claras y medidas adicionales que comprometan a las empresas del sector transporte, a las industrias y al ciudadano en general. Como primera medida la Secretaría del Medio Ambiente anunció la siembra de 100 mil árboles nuevos este año, 10 mil en lo urbano y 90 mil en el espacio rural del Valle del Aburrá. Según cifras de esa secretaría, la contaminación en Medellín es producida en un 66% por las fuentes móviles, 33% las fuentes fijas como las industrias y el 1% otras fuentes como las construcciones. También aseguran que en mediciones del año 2009, se detectó una reducción en la concentración de material particulado pm10, entre el 12 y 20%. Natalia Posada, Subsecretaria de Planeación Ambiental del Municipio, informó que “estamos haciendo una serie de programas con el sector transporte. En un convenio con la UPB hemos capacitado 3 mil conductores de transporte de carga en prácticas de conducción, mantenimiento preventivo, y se les hace una prueba de opacidad con un medidor en el mofle para ver que tanto está contaminando. Incluso ya se está pensando en implementar pico y placa ambiental para estos transportadores”. Alejandro González, Subdirector Ambiental del Área Metropolitana, dice que con la reducción a 50 ppm, “estaremos en la vanguardia junto con Chile y México; nos quitaremos un estigma de encima pero no es suficiente, por eso haremos capacitaciones a conductores de 1.000 volquetas, 3.600 buses y otros 1.000 de carga durante este 2010”. Con el sector industrial, González destacó el monitoreo de 200 industrias por emisiones atmosféricas durante el segundo semestre de 2009, y explicó la Resolución 909 del Ministerio de Ambiente. “La resolución estaba desde 2008 pero había dado un período de transición y era muy permisible, pero ya entró en vigencia la primera fase hasta junio y es más restrictiva. Vamos a medir 170 empresas, arrancamos muy exigentes porque es una herramienta que no teníamos, nos daba rabia llegar a una empresa que contaminaba mucho pero era cobijada por la norma”, alertó el funcionario del Área Metropolitana. También informó que este año continuará el proceso de chatarrización bajo el mismo criterio. Sí ha reducido la contaminación Josshual Serna, investigador de línea de estudios atmosféricos de la Universidad Pontificia Bolivariana, explicó que “con ese tipo de estrategias como la gestión ambiental y la chatarrización, hemos identificado que al hacer cambios de combustible puede haber mejoras de hasta 30%, o sea que es cierto que la calidad del aire ha mejorado respecto al año pasado. Es una mejora gradual porque como estamos en un valle, la contaminación no se distribuye y, cuando llueve, la contaminación se precipita hacia otros ecosistemas; es un ciclo, un lavado de la atmósfera. Siempre va a haber contaminación pero si esta se disminuye, es como si el aire se auto limpiara”. | |