Por Daniel Palacio Tamayo
“La comunidad está maniatada”, asegura Mario Bertieri, uno de los vecinos, quien agrega que en esa obra no se han hecho sentir para buscar los responsables de un proyecto que tuvo un costo inicial de 46 mil millones de pesos y actualmente vale unos 165 mil millones.
Beatriz Arango, también vecina del sector en la Capital, apenas suspira y dice “ay Dios” al escuchar la situación del deprimido de Los Balsos con la Inferior, en Medellín, donde, como en Bogotá, la Alcaldía tuvo que cambiar de contratista, hubo problemas con la localización de redes y daños en estructuras de viviendas cercanas. La habitante de la capital asegura que “hay que insistir sin miedo de denunciar las cosas, siempre y cuando estén bien sustentadas”, dice.
Comisión en el Concejo Municipal
Regresando al caso de Medellín, vecinos de Los Balsos con la Inferior y concejales de la ciudad participaron en una comisión en la que funcionarios del Municipio anunciaron que para finales de agosto se podrían reanudar las obras de reparación de las fallas estructurales en el túnel que fueron detectadas en la parte final del proceso constructivo. Según estimaciones previas, las nuevas obras tardarían unas 8 semanas.
Luz Marina López, Secretaria de Infraestructura, afirmó que tras conocerse los resultados del estudio de la Universidad de Medellín, contratado por la Alcaldía con el fin de identificar el origen de las fallas que derivaron en los problemas estructurales del túnel de la Inferior y proponer una solución, el contratista Gisaico y la interventoría hicieron unas reclamaciones, que serán escuchadas “para tener en su contexto toda la información”.
Igualmente la secretaría López anunció que espera el informe definitivo y aclaratorio de los consultores para avanzar con las reclamaciones a los presuntos responsables de las anomalías en el proyecto. Según adelantó la funcionaria, la Empresa de Desarrollo Urbano, entidad con la que Fonvalmed firmó un convenio para agilizar la contratación, tiene adelantadas las gestiones para que sea “una empresa reconocida la que haga la reparación”, que tendría un valor cercano a los 2 mil millones de pesos.
Por su parte, Luz María Múnera, concejal citante de la comisión, aseguró que es necesario poner en conocimiento de los entes de control las deficiencias que ha presentado, entre los que se enumeran problemas estructurales y daños en las viviendas cercanas que no estarían cubiertas por las pólizas.