Hace unos días, la Alcaldía de Medellín presentó el programa correspondiente a la Feria de las Flores, edición número 68. Al comienzo, en la introducción escrita por Federico Gutiérrez, alcalde de la ciudad, se lee:
“Este año, la Feria de las Flores resplandece con un mensaje que nace del corazón: Medellín te quiere. Te quiere cerca, te quiere feliz, te quiere orgulloso de lo que somos y de lo que construimos juntos. Si vives aquí, esta es tu fiesta”.
Para muchos, esta celebración será una oportunidad para hacer una pausa en el ritmo acelerado de los días, volver al pasado y recordar costumbres.
También será un momento para divertirse, ver a la familia, los amigos o atender a los cientos de turistas. Si revisamos las cifras divulgadas por la Alcaldía de Medellín y correspondientes al 2024, recordamos que hubo una derrama económica superior a los 42.1 millones de dólares y una ocupación hotelera del 77.6 % aproximadamente.
Esto convierte a esta edición 2025 en una oportunidad económica valiosa para cientos de comerciantes, organizaciones y negocios de todos los tamaños.
Al mismo tiempo, un evento de estas magnitudes nos invita a hacer algunas preguntas sobre la convivencia, los niveles de ruido, el uso de las basuras, el cuidado a niños y jóvenes y la inspiración que puede quedarnos para entender que hay y habrá flores mientras aseguramos el cuidado y protección de la naturaleza y todos sus seres.