Por Laura Montoya Carvajal
El martes 26 de julio comienza en Plaza Mayor esta feria, que se ha consolidado como el evento de moda más importante en Latinoamérica. La llamada semana de la moda presenta un aumento, desde el 2011 hasta el año pasado, de un 45% de sus expositores, al igual que un 20% de incremento en el número de compradores nacionales e igual porcentaje en internacionales. Este año esperan 13.000 asistentes compradores y alrededor de 650 marcas expositoras.
Clara Henríquez plantea por qué buscan que Colombiamoda sea una feria experiencial: “Estas marcas que vienen a visitarnos son nuestros consumidores, y nos demoramos un año en volver a verlos. Debemos dejar huellas memorables en ellos, y por eso nos preocupan la gastronomía, la diversión y el entretenimiento”.
La directora también enfatiza en la necesidad de hacer memorables las pasarelas, uno de los elementos característicos e imprescindibles en la feria. Este año, el diseñador Jorge Duque inaugurará la feria la noche del 25 de julio. “Las pasarelas deben mover al espectador: esa experiencia de ver las presentaciones debe mover los marcos mentales del que observa, por la indumentaria, pero también por el formato en el que se presentan. La idea es que cuando yo tenga una vocación de uso parecida a la de esa pasarela me acuerde de ese diseñador. Se trata de conectar”.
Justamente esas conexiones son las que determinan el presente y el futuro de Colombiamoda. Además de los espacios de exhibición de diseñadores de indumentaria, este año toman fuerza un espacio de moda infantil y el de marroquinería y calzado.
Por otro lado, continúa el Pabellón del conocimiento Inexmoda – Upb, donde se realizarán conferencias sobre modelos de negocios, tendencias y otros temas de interés. “Este es el espacio de formación gratuita más grande de América Latina. Se conecta gente de todas partes y el contenido que más buscan es el de tendencias”, explica ella, ante la oferta de poder ver todas las charlas por streaming.
Los diseñadores que expondrán le dan otro sentido al negocio, donde, comenta la directora de Plataformas Comerciales, prima el interés por el valor agregado de la creatividad de cada uno sobre el modelo de negocio fundamentado en el volumen.
El promedio de negocios estimado para esta edición es de 341 millones de dólares. Clara Henríquez detalla que la negociación que mejor se puede dar en este momento es la exportación. “Con el dólar tan alto, no nos favorece la compra de productos extranjeros. Incluso desde el Gobierno se está estimulando la inversión extranjera con monedas fuertes que compren nuestros productos”.
Otros espacios que toman fuerza en la feria son la cuarta edición de Textiles 2, de fabricantes y comercializadores del sector textil, y el de Ropa de control, enfocado a las prendas que moldean y conservan la figura.
El futuro, la Directora de Plataformas solo puede verlo en expansión: “Las posibilidades de crecimiento son infinitas”, asegura. Explica que con una mirada sistémica, es decir, donde todos los elementos se asocian y ayudan, es fácil ver posibilidades de crecimiento. “Cuando uno tiene esta mirada y entiende las relaciones de la moda con otras disciplinas hay una arena generosa de crecimiento. Lo que no es generoso es el metraje que tiene nuestro recinto ferial, entonces tenemos que pensar en vías para crecer conjuntamente”. Complementa que también han considerado la posibilidad de escindir algunas partes de la feria que ya tienen vida propia, de manera que sean eventos individuales.
“Hay moda en todo. Hay posibilidades de ver cómo, más allá del evento, Inexmoda puede aportar al desarrollo económico de otros sectores”, concluye ella.