En rueda de prensa, el alcalde de Medellín, Aníbal Gaviria, el Ministro de Vivienda Luis Felipe Henao, Carlos Iván Márquez, de la Dirección nacional de Gestión del Riesgo, y representantes de CDO, Atila y la Universidad de los Andes, catalogaron como un éxito la operación de implosión de la fase 5 del edificio Space.
Sin embargo, el haber adelantado la implosión al menos 8 minutos de lo planeado (estaba prevista para hacerse entre las 9 y las 10 de la mañana y se hizo) con sirenas y alarmas apenas perceptibles dentro de la unidad de Space, dejó muchas dudas. Residentes y medios de comunicación cercanos a la zona no alcanzaron a cerrar ventanas o protegerse con tapabocas, tapones en los oídos y gafas de seguridad. Al respecto, Carlos Gil, director del Dagrd, dijo que el momento de la implosión había sido el ideal por las condiciones climatológicas y que habían tomado la decisión por recomendación de la empresa Atila y la constructora CDO. La implosión dejó cero personas afectadas.
Escombros colgantes
Rogelio Gómez, gerente de Atila, declaró que no hubo sismo ni daños al alcantarillado ni a fibras ópticas. Sobre los fragmentos de escombros suspendidos desde la fase 4 y que han inquietado a la ciudadanía dijo que era parte de lo planeado: “Sabíamos que quedarían losas colgantes y esto era para proteger a la fase 4”.
Freddy Castañeda, asesor y único representante de CDO en la rueda de prensa, dijo que las losas las desmontarían manualmente y que implosión no había afectado las fases de la 1 a la 4. “Todo funcionó como lo teníamos estimado”.
Tanto el Alcalde como la universidad de los Andes, aseguraron que el riesgo de los escombros suspendidos es totalmente manejable. Gaviria agregó que ya se había dado la orden para removerlos manualmente y que este trabajo tardaría unos quince días.