La Feria de las Flores de Medellín, uno de los eventos más emblemáticos de Colombia. Este encuentro cultural también abre sus puertas a la paz y la reconciliación. La Agencia para la Reincorporación y la
Normalización (ARN), en articulación con la Secretaría de Paz y Derechos Humanos de la Alcaldía de Medellín, acompaña la participación de 12 firmantes de paz en reintegración, tres comparecientes y 21 víctimas del conflicto, quienes exponen sus productos, entre los que se destacan alimentos, bebidas, artesanías y prendas de vestir.
“Primero, es una oportunidad para que ellos se den a conocer y que se conozca qué productos vienen haciendo en aras de la construcción de la paz, sobre todo por una generación de ingresos y una subsistencia económica de estas familias que sin ello será muy difícil lograr que avancen en el proceso. Necesitamos el apoyo aquí de la www.reincorporacion.gov.co institucionalidad y del empresariado. Y segundo, el encuentro entre todos ellos es fundamental para avanzar en la construcción de la paz que evidentemente se hace entre distintos y esto un gran ejemplo de lo que puede pasar en el país: personas que pensaron diferente, por motivos diferentes, pero que son hermanos, amigos, vecinos, familiares; que se encontraron en diferentes momentos, en diferentes bandos, pero hoy tienen una misma apuesta de paz”, precisó Luz Nelly Osorno, coordinadora de la ARN en Antioquia.
Hasta este domingo 11 de agosto, Medellín se viste de flores, cultura y folclor para atender a propios y visitantes, quienes han disfrutado de una amplia oferta de eventos, pero que además se han congregado en esta apuesta de paz y reconciliación en el que diferentes actores del conflicto dan cuenta de procesos de transformación en el territorio, reconciliación y una sana convivencia.
Luz Enith Moreno, líder de Mujeres Origen, colectivo de mujeres firmantes de paz, expresó: “estos son escenarios muy importantes porque de una u otra forma nos enseñan a nosotros a ser muy incluyentes con otras comunidades y no solo eso sino que ahí se va incluyendo esa reparación y reconstrucción del tejido social con otras comunidades como firmantes y comparecientes y todos aquellos actores que hicieron parte de ese conflicto y que hoy estamos todos en un mismo escenario en un en un mismo espacio, exponiendo nuestros proyectos de vida y no solo de nosotros sino de todos los que no están, a los que estamos representando o sea a todos los colectivos”.
Y como evidencia de procesos de reconciliación no forzados, espontáneos y reales en el stand contiguo a los y las firmantes de paz, encontramos a Mary Luz López, escritora, defensora de derechos humanos y víctima del conflicto armado, quien expone en un stand de 2×1 metros los dolores y las consecuencias de la guerra, pero más que ello, el poder de entendernos entre diferentes para construir paz.
“-La guerra me hizo puta-, es una radiografía de la prostitución en Colombia; es como después de vivir un secuestro llegué a la prostitución, pero no solamente me pasó a mí, a muchas mujeres en Colombia nos afectó el conflicto armado y llegamos a ese mundo oscuro; unas salieron, otras ni aparecieron y yo estoy aquí, no soy la voz de ellas, pero sí represento ese ese tipo de población para que no queden en indiferencia ni en el olvido. Somos mujeres y a todas nos atravesó la guerra y la violencia por el cuerpo, ellos en un lado, nosotros en el otro. Ya no estamos en orillas, estamos en un mismo plano, saliendo adelante. Yo voy allá y compro cerveza la roja, café, y ella y yo nos encontramos en muchos espacios y la quiero mucho, las hago reír y nos ‘desatrasamos’ de los chismes cada que nos vemos de ferias”, relató Mary Luz.
Entre los 12 firmantes de paz y personas en reintegración, se destacan proyectos productivos textiles, artesanías, café, miel y productos alimenticios. La ARN en Antioquia reporta un desembolso y acompañamiento a 584 proyectos productivos de firmantes de paz www.reincorporacion.gov.co y 289 proyectos productivos de personas pertenecientes a otras rutas de reintegración social.