Examen y diagnóstico del cáncer de seno
Adaptado para Internet de la edición impresa (Edición 301)
Los exámenes que buscan evidencias de la existencia de la enfermedad antes de que aparezcan los síntomas son la clave para encontrar el cáncer de seno en sus etapas tempranas (y tratables). Según sea el factor de riesgo de cada persona los exámenes pueden ser: autoexamen de los senos, evaluación clínica (examen de los senos hecho por un médico o una enfermera), mamograma y otros exámenes.
- El autoexamen se ha recomendado tradicionalmente desde más o menos los 20 años de edad y para que sea hecho cada mes. Algunos estudios lo consideran opcional y no obligatorio.
- El examen clínico se debe hacer cada 3 años hasta que se llegue a los 40 años de edad, según recomendación de la Sociedad Americana del Cáncer, a menos que se trate de una persona con un historial familiar de cáncer o con otros factores de riesgo.
- El mamograma o mamografía es recomendado para todas las mujeres mayores de 40. No se trata de un examen infalible (puede fallar en un 25% de los casos), pero es lo que hay.
- Otras formas de examen son: detección asistida por computador, mamografía digital, imagen por resonancia magnética y el ultrasonido.