Las lluvias intensas y continuas de las últimas semanas han terminado en inundaciones.
¿Qué dicen nuestras autoridades?
Para muchos, ya se convirtió en un escenario predecible: en la tarde, los colores del cielo cambian, y a las nubes grises siguen aguaceros, granizo y truenos.
Minutos después, comienzan los reportes de inundaciones o se ven los desastres, en las calles. En muchos de los casos, el asunto tiene que ver con el curso de las quebradas. En otros, con el estado de alcantarillas y sitios de desagüe de las aguas acumuladas.O con la arquitectura y composición del suelo.
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De acuerdo con la Alcaldía de Medellín, la primera temporada de lluvias comienza en mayo, y la segunda, inicia en septiembre y termina en noviembre. Esto ocurre en términos generales y no de una forma absoluta.
No solo por los efectos visibles del cambio climático, sino también por Colombia ser un país tropical que no cuenta con estaciones de clima más definidas como sí ocurre en otras regiones del mundo.
Según funcionarios de la secretaría de Medio Ambiente, ya “están identificados algunos de los puntos más críticos de la ciudad, y esto permite realizar mantenimientos preventivos y de rutina para garantizar la capacidad de los cauces, y que estos no colapsen en la temporada de lluvias”.
¿Cuestión de mantenimiento?
La secretaría de Medio Ambiente, de acuerdo con la ley, es la encargada de realizar varias acciones con el fin de mantener y mejorar las condiciones de las corrientes de agua. Según esta dependencia, la red hídrica de Medellín cuenta con 56 afluentes principales y 4.261 afluentes secundarios, en las 16 comunas y 5 corregimientos del municipio.
“Se ejecutan acciones e intervenciones sistemáticas y periódicas con un enfoque preventivo y correctivo como alternativa de mitigación y reducción de riesgos hidráulicos”. Entre esas actividades, se ejecutan tareas de limpieza, retiro de basuras, escombros y sedimentos. También se reparan losas y coberturas de piso. O se construyen estructuras para proteger los cauces de quebrada.
56 afluentes principales y 4261 secundarios hacen parte de la red hídrica local
La secretaría de Medio Ambiente dice tener presente que el propósito de estas acciones es “disminuir el grado de vulnerabilidad física ante el riesgo de inundación y de movimientos en masa, de la población asentada en la zona de influencia de las quebradas.
También se busca mejorar las condiciones estructurales de las obras existentes para prevenir colapsos y desbordamientos. Esto se hace mediante “obras de paisajismo para adecuar taludes y evitar procesos de erosión superficial”.
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Respecto a la frecuencia de estas actividades que mantengan el sistema en buena forma, y permitan evitar tragedias futuras, la Alcaldía explica que en el caso de las quebradas, la “subsecretaría de Recursos Naturales Renovables adelanta un protocolo de atención con base en el criterio de profesionales, documentos e inspecciones permanentes”.
Respecto a los desagües y alcantarillas, “una parte de esto funciona como conducción de aguas residuales, que lo administra EPM, pero no se conecta a las quebradas, otra parte sí.
Esta última descarga sus aguas a través de ‘aliviaderos’, de forma normal, y diseñada para que alivien la presión sobre las quebradas.
De acuerdo con los expertos de la secretaría de Medio Ambiente, todo funciona como “un sistema conectado, vinculante y unido. Si hay una falla, esto no será posible. También explican que aunque el trabajo sea conjunto entre ellos y Empresas Públicas de Medellín, las personas también tienen una responsabilidad y la capacidad de ayudar.
Esto se logra con un buen uso de las basuras, con el seguimiento de las instrucciones que dan las autoridades. Y con el reporte de cualquier situación que consideren importante para mantener la red en forma, y evitar contratiempos.
La importancia de entender el paisaje
Conocer el paisaje local y nuestra geografía es una de las acciones más importantes para entender el comportamiento de las aguas, del río Medellín, afluentes, y lo que ocurre, en temporadas de inundaciones. También para prevenir accidentes y lograr que las construcciones y el uso del espacio público se realicen con base en ese conocimiento del paisaje. Estas fueron algunas de las conclusiones que quedaron después de escuchar el capítulo de Diálogos MDE (un espacio en el que se tratan temas de espacio público), número 6. En este capítulo se tocó el tema de Parques del Río y la estructura ecológica y del paisaje.