Su nombre anuncia un poco su naturaleza: se conoce como humedales a esas zonas de la ciudad que permanecen en condiciones de inundación o tienen saturación de agua que puede provenir del mar, los ríos o la lluvia. Son la casa de plantas y animales, y se convierten en transición entre ecosistemas acuáticos y terrestres.
Desde 1997, y como parte de la Convención sobre Humedales realizada en Ramsar, Irán, se estableció su día clásico cada 2 febrero. Una fecha que se convierte en una oportunidad para conocer su valor y buscar formas de cuidarlos, en un mundo que según cifras de las autoridades ha perdido alrededor del 35 por ciento de ellos desde los años setenta.
Humedales, en El Poblado: lugares vitales
En el sur hay tres humedales que son considerados importantes: uno localizado en La Loma de los González, otro cerca al Club Campestre, y otro en el sector de El Trianón, en Envigado. En la ciudad hay humedales en otros puntos.
De acuerdo con Vanessa Correa, bióloga de la Universidad CES y coordinadora de la Escuela de Ecología Urbana del Valle de Aburrá: “los humedales son muy importantes porque amortiguan los ecosistemas. En términos de diversidad biológica, albergan una cantidad de flora y fauna que no hay en otros lugares. Estos humedales pueden ser permanentes o intermitentes, es decir, estos últimos pueden aparecer cuando hay temporadas de lluvia. Otro de los beneficios es la amortiguación de las inundaciones. En ciudades como Medellín donde hay tanto cemento, el agua no se filtra; todo llega hasta el río y hay inundaciones porque el suelo ya no filtra la tierra y esto puede dañar los mantos acuíferos. También aportan beneficios relacionados con el entretenimiento y la diversión de las personas”.
Respecto a los cuidados, dice que es importante ver dónde se depositan los residuos. Vanessa Correa cuenta que el barrio Moravia era un humedal en el pasado, y después de la orden de un mandatario, la tierra se volvió compacta, comenzó a recibir residuos y después, la tierra no dio abasto. Agrega que muchos humedales han desaparecido por las construcciones y crecimiento urbanístico y esto hace que se hayan desplazado muchas aves; también son sitios de paso muy importantes para las aves migratorias. Explica que también son lugares importantes porque en algunos brotan manantiales de agua.