El bienestar mental en Colombia ha mostrado mejoras desde el inicio de la pandemia, sin embargo, el progreso ha sido gradual. Factores como la mala alimentación, el uso excesivo de tecnología y el distanciamiento social continúan siendo preocupaciones clave que requieren atención.
Según el informe más reciente “El estado mental del mundo”, publicado por Sapien Labs en colaboración con el proyecto La Mente Mundial, el deterioro del bienestar mental persiste a nivel global, con pocos indicios de recuperación desde 2020.
El estudio, que encuestó a 500.000 personas en 71 países de 13 idiomas, utiliza el Cociente de Salud Mental (MHQ) y diversos panoramas dimensionales para evaluar la capacidad de las personas para enfrentar el estrés y funcionar de manera productiva en la vida diaria.
Colombia, se sitúa en el octavo lugar en Latinoamérica. Nuestro país se destaca en adaptabilidad, resiliencia e impulso, pero muestra debilidades en áreas como el aspecto social y el humor.
Es preocupante que, tres años después del inicio de la pandemia, no se hayan producido cambios significativos en el bienestar mental a nivel global. Expertos plantean interrogantes sobre si los efectos de la pandemia serán permanentes y si las nuevas rutinas, como el trabajo remoto y la comunicación a distancia, se han normalizado demasiado.
Es esencial abordar estos desafíos para evitar una normalización del deterioro del bienestar mental, que podría tener consecuencias devastadoras a largo plazo para la sociedad.