El Escepticismo y el Nihilismo como propuestas filosóficas y posturas políticas.
El escepticismo y el nihilismo son doctrinas filosóficas que, a pesar de estar separadas temporalmente, tienen interesantes afinidades entre si; ambas, por ejemplo, han sido superficialmente consideradas como doctrinas negativas o negadoras de elementos fundamentales al hombre y a la sociedad.
El escepticismo como negador de las posibilidades del conocimiento, el nihilismo como negador de los valores y del sentido del mundo. Sin embargo se trata de propuestas filosóficas profundas, cuyo sentido y utilización política expondremos brevemente.
EL ESCEPTICISMO
El termino griego skepsis (origen de la palabra escepticismo ) significa observación, examen atento, vigilancia, especulación, consideración cuidadosa de algo, etc. Esto indica que el escepticismo original es una actitud o postura critica que exige un examen cuidadoso de cualquier criterio de conocimiento o de conducta y una posición de duda ante toda doctrina o dogma en cuanto a su validez ultima.A Pirrón de Elis (360 – 270 a.c) se le considera el fundador de la escuela escéptica. Hizo parte de la exposición de Alejandro Magno a la India, donde aprendió de los gimnosofistas (o sabios desnudos) y de los faquires y pensadores entregados a la negación del dolor y la imperturbabilidad.
Pirnón fue sumo sacerdote, lo cuál le aporto honores y reconocimiento.
El más importante de los discípulos de Pirrón fue Timón de Fliunte (320-230 a.c), que difundió las ideas de su maestro en Atenas, influyendo en la academia de Platón.A finales del siglo IV a.c. y en la primera mitad del siglo III d.c. se dio dentro de la academia platónica un periodo de cultivo asiduo del escepticismo. Arcesilao de Pitane (316-241 a.c.) y Carneades de Cirene (214-135 a.c.), fueron sus principales representantes. El escepticismo tardío antiguo estuvo encarnado en Enesidemo de Cnosos (80- 40 a.c.) y Sexto Empírico (hacia 200), quien además de filósofo es famoso como médico. Sexto ha sido el principal recopilador y transmisor de las ideas escepticas. Su obra fue conocida por Michel de Montaigne (1533-1592), el pensador francés del Renacimiento, que trata de unir el escepticismo con el humanismo y propone una visión critica de la condición humana.Las principales características de la doctrina esceptica son:
El principal bien del hombre es la felicidad, esta consiste en la absoluta tranquilidad del espíritu o ataraxia.
La ataraxia o imperturabilidad no es una negación del mundo sino un temple de ánimo desde el cual el mundo se contempla sin que nos afecte.
Todo conocimiento y toda doctrina deben ser permanentemente puestos en tela de juicio
Querer llegar a conocimientos absolutos es una fuente permanente de perturbación
Hay que abstenerse de todo juicio y reconocer que no captamos el ser de las cosas sino tan solo la manera como las cosas nos afectan.
El escepticismo implica una critica de la razón, ya que sus conocimientos están basados en las sensaciones lo cual los hace objeto de duda.
Para no absolutizar la posición esceptica debemos atenernos en la vida diaria y practica, a lo razonable y a lo más probable.
La postura esceptica es una cura contra la arrogancia humana que cree conocer la verdad y ser infalible, conduciendo finalmente a la incompetencia.Por su esencia antidogmática y critica los filósofos escépticos siempre prefirieron no participar directamente de los asuntos de sus sociedades; por lo común se mantuvieron en posiciones personales e individualistas y alejados de la política. Si bien Montaigne fue alcalde de su ciudad: Burdeos, lo hizo en la condición expresa de quien realiza una función en la cual no cree y de la que no participa a título realmente personal.Seria difícil afirmar hoy la existencia de una corriente de pensamiento filosófico o académico propiamente escépticos, pero es posible afirmar que las condiciones actuales de las sociedades y de la relación del hombre con la naturaleza, inclinan a muchos pensadores a ser escépticos frente al futuro de la humanidad.
EL NIHILISMO
Aunque en su origen la palabra se asocia con la doctrina política radical que se desarrollo en la Rusia Zarista de la segunda mitad del siglo XIX, la cual sirvió de aglutinante a los campesinos desplazados de la invadida Polonia, que estaban a punto de morir en su movilización política ante un sistema tan opresivo que solo le ofrecía la miseria y la muerte.
La filosofía del nihilismo se desarrolla reaalmente en Schopenhauer (1788-1860), para quien la vida humana se mueve entre el sufrimiento producido por el deseo insatisfecho y el dolor provocado por el vacío que queda tras la satisfacción de los mismos deseos. Para él la felicidad está en la renuncia a la voluntad, en cuanto esta es la causa del dolor interno, del egoismo y de la violencia.Schopenhauer ve la vida como castigo y explicación donde la única salida es la auto negación de la voluntad, lo cual provoca que el mundo real pierda su consistencia y carácter amenazador, pasando a ser visto por una especiee de “nada”.Pero es en Nietzsche (1844-1900), en quien el tema del nihilismo adquiere una gran dimensión, Nietzche es un filósofo particular; no pretende tan solo de filosofar para establecer un sentido de la realidad, pretende mucho más; ptrende algo desmesurado y para muchos imposible: Quiere establecer filosóficamente la certeza de que el camino espiritual seguido por la humanidad hasta el presente es, no solo un camino errado sino un fraude y un error. El pensamiento de Nietzche es un lucido esfuerzo por ponerlo todo en cuestión, por realizar una crítica total y radical de la cultura y de la condición humana.Pero no es Nietzsche un moralista, no pretende criticar para mejorar al hombre y al mundo. Pretende superar a ambos y de un modo esencialmente trágico, no pretende llevar al hombre a un cierto estado de perfección sino superarlo. Mientras anuncia el ocaso de la humanidad y la súperacción de nuestra condición humana, decadente, mísera y autocomplaciente, por un estado de sobre- hombría difícil y enigmático.Nietzsche es un nihilista a su manera esto significa; anuncia que Europa y occidente han caído plenamente en una forma de vivir y de pensar profundamente nihilista. El nihilismo es el término de una situación histórica sin otra salida posible y es además una condición inconciente e insoluble.La Europa cristiana y moderna ha interpretado tradicional y dogmáticamente la existencia del hombre y del cosmos de un modo nihilista, tanto en lo metafísico como en lo moral y lo practico. El hombre y lo real han sido interpretados como si fueran realidades de segunda mano; el universo, se piensa, en tanto creado por un Dios, como algo que tiene una realidad inferior en relación con aquel Dios que lo ha creado. Esta visión deriva de una lectura vulgar del platonismo desde la doctrina cristiana, y ha terminado por despojar al hombre de los auténticos valores de la fuerza, la espontaneidad, la voluntad de vida, el egoísmo constructivo y ascencional, la discordia creadora, el equilibrio natural de los instintos, el erotismo, la voluntad de auto superación y el amor por la terrenalidad.El hombre occidental de hoy acepta vivir una circunstancia que cree no tiene sentido en si misma sino en cuanto que trascienda, y los diversos modos de trascendencia; la social, la afectiva, la laboral, etc. Son formas de supuesta “salvación”, no son más que estados de alineación que configuran un gran sistema de apartamiento y negación de si mismo que el hombre individual acepta, con tal de poder sobrevivir en lo diversos tipos de sociedad que hemos creado.Este nihilismo es inconciente, porque se enmascara tras un sistema de vida y de valores que aparenta ser el mejor posible, mientras hace despreciable al hombre, a la vida, a la naturaleza y al mundo. El nihilismo europeo es una forma radical de escepticismo absoluto en la existencia, una negación del valor de todo lo real que desemboca en la incapacidad de valorar lo real.
A este nihilismo negativo y paralizante le opone Nietzsche un nihilismo activo, que consiste en negar todo el sistema de conceptos y valores que han hecho posible al nihilismo europeo; un nihilismo sin nihilismo, que niega casi toda la tradición occidental; este nihilismo activo implica factores fundamentales como: la realización de una transmutación de todos lo svalores, la autoafirmación del hombre tras la muerte de Dios, la cosmología del eterno retorno de lo idéntico, la experiencia dionisíaca del mundo y, finalmente, la realización de la sobrehombría.Pero estas condiciones progresivas, que terminan con la superhombría, están planteadas por Nietzsche inicialmente con conciencia de que se trata del ámbito filosófico. Nietzsche se ocupó del campo político, por lo menos desde 1872. Inicialmente su propuesta está ceñida a su propia visión de los griegos, como cultura artística, pero después, hacia el final de su vida lúcida, Nietzsche se inclina hacia la idea de una posible realización práctica de su política del nihilismo activo y concibe como seria un estado totalitario encargado de producir, imponer y sostener la sobrehombría.Lamentablemente la visión de Nietzche (quizá manipulaba tras su muerte por su hermana Elizabeth), cae en una propuesta totalitaria semejante a la República de Platón.