El barrio Las Lomas, ubicado al nororiente de la comuna, es un barrio más de El Poblado en el que lo comercial y residencial sobresalen sin existir interacción entre ellos
Edificios de empresas, unidades residenciales y muchos vehículos estacionados en las calles son gran parte del paisaje de este barrio. Pueden transcurrir muchos minutos sin ver a alguien caminando por las aceras del barrio, hasta que el paso de algún habitante con su mascota rompe con la rutina de los carros, los semáforos y el silencio general que se percibe por sus cuadras. El paso de esa mascota puede ser el hecho más relevante de un día de semana en el barrio Las Lomas. Mientras en las calles las personas no se ven, no hay tiendas ni graneros, en las oficinas y en los apartamentos de las urbanizaciones cada quien vive lo suyo sin preocuparse por el exterior. Al terminar la jornada, se suben a sus carros y se van sin dejar rastro alguno, y el barrio silencioso sigue ahí.
Así es el barrio, dividido por el Municipio como Las Lomas 1 y Las Lomas 2. Tiene homónimos como las lomas de Los Parra, Los González y Los Mangos, pero el barrio Las Lomas es uno solo y está comprendido entre la carrera 36 y la Transversal Superior, y la calle 10 y la variante Las Palmas, en un área de 826 mil 535 metros cuadrados.
Allí habitan más de 6 mil personas y mientras en 1997 contaba con 2.023 viviendas, actualmente son 2.870 apartamentos, 86 edificios y 230 oficinas.
Algunos referentes son el Hotel Intercontinental, Hotel Park 10, Pinar del Río, Caná de Galilea, Centro Comercial Vizcaya, Hogar Vizcaya y edificios como Las Conchas, Los Caobos, Palmeiras y Fontana Rosa entre otros. El barrio no cuenta con una parroquia grande para los feligreses, pero sí con una pequeña capilla, un centro apostólico llamado Nuestra Señora de la Candelaria.
Las Conchas y Los Caobos
El conjunto de unidades residenciales vecinas a la calle 10 y separadas por la quebrada La Poblada del resto del barrio son conocidas como Las Conchas. Arboleda de La Concha, La Concha, La Concha 2, Bosque de La Concha, Altos de La Concha y el Vivero La Concha son algunos de los sitios que rememoran aquella vieja finca que, como Patio Bonito, Astorga y Manila, hizo de El Poblado un sitio de paseo y descanso a mediados del siglo anterior.
Los Caobos, casa ubicada en la calle 10B con la carrera 35, es una de las edificaciones que muestra que El Poblado era para veranear. Como lo publicó Vivir en El Poblado en su edición 120, de la segunda quincena de septiembre de 1997, “la casa era propiedad de don Jesús Posada y luego de don Jorge Cock Quevedo. Aunque luego pasó a funcionar allí un almacén, siempre será recordada como la casa de la finca Los Caobos y también de la San Lorenzo, cuya portada estaba ubicada en la calle 10”.
Hogar Vizcaya, tres décadas de servicio
El próximo mes de febrero, este lugar que es la casa de 40 ancianos que viven con las comodidades y atención del grupo profesional del hogar, cumplirá 30 años desde su fundación en esa casa antigua que es uno de los sitios tradicionales del barrio Las Lomas.
El Hogar Vizcaya fue una donación de Germán Echavarría y Lucía Olarte, hijo y esposa del reconocido empresario antioqueño Alejandro Echavarría, de la casa que fuera su residencia de veraneo por muchos años. La entrega se hizo siguiendo el deseo de Alejandro Echavarría, quien explícitamente pidió destinar esa vivienda para el cuidado y atención de ancianos de la ciudad.
La Hermana Obeida Bedoya, quien trabaja en enfermería del Hogar, dijo que “acá la política es trabajar para que se sientan en un ambiente de hogar, cubrir las necesidades básicas en un ambiente de familia con todos los servicios de nutrición, fisioterapia, tiempo libre, actividades recreativas y enfermería entre otros. Que estén felices y se sientan queridos y valorados”.
Espacio para el arte
La Galería Arte Autopista tiene 42 años de existencia, empezó en el Centro de Medellín en Sucre con la Avenida La Playa, luego en Oviedo, Villanueva y en otras ciudades como Cali y Bogotá, y hace más de 20 años se encuentra en el barrio Las Lomas en la carrera 28 con la calle 10B.
Hildebrando Mejía, director de la galería desde hace 18 años, fue hace un tiempo un comerciante reconocido que perteneció a las juntas de Fenalco y la Cámara de Comercio. Hoy, a sus 78 años, continúa al frente de este espació para el arte y la exhibición, mientras hace el empalme con su hija Ana Lucía Mejía, negociadora internacional de la Universidad Eafit con Maestría en negocios con orientación al arte en España.
Según el director Mejía, en la galería han hecho unas mil exposiciones y han pasado grandes maestros como Enrique Grau y Ricardo Gómez Campuzano entre otros. Pinturas en óleo, acrílico, dibujo y acuarela; esculturas de piedra, bronce, madera y yeso, son la constante en la Galería Arte Autopista.
“Acabamos de terminar la exposición de Leonel Estrada con 90 cuadros, y justo él cumplió 90 años. Fue extraordinario porque vino la familia en pleno a la exposición. Lo que Leonel buscó es que los niños le pierdan el temor a pintar, que sean mejores personas y artistas, por eso hemos pensado vincular empresas para enviar sus obras a pueblos antioqueños”, dijo Hildebrando Mejía.
También destacó la importancia de la presencia de la galería en el barrio, por la gran ubicación que tiene y la cercanía con importantes hoteles, para que los extranjeros conozcan el arte colombiano.
Problemas de tránsito
Vivir en El Poblado en su especial del barrio Las Lomas en 1997, informó que “la tranquilidad del sector se ha visto vulnerada, sobre todo en las noches y debido al tráfico de vehículos. En el sector de las casas, los camiones en la madrugada que recortan el viaje desde Las Palmas hasta la autopista hacen mucho ruido. Y en Las Conchas, el retorno de la vuelta a oriente por la Cola del Zorro que recalienta frenos y produce choques casi cada semana”. La información de aquella época sigue vigente en la actualidad teniendo en cuenta las quejas de los habitantes de esa zona, que también hablan de las rutas de buses que comienzan a subir y a descender por las lomas desde muy temprano en la mañana, generando ruido y malestar al interior de las viviendas.