Hay sueños que permanecen en muchos. Entre ellos están fundar o estar a cargo de una editorial o de una librería. Dos sueños que implican grandes retos y también la satisfacción que da aquello que se entrega a los otros a través de la palabra. Al conversar con el escritor Esteban Duperly Posada, jefe de la editorial de EAFIT, uno encuentra la ilusión por los nuevos títulos, por los desafíos de la edición y el diseño, por la sorpresa que da el encuentro con un autor desconocido que seduce con su escritura.
Esteban ingresó en enero de 2023 cuando la escritora Claudia Ivonne Giraldo se retiró por su jubilación. Duperly está convencido de que lo que funciona bien no hay que cambiarlo. Es consciente de que la editorial es el fruto del trabajo de cada uno de sus anteriores editores. Cada uno dejó una semilla que se expande.
“Lo que he hecho es continuar un proceso que ya estaba sólido, reconocido. Llegué con un catálogo de unos 850 libros, un catálogo fortalecido. Hay inclinaciones personales de ciertas cosas que uno ajusta en virtud del cambio de tiempos y de los gustos. Este es un proyecto que, por supuesto, se actualiza, sufre modificaciones, pero en esencia está muy cimentado…”, explica el editor, quien es escritor, periodista, fotógrafo y quien está próximo a obtener su máster en Historia.
La editorial, dice, “expresa, mediante productos editoriales, el proyecto investigativo, educativo, científico y cultural de EAFIT. Es un proyecto al servicio de la sociedad. ¿Cuáles son los temas de los que necesitamos reflexionar? Uno de los principios es publicar títulos sobre esos temas, lo que, por supuesto, atraviesa lo cultural y lo artístico”. Es una dependencia financiada por EAFIT, sin embargo, opera de manera autónoma. Hace parte de la Dirección de Narrativas y Cultura.
Hay dos comités, uno que asesora y da líneas generales de temas administrativos y estratégicos. Y un comité editorial que toma la decisión de qué libros publicar, se hace de manera interna entre el director jefe y los editores, Carmiña Cadavid, Marcel Gutiérrez y Heiner Mercado y un profesor de Literatura invitado, entre otros.

Una conversación que fluye
“Si miras de una manera más amplia y abres el foco, te encuentras con que una editorial universitaria tiene una labor social y es publicar libros para que el lector pueda informarse mejor, reflexionar sobre temas que son importantes para la sociedad”. La paz, la planeación urbana, los ecosistemas y sus crisis, tienen un interés esencial.
Para Esteban es clave generar conversaciones sobre diversidad e identidad; sobre nuestras violencias y los cambios en el mundo contemporáneo; generar un diálogo sobre preguntas relacionadas con la ética, los valores, la justicia. “Parte del olfato que uno tiene que tener como editor es mirar cuáles son esas conversaciones que necesitamos y ponerlas en esas páginas”.
A la editorial le dan vida los libros que tienen un carácter académico, producidos por profesores e investigadores que están vinculados con la Universidad, que, si bien tienen un nicho pequeño, deben existir para expandir aquello que sale de las aulas, que es producto de años sabáticos o tesis. Historia, ingeniería, urbanismo, derecho, estudios hermenéuticos hacen parte de este grupo que puede ocupar un 60% de la producción. Y un 40% lo ocupan títulos de novela, cuento, poesía, ensayo, entre otros.
La editorial se ha hecho sólida dentro del ámbito de las universitarias con la colección de narrativa, poniendo autores reconocidos y otros nuevos que comienzan a mostrar su talento en las letras, lo que expresa el proyecto cultural de la casa matriz. Además, es una de las pocas en Colombia que publica partituras.
En este 2025 se planean unos 35 libros. A finales de abril saldrán los primeros títulos. Hay un cronograma que es como un dominó, cada libro debe interactuar con los otros. Un proceso complejo, porque cada uno pide un tratamiento distinto. Se reciben las propuestas, los editores leen, se decide, se trabaja con el autor. Por fuera hay un grupo de correctores. Los textos llegan corregidos y allí empieza el trabajo de diseño y montaje, definición de cubiertas, de tipografía, de papel; la corrección de pruebas… Esto es una filigrana que apasiona y en la que cada detalle cuenta.

Entre muchos otros, vendrán este año, en la Colección Rescates, un libro de carácter jurídico sobre el principio del daño moral; hay uno de cartas de Gonzalo Arango y otro de cuentos que hace parte de la vocación de la colección de literatura, presentar nuevas firmas. También se publicará un libro de Mario Escobar Velásquez dedicado a sus escritos en la revista Lanzadera, edición facsimilar, que ilusiona a sus editores.
Una de las novedades será un texto para niños y adolescentes que hace parte de la colección Tuerca de vuelta, que fue pensada por Claudia Ivonne Giraldo. Requiere un tratamiento único en su tipografía, diseño, ilustraciones. La odisea de Serafina es el primero de estos títulos de divulgación científica con una delicada conceptualización.
La Colección Biblioteca de Autor reúne los libros dispersos en otras editoriales de los escritores Fernando González, Gonzalo Arango, Rocío Vélez de Piedrahíta, Mario Escobar Velásquez y Jorge Alberto Naranjo.
Hay libros que requieren un tratamiento especial, desde la concepción y el diseño, con un trabajo editorial más refinado, como las bibliotecas de autor, las colecciones Rescates o Letra X Letra; y Otramina (nombre que rinde homenaje a León de Greiff), dedicada a la poesía y que es curada por el gran poeta colombiano Darío Jaramillo. El autor invitado en este año es el español Alfonso Martínez Galilea.
“Tenemos una responsabilidad moral, uno compite para que el libro llegue a un mundo que te dice más rápido, más rudo, más grande, mientras sacas algo silencioso, pequeño”, dice Esteban Duperly, quien termina nuestra conversación con una noticia: ¡volverá el Premio León de Greiff al Mérito Literario!, que otorga la Secretaría de Cultura de Medellín, por intermedio de Eventos del Libro. EAFIT es socia. La editorial publica el libro ganador.