Con el desplome de uno de los edificios símbolo del poder de Pablo Escobar, salieron a relucir oscuros recuerdos y dolor por todo lo que en aquella época sucedió. Al mismo tiempo, opiniones de un lado y de otro dicen que será un antes y un después, y que el parque que se construirá en honor a todas las víctimas será un gran paso para la renovación de la ciudad, que busca dejar atrás un pasado sombrío y que ahora trabaja a diario para tener una imagen más positiva ante el mundo, una de innovación, de esfuerzo, de resiliencia, de una ciudad amigable que recibe a todos sus visitantes con los brazos abiertos, de una nueva Medellín que día a día lucha para ser mejor.
Por: Alejandra Ceballos
Esto es parte de un nuevo comienzo, de borrar las ganas de “dinero fácil” para llevar una vida de lujos así sea corta, que por cierto, es una idea bastante errada porque el dinero fácil no existe.
No queremos más niños admirando a un hombre que hizo tanto daño, pero que para muchos era bueno porque regalaba plata a los pobres, ni de seguir a individuos como Popeye que hablan de todos los crímenes que cometieron como si estuvieran explicando una receta de cocina. De ningún modo son buenos referentes, y aunque quisiéramos olvidarnos de ellos, no es posible ignorar que existen, pero pueden servirnos para darnos cuenta de que eso es lo que debemos evitar ser. Para eso nuestro gobierno debería invertir en más educación y oportunidades para que nuestros niños y jóvenes no equivoquen el camino.
Me sorprendió mucho conocer la noticia de un niño de tan solo 13 años que no está de acuerdo con la demolición y que gracias a narconovelas como El Patrón del Mal le ha surgido una admiración por este personaje. De alguna manera somos culpables porque eso es lo que transmitimos a otros países, pero eso nos lleva a pensar en tener más consciencia y aportar desde nuestras acciones para progresar como seres humanos y preguntarnos: ¿Cómo queremos que nos vean? ¿En qué nos queremos destacar? ¿Qué queremos ofrecer a quienes nos visitan? ¿Qué queremos que nos digan cuando salimos de vacaciones al exterior? Tenemos que reflexionar, ya es hora de un cambio y aunque muchas veces pensemos que uno solo no hace la diferencia, muchos unidos si podemos lograrlo.
Destaquémonos siempre por lo bueno y valioso.
Con la caída del Mónaco caerán las tristezas y llegará la luz para contar una historia nueva y diferente, para que las nuevas generaciones conozcan lo bueno que tenemos y lo extraordinarios que podemos llegar a ser, para que como sociedad entendamos que entre todos podemos cuidarnos y querernos, que crecemos más siendo tolerantes, creando cultura, ayudándonos, sabiendo que con esfuerzo se llega lejos, que unidos vamos a demostrarle al mundo que somos más que violencia y drogas, que podemos ser ejemplo de empuje y que de ahora en adelante empezaremos a respirar un nuevo aire.