La región del Catatumbo, en el departamento de Norte de Santander, vive una de las peores crisis humanitarias de su historia reciente tras la suspensión de las negociaciones con el grupo armado ilegal ELN el pasado 17 de enero. Los enfrentamientos entre esta guerrilla y las disidencias de las Farc han dejado más de ochenta muertos, al menos veinte heridos y miles de desplazados.
La escalada de violencia, que comenzó el pasado jueves, ha provocado un éxodo masivo de campesinos hacia las cabeceras urbanas de Cúcuta, Ocaña y Tibú, e incluso hacia territorio venezolano. En respuesta a esta situación, el Ejército colombiano ha llevado a cabo operativos de rescate en zonas de conflicto.
El alcalde de Cúcuta, Jorge Acevedo, informó a medios de comunicación que la ruta de atención a desplazados está activa y que entre la noche del sábado y la madrugada del domingo se atendieron 2.790 personas en el albergue instalado en el Estadio General Santander, mientras que 408 camas de hotel fueron ocupadas por familias desplazadas.
Ante esta situación, el alcalde de Medellín, Federico Gutiérrez, hizo un llamado a todos los medellinenses a unirse a esta causa y recordó la importancia de la solidaridad entre las regiones.
“El Catatumbo enfrenta una grave crisis humanitaria, con más de 10 mil desplazados que han llegado a Cúcuta en busca de refugio. Siempre hemos sido solidarios desde las regiones, y hoy más que nunca es momento de demostrarlo. Invito a todos los medellinenses a sumarse a esta causa; pueden donar dinero a la cuenta de la Corporación Presente o contribuir con ayudas en especie en distintos puntos de la ciudad, especialmente en las bibliotecas públicas”,
afirmó el mandatario antioqueño.
Para facilitar la recolección de ayudas, se han habilitado diversos canales tanto digitales como presenciales. Los ciudadanos pueden realizar donaciones escaneando el código QR o acercándose a los puntos de acopio ubicados en las bibliotecas públicas de la ciudad:
Crisis humanitaria en el Catatumbo
La Gobernación de Norte de Santander declaró emergencia humanitaria, social y económica en la región del Catatumbo mediante los decretos 0042 y 0043 del 20 de enero de 2025. La medida busca hacer frente a la crítica situación.
El plan de acción contempla la articulación de esfuerzos con el Gobierno Nacional, organizaciones humanitarias y entidades locales para garantizar la atención integral de las familias afectadas. Se priorizará la provisión de alimentación, refugio, atención psicosocial y medidas de seguridad en los municipios más golpeados por la violencia.
La crisis humanitaria se ha intensificado con la declaración de estado de conmoción interior por parte del presidente Gustavo Petro, debido al incremento de la violencia en la zona.
Las autoridades han manifestado su preocupación por la falta de recursos para atender a los desplazados, quienes han llegado principalmente a Cúcuta, Ocaña y Tibú en busca de ayuda. La Procuraduría ha alertado sobre la difícil situación de la población infantil, que representa el 35 % de los desplazados.
La comunidad ha solicitado apoyo urgente en insumos básicos como alimentos no perecederos, productos de higiene y ropa, mientras se espera una respuesta más contundente por parte del Gobierno Nacional para hacer frente a la crisis.