En el Oriente antioqueño se abrió el primer kínder para niños desde un año, basado en highscopey Ruler. ¿Qué es? Este modelo, con origen en EE.UU., ha demostrado mejorar habilidades cognitivas, sociales y emocionales con impactos a largo plazo, como lo evidencian estudios que muestran mejores resultados académicos, laborales y emocionales en sus beneficiarios.
Este nuevo kínder, creado por el Vermont School en El Retiro, responde a la importancia de estimular el cerebro en los primeros años de vida. Según la Unesco, el 90 % del desarrollo cerebral ocurre antes de los cinco años, siendo el período entre uno y tres años crucial para el fortalecimiento de habilidades intelectuales y emocionales. Con un enfoque de aprendizaje activo y exploración estructurada, highscopeofrece un entorno enriquecedor donde los niños desarrollan su autonomía, creatividad y pensamiento crítico, brindándoles herramientas fundamentales para su vida futura.
Santiago Castro, rector del colegio, explica que estos principios se implementan a través de una metodología estructurada que permite a los niños planificar, ejecutar y reflexionar sobre sus actividades diarias, adaptándose a sus intereses y necesidades individuales desde los 12 meses de edad.
“Creemos en una educación que respete el ritmo de cada niño y promueva su desarrollo integral. Por eso, hemos adoptado una metodología basada en un entorno que estimula la exploración y la autonomía, una interacción adulto-niño con control compartido para fomentar la toma de decisiones en un ambiente seguro, una rutina estructurada que brinda estabilidad y fortalece el desarrollo cognitivo, una evaluación continua para adaptar las estrategias pedagógicas y la participación activa de las familias, esencial para reforzar el aprendizaje en casa“,
señala el rector del Vermont School Medellín.
De acuerdo con la Unesco, durante los primeros años de vida, también es fundamental trabajar en el desarrollo de habilidades socioemocionales, ya que estas impactan el bienestar, la adaptación social y el aprendizaje a lo largo de la vida. Por esta razón, este kínder incorpora el programa Ruler, una metodología desarrollada por el Centro de Inteligencia Emocional de la Universidad de Yale, que enseña a los niños a reconocer, comprender, expresar y regular sus emociones de manera efectiva.
A través de herramientas como el “Mood Meter”, que les ayuda a identificar y etiquetar sus sentimientos, y el “Meta-Moment”, que les enseña a pausar y reflexionar antes de reaccionar, los pequeños adquieren estrategias para manejar sus emociones, fortalecer su autoestima y mejorar sus relaciones interpersonales desde temprana edad.
Asimismo, es necesario estimular el desarrollo del lenguaje a través de la exposición a otros idiomas como el inglés, ya que la primera infancia es una etapa clave para la adquisición natural de nuevas lenguas.