Desde el pasado mes de septiembre, el colegio Vermont inició actividades en un modelo de alternancia que permite a niños, niñas y adolescentes aprender y socializar.
Casi seis meses ajusta el Vermont, ubicado en el municipio de El Retiro, con su modelo de alternancia. “Empezamos una vez tuvimos la autorización para iniciar actividades presenciales”, explica Telmo Peña, rector de la institución.
Una suma de características ha hecho que este colegio se haya convertido en referente, no solo en la región sino en el país. La tecnología siempre ha sido fundamental en la propuesta pedagógica por lo que la migración a los entornos virtuales se dio de forma orgánica.
“Nuestros estudiantes siempre tienen acceso a un computador y esto ha sido esencial en la alternancia”, dice Peña.
Otro punto a favor son las instalaciones campestres. Peña explica que “tenemos un campus generoso que tiene la posibilidad de que en el colegio puedan estar presentes todos los estudiantes que escogieron la presencialidad”. En la sede de Medellín, ubicada en El Poblado, también se han implementado estrictos protocolos de bioseguridad para garantizar la seguridad de los estudiantes.
“Volver a las actividades al colegio nos ha dado la oportunidad de enviar un mensaje de confianza y esperanza”, dice Peña. Además, ha representado la posibilidad de enseñar que las normas deben cumplirse porque son en beneficio de la seguridad de los otros.
El regreso, además, ha propiciado no solo los espacios académicos, sino los de desarrollo social. “Hoy el recreo es uno de los momentos más importantes de la jornada”, explica el rector.