Desde que se registró el deslizamiento en la loma de los Balsos, el pasado 6 de mayo, la Alcaldía de Medellín ha trabajado para garantizar condiciones seguras a la comunidad.
Hasta hoy, van 55.000 metros cúbicos de material retirado y se avanza en la fractura controlada de roca para facilitar su remoción. También se han instalado 484 metros de drenes horizontales y realizado 375 metros de zanjas para el manejo y control de aguas.
“Hemos identificado nuevas aguas subterráneas, de las que aún no se sabe su origen para poderlas tratar adecuadamente, lo que dificulta los diseños definitivos para estabilizar la ladera. Seguimos trabajando en los estudios hidráulicos y técnicos, en la evaluación para construir un terraplén (relleno) en la base, utilizando la roca extraída como barrera de contención; y en el terraceo, con el propósito de bajarle el volumen y peso a la montaña, así como en las perforaciones de esta”, explicó el secretario de Infraestructura Física, Jaime Andrés Naranjo Medina.
Las labores se realizan con un equipo de más de 100 personas, entre geólogos, ingenieros, operadores, obreros, oficiales, topógrafos, administradores, entre otros. El contratista y la interventoría, además, trabajan de manera continua para definir las posibles opciones para estabilizar la ladera.
Teniendo en cuenta que el riesgo continúa, según el monitoreo y las visitas técnicas del DAGRD, la Administración Distrital determinó que el cierre en la loma de los Balsos continuará, por lo menos, dos meses y medio más.
En la zona, actualmente se lleva a cabo un estudio geotécnico, geológico, hidráulico y de diseño para lograr la estabilización del talud. Este seguimiento se hace por medio de teledetección con drones e inspección especializada.
“Si bien las condiciones hidrometeorológicas han ayudado a tener más seco el terreno, fuertes precipitaciones se han presentado a lo largo de la semana que han hecho que el suelo vuelva y se sature de agua, por lo tanto, se debe, permanentemente, filtrar y drenar a través de sistemas manuales. Aquí lo más importante es la vida de las personas, y hasta que no tengamos los factores de seguridad, no abriremos la vía, porque es poner en riesgo a los ciudadanos que la transitan”, dijo el director del DAGRD, Carlos Andrés Quintero.
En cuanto a la movilidad en la zona, seis agentes de tránsito ubicados en el cierre principal sobre la vía afectada adelantan labores preventivas, de regulación y control del flujo vehicular. Además, desde este 19 de junio, se habilitó en doble sentido el tramo de la Cola del Zorro comprendido entre la vía Las Palmas y la transversal Superior.
“Esta decisión se toma considerando que la Universidad CES, el Colegio San José de la Salle y los demás centros educativos de la zona salieron a vacaciones. Esto hace que la carga vehicular disminuya y, por lo tanto, que la vía pueda estar en ambos sentidos. Aun así, invitamos a los ciudadanos a que utilicen corredores alternos”, agregó el secretario de Movilidad, Mateo González.
El Distrito de Medellín reitera que por ahora este tramo de vía no será habilitada hasta tener los factores de riesgos controlados y plenas garantías de estabilización de la montaña.