Sebastián Dávila, un colombiano radicado en Canadá, comenzó a experimentar un dolor constante en la cabeza y el cuello, que se extendía hasta el brazo derecho. Decidió viajar a Medellín para buscar alivio y encontró en la IPS CEAD, un centro especializado en el tratamiento del dolor, la atención y el tratamiento que necesitaba.
“El diagnóstico reveló que un disco intervertebral produjo una irritación de los nervios y, como consecuencia, esos dolores molestos, por lo que decidimos realizarle un bloqueo interlaminar cervical”, explica el médico Frantz Colimón, especialista en Terapia del Dolor del CEAD.
Sebastián quedó sorprendido con el procedimiento. “Fue muy rápido, como 15 minutos; todo el tiempo estuve despierto y consciente de lo que me estaban haciendo. El doctor me explicaba el procedimiento, incluso me preguntó qué música me gustaba o si sentía algún tipo de dolor. Ahora me siento mejor, pues yo no podía mover el cuello y ya puedo hacer movimientos circulares”, expresa.
Él es un caso de éxito entre miles que ha atendido el CEAD en tratamiento de dolores producidos por hernias discales. Estas hernias ocurren cuando una parte del disco, que está entre las vértebras de la columna, se desplaza por pequeñas fisuras, pudiendo presionar los nervios cercanos. Esto puede generar dolor en la espalda o incluso en la pierna, como sucede con la ciática.
Causas del dolor
Esos dolores pueden surgir por actividades cotidianas como una mala postura en el trabajo, el estrés constante, la tensión muscular, lesiones por caídas o golpes, o enfermedades degenerativas. Lo más común es que las personas consulten a varios especialistas y gasten mucho dinero antes de dar con la verdadera solución.
El dolor de espalda puede presentarse en la zona cervical, ubicada en la parte superior de la columna, y afectar la cabeza y el cuello; o en la zona lumbar, que corresponde a la parte baja de la espalda y puede dificultar movimientos como doblarse o levantar objetos.
Puede parecer sorprendente, pero los fumadores forman parte de un grupo de riesgo para este tipo de dolores. Fumar o vapear debilita los ligamentos de la columna, lo que los hace más propensos no solo a desarrollar hernias discales, sino también a otras afecciones musculoesqueléticas.
“Muchas personas desconocen que existen especialistas dedicados al manejo del dolor, por eso, en muchos casos, creen que la única solución es la cirugía, cuando en realidad no siempre es necesaria. En CEAD contamos con tratamientos efectivos para el dolor cervical y un equipo comprometido con mejorar la calidad de vida de nuestros pacientes en el menor tiempo posible”, revela el doctor Colimón.
Otro caso exitoso es el de Javier Tamayo, un paciente con dolor extremo en las piernas. “Sentía como si me clavaran chuzos cada vez que apoyaba el pie”, cuenta don Javier. “Al llegar a CEAD, los especialistas me recomendaron un tratamiento con electrodos en la columna. Es como si conectaran tu cuerpo a un computador que genera un campo eléctrico para bloquear el dolor antes de que llegue al cerebro. Gracias a ese procedimiento, mi neuropatía mejoró en un 99 %. Volví a caminar sin miedo, sin dolor… volví a vivir”, exclama.
El dolor crónico puede afectar no solo el cuerpo, sino también el estado emocional y social de quien lo padece. CEAD le ofrece acompañamiento integral que incluye el apoyo de especialistas en salud mental durante el proceso de tratamiento. Recuerde: entre más pronto consulte, más cerca estará de encontrar alivio y recuperar su bienestar.
Tipos de tratamiento
CEAD ofrece tratamientos avanzados para las hernias discales que permiten aliviar el dolor de forma segura y sin recurrir a cirugías mayores. Algunos de estos tratamientos son:
Proloterapia: es un tratamiento regenerativo que consiste en aplicar sustancias naturales (como dextrosa) en los ligamentos o tendones lesionados para estimular la reparación y fortalecer la estructura de la columna.
Radiofrecuencia: utiliza energía térmica controlada para desactivar temporalmente los nervios que transmiten el dolor, lo que proporciona alivio prolongado y mejora la movilidad del paciente.
Estos procedimientos son mínimamente invasivos, ambulatorios y están orientados a recuperar la calidad de vida sin necesidad de cirugía.
Para realizarlos, CEAD utiliza técnicas de avanzada como la fluoroscopia, que permite al especialista ubicar con precisión la zona afectada para aplicar medicamentos directamente en el área del dolor. También utilizan la ecografía musculoesquelética, que permite visualizar tejidos blandos, músculos y articulaciones en tiempo real, para aplicar tratamientos de forma segura y efectiva sin exposición a radiación.
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