La ayurveda es una tradición medicinal con miles de años, que parte de la base de la alimentación como remedio y tratamiento para toda enfermedad.
La alimentación es fundamental para tener el prana al 100%. Prana es una palabra en sánscrito que se refiere a lo vital, a la energía de las cosas vivas. Al consumir productos de la tierra ingerimos el prana de cada uno de ellos.
Una de las cosas principales es tener una relación armónica con la naturaleza y aquellos productos que tomamos de ella. Uno de los conceptos a considerar es el ecológico. Los productos locales y en cosecha son más amigables con el medio ambiente ya que no requieren mucha transportación contaminante para llegar a la mesa. Los productos orgánicos no usan pesticidas ni otros químicos que impurifican aire, agua y campos. Además del medio ambiente, la alimentación orgánica y local permite que tengamos ingredientes frescos y sin preservantes. Mientras más natural el producto más prana obtendremos de él.
La preparación y cocción de los alimentos también influye. Al cortarlos, pelarlos o picarlos, empiezan a perder sus vitaminas y energía gradualmente, algunos, como el limón, pierden sus propiedades con más velocidad que otros. En cuanto a la cocción no se recomiendan temperaturas extremas, ni sumergir los alimentos en agua durante largos ratos.
El término sánscrito agni, significa fuego, y se emplea para describir las fuerzas que descomponen el alimento que consumimos. Esto se refiere a los enzimas y ácidos que participan en el proceso digestivo, al hígado, la vesícula, las glándulas salivares, el páncreas y el resto de órganos y tejidos participantes en esta función y que regulan el apetito y la eliminación de residuos. El desequilibrio del agni puede producirse por exceso de comida y líquidos, estrés o por comer en un ambiente intranquilo, en conflicto o con una mala disposición. La actitud frente a la comida es tan importante como la comida misma.
No solo como salud sino como forma de mantener un peso adecuado, la cocina ayuervédica, sin ser una dieta, nos permite ser más conscientes de aquello consumido.
Según la ayurveda, el cuerpo posee tres doshas: vata (aire), pitta (fuego) y kapha (agua), encargadas de regular las actividades fisiológicas y fisico-químicas. El equilibrio de las tres es indispensable para la buena salud, pero cada individuo tiene tendencias hacia uno de los grupos. Esto se determina por sus características físicas, de personalidad y emocionales. Según los parámetros de cada grupo, un tipo u otro de alimentación es más apropiada, por ejemplo: una persona pitta debe alimentarse con cosas refrescantes como el cilantro o el hinojo, un kapha se benficia de la comida picante y los vata de las comidas cremosas y yogures. Cada grupo tiene sus propias características pero algunas personas pueden ser un híbrido y beneficiarse de una alimentación balanceada. Para identificar a qué grupo o híbrido se pertenece, es necesario investigar y analizar cada constitución, pero algunas de las características básicas son:
Vata: se asocia a personas de constitución delgada, muy altos o muy bajos de estatura, de carácter inquieto y sueño ligero, visionarios que viven de forma acelerada, con muchos cambios de humor.
Pitta: son personas de constitución mediana, temperamento enérgico, volubles y apasionados con sueño tranquilo y son líderes naturales.
Kapha: suelen ser personas de constitución fuerte y grande, con buen apetito, sueño profundo y carácter estable, cariñosos con tendencias a ser muy pasivos.