De los mil nuevos policías que llegaron a Medellín en febrero, 108 se destinaron a El Poblado. Esto permitió crear 18 nuevos cuadrantes que, sumados a los 11 que había, dan en total 29. “Se pretendió que la cobertura por cuadrante fuera menor. Ahora cada barrio de El Poblado cuenta con un cuadrante o con dos, según su tamaño”, afirma el mayor Andrés Pulido, comandante de la Estación de Policía de la comuna 14.
Agrega que se reforzó el esquema de seguridad con puestos de control móviles y con presencia permanente de policías en puntos críticos, donde se requisan vehículos y motos. Esto ha permitido, por ejemplo, que desde el 1 de enero hasta el 11 de febrero se realizaran en El Poblado 87 capturas por hurto.
Una de las capturas más importantes se llevó a cabo en Provenza y si bien no está relacionada directamente con robos, sí con una red de microtráfico, factor clave en la inseguridad. Según el mayor Pulido, en este sector una mujer fue encontrada en posesión de drogas ilícitas y con una lista de las personas a las que debía surtir con las sustancias, para ellas, a su vez, venderlas.
Sitios con presencia policial en El Poblado
San Carbón, Mall Plaza, Zona 2, Carulla Pinar del Río, Consumo, San Lucas y el Complex. A estos se suma la ubicación de 17 camionetas Duster en puntos de ingreso y salida de la comuna 14: Punto Clave, Monterrey, la calle 4 Sur, La Frontera, corredor vial Las Palmas, Puente de La Asomadera y Avenida El Poblado. También en la Milla de Oro, La Visitación, la Intermedia con Los Balsos, La Cola del Zorro, El Tesoro, Parque Lleras, Vía Primavera y Provenza, Ciudad del Río. Hay otras tres camionetas que recorren toda la comuna.
Percepciones de seguridad
Los robos en diferentes modalidades, la intención de algunos ciudadanos de tomarse la justicia por sus propias manos, entre otros temas relacionados con la seguridad en El Poblado y otros sitios de Medellín, han sido permanentes durante este año en los medios de comunicación y las redes sociales. Incluso, en una entrevista reciente en un medio nacional, el alcalde Aníbal Gaviria decía sobre su gestión en 2013: “Nos faltó ser más contundentes en el ataque a la microextorsión y a los hurtos en general. Ahí tenemos que darles muy duro para que nuestros ciudadanos tengan más tranquilidad”.
En El Poblado las denuncias están relacionadas con robos de bicicletas en Las Palmas y en las lomas; en las transversales, delincuentes en motos despojan a los ocupantes de los carros de sus celulares, relojes y dinero. Algunos de los llamados “trapos rojos”, en barrios como Manila, se convierten en una amenaza y, según se queja un lector, ahora en los parquímetros se presenta una nueva situación: “Llega uno en su carro y le dicen que hay una persona muy interesada en él para que uno le deje los datos al supuesto comprador, que después resulta ser un ladrón”.
Una percepción más positiva tiene Juan Gonzalo Velásquez, director ejecutivo del Tour Gastronómico, para quien la seguridad ha mejorado en El Poblado y en Medellín en general: “Los comerciantes estamos muy contentos con la llegada de más policías a la ciudad y el aumento del número cuadrantes. Hacemos un llamado para trabajar articulados con ellos y usar celulares, avantales, alarmas, cámaras y demás ayudas tecnológicas para la prevención”.