El Carmín es muy susceptible a la contaminación y por eso requiere poda de formación, fertilización y control de plagas. Las hojas y los frutos son tóxicos para los animales domésticos. Su madera, aunque no resiste el comején, es dura y pesada y se usa en construcción, en ebanistería y para postes; es propia para la producción de leña y carbón. El Carmín, originario del sudeste asiático y presente en todas las regiones tropicales, es apto para la reforestación de terrenos degradados.
Este se encuentra en la Avenida El Poblado con la calle 19.