Carlos Pardo Botero: Arquitectura para reencontrarnos.
Lograr recuperar ese esquema de construcciones en las que las personas tienen todo dispuesto para reencontrarse como vecinos; esa es la apuesta. Luego de graduarse en la Universidad Pontificia Bolivariana, llegó en 1999 el primer proyecto de una serie de edificios residenciales conocidos como “los aviñones”, en San Lucas. Gracias a este estilo, varios proyectos de Obranegra Arquitectos, grupo del cual hacer parte Carlos Pardo desde hace 20 años, fueron incluidos en la publicación de la Bienal del año 2000. La idea ha sido, desde entonces, proponer una arquitectura que nos devuelva el encuentro como sociedad en el entorno habitacional.
Esa amalgama de posibilidades que se ven en otros barrios de la ciudad es materia prima para extractar esas ideas de unión a través de las estructuras. Como si se tratara de un manifiesto ya escrito, fue escogido para unir dos edificaciones educativas existentes que derivarían en la Institución educativa Santo Domingo Savio, un trabajo que Carlos Pardo donó a la ciudad y confirmó las capacidades para generar espacios de contacto social, sea cual sea el concepto. Carlos Tobón lo retrató en 2007.