Si bien el 6 de abril el Área Metropolitana reportó como terminado el episodio crítico para la calidad del aire en el Valle de Aburrá, dos semanas después los indicadores del Sistema de Alerta Temprana (Siata) presentan un predominio de nivel moderado (16 estaciones en amarillo), mientras dos están en nivel bueno (están en verde las estaciones de Sabaneta y de Caldas).
El registro promedio de las últimas 24 horas reportó en amarillo todas las 18 estaciones.
“La emisión de contaminantes producto del transporte de carga, las condiciones meteorológicas desfavorables y los incendios forestales que se presentan al norte del país y en Venezuela”, son los factores que inciden en estos momentos, de acuerdo con explicaciones ofrecidas por Gloria Ramírez, integrante del Equipo de Calidad del Aire del Área Metropolitana del Valle de Aburrá.
Por su parte, el Sistema de Alerta Temprana (Siata) ha señalado como causantes del paso de calidad buena a moderada las emisiones contaminantes provenientes de camiones y volquetas que soportan la reactivación de las obras de infraestructura pública desde el lunes 13 de abril, la operación de la cadena de abastecimiento y la entrega de ayudas. Esas emisiones han presentado picos de afectación de la calidad del aire entre las 7 y las 10 a.m.
Indicadores del portal Purple Air
Por su parte, este es el panorama que reporta el portal colaborativo Purple Air, que arroja indicadores en tiempo real:
¿Cómo se mide la calidad del aire en el Valle de Aburrá?
El Índice de Calidad del Aire ICA, que es monitoreado por el Sistema de Alerta Temprana Siata, mide las concentraciones de gases y partículas en el aire como dióxido de azufre, monóxido de carbono y dióxido de nitrógeno en partículas menores a 10 micrómetros (PM10) y menores a 2.5 micrómetros (PM2.5), bajo el protocolo del Plan Operacional para Enfrentar Episodios Críticos de Contaminación Atmosférica.
Este tipo de sustancias en altas concentraciones afectan de forma directa la salud de los seres vivos. Pueden causar enfermedades respiratorias o problemas cardiovasculares. La escala está dividida según el impacto que tiene en la salud de las personas: del verde, que significa una buena calidad del aire, hasta morado que indica concentraciones peligrosas.