La era digital llega a Oriente
Clubes de ciencia y tecnología, colegios digitales y educación a distancia hacen parte de la revolución educativa
No ha pasado una semana desde que el Centro Educativo Rural Obispo Emilio Botero González, en la vereda Las Mercedes del municipio de Marinilla, en el Oriente antioqueño, fuera construido y dotado con una moderna aula con siete tableros digitales, siete computadores portátiles y 16 de escritorio, siete videoproyectores, conexión a internet inalámbrico de seis megas y mobiliario escolar, convirtiéndose en el primer colegio digital del departamento, según la Secretaría de Educación de Antioquia. Beneficia a 120 estudiantes de preescolar y primaria.
“En el siguiente mes esperamos estar entregando otro de los colegios digitales. En este momento se está realizando un diagnóstico en todas las instituciones para analizar las necesidades en cada uno de los municipios. De este estudio se van a priorizar los recursos, los municipios e instituciones a intervenir dentro del programa. En Oriente ya pueden disfrutar de este colegio moderno, que está abierto también a la comunidad”, dice Andrés Ochoa, director de Antioquia Digital, de la Secretaría de Educación.
Con la adaptación de estas nuevas tecnologías de la información y la comunicación -TIC- al aula de clase, comienza lo que se ha catalogado como la revolución educativa que el gobierno departamental ofrece dentro del programa Antioquia Digital. Mediante este, pretende construir 40 colegios digitales, dotar 234 instituciones en el departamento, transformar los modelos educativos y promover el uso y la apropiación de tecnologías en los salones de clase, para una cobertura de más de 10 mil estudiantes.
En Oriente, como parte de la estrategia educativa, además de la entrega del colegio digital, la Gobernación anunció la apertura de seis clubes juveniles de ciencia y tecnología DiverTIC, en municipios como Marinilla, Guarne, La Ceja y Rionegro. Estos clubes tendrán la tarea de acompañar a los estudiantes y formar a los docentes para el uso de las TIC en el aula y aportar diferentes contenidos educativos digitales.
Además, dentro del programa Antioquia Digital se estima el acompañamiento y apoyo a los nuevos modelos educativos, como los virtuales y a distancia. Se brindarán tres mil suscripciones a cursos escolares en línea, en materias como lenguaje y matemáticas. “Hay adultos y niños que viven en lugares muy apartados y no pueden trasladarse fácilmente a las cabeceras municipales, entonces esto se convierte en una buena alternativa para su educación. El reto es facilitar el acceso a internet a 2.300 sedes educativas, apoyar la creación de 234 clubes juveniles en ciencia y tecnología y acompañarlos en la incorporación de las TIC en las actividades de clase”, explica Ochoa.
Uno de los mayores problemas que puede tener la adaptación de los colegios digitales y la educación virtual y a distancia, es la conectividad a internet en el departamento, pues debido a su geografía se dificulta el acceso a muchas poblaciones. Sin embargo, según las autoridades departamentales, se cuenta con la experiencia de empresas como Une y Edatel para la conexión a la web, con una cobertura actualmente en las sedes rurales del 60 por ciento y en instituciones urbanas del cien por ciento.
La U, en la era digital
Pero en Oriente la inauguración del primer colegio digital no es la única muestra de la revolución educativa. Desde abril de 2011 la Universidad Católica de Oriente, en el municipio de Rionegro, ofrece la Maestría en Educación, ciento por ciento virtual, con el objetivo de formar docentes y profesionales de la educación.
Actualmente 115 estudiantes, de cuatro cohortes en marcha, tanto del mismo Oriente antioqueño como de ciudades como Bucaramanga y Leticia, están matriculados en este posgrado. Gracias a la modalidad a distancia pueden formarse por medio de módulos educativos y plataformas tecnológicas que les permiten el acceso a los cursos. Este posgrado se realiza en convenio con la Universidad Católica del Norte (ubicada en Santa Rosa de Osos), centro reconocido por tener la experiencia más amplia en este modelo educativo y por ser pionero en la educación virtual en el país.
Elkin Ríos, coordinador de la Maestría en Educación, afirma que “la educación a distancia, en relación con la presencial, tiene un acceso equilibrado al conocimiento. Una ventaja de este sistema es el tiempo y el espacio, ya que desde la misma casa los estudiantes pueden interactuar por medio de las plataformas educativas y acceder a contenidos, cursos y orientaciones, sin necesidad de desplazarse.”
La universidad, que cuenta con 21 programas de pregrado, también tiene a distancia, con apoyo virtual, el programa de Gerontología, el cual utiliza aprendizajes interactivos con Tecnologías de la Información y la Comunicación -TIC-.
“La universidad desde hace varios años ha iniciado la incorporación de las TIC. Se ha capacitado a los docentes en la aplicación y el uso de estas tecnologías para el fortalecimiento de la enseñanza y el aprendizaje. La conectividad en el departamento, para efectos de interacción, es baja. Tenemos estudiantes que son de las zonas rurales y tienen que llegar a las cabeceras municipales para vincularse. Es importante que al menos los estudiantes tengan un día para conectarse, sobretodo en el área rural, donde es más difícil el acceso”, opina Elkin Ríos.
“Hay que formar maestros”
“Todavía no estamos preparados para una formación totalmente virtual, estamos en un modelo combinado que es en parte presencial y en parte virtual, básicamente por dos razones: una porque la cultura apenas se está instaurando, estamos acostumbrados a la presencialidad, y otra porque la conectividad en el país aún no es totalmente buena.
Esos modelos combinados nos van permitiendo acercarnos a la virtualidad, que no se puede convertir en una réplica de la presencialidad y las metodologías tradicionales”, expresa Doris Ramírez, doctora en Educación y TIC y coordinadora académica del grupo de investigación Didáctica y Nuevas Tecnologías, de la Sede de Investigación Universitaria – SIU – de la Universidad de Antioquia.
Este grupo de investigación, fundado hace 26 años, nació con la idea de profundizar en el uso de las herramientas tecnológicas en el aula de clase y contribuir mediante la investigación y la incorporación de tecnología informática y telemática al sector educativo. Uno de sus propósitos es preparar y formar los maestros para la implementación de las TIC.
“El uso de la tecnología cambia muchas cosas en la escuela. Cambia la forma como el maestro se enfrenta a la enseñanza y la forma como el estudiante aprende. Nosotros pensamos que ningún computador hace mejor maestro a nadie. Pensamos que la dotación que se hace en las escuelas no se puede adelantar sin la formación de los maestros. Nosotros vamos a la escuela, a que el maestro piense cómo está enseñando y cómo estas tecnologías le ayudan a él a explicarles a sus estudiantes otros procesos”, afirma la investigadora Ramírez.