La cifra oficial más reciente de casos de escopolamina en El Poblado da cuenta de 36 denuncias de víctimas entre enero 1 y 19 de noviembre de 2018, ese registro y los recientes casos de dos profesores universitarios en los que se tiene la hipótesis de una sobredosis de escopolamina como causa de muerte, muestran que es una práctica que se sigue presentando en la ciudad.
Hablan los médicos
Ubier Eduardo Gómez, médico especialista en Toxicología Clínica, del Hospital San Vicente Fundación, aclara que “mucha parte de lo que se habla comúnmente sobre la escopolamina no es cierto, como cuando dicen que en un taxi les pasaron una revista con la sustancia o a través de las ventanas del carro les soplan algo en la cara, porque la escopolamina no actúa inmediatamente, requiere de un tiempo para activarse en el organismo”.
Gómez explica que el método más usado y efectivo para suministrar esta sustancia, es por la vía oral en bebidas amargas como café y cerveza, en cigarrillos o en alimentos dulces como masapanes. En una bebida, después de una hora de administrada, pueden aparecer los cuadros de amnesia.
“Ciego como un murciélago, seco como un palo, rojo como una remolacha, caliente como una brasa y loco como una cabra”, es un aforismo que describe los síntomas de intoxicación por escopolamina, explica el toxicólogo Ubier Gómez
Vivir en El Poblado recuerda algunos casos publicados por el periódico de víctimas de esta sustancia en la Comuna 14.
El 30 de diciembre de 2018 fue reportado como desaparecido Jairo Rodas, profesor universitario de la Universidad Nacional y del ITM, según algunas versiones, la última vez que lo vieron con vida habría sido en el Parque Lleras. Pero fue encontrado muerto y sin signos de violencia en el barrio Buenos Aires. Aun las autoridades no entregan el dictamen de las causas de la muerte.
Uno de los casos recientes fue en noviembre de 2018, una señora de 70 años fue víctima de esta modalidad cuando salía de un gimnasio en la Milla de Oro a las 7:30 a.m., al cruzar el semáforo de la avenida El Poblado con calle 7 sur fue abordada por dos hombres que la retuvieron durante dos horas, tomaron café con ella y le terminaron robando 300 euros.
En el año 2015, Pablo al salir de su oficina para tomar un taxi en el barrio Provenza, cerca las 8:30 p.m., dos señoras mayores lo abordaron para que les ayudara a buscar una dirección.
Él relataba que: “desde que me encontré con las señoras no me acuerdo de nada hasta el otro día, cuando desperté solo en la oficina y vi que me habían robado el portátil, un disco duro y una cámara. Me fui para el hospital y allá el médico me confirmó que me habían dado escopolamina, que incluso con el tacto puede ser suficiente para entrar en un estado en el que la mente no responde”, dijo.
“Yo estaba compartiendo con unos amigos en una de las discotecas de Barrio Colombia. A la media noche, salí del lugar a sacar algo de dinero en un cajero cercano. A partir de allí no recuerdo qué pasó”, contaba Luis Fernando Ruiz, víctima en abril de 2013.
En mayo del 2013 Diego abordó un taxi al salir de un sitio nocturno en Río Sur, y fue robado, “posteriormente no recordaba nada de lo sucedido”, le narró en su momento a Vivir en El Poblado.
Por el caso de Diego en mayo de 2013, el Mayor José Andrés Pulido, de la estación de Policía de El Poblado, le dijo al periódico: “básicamente la tendencia se da por casos de mujeres en discotecas, que en medio de la fiesta dan en el trago la escopolamina a los hombres. Hemos conocido tres casos esta semana (cuarta semana de mayo de 2013) de personas que se van de fiesta y llevan a sus apartamentos a mujeres que los terminan durmiendo y robándoles sus pertenencias”, concluyó el Mayor.
En 2011, Fabio Rojas, comandante de la estación de Policía de El Poblado en esa época, le dijo al periódico en ese momento: “tenemos dos denuncias de casos con escopolamina pero con extranjeros que están asociados a mujeres jóvenes, en busca de sus servicios”.
Recomendaciones
- No reciba bebidas ni alimentos de personas desconocidas, por más confiable que sea el aspecto de la persona que le ofrezca.
- Practique el autocuidado y el cuidado a la persona que lo acompaña
- No acepte cigarrillos, chicles o dulces de personas desconocidas.
- En un sitio público nunca deje sin vigilancia la mesa con bebidas o alimentos.
- Si toma un taxi, pídale a un conocido que apunte las placas del vehículo.
- No retire grandes cantidades de dinero en sitios muy concurridos.
- Procure no retirar dinero sin la compañía de alguien conocido.
- No permita que personas extrañas entablen conversación.
Autoridades buscan esclarecer las causas de la muerte del profesor universitario