EPM y Renault Sofasa desarrollan un proyecto que busca ofrecerle a la ciudad otra forma de movilidad sostenible y beneficiosa para el medio ambiente
En el segundo semestre de 2012, en Bogotá y Medellín rodarán 250 carros eléctricos, los cuales serán probados por empresas de distribución de diferentes productos y servicios.
Como se recordará, en diciembre pasado llegaron al país los primeros vehículos operados con energía eléctrica. Dos en Bogotá y dos en Medellín, se encuentran rodando por las vías como elemento de prueba para los estudios que determinarán las adecuaciones necesarias para masificar y comercializar el producto.
Gracias a investigaciones realizadas por EPM y a que países como Francia y Estados Unidos comenzaron a avanzar en movilidad eléctrica, en 2009 EPM y Renault Sofasa firmaron un memorando de entendimiento para ambos aportar en sus campos y conseguir en un par de años que los vehículos sean comprados por los ciudadanos. Según Juan Jacobo Rodríguez, profesional del área de Planeación, Transmisión y Distribución de Energía de EPM, “la clave es articular tres agentes: las empresas de energía, las automotrices y el Gobierno Nacional y generar incentivos tributarios para que el vehículo sea competitivo. Esta es una posibilidad grande para Colombia por su autosuficiencia energética; EPM implementará la infraestructura de recarga necesaria y la casa matriz de Renault escogió a Colombia como el primer país de América Latina para hacer este piloto. Se espera que para el año 2020 el 10 por ciento de los carros del mundo sean eléctricos”.
Solución de sostenibilidad
Desde hace varios años EPM venía investigando y realizando tareas de monitoreo tecnológico, para impactar positivamente en el medio ambiente, reducir las emisiones e incrementar la eficiencia energética. La conclusión fue que la movilidad eléctrica es una nueva solución de sostenibilidad para las ciudades, además porque permite aprovechar la riqueza del país en esta materia.
Según Rodríguez, aunque el estado de penetración del negocio es bajo, la perspectiva es alta ya que generalmente los vehículos en las ciudades colombianas no recorren más de 100 kilómetros al día, lo que posibilita su apropiada carga y funcionamiento.
Compromiso de Sofasa
Con una propuesta sólida, EPM buscó un aliado automotriz para desarrollar las pruebas. Por su liderazgo e interés, Renault Sofasa fue la empresa elegida para trabajar en conjunto y proyectar la masificación de los vehículos comercialmente. Brasil y Chile, interesados en implementar primero dichas pruebas, tendrán que esperar los resultados de Colombia.
Juan Sebastián Toro, del Grupo Proyectos de Sofasa, informó que estudiarán el comportamiento de los vehículos, sus variables de mantenimiento, la topografía. Mientras tanto, capacitan mecánicos pensando en el servicio posventa. “Nuestra intención es contribuir con una movilidad sostenible y nuestra casa matriz en Francia es pilar a nivel mundial. Es un voto de confianza, tenemos mecánicos que se formaron en Europa para prestarle el mejor servicio al cliente”, dijo.
El piloto con los 250 vehículos iría hasta 2013, y esperan para 2014 tener ofertas comerciales cuando EPM defina el modelo de carga en las diferentes ciudades.
“Colombia será para Renault el país pionero en los carros eléctricos por el potencial de energía eléctrica limpia, la voluntad del sector automotriz y el compromiso por mejorar el medio ambiente. El cliente colombiano en las ciudades está por debajo de los 50 kilómetros diarios, entonces las condiciones topográficas y de tránsito se prestan para comercializar estos carros. Nuestra intención es contribuir con la movilidad sostenible, pilar de nuestra compañía a nivel mundial”, expresó Juan Sebastián Toro, de Sofasa.
Características del carro eléctrico
Los vehículos eléctricos que llegarán al país, contarán con una capacidad de batería para recorrer 160 kilómetros, lo que permite acoplarse a las condiciones de las ciudades colombianas. Para cargarlo totalmente serán necesarias de 6 a 8 horas, en puntos que EPM desarrollaría o incluso en el propio hogar. “El carro lleva una importante inversión inicial pero luego se sentirá la diferencia. Con un galón de gasolina se puede avanzar unos 40 kilómetros, en el eléctrico son 160 con 15 kilovatios por hora. El combustible eléctrico cuesta una tercera parte de lo que cuesta la gasolina”, expresó Juan Jacobo Rodríguez, profesional del área de Planeación, Transmisión y Distribución de Energía de EPM. También destacó que no requiere cambio de aceite, no genera ruido, ni vibraciones, ni calentamientos; las piezas duran más y el motor tiene mejor desempeño.
EPM instalará la infraestructura para que los usuarios carguen sus vehículos mientras realizan otras actividades, y luego de comercializarlo, esperan convertirlo en un producto exportador.