El proceso de actualizar el catastro , que debió efectuarse en 2017, sigue entre las tareas pendientes de la Alcaldía de Medellín. No hay fecha de ejecución y expertos advierten que el golpe al impuesto predial será fuerte.
Por Sebastián Aguirre Eastman
La más reciente actualización catastral en Medellín se hizo en 2012 y se aplicó en 2013. El proceso contribuyó a que la ciudad recaudara cerca de 60 mil millones de pesos más por impuesto predial (un incremento del 28%).
La ley exige a los municipios realizar este proceso cada cinco años ajustándose a la variación de los valores inmobiliarios. Medellín debió hacerlo en 2017 y aún no tiene fecha, confirmó el secretario de Gestión Territorial, Nicolás Duque Ossa.
La Alcaldía, de acuerdo con el funcionario, ha realizado ajustes anuales, que se aplican según la inflación, como explica el avaluador Francisco Ochoa. No hacer la actualización cada cinco años no solo es ilegal e implica sanciones que se reflejan en las transferencias nacionales a los municipios, sino que el recaudo por impuesto predial no se ajusta a la realidad del mercado inmobiliario, agregó.
60% a 100% del valor comercial de la propiedad es el rango en que debe fluctuar la actualización catastral.
88 mil predios fueron objeto de actualización catastral en 2012
Otra implicación, señala Federico Estrada, gerente de la Lonja de Propiedad Raíz de Medellín, se refleja en los cánones de arrendamiento, pues el valor comercial de las propiedades no se ajustará a su realidad, dado que estos varían con la actualización catastral.
Entre 2005 y 2013 la valorización de los apartamentos en Medellín fue del 79% según datos de la Lonja. En ese mismo periodo, el incremento acumulado de la inflación fue del 35.97%: una diferencia del 43.03% que hará mella en la actualización catastral.
El secretario Duque Ossa asegura que la actualización está en estudio y que el proceso está dentro de los tiempos, pero lo cierto es que el plazo por ley se venció en 2017. Advierte el funcionario que la Alcaldía procurará que el proceso no genere un impacto fuerte en las finanzas de los propietarios.
Otra cosa piensa Francisco Ochoa, quien cree que mientras más pase el tiempo, mayor será el incremento percibido en el impuesto predial.
Clave para mitigar impacto de Hidroituango
Se prevé que las transferencias anuales que recibe Medellín de parte de EPM se vean afectadas por la situación del proyecto Hidroituango. Por tanto, el avaluador Francisco Ochoa plantea que una de las posibles alternativas de mitigación del impacto financiero que tendrá esta situación en las arcas municipales pudo haber sido el aumento del recaudo por predial vía una actualización catastral, pero cree que por los tiempos no será posible que esta se dé al menos en los próximos dos años.
Sugiere que en 2019, último año de la administración de Federico Gutiérrez, el tema sea aprobado por el Concejo para aplicarse en 2020.
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