Estas empresas aportaron con su talento, recursos y creatividad a las 42 experiencias centrales y 40 salas interactivas que se disfrutaron en los cuatro pabellones de Plaza Mayor, donde los elementos de la naturaleza —tierra, agua, fuego y aire— inspiraron juegos, aprendizajes y encuentros.
“Cada aporte, cada alianza, se traduce en más sonrisas para la niñez de Medellín. El Festival Buen Comienzo demuestra que cuando la ciudad se une alrededor de las niñas y niños, logramos escenarios de esperanza y transformación”, expresó la primera dama de Medellín, Margarita María Gómez Marín.
Con la participación de los aliados privados, el Festival se consolidó como un ejemplo de trabajo conjunto entre el sector público y el privado para garantizar el derecho al juego, la cultura, el arte y la convivencia.

“En esta oportunidad tuvimos dos actividades muy especiales para los niños, una de ellas la casa del Dr. Muelitas, donde hubo actividades lúdicas para enseñar la importancia de los hábitos de cepillado, la importancia de asistir al odontólogo, de tener una alimentación saludable; en otro pabellón, estuvo el Camión de las Sonrisas”, dijo María Cecilia Cabal, representante Relaciones Profesionales de Colgate- Palmolive.
Los aliados privados que se sumaron a esta versión aportaron desde la dotación de materiales y recursos logísticos hasta el diseño de experiencias lúdicas y culturales que enriquecen la programación.

“Desde Tiendas ARA preparamos una actividad para toda la familia de Medellín, pero, especialmente para los más chiquitos: vivir la experiencia interactiva de hacer mercado. Queremos promover la alimentación saludable de los más pequeños de Medellín”, comentó Juan Camilo Dueñas, director de Relaciones Institucionales de Tiendas ARA.
De acuerdo con los organizadores, gracias a este esfuerzo colectivo entre los sectores público y privado, los asistentes al festival infantil disfrutaron de un espacio seguro, incluyente, diverso y lleno de fantasía.